Capítulo 1: Tentación
Era lunes por la mañana y el sol ya estaba empezando a dar algunos rayos de luz cuando su alarma sonó, sin mucha delicadeza la apagó y se levanto bostezando, estiró sus brazos hacia arriba para luego tomar algunas cosas para salir a darse una ducha. Por el camino se fue encontrando con sus ruidosos compañeros, algunos tenían enormes ojeras por no haber dormido mucho durante la última semana.
Perdido en sus propios pensamientos se golpeo una rodilla con un basurero y con su poca paciencia ya instaurada, soltó algunas palabrotas para luego emitir unas explosiones y descargar su ira con el pobre objeto.
- Tan temprano empezando con tu buen humor -dijo Kirishima a su espalda soltando una carcajada.
- ¿Qué dijiste? -volteo de manera tenebrosa, causando que el pelirrojo mirara a Izuku por ayuda.
- Kacchan -nombro el pecoso acercándose- ¿Te encuentras bien? -preguntó a un metro del rubio cenizo.
- ¡No te metas nerd! -grito girándose para seguir su camino hacia las duchas, dejando al pecoso en el pasillo junto a Eijiro.
- Parece que Katsuki tiene una insuficiencia de cariño por parte de su novio -dijo tranquilo mientras a Midoriya se le teñían la mejillas de un notorio color rojizo.
- No digas eso, podrían escucharte los demás -murmuro avergonzado.
Su relación con Katsuki era un secreto o eso era antes de que el pelirrojo los sorprendiera besándose en el pasillo de los dormitorios. El rubio cenizo había amenazado a su amigo con varias explosiones para que mantuviera la boca cerrada y hasta ese día, nadie más se había enterado.
Sonrió por unos momentos antes de volver a caminar hacia la cocina para desayunar. Estar con Kacchan era complicado, si esa es una manera de denominarlo, aunque lo conocía desde que eran pequeños de vez en cuando no lo entendida para nada.
Suspiró cansado para pasarse una mano por los ojos, estaba somnoliento y estresado, se levantaba más temprano que sus compañeros para su rutina de ejercicios, no podía dejarla de un día para otro solo con la intención de dormir mas. Debía aguantar solo unos días hasta que los exámenes terminarán.
Vertió un poco de leche en sus cereales, extrañaba pasar tiempo con su novio, poder abrazarlo y escuchar el latido de su corazón mientras el acariciaba su cabello verdoso. Aquellas manos tibias que lo tocaban con ternura pero en un abrir y cerrar de ojos comenzaban a recorrer su cuerpo haciéndolo suspirar y gemir suavemente contra su cuello.
Esfumó esos recuerdos de su mente y se concentró en sus cereales, no podía estar fantaseando con el rubio cenizo en mitad de su desayuno, para distraerse agarro su celular y ojeo las noticias, observando las hazañas de los héroes y anotando mentalmente sus habilidades para más tarde poder escribirlas en uno de sus cuadernos.
La primera jornada escolar transcurrió sin ningún incidente, eso era algo anormal viniendo de la clase 1-A y todo se debía al agotamiento de sus estudiantes que se concentraban en la pizarra y en lo que decía el profesor, aunque ni siquiera entendieran lo que estaban anotando. Los exámenes finales eran una verdadera tortura, si ya sufrían con las pruebas escritas, las pruebas de combate eran el golpe final hacia sus mentes y cuerpos.
En esos momentos los alumnos se encontraban en los vestidores para algunas pruebas practicas en el campo de entrenamiento, en donde Aizawa los enviaría hacer varios ejercicios entre los edificios del lugar y All Might los estaría observando desde un lugar seguro para ver su progreso como héroes.
Katsuki estaba poniéndose la ultima parte de su traje cuando por unos segundos desvió la mirada para toparse con la espalda pecosa de Izuku, aquella suave, tentadora y pálida piel expuesta le hizo soltar un pequeño gruñido mientras aguantaba las ganas de morderlo por donde sus ojos lo recorrían. Sin embargo la subida de temperatura que ponía en riesgo su semblante de aguante fue renovada al ver como Todoroki se acercaba a hablarle a su novio, quien aun no terminaba de vestirse.
