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Quince


William necesita que Harry le de más atención, sus gemelos se sorprenden cuando escuchan un leve gruñido por parte de William. Harry de inmediato lo mira, colocando sus manos sobre su pecho para sentir que William intentaba reprimir a su alfa interior, evitando gruñir fuerte.

—Tranquilo, mis ojos también están en ti. —Harry quiere hacerle saber que le está prestando atención.

—Pe-rdon no te quise gruñir. —William no quiere que Harry piense que es un animal.

Tragando duro cuando Harry lo mira con esos ojos de cachorro. Sonriéndole tranquilo para darle paz a su interior.

—Entiendo. Solo quieres mi atención.

Louis y Troy jamás habían visto a William siendo posesivo, buscando tener la atención de un omega, ahora con Harry le está sucediendo. Siquiera con Bred se le daba por querer llamar su atención.

Louis se acerca al oído de Harry para decirle algo mientras el omega mantenía su mirada sobre los ojos de William. Viendo como se le estaban cayendo sus lentes pero el alfa se los acomodaba enseguida con rapidez.

—¿Puedes dársela?

Louis le habla cerca de su oído, susurrando con el aliento caliente causándole escalofríos a Harry.

El cual asiente, por supuesto que lo haría.

—Te estaremos viendo.

Harry no sabe en qué momento Louis y Troy se alejan de la cama para dejarlos solo a ellos dos allí.

William no sabe cómo actuar, no es que no haya tenido sus experiencias sexuales, pero con Harry no sabe cómo actuar.

No quiere ser dominante, tampoco brusco.

Quiere ser cuidadoso.

Si lo llega a tocar, quiere que sea una leve caricia.

Así quiere tocar al omega.

—¿Quieres tocarme?—Harry llama su atención, tirando del suéter de William, este enseguida lo mira con profundidad y nerviosismo. —Tócame si así lo quieres.

Harry es lo último que dice antes de acostarse suavemente sobre la cama.
Abriendo despacio sus piernas como forma de invitación a William.

Este tarda varios segundos en reaccionar, se acomoda sus lentes por última vez antes de subirse a la cama, yendo despacio para no espantar al pequeño omega. Suspira cuando no puede más con la forma en la que Harry lo mira con sus ojos verdes y brillantes.

—¿De verdad puedo tocarte?—William está sonrojado. Sintiendo las miradas de sus dos gemelos.

—Tócame donde quieras. —Harry asiente con una pequeña sonrisa. William le causa ternura, es el más delicado.

Cuando le dijo que podía tocarlo donde quisiera, no esperaba que lo primero que William le toque, sea su cara, específicamente sus mejillas.
Acariciando con suavidad su piel sonrojada.

—Sigue...por favor. —Pide Harry cerrando sus ojos ante las caricias suaves.

Las yemas de los dedos del alfa hacen un recorrido hasta su mandíbula, la acaricia para luego ir bajando hasta su cuello.

El choker no es impedimento para que él acerque su cara hasta allí para poder pegar su nariz a su piel, sintiendo su ligero aroma a jazmín.

Quiere guardarse ese aroma para siempre, para cuando no tenga al omega cerca, recordar su aroma y no sentirse tan solo.

Recordar siempre a Harry no es una mala idea.

—¿Puedo ir más allá?

William pregunta antes de hacer un siguiente movimiento.

Recibiendo un asentimiento por parte del bonito omega. No puede evitar colar su mano por debajo de la remera, sus dedos acarician toda su piel. Su abdomen, sus costillas, sus caderas, y por último se topa con sus pezones.

Los roza con suavidad, sonriendo cuando escucha de cerca un jadeo por parte de Harry.

Los otros dos no saben cómo reaccionar ante lo que están viendo. Simplemente se dedican a mirar a Harry, la forma en la que disfruta con William. Sin sentirse tímido al tener a dos alfas mirándolos, al contrario, parece que eso lo pone aún más excitado.

—Espero que te guste...

William le habla de cerca, sus lentes se están bajando, pero no quiere quitar sus manos del cuerpo del omega. Este asiente repetidas veces cuando siente que el alfa los aprieta levemente sin querer causarle dolor.

El pecho del omega sube y baja, siente el calor consumiendo su cuerpo al tener a William apretando sus pezones.

No puede evitar pedirle que le quite su remera, cuando el alfa se lo cumple, Harry lo toma desde la parte de atrás de su cabeza para acercarlo a esa zona.

A William se le han caído los lentes, pero con lo poco que puede ver, su lengua llega a hacer contacto con uno de esos botones.

Pasando su lengua varias veces para saborearlo, succiona cuando Harry le tira de su cabello por el placer.

—Es dulce, ¿verdad?

De alguna parte de la habitación se escucha la voz de Louis, William gira su cabeza para mirarlo y poder asentir sobre su pregunta, pero no puede ver nada que no sea todo borroso.

Aunque al no poder ver, se han agudizado sus sentidos, el olfato fué uno de ellos, sintiendo más intenso el aroma a jazmín que desprendía el omega.

—Tranquilo Will.

