— Estoy confundida— dijo por lo bajo la princesa del infierno sin despegar la mirada del suelo.

La tuerta tragó duró sintiendo su corazón acelerarse furiosamente. No sabía a qué se refería, pero presentía que no era nada bueno.

— ¿Co-confundida de qué?— preguntó temerosamente. Últimamente había un raro comportamiento en Charlie, pero se negaba rotundamente a pensar en las razones.

Únicamente la más alta miró a otra dirección, tratando de buscar las palabras correctas para responder sin herir a su novia.

— Po-por lo nuestro, n-no sé... Si sigo sintiendo lo mismo— el labio inferior de la polilla tembló sintiendo un nudo en la garganta— Últimamente... Yo... No puedo dejar de pensar en Alastor— oh, si Charlie estaba tratando de no dañarla, estaba haciendo un pésimo trabajo— He empezado a sentir... "Mariposas" cuando estoy con él, traté de evitarlo pero... Éste sentimiento se está haciendo más fuerte...— fue entonces que por fin se dignó mirar a Vaggie y la miró fijamente— Pido que nos demos un tiempo— dijo finalmente— Yo... No puedo estar contigo mientras pienso en él.

No podía describir específicamente lo que sentía en ése momento, pero sí estaba segura de algo: dolor, un tortuoso y desgarrador dolor, era como si un cuchillo perforara una y otra vez su corazón, se sentía como volver a morir, casi no podía respirar por el dolor que sentía en su interior.

¿Tomarse un tiempo? Si claro, ella no creía en ésas cosas, para ella siempre el "debemos darnos un tiempo" era lo mismo que terminar, ya que usualmente las personas siempre terminaban rompiendo. En otra situación le hubiera dicho que no se ande con mamadas y que la terminara como correspondía.

Pero se trataba de Charlie.

Cuando estaba en vida tuvo muchas parejas, por lo que terminar una relación no era nuevo para ella, pero sin duda era la primera vez que le dolía tanto.

Ya que, en el momento que conoció a Charlie, a su Charlie, su mundo se iluminó, ni siquiera en vida se sintió tan viva con una persona. Cuando cruzaron por primera vez miradas, por un momento sintió que había sido llevada al cielo, porque definitivamente su mirada era como la de un ángel, la más hermosa de todas.

Y los minutos que pasa a su lado, definitivamente no se siente como si estuviera cumpliendo una condena en el infierno, se siente como si el mundo haya confabulado para que pudieran estar juntas.

Ella necesita de Charlie para ser feliz, porque Charlie es lo único que vale la pena.

Es por esta razón que se negaba a aceptar romper su relación con Charlie y es por esta misma razón que aceptaría darle su tiempo.

Prefería éso a dar por terminada su relación y ser simples conocidas.

Una vida sin Charlie sería su ruina.

Tan sólo con ésa idea sentía ganas de llorar y gritar, quería desgarrarse la garganta, quería golpear cualquier cosa que estuviera cerca.

Entonces recordó la razón por la que su relación se estaba yendo a la mierda.

Alastor.

Apretó con fuerza los dientes y sus puños tratando de contener su ira.

Lo sabía, sabía que ése cabrón iba a ser su ruina, aunque precisamente no sabía que sería la ruina de su relación. Sin embargo, ahora que lo analizaba, tuvo que haber predicho que algo así sucedería.

El hijo de puta siempre andaba sobre su novia, dándole apodos cariñosos, invadiendo su espacio personal y teniendo un exceso de contacto físico, además que su carisma y su forma enérgica de hablar llamaba inmediatamente la atención.

Trató enumeradas veces de ponerse en medio de ambos pero el demonio rojo siempre la terminaba arrojando muy lejos a espaldas de su novia, terminando inmediatamente siendo excluida.

Para muchos era evidente que algo terminaría surgiendo en ésa cercanía.

Pero aún así no podía creer que Charlie haya caído por él ¡El maldito bastardo era asexual por todos los diablos! ¡Te faltaría una gran cantidad de neuronas para fijarte en alguien que no siente amor sentimental hacia nada! ¡No sólo éso! ¡Él tipo era un psicópata! ¡Y la soberbia estaba escrita en su cara! ¡Sólo las personas imbéciles caerían por él!

