Un mes después de que Xever y Rahzar se confesaran sus sentimientos, ahora eran novios. Pero aún no había sido marcado, Raph y Garra de tigre ardían de rabia al verlos juntos.
Una tarde de sabado, Xever pasaba un rato divertido con su alfa hasta que de pronto empieza a llover.

Xever:Esta lloviendo fuerte.

Rahzar:Si, tendrás que quedarte hasta que pare la lluvia.

Xever:(Tiembla) Supongo que si.

Rahzar:¿Estás bien? Estas temblando.

Xever:Bueno, me dan miedo las tormentas.

Rahzar:No tienes por qué tener miedo a las tormentas. (Coloca su brazo por detrás de la cintura del pez)

Xever:Si, porque me pasó una cosa de pequeño que me gustaría olvidar. (Abraza sus piernas)

Rahzar:¿Qué pasó?

Xever:Fue hace años cuando sucedió el accidente, yo tenía un hermano pequeño de cinco años yo solo tenía siete años. Mi hermano y yo estabamos jugando en el jardín, en ese momento apareció una tormenta, estabamos por entrar en casa cuando un rayo cayó sobre mi hermano, matandolo. Desde entonces le tengo pánico a las tormentas.

Rahzar:(Baja sus orejas triste) Lo siento por tu hermano, prometo que siempre te cuidaré y te protegere. (Besa su frente)

Xever:(Lo abraza) Gracias, te amo.

Rahzar:Yo también te amo. (Corresponde al abrazo)

Luego de un rato Xever se quedó dormido entre los brazos del can, Rahzar sonrió con ternura y lo recosto con cuidado en la cama.

Rahzar:Que descanses mi pequeño. (Besa su frente antes de quedarse dormido, abrazandolo)

Continuará...