Isolda quedó embarazada de Tristán, ella estaba sola en su casa mientras que el príncipe (aún no es rey ya que ellos tienen 20-21 años).

Tristán estaba en una misión con sus amigos aunque no quería ir por isolda pero ella le dijo que estaría bien.

Pero eso fue un gran error, isolda tiene nueve meses de embarazo en cualquier momento podría dar a luz.

—Algo me duele...—Habló dolorida isolda—(¿Será lo que comí?)

Entró en pánico, no podía levantarse.

—¡Y-Ya nace!—Gritó fuertemente mientras que afuera una mujer escuchó el grito de isolda y fue a avisar a la reina Elizabeth.

Por suerte llegaron justo a tiempo, la reina Elizabeth estaba ayudando a isolda a empujar.

—Respira profundo isolda—Habló.—Tu bebé ya nacerá, Meliodas mando una carta a Tristán.

—¡Duele!—Llora un poco.—¡No puedo!

Isolda estaba sufriendo de dolor y estaba a punto de perder la conciencia Pero elizabeth con sus poderes logra tranquilizarla un poco.

—¡¡PADRE!! ¡¡MADRE!!—llegó apurado Tristán después de 3 horas—¡¿DÓNDE ESTÁS ISOLDA?!

—Aver, Aver, Aver—Habló el rey meliodas—primero cálmate, isolda está en tu antiguo cuarto y..

—¡Adiós!—Tristán salió corriendo dejando a su padre hablando solo.

Tristán corrió hacía su antigua habitación y abrió la puerta, pudo ver a isolda dormida mientras en sus brazos había un hermoso bebé.

Se acercó cuidadosamente y miró primero a isolda ya que ella está un poco cansada después de dar a luz.

Es un niño cabello como Tristán solo faltaba ver el color de sus ojos.

Sintió la mirada de su hermosa mujer, se arrodilló en frente de ella.

—Mi amor—Habló muy arrepentido.—Perdóname por no estar contigo, debí estar contigo en ese momento más importante de nuestra vida.

—Levanta la cabeza Tristán, tu no tienes la culpa—Habló isolda mientras que su bebé se estaba levantando.—Mira a nuestro hijo, se parece a ti.

Tristán se acostó junto con ellos en el dormitorio.

—Tiene los ojos de mi mamá—Habló sorprendido Tristán—¿Tendrá el poder de mi mamá?

—Eso lo averiguaremos cuando Hiro crezca—Habló tranquilamente

—¿Hiro?—Preguntó.—Es un hermoso nombre para él.

El bebé estaba mirando atentamente a su padre Tristán.

—No solo di a luz a Hiro, hay otro más—Habló Isolda con una sonrisa.

Tristán se quedó en shock mientras que la puerta se escuchó.

—Señorita isolda—Habló una sirvienta.—La bebé ya está limpia.

Tristán miró a la bebé, es una niña y al parecer isolda dió a luz a unos mellizos.

La sirvienta dejó a la bebé en los brazos de Tristán y se retiró.

—Soy papá de dos bebés—Habló Tristán mientras unas lágrimas salían de su rostro—Isolda, ella tiene tu cabello.

La bebé abrió los ojos y resulta que heredó los ojos de su abuela Elizabeth.

Isolda le causó algo de ternura al ver la reacción de Tristán que es padre de dos mellizos.

—¿Le pusiste un nombre?—Le preguntó eso Tristán a isolda y la chica de negó—Entonces te lo pondré un nombre.

Estuvo pensando y por fin se le ocurrió el nombre.

Se acercó junto con isolda y con los mellizos.

—Bienvenido al mundo—Habló Tristán— Hiro y Hannah