Y lamentablemente, su novia fue lo suficientemente ingenua para desarrollar sentimientos por el poderoso demonio.

Tenía una grandes ganas de gritarle todo lo que pensaba, pero el nudo en su garganta se lo impedía. Aunque la ira estaba muy presente en sus sentimientos, mayor era la tristeza que sentía, sentía que sus ojos empezaban a picar, amenazando con soltar algunas lágrimas.

Pero no lo permitiría, no quería dejar ver lo patética y débil que sentía, no quería dar pena, no quería que solamente por ponerse a llorar, Charlie se arrepintiera y se retractara de su decisión.

Después de todo éso no cambiaría en nada los sentimientos que le tiene a Alastor.

Se paró derecha y le dio una mirada fría.

— Está bien— dijo finalmente, sorprendida de que su voz no haya salido temblorosa, sino más bien dura— Haz lo que quieras.

— Vaggie...— pero no se paró a escuchar lo que le quería decir, pues estaba segura que sería una disculpa y si se disculpaba, estaba segura que se pondría a llorar en ése momento.

Se dio la vuelta y se alejó con paso firme, sin darse la vuelta, sin mirarla, sin tristeza.

Solamente la frialdad estaba dejando a su paso y así fue hasta desaparecer de la vista.

.  .  .  .  .

El grito desgarrador que soltó fue amortiguado por la almohada y las lágrimas salían como una cascada mojando la tela y sus mejillas.

— Vamos, sueltalo todo— le dijo Kalmia mientras acariciaba su espalda.

Kalmia era una hospedante que se internó hace unos meses al hotel. Su aspecto era idéntico al de una muñeca vudú, su cuerpo estaba completamente hecho con telas de diferentes colores y su cabellos eran hilos de costura color rosado.

Su aspecto era llamativo, al igual que su nombre y cuando le preguntó el origen de éste, simplemente le dijo que era su arma favorita.

— ¡Por Alastor!— gritó con la voz quebrada mientras alejaba su rostro de la almohada para mirarla sin dejar de sentir sus lágrimas correr por su rostro— ¡Me va a dejar por el maldito venado!— se le extendió una caja de pañuelos y al subir la mirada, se topó con la sonrisa compasiva de Angel Dust, quien le extendía los pañuelos.

— Ten, limpiate chica— sin decir nada, tomó los pañuelos para limpiarse las lágrimas y mocos.

Dentro de lo mierda que se sentía, agradecía que Kalmia y Angel estuvieran ahí en su cuarto tratando de consolarla. La hacía sentir menos miserable.

— Levantamos éste hotel juntas— dijo con voz temblorosa y con pequeños hipos saliendo de su garganta mientras se limpiaba las lágrimas, para que solamente caigan más— básicamente es como nuestro hijo.

Kalmia y Angel se dieron una mirada de preocupación, en todo el tiempo en que han vivido con Vaggie, siempre la contemplaron como una mujer fuerte y segura, pero ahí estaban ellos, viendo su peor lado, hecha un desastre de mocos y lágrimas.

— Bueno, como hace mi gatito, solamente puedes hacer una cosa en éste momento— soltó Angel mientras se encogía de hombros para después salir de su habitación y volver unos minutos después con una botella de Vodka— Lo estaba guardando para una ocasión especial, pero al parecer tú lo necesitas más que yo— dijo mientras lo destapaba y se lo ofrecía a la tuerta.

Está lo miró con molestia sin dejar de tratar de quitarse las lágrimas.

— Los licores fuertes están prohibidos en el establecimiento— lo regañó aún con la voz temblorosa.

El arácnido se encogió de hombros no dándole importancia.

— Bueno, entonces supongo que no lo quieres— dijo mientras hacía el movimiento de volverlo a cerrar, pero Vaggie se lo arrebató de las manos y empezó a beber en grandes cantidades.

— Más despacio Vaggie o te vas a atragantar— la nombrada despegó la botella de sus labios y miró con desprecio a un punto específico de la habitación.