Harry le habla con suavidad mientras le coloca los lentes otra vez, acariciando después su suave cabello castaño.

El alfa al poder ver otra vez, enseguida enfoca su mirada en el omega debajo suyo, sonrojado y sonriente.

—Ponte de manos y rodillas.

Se escucha que habla Troy.

Harry asiente, pero antes de hacerlo mira a William.

Este asiente despacio, alejándose un poco para que pueda moverse.

Poniéndose de manos y rodillas, el omega sonrió y presentó su trasero enfrente de William. Este jadea al ver las nalgas blancas y suaves totalmente lampiñas del omega.

—Voy a tocarte.

Avisa William.

Harry por supuesto que asiente.

William se inclinó para extenderlos, Harry fue quien se bajó su braga negra.

–Todo de ti es hermoso.

Dice el alfa frotando su espalda en la parte inferior.

A William le tiemblan las manos, aun así se anima a darle una rápida lamida a su agujero, su lengua lamiendo el anillo logró que Harry se estremeciera de placer por la sensación.

William se acalora cuando pueden ver un chorro de lubricante natural del omega bajando por uno de sus muslos.

Deseoso de hacer avanzar las cosas, William no hace otra cosa que bajarse el cierre de la bragueta del jean, se sorprende cuando otras manos le bajan el pantalón junto con su bóxer.
Mira y era Louis quien lo ayudaba, con una sonrisa en su rostro.
William está que explota de lo rojo que llegó a estar. Le agradece a Louis, este le da un golpecito en su hombro para alentarlo a seguir.

–Vamos Will.

Harry lo mira de costado sobre su hombro, sus mejillas están sonrojadas y sus rulos alborotados.

—Hazme tuyo.

Aún en la cama del omega, se inclina para llenar de besos la espalda del chico, hasta que llega a su oreja, mordisquea el lóbulo.

—Entraré, ¿bien bebé?

—Sí William por favor...

William quiere llorar por lo bonito que es el omega. Le causa ternura, combinada con esa excitación calando sus huesos.
El alfa alineó el glande de su polla en el agujero del chico mientras veía como palpitaba anticipando con emoción algo nuevo. William había querido hacer esto durante mucho tiempo y casi no creía que finalmente iba a suceder.

Entró suavemente, cerrando con fuerza sus ojos.

Cuando el omega se relajó alrededor del glande, lo succiona por completo. Saboreando el momento, William sintió la calidez de ese delicioso túnel cuando comenzó a deslizar su polla en el interior del rizado. Jadeando de placer el alfa deslizó la mitad de su polla en el interior del omega antes de toparse con algo de resistencia.

—Tan bonito, princesa. —Gruñó el alfa.

Moviéndose hacia atrás, vió como la punta se deslizó fuera del interior del omega, y con una enorme satisfacción volvió a alinear su polla en el agujero caliente del rizado, empujando de nuevo sin pausa pero sin prisa.

Esta vez Harry pudo tomar media pulgada extra, haciendo que William gimiera.

El omega puede sentir que lo está partiendo a la mitad, lo que William tiene de tierno y dulce, también lo tiene en tamaño. Es el más grande de los tres, más ancho.

Sabiendo que Harry se estaba abriendo y pronto quizá sería capaz de aguantar una ruda y extensa noche junto con sus gemelos.

Esa idea lo puso aún más duro.

Mientras taladraba el interior del omega, William se inclinó y lo besó en la parte de atrás de su cuello. Los otros dos alfas miraban cada movimiento, viendo a William follando con el pequeño y sexy omega. La imagen de un alfa que se eleva sobre un omega suave y frágil era gloriosa para ellos dos. Después de unos pocos segundos Harry se había abierto lo suficiente para que el alfa se deslizara todo dentro de él.

Harry tomaba respiraciones profundas.
Agradece que el alfa esté siendo cuidadoso y lento, porque sin duda podría destrozarlo si lo quisiera.

Con cada embestida por su parte, William sentía su poco vello rozar con el culo blanco y suave del omega.

Esas hermosas nalgas eran lo más precioso para William, tenía que concentrarse con cuidado en no llegar al orgasmo.

William sacó su polla hasta la punta para después deslizar toda su erección dentro de Harry, veía como el omega apretaba las sabanas con las manos mientras dócilmente era sodomizado por el alfa. Tratando de demostrar que era un buen omega.

Harry estaba tomando todo como un real campeón. Aunque su cabeza estaba comenzando a dar vueltas por la excitación y el placer.

El sentimiento sin embargo, de William dentro suyo, se sentía increíble para él.

Jadeaba y gemía mientras tomaba todo lo que el alfa tenía para darle.

—¿Te sientes bien?

William quiere asegurarse de estar haciendo un buen trabajo.

Harry no responde con palabras, solo asiente varias veces, mordiéndose el labio inferior mientras retenía lágrimas de placer.

