Harry se queja, Troy y William se quedan a mitad de camino cuando el padre de Harry, hace acto de presencia, gruñendo bastante fuerte cuando puede ver a su hijo y al ruso tocándole la cintura.

Los alfas mayores siempre deben ser respetados por los alfas más jóvenes.

El rubio estaba tocando al omega en la presencia de Edward, siquiera se conocían, solo se vieron por primera vez esa noche.

Edward por supuesto que no lo aprobaba para nada. Se sintió furioso al ver a ese alfa tan cerca de su hijo.

—Se mira pero no se toca. —Edward le quita la mano a Matvey, la que sostenía la cintura de Harry.

Este de inmediato se pone rígido al ver a Edward. Ese hombre literalmente es capaz de arrancarte el pellejo con sus dientes.

Su mirada dura y sus músculos tensos, dicen que no está jugando.

Troy quiere sonreír, William puede que esté un poco asustado al ver a ese alfa mayor así de protector. Harry se cruza de brazos y quiere chillar.

El ambiente estaba tenso, hasta atrajeron miradas de los otros invitados, que para nada se iban a entrometer, solo miraban la situación.

—Disculpe Señor Styles.

El ruso intenta hablar correctamente, su acento ruso era muy marcado.

—Tu padre y yo te estábamos buscando para hablar de negocios y resulta que estabas intentando robarte a mi hijo.

Harry realmente quiere llorar, ¿su padre de verdad ha dicho "robarte"?

—Eso no intentar yo. —El ruso no pudo conjugar muy bien las palabras.

Harry mira hacia donde pudo escuchar una carcajada, allí puede ver a Troy tapándose la boca y a William mirándolo con grandes ojos de sorpresa.

A Harry realmente le extrañó no haber sentido sus aromas, quizá la razón sea que el alfa ruso lo estaba marcando sutilmente con su aroma.

Harry de verdad estaba bastante interesado en ese alfa, le estaba endulzando el oído con su acento, su tacto gentil.

Hasta que su padre tuvo que acabar con todo.

Además, se estaba dejando llevar por ese alfa ya que ninguno de los trillizos le prestó demasiada atención.

Lo saludaron pero huyeron cuando pudieron ver a su padre rondando por la habitación.

Está bien que tengan que mostrar respeto y disimular que nada ha pasado con ellos.

Porque si su padre se llega a enterar, allí sería el final de todo.

Y además de todo lo anterior nombrado, pudo ver que Louis se había alejado junto con una bonita mujer, seguramente una omega. No podía hacer demasiado así que solo se concentró en el ruso, o al menos intentó concentrarse solo en él.

—¿Qué dices si me acompañas?

Edward en verdad no le está preguntando,
el ruso debía decir que si, las cosas podrían ponerse peor si Matvey le decía que no.

—Sí.

A Matvey le tiembla un poco la voz, pero se muestra derecho sin bajar la cabeza.

Quizá por dentro se esté muriendo de miedo, pero no debía mostrar tanta debilidad.

—Voy detrás de ti.

Edward no debe fingir una sonrisa, no tiene que fingir amabilidad, lo quiere lejos de su hijo, eso es todo.

Matvey mira por última vez a Harry, este le quiere pedir disculpas con la mirada, pero ya es tarde cuando se aleja con su padre yendo detrás suyo.

Harry tiene un puchero y su ceño fruncido.

Mirando hacia arriba cuando puede sentir el aroma de Troy junto con el de William.

—No hagas eso, te puedes arrugar, cachorro. —Troy le toca la parte donde su ceño está fruncido, sonriendo cuando Harry le quita la mano de un manotazo.

—¿Y a ti qué tanto te causaba risa?

Harry se vuelve a cruzar de brazos.
Luciendo encaprichado.

—Yo no saber responder pregunta. —Troy se burla imitando el acento del ruso, recibiendo una mirada de reproche por parte de William.

Harry voltea sus ojos, quiere darse la vuelta pero una mano sosteniendo su brazo lo detiene.

–No seas desobediente, omega.

Esta vez Troy habla con dureza.

—No voltees tus ojos como un caprichoso.

El omega ríe con ironía.

–El único alfa que puede mandarme, es ese hombre que se acaba de ir por allá. —Harry hace referencia a su padre. —Y te volteo los ojos cuando yo quiera, tonto.

A Troy algo se le enciende por dentro al escuchar al omega hablándole de esa forma.

Se acerca a su oído, su mano ahora ya no toma su brazo, ahora aprieta su cintura con posesión, logrando que un gemido bajito se escape de los deliciosos labios del omega.

—¿No quieres que te haga voltear los ojos por tanto placer que te puedo dar? Como ya lo he hecho tantas veces.

Troy juega con él, sabiendo que Harry no toma los supresores, ya puede comenzar a sentir ese aroma peculiar y dulce.

—No.

A Harry le cuesta negarse, más cuando siente la respiración errática del alfa.

—Ni Lou ni tú me van a tocar, han sido malos alfas.

Harry habla con ese tono caprichoso que enloquece a Troy, se puede decir que de buena manera.

Pero el alfa interior de Troy se siente confundido por lo que ha dicho el omega.
No entiende qué hizo mal, se angustia al recibir ese comentario por parte del omega.