Azoto la puerta de su casillero para girarse hacia la salida de los vestidores sin antes darle una mirada de enfado al bicolor, tenía que aguantar unos días más, pensó apretando sus dientes.
Todo fue un verdadero caos, al estar los muchachos con su energía baja, golpeaban objetivos sin pensarlo dejando escombros y ruinas en el lugar. Izuku, quien intentaba mantenerse alerta ante algún objeto que volara contra él, apretaba sus puños con el fin de perfeccionar su singularidad, siguiendo las instrucciones de su ídolo.
Ya al terminar la desastrosa clase, que Aizawa los regañara y que Toshinori intentara animarlos, el día escolar había terminado.
Luego de volver a los vestidores y darse una ducha, Katsuki vio una oportunidad de acercarse a su pecoso quien deliberadamente lo había estado tentando durante las últimas dos horas, su simple traje se ajustaba a cada curva de su cuerpo y en especial en su trasero. Con los ojos rubí en su objetivo tardó más tiempo en vestirse con el objetivo que nadie sospechara de sus intenciones, reviso el lugar de un vistazo y tomo su bolso para luego salir.
Espero que Izuku terminara de hablar con el ex símbolo de la paz, cuando lo vio marcharse prosiguió a seguirlo por los pasillos de la academia, a una distancia prudente y que no notara su presencia, sin embargo su novio no era tan estúpido como para no darse cuenta que el rubio cenizo estaba a unos pocos pasos, por lo que se giro con rapidez quedando con sus ojos fijos en él.
El oji-rubí suspiro y decidido se acerco tomando al pecoso de la muñeca, sin primero percatarse que nadie los estaba viendo, con paso rápido y haciendo caso omiso a las quejas y preguntas ajenas, llegó hasta la puerta del cuarto de limpieza y lo empujó dentro, cerrando la puerta a su espalda.
Ahí vio los ojos esmeraldas que mostraban asombro pero a su vez un sentimiento que no pudo descifrar, se acerco a Izuku y lo acorraló contra la pared poniendo sus brazos a los costados del cuerpo nervioso de su novio, quien a los segundos bajo la mirada al notar el deseo intenso en los ojos rubí. Su respiración se agito al aspirar el aroma masculino de Katsuki, escucho y sintió la tibia respiración cerca de su cabello, soltando una pequeña y casi muda exclamación.
Se veía tan indefenso, como un pequeño animal atrapado por su presa esperando ser devorado, sin embargo el no se lo comería ese día, sino que solo saborearía su piel para saciar parte de su apetito lujurioso y por supuesto, llevarlo a un punto de frustración en donde el peliverde le rogaría por mas.
Posó su pierna derecha entre las contrarias, separándolas y ganándose una protesta de Deku, pero no se detuvo. Bajo una de sus manos para colarla por la camisa y acariciar parte de la cadera suave que se retorcía con cada unos de sus toques. Con una sonrisa en su rostro, siguió explorando aquel tramo de piel prestando atención a los leves suspiros y estremecimientos que le causaba a su novio.
- Kacchan -murmuro el peliverde tapándose su boca para ahogar un gemido cuando el nombrado le desabrochó la camisa con la intención de acariciarle el torso con un movimiento suave y tentador- ¿Qué haces? -preguntó sin poder decir nada más coherente dejando caer su mochila al suelo.
- ¿Qué hago? -susurró cerca del oído ajeno- Creo que sabes perfectamente lo que hago -dijo tranquilo mientras comenzaba a besar el pálido cuello de su pareja- Y te gusta -susurró.
La racionalidad estaba abandonando su cuerpo, no quería dejarse llevar por aquellas caricias que encendían sus más oscuros pensamientos, pero al pensar que estaban en la academia y más aun es ese pequeño cuarto de limpieza lleno de escobas, baldes y otros artículos, en vez de provocarle un rechazo estaba ocurriendo todo lo contrario, cada célula de su cuerpo se estaba volviendo más sensible por la excitación de encontrarse en un lugar prohibido. Se estaba transformando en un pervertido.