Ahora que William sabe que Harry se siente bien, acelerando su empuje, alcanzó su mano hacia abajo y acarició la polla del omega. Eso provocó en Harry una sensación asombrosa. Los sonidos de golpeteo que provocaba la polla del alfa al taladrar su pequeño agujero, y la mano de William jugando con su polla fué demasiado para el chico y su cuerpo comenzó a hormiguear por todas partes.

Mientras su polla bailaba en los dedos del alfa, un gemido sonoro escapó de la garganta de Harry, un temblor incontrolable se apoderó de él.

Harry estaba teniendo un orgasmo seco.

William pudo sentir en su totalidad el orgasmo del omega, el pequeño túnel apretó casi estrangulando su polla con cada espasmo provocado por el delicioso orgasmo del rizado. Esas espectaculares sensaciones fueron demasiado para su miembro, acercando al alfa al punto de no retorno de su deseo intenso. Su mirada se volvió errática cuando comenzó la sensación familiar en su vientre.

—Te sientes tan bien, cielo. —William no es grotesco con las palabras. Es dulce con su voz. —Tan bonito, un hermoso omega.

—Yo también te siento demasiado bien en mí.

Harry parece estar quedándose sin aliento. Está sonrojado y sudoroso.

Esas palabras y esa vista fué suficiente para hacer explotar al alfa dentro del chico.

Bombeó chorros y chorros de semen.
Cada chorro era acompañado de gemidos y gruñidos por parte del alfa, que llenaba al omega de manera extraordinaria.

Harry sintió la explosión dentro de él, el calor del semen del alfa brotando en su interior. Por su parte, el alfa continuó empujando dentro del omega mientras su orgasmo y miembro perdían potencia.

El alfa siguió dentro del omega hasta que se drenó por completo y no le quedaba nada para dar. El nudo ya ha terminado.

Inclinándose, volvió a besar al omega en la nuca.

—Eso fue Increíble, gracias omega.

William abrazó al omega mientras su miembro se ablandaba y luego se deslizaba fuera del interior del rizado.

Ambos se sentaron en la cama y se besaron profundamente.

Los otros dos alfas necesitaban atención también, pero no le iban a sacar ese momento a William.

💐

A la mañana siguiente:

Harry se remueve en su cama, sintiéndose adormilado, adolorido, pero al recordar lo sucedido una sonrisa pequeña aparece en su cara. William había sido tan gentil, suave, en todo momento preocupado por él.

No se da cuenta que la puerta de su cuarto había quedado abierta, él se tapa con su sabana cuando escucha los pasos de su padre. Abre en grande sus ojos cuando Edward aparece en su puerta, el ceño fruncido mientras sostenía una caja blanca con bordes negros.

—Te ha llegado esto, ¿es de Connor...?

Su padre no terminó de hablar cuando su olfato identifica varios aromas. Ninguno conocido, no eran los mejores amigos de su hijo.

Aunque después de varios segundos si reconoce esos aromas, le costó un poco pero pudo reconocer que provenían de los trillizos.

—¿Louis ha estado aquí? —Edward deja la caja sobre el escritorio del cuarto de su hijo. Notando enseguida el nerviosismo por parte de su hijo.

—Dime la verdad, puedo sentir el aroma en el aire.

— S-i

Harry aclara su garganta. Debía ser creíble lo que tiene que decir.

—Vino con sus gemelos, estamos comenzando a formar una amistad, nos estamos llevando bien...

—No puedes ser amigo de ellos, es imposible. — Su padre niega con seriedad. —Ellos no tienen tu edad, ¿qué podrías compartir con ellos? —Ríe con ironía.

—Pero papá...

—"Papá" nada. —Edward niega varias veces cuando ve que su hijo le está haciendo ojos de cachorro. Esos que siempre lo convencen.

—No los quiero ver cerca de ti.
Te prohíbo volver a verlos. Eres mi hijo, yo sé lo que es mejor para ti, debes hacerme caso.

Es lo que sentencia su padre.

Harry no puede hacer nada cuando Edward se va de su habitación, cerrando la puerta detrás suyo.

Harry quiere gritar y patalear.

¿Por qué tiene que ser tan injusto?

Se pregunta mientras camina hacia donde estaba la caja blanca. Frunce el ceño al ver que decía "Chanel" esa es una de sus marcas favoritas. Cuando la abre, se asombra y se pone feliz cuando ve un lazo en forma de moño.

Aunque esa sonrisa se borra un poco al pensar que quizá era un regalo de Connor, pero que equivocado que estaba cuando encontró una pequeña notita dentro escrita con letra perfecta.

"Pasamos la mejor noche junto a ti, personalmente yo puedo decir que fué la mejor noche de mi vida. Eres increíble, un omega precioso, tan bello. Gracias, Harry."

William.


GRACIAS POR LOS 1K DE VOTOS, LLORO☺️

Al fin William pudo estar con Harry 😂

Dedicado a las personas que comentaron que ya era hora de que Will debutara con Harry jaja. ❤️

Si lo desean pueden pasarse por esto que he publicado, un libro de os, si quieren pueden pedirme que escriba uno de la temática que sea, lo haré con gusto 😊

Lxs veo por ahí ❤️

Sofía Nadal 🥀

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