— Mejor, así talvez me pueda morir, en éste momento sólo me quiero ir al doble infierno— se llevó una mano al rostro y se cubrió los ojos— soy una idiota, por supuesto que Charlie se fijaría en Alastor, ella no es lo suficientemente discreta para esconder sus sentimientos.

— Pff— soltó Angel— Digo ¿Quién no? No es mi tipo, pero definitivamente nadie puede negar que él es extremadamente guapo y es divertido estar con él. Si está Alastor, definitivamente habrá diver- ¡Ah!— se interrumpió por la fuerte patada que le llegó a su pierna.

— ¡No ayudas!— dijo entre dientes la muñeca mientras señalaba con la cabeza a la chica que nuevamente empezó a beber desesperada.

— No— soltó Vaggie dejando de beber— tiene razón, el cabrón es atractivo, inteligente y divertido. Nada que ver conmigo. Es calmado, siempre le saca risas a todos, tiene un buen cuerpo, una gran reputación...— soltó un suspiro y acercó la botella a sus labios— entre él y yo, es claro a quien eligierá— pegó la botella a sus labios dispuesta a terminar lo que quedaba de líquido.

Sin embargo una mano le dio un manotazo tan fuerte que la botella salió volando a un lugar inespecífico de la habitación y al voltearse se encontró con la mirada enojada de Kalmia.

— ¡ESTÚPIDA MI VODKA IDIOTA!— gritó Angel antes de lanzarse a buscar su licor para salvar lo podía, sin embargo la insultada ni siquiera se volteó a verlo.

— Es suficiente— dijo antes de agarrar los hombros de Vaggie— ¡Puedo tolerar que llores por alguien que decidió botarte apenas vio una cara bonita pasar a su lado! ¡Pero no voy a permitir que gastes saliva para poner a Alastor sobre ti! ¡Porque ambas sabemos que entré tú y él, tú eres mil veces mejor!— soltó casi con desesperación, después se incorporó y le dio una mirada seria— No pienses en éso, no le des vuelta a que él es mejor, que ella lo quiere más, que tu no sirves para esto, etc, etc. No pienses que tu relación está destinada al fracaso. Yo estoy aquí para decirte que aún esto no termina ¿Y sabes? Esto es perfecto. Si ella quiere un tiempo es porque se está cansando de su relación, pero definitivamente la vida cambia cuando estás con alguien y cuando se termina. Y éso es lo que aprovecharás— le sonrió con seguridad— Déjala que extrañe éso, déjala que te extrañe. Déjala vivir dos vidas: su vida contigo y su vida sin ti. Dale la oportunidad de estar sin ti unos días, unas semanas, tal vez un mes— Vaggie sintió un sudor frío correr por su espalda al pensar estar sin Charlie por un mes— No estoy diciendo que no se hablen por un mes, hablo de forma sentimental, cómo dos simples conocidas ¿Sabes para qué servirá esto? Para que ella extrañe las cosas que solía hacer contigo. Ejemplo: si ambas antes dormían en la misma cama, entonces ahora cada vez que se vaya a dormir, verá la cama vacía, cuando se acueste sentirá frío y es en esos momentos cuando recordará cuándo ambas dormían juntas y compartían su calor en las noches frías, y te aseguro sin titubeos, que te va a extrañar— tanto Vaggie y Angel quedaron sorprendidos por las palabras de la chica, ya que usualmente ella no era la clase de chica que da frases motivacionales. Ése es el trabajo de Charlie.

— Suena bastante lógico— soltó al fin Vaggie después de unos segundos— pero hay un pequeño detalle ¿No crees que yo también sentiré eso?— soltó un suspiro al pensar que ésa noche tendría que buscar una habitación vacía en el hotel para ella— Tan sólo pensar estar sin ella me hace sentir vacía— susurró mientras apretaba los ojos para evitar llorar otra vez.