- No podemos hacer esto aquí -pronunció con dificultad mientras besaban su cuello.
El rubio cenizo puso fin a sus reproches callando su boca con un beso, al principio encontró algo de resistencia pero mordió levemente el labio inferior, escuchando un pequeño gemido y sintiendo como las manos ajenas se aferraban a su camisa. Profundizó su contacto, introduciendo su lengua para después apegarse al cuerpo del más bajo, apretándolo contra la pared.
Su idea era tentar al peliverde, dejarlo frustrado y deseando por mas, pero en esos momentos esos pensamientos estaban siendo llevados al rincón más alejado de su mente.
Sin dejar de besarlo, tocó las nalgas con ambas manos, apretándolas y ansiando poder quemar aquella fina capa de tela que los separaba. Cuando Deku gimió entre sus labios, ya ambos tenían una marcada erección, apretó el trasero ajeno e impulsó el cuerpo de su novio hacia arriba, mientras este pasaba sus piernas alrededor de la cadera de Katsuki.
La fricción en sus entrepiernas los estaba llevando a un lugar conocido y ansiado. El oji-rubí se separó unos instantes para observar el sonrojado rostro de Izuku, quien lo veía con sus ojos esmeraldas brillosos y cargados de pasión. Aquella mirada era su perdición.
Ya todo el exterior le importaba una mierda, ahora solo importaba él e Izuku en aquel pequeño cuarto de limpieza que era tenuemente iluminado por una ventanilla situada en la parte superior de la pared.
Dejó escapar su libido estrechando mas el cuerpo del peliverde contra el suyo, sus labios no se habían vuelto a separar y el aire a su alrededor se volvía pesado y caluroso. Percibió como Deku tironeaba su ropa para poder desnudarlo, sin embargo no era el lugar para estar toda la tarde fundiéndose el uno con el otro, por lo que tomo las muñecas contrarias y las poso por encima de su cabeza, escuchando un leve reclamo.
Aumento el roce entre sus entrepiernas moviendo sus caderas, sus gemidos hacían eco en la habitación y ambos comenzaban a sentir como sus cuerpos se estremecían por el placer, querían mas, ansiaban mas. El leve sudor cubría sus frentes como la humedad que traspasaba su ropa, sus lenguas se entrelazaban en una danza hambrienta y necesitada mientras se aferraban al cuerpo ajeno en una búsqueda de lo conocido y excitante.
El pecoso ya al borde de su clímax, uso su singularidad para zafarse del agarre de su novio pasando sus brazos alrededor del cuello de este, justo en el momento que separaba sus labios emitió un gemido de placer cuando llego al orgasmo dejándolo con una exquisita corriente eléctrica recorriendo su cuerpo.
Al verlo y observar como los ojos esmeraldas se cargaban de placer, empujo aun más la bien formada anatomía contra la pared y cuando escucho esa exquisita melodía soltó un gruñido ahogado, llegando a su propia satisfacción.
Ninguno se movió por varios segundos, lo que había ocurrido era una experiencia nueva y abría un sin fin de posibilidades de encuentros pasajeros en el futuro, pero en esos momentos y aun cargando con Deku en su cadera, tendrían que solucionar un problema húmedo en sus pantalones y de cómo llegarían a los dormitorios sin que nadie lo notara.
Con una pequeña risa, el pecoso beso levemente la mejilla acalorada del rubio cenizo, indicándole con la mirada que lo dejara bajar, pero este lo sujeto con fuerza para dirigirse a su oído.
- Esto no se comparará en nada con lo que te haré en los próximos días -murmuró en un tono sensual y atrayente.
Continuará...
Hello!!!! Mis lectores!!! Tanto tiempo sin publicar nada😱😱 ya los extrañaba 😭😭😭 espero que ustedes igual a mi 🤭
Para empezar el mes de octubre les traigo este especial suculento de Halloween jujuju el cual actualizaré una vez por semana ♥️
Como ya saben, cualquiera sugerencia de lemon es bien recibida 👌🏻estoy aquí para darles lo que les gusta ♥️
Que tengan un lindo día♥️ nos vemos en una semanita :33:D
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