Ellos son lo más importante que tienen los alfas, que un omega te diga que has sido malo, eso es terrible.

Lo hace sentir que está fallando en algo tan importante como complacer al omega.

—¿Por qué?—Troy lo acerca más a su cuerpo, Harry coloca sus manos en el pecho del alfa. –¿Qué hemos hecho?

—Tú por burlarte de Matvey, Lou por no prestarme atención a mí en vez de a esa omega. Solo dejaré que me toque William.

╭──────────────────♡.

—¿Tú crees que vendrán?

Harry le pregunta a William.

Sentado sobre su abdomen, jugando con el cabello lacio del alfa.

El cual lo mira con admiración desde su posición, acomodándose los lentes para no perderse esa hermosa imagen del omega sobre él.

Harry se aseguró de que su padre esté lejos con sus socios hablando de negocios, luego buscó un lugar para tener privacidad. Allí con William encontraron un cuarto en el segundo piso, al final del pasillo.

—No dudo que en cualquier momento estén por llegar.

William sonríe.

Él al tener el sentido del olfato más desarrollado, pudo sentir cerca el aroma de sus pares.

Dicho y hecho.

Harry hace a un costado su cabeza cuando puede escuchar que la puerta se abre. Viendo como se hacen presentes en la habitación esos dos alfas que faltaban.
El omega quiere sonreír cuando Louis tranca la puerta.

Ambos se ven serios.

A Harry eso le parece lo más caliente.

Sonríe cuando William lo aprieta levemente por las caderas, él vuelve a mirarlo mientras se va quitando las mangas del vestido, sonriendo mientras lo va bajando.

Dejando su espalda desnuda.

Los otros dos alfas se apoyan contra la pared, admirando la espalda del omega, también la forma en la que se comienza a mover sobre William.

Lentamente de adelante hacia atrás, tomando las manos de alfa para dejarlas en sus nalgas por debajo de lo que quedaba de vestido.

Louis y Troy pueden ver que su otro gemelo lo aprieta con delicadeza.

Ellos se mueren por estar en su lugar y apretar con fuerza, hasta dejándole azotes.

También pueden ver humedad en el pantalón de William, la misma que está dejando Harry mientras se mueve de adelante hacia atrás.

Ellos aprietan sus puños, se sienten ansiosos cuando pueden ver que Harry se lame dos de sus dedos y los dirige hacia su entrada.

Penetrandose él mismo, tirando de su cabeza hacia atrás, ahora comenzando a montar sus propios dedos.

William está con la boca abierta al ver semejante imagen sobre él.

Harry es inocencia combinada con lujuria y sensualidad. Los vuelve locos a los tres.

—¿Les gusta lo que ven?

Harry se atreve a mirarlos de costado, logrando ver las erecciones de ambos,
la de William ya podía sentirla debajo suyo.

Ellos sin dudarlo asienten, mirándolo con deseo oscuro, él se incentiva en moverse más rápido en sus propios dedos.

Harry vuelve a mirar hacia William.
Lo encuentra con su pelo pegado a su cara por el sudor y sus mejillas muy sonrojadas.

Harry se inclina y le deja un besito en los labios. Tomando una mano del alfa para poder llevarse dos dedos a la boca, mirándolo a los ojos mientras desliza sus gruesos labios por los dedos.

William está enamorado.

Cuando los deja con bastante saliva, se los saca de la boca, sonriendo con inocencia cuando escucha gruñidos por parte de los otros alfas.

—¿Puedes hacerlo por mí? Me he cansado.

Hace un pequeño puchero.
William no se negaría ante eso.

Dirige sus dedos húmedos a la entrada del omega, jadeando cuando puede sentir lo mojado que ya está por su propio lubricante natural. Los otros dos tienen sus dientes apretados al sentir el aroma a jazmines por toda la habitación.

Harry muerde fuerte su labio inferior, aferrándose al pecho de William cuando este va hundiendo los dedos en su interior.

Ambos gimen en voz alta, William siente la suavidad de su interior, apretado, sagrado.

Harry quiere comenzar a saltar, moverse sin control alguno, pero debe controlarse, no puede tener un orgasmo tan pronto.

Los vuelve a mirar a los dos, estos están aún parados contra la pared, no se han acercado porque Harry no se los permitió.

Quiere sonreír, pero quiere seguir jugando.

—Pueden acercarse, sentarse en la cama, pero no me toquen.

Harry habla entre suspiros, William lo está haciendo lento, disfrutando el momento, perdido en los pezones del omega.

Los alfas se acercan, tomando asiento cerca de ellos, no pueden evitar mirar como los dedos de William entraban y salían. Querían levantar el vestido para tener una mejor vista de las nalgas del omega, pero este no se deja tocar.

—Cuando tenga la oportunidad, te voy a morder tan fuerte el cuello...

Troy no puede evitar tomar un puñado de los rulos del omega, logrando que se le mueva el lazo, haciendo a Harry sonreír con los ojos cerrados.

Siendo jodido por los dedos del alfa más tierno y lindo.

Le está gustando más de lo normal esta situación donde se encuentra entre los tres alfas.