— No, no te va a pasar— la dureza con la que lo dijo hizo nuevamente a la tuerta alzar la mirada con sorpresa— ¿Y sabes por qué no te va a pasar? Porque tú vas a brillar en su ausencia y yo te enseñaré a cómo hacerlo— aseguró con una sonrisa decidida— Tú debés brillar sin ella y lo digo tanto física como mentalmente, así ella verá que tienes tu propia vida, que ustedes dos tienen vidas aparte. ¿Cómo se hace éso? La respuesta es muy fácil Vaggie— se acercó hasta estar frente a ella y puso sus manos en las mejillas aún rojas por el llanto— Debes aprender a amarte Vaggie, debes amarte sin ella— aquellas palabras le cayeron como un balde de agua fría, Kalmia se separó de ella y caminó hacia Angel— Cuando tu te amas, es muy evidente cuando lo haces, porque empiezas a amar tu cuerpo y cuando uno ama su cuerpo, empieza a usar ropa que te favorece— con un brazo rodeó la cintura de Angel y lo acercó a ella con una sonrisa— Por qué obviamente, un diamante no puede lucirse con un envoltorio mediocre ¿O no Angel?— el chico soltó una risa mientras apoyaba uno de sus brazos en el cuello de Kalmia.

— Por supuesto.

— Y tú eres la viva representante de un diamante bien envuelto— el arácnido sólo soltó una carcajada mientras le revolvió el cabello a la muchacha.

— ¡Obviamente!

— Y cuando uno se viste bien, das una vibra a los demás de que te amas y que eres una pedazo de mujer— volvió a mirar a Vaggie— ésas son las reglas de amarse a si misma. Y créeme que ahora mismo no estás mostrando quererte. Si yo estuviera en tu situación hubiera mandado a la mierda a Charlie y me conseguiría a una mujer más hermosa que ella. Y de paso a una más inteligente— masculló lo último por lo bajo para que solamente Angel pudiera escucharla, sacándole una risa, sin embargo la tuerta igual la escuchó.

— Charlie es inteligente— la defendió mientras los fulminaba con la mirada.

— Perdóname por contradecirte Vaggie, pero no hay nada de inteligente en fijarse en Alastor, principalmente porque él es asexual. Solamente los ilusos se fíjan en una persona asexual— el actor asintió completamente de acuerdo con la más baja. Era una suerte que a él nunca le pasó algo parecido.

Vaggie desvió la mirada no pudiendo contradecir éso.

— Admito que es algo ingenuo que Charlie se haya fijado en Alastor, pero-.

— Sin peros. ¿Vez? A esto me refiero, la estás defendiendo en vez de tirarle mierda por haberte dejado. Vaggie, te diré esto lentamente para que lo entiendas— se separó de Angel y se acercó a la peliblanca— No-la-idolatres. Ella no es un ser divino, es una mujer que puede hacer los peores errores de su vida. Por esta misma razón, no te arrastres por ella, no debes perder la dignidad por nadie. Debes quererte y quererla. Ámala, pero no dependas de ella— aquellas palabras se sintieron como una fuerte cachetada, pero fue lo suficientemente fuerte para darse cuenta de lo que estaba haciendo— Es por esta misma razón que te voy a enseñar no solamente a mejorar tu relación, sino que también te a ayudar a recuperarla. Vamos a hacer que Charlie se venga arrastrando pidiéndote disculpas y esta vez, nunca más te soltará.

Aquellas palabras hicieron saltar su corazón de la alegría y una creciente emoción empezó a aparecer en ella.

Angel soltó una risa.

— ¿De verdad podrás hacerlo? Digo, no te estoy cuestionando, pero con un poder así de grande se debe tener una gran responsabilidad.

— Por supuesto que podré hacer y está científicamente comprobado por mí— dijo orgullosa Kalmia— hasta el día de hoy, mi ex de hace dos siglos me sigue llamando.

— Wow— soltó impresionado Angel también sintiendo una emoción creciendo en su pecho— Si es así de efectivo podrías estar ganando bastante dinero dando unas clases— la muñeca soltó una risa y se dio la vuelta dramáticamente.

— Bienvenidos mis queridos alumnos— dio unos pasos hacia adelante con las manos en su espalda— Solamente por hoy se les dará unas clases gratuitas sobre un tema que muy seguro les interesará— se dio la vuelta mientras ponía sus manos en sus cintura y los miraba con seguridad— Cómo recuperar a tu pareja en tres pasos.

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¡Que emoción! ¡De verdad me gusta esta pareja y estoy emocionada con esta historia!

Espero le haya gustado uwu y nos leemos en el siguiente capítulo.

Bye