Seungmin miró al frente, el alfa del que ha estado enamorado desde sus días de universitario lo miraba con una expresión demasiado... fuera de lugar.

Hyunjin no es un alfa fácil de perturbar, su paciencia, seguridad y amabilidad son puntos destacables de su forma de ser, algo que enamoró a Seungmin aunque siempre trató de hacerse el difícil, la perseverancia de Hyunjin es lo que le dio la seguridad de que este es el alfa con el que deseaba pasar su vida entera, o al menos lo era.

Hyunjin lo mira con... furia, sus atractivas facciones deformadas en una mueca de confusión e ira.

—¿Qué demonios está pasando, Kim Seungmin? —su tono áspero y frío, —hace dos días que no duermes en casa, además de que te llevaste casi todas tus cosas.

Seungmin desvió la mirada, tomó una respiración silenciosamente fuerte y miró a Hyunjin de vuelta.

—Estoy dejándote.

Algo en la expresión de Hyunjin cambió... dolor, tristeza y demasiada sorpresa fueron las emociones que Seungmin pudo leer.

—¿Estás dejándome? —preguntó el alfa con incredulidad, —después de años de estar juntos, de compartirlo todo y ser más que amantes, tú... ¿Estás dejándome? ¡¿Porqué?! —elevó su tono sin poder controlarlo.

—Estoy casando, Hyunjin. Quiero algo... algo que no voy a tener contigo-

—¿Es por mis viajes? Seungmin sabes que siempre tengo que viajar en esta temporada, mi trabajo-

—No, yo- siempre he estado feliz por tu dedicación a tu trabajo, —se apresuró a explicar, lo menos que necesita es que Hyunjin se culpe por esta decisión.

—Entonces, dime que pasa.

—Ya no quiero estar contigo, eso es todo. —Afirmó con una seguridad demasiado cargada de confianza, mentir realmente nunca ha sido un problema para él, como omega siempre supo que tenía desventajas físicas contra los alfas, pero sus palabras y seguridad era su fortaleza.

Y justo ahora, al enfrentar a su compañero de vida y dueño de la marca sobre su cuello usó toda su fuerza para mentir y engañar a la conexión del lazo.

Hyunjin lo miró sin poder creerlo, el alfa en su pecho clamaba la comunicación del lazo para buscar respuesta y solo encontró rechazo, Seungmin estaba rechazando la conexión para no compartir sus sentimientos.

Hyunjin bufó con indignación, —siempre me dijeron que debía casarme, que no era posible mantenerte a mi lado solo con confianza, pero yo respondía que lo que había entre tú y yo era demasiado fuerte como para que lo entendieran y tú solo... me dejas.

Seungmin no dijo nada.

—Me aseguraré de recoger las pocas cosas que dejaste en el departamento, —siguió el alfa, —puedes ir por ellas cuando quieras y... dejas la copia de la llave en el comedor.

Hyunjin se levantó de su asiento en el modesto café donde fue citado, no miró a Seungmin mientras se retiraba.

El omega Kim soportó sus lágrimas hasta que Hyunjin estuvo bastante lejos y lloró, dejó ir todo el dolor que sentía al darse cuenta de que su protector, su soporte, su vida, ya no estaría allí para darle besos en las mejillas y decirle silenciosos "te amo".

***

La segunda semana después de su ruptura fue... "Extraña", como distante, fría, muy tranquila y demasiado vacía, extrañaba a Minho en todos y cada uno de los aspectos de su vida, extrañaba mirarlo por ahí en la oficina o concentrado en su trabajo, sentado en el cubículo, de pronto levantaba la mirada encontrando los ojos, marrón oscuro de Jisung, sonriendo solo para él y después volver a su trabajo.

Extrañaba recogerlo al otro lado del parque al salir del trabajo e ir por ahí a comer juntos o simplemente a pasar el rato en el departamento del menor, sentados frente al televisor prestando más atención a las caricias y besos suaves que solían compartir mientras algún programa o película se proyectaba.

Extrañaba la dulce y cálida sensación de las manos de Minho en su espalda baja o su cintura, en sus mejillas o su cabello, pero extrañaba más que nada la presencia del alfa de Minho en compatibilidad con su omega.

Y su omega no estaba mejor, ahora parecía resignado, como si ya hubiera aceptado que había perdido al alfa que deseaba, y Jisung realmente se sentía igual sobre Minho, pero aun aceptando que todo había terminado no ayudaba a no extrañarlo.

Chan había sido un buen soporte a la realidad, pero la persona que nunca se apartaba seguía siendo su hyung, Young no era insistente, en realidad mantenía una distancia sana, sin perturbarlo, pero Jisung estaba tan distraído y fuera de si en su vida personal, que termina recurriendo a Younghyun por no querer molestar a Seungmin, Felix o su mellizo.

No quería atosigar a los demás y menos ahora que cada uno tenía sus propios problemas, Seungmin acaba de terminar su relación de años con Hyunjin, Jisung simplemente no podía creerlo cuando Seungmin se lo dijo a él y a Felix, Seungmin solo dijo: "Hyunjin no es lo que necesito ahora" y no hubo más preguntas.

Por otro lado, estaba Felix que cada día se acercaba más a su fecha de parto y Changbin parecía demasiado ocupado como para cuidarlo adecuadamente, Felix no se quejaba realmente, solo decía cosas como: "puedo cuidarme solo", aunque claramente pedía a gritos la atención de su pareja.

Inusualmente su mellizo también tenía algo así como un problema, no sabe mucho al respecto porque Chan siempre le habla del tema a medias, pero por lo que entendió, su mellizo tiene algo así como un enamoramiento inadecuado, no sabe a que refiere con eso, pero es claro que algo lo detiene y eso es suficiente para hacerlo perder el enfoque.

En definitiva, cada uno tenía que lidiar con los problemas de sus vidas adultas, lo que llevó a Jisung de nuevo con Younghyun.

—¿Por qué no lo invitas a cenar con nosotros? —preguntó su madre un sábado por la mañana, su día libre.

—¿A quién? —preguntó Jisung de vuelta.

Su madre sonrió como si Jisung acabara de hacer una pregunta tonta. Chan suspiró a su lado, están desayunando todos juntos en el departamento de sus padres.

—Se refiere a Younghyun, —susurraba Chan. —Ha estado hablándote de él los últimos diez minutos.

Jisung miró a su mellizo con incredulidad, ¿Su madre le estaba hablando? Ni siquiera lo había notado solo miraba a la nada y su desayuno pensando como estaría Minho.

—Oh, hyung. —dijo con entendimiento hacia su madre, —bueno hyung es un alfa bastante ocupado.

Su madre reía con picardía, —estoy segura de que quiere cortejarte, si no me equivoco por supuesto que hará un espacio en su agenda para ti.

Jisung tragó de golpe su cucharada de arroz y se obligó a no mostrar una expresión horrorizada.

—Madre no creo que Jisung quiera empezar una relación en este momento, la agencia está pasando por un momento difícil, ¿Cierto Sung? —Jisung asintió hacia su mellizo y después a su madre agradeciendo a la Luna que tenía a su mellizo para ayudarle esta mañana.

Jisung suspiró, ciertamente la agencia donde ha pasado menos de diez años trabajando como administrador está pasando por un momento critico y bastante tenso, hace apenas unos días que todos fueron informados sobre la compra de la agencia, al parecer el CEO tenía pensado un proyecto más tranquilo en otra ciudad y decidió vender la agencia a una corporación de arquitectura y diseño de interiores más grande.

Jisung investigó sobre el tema, la corporación "Ajya" es bastante conocida en Seúl e Incheon, Younghyun le dijo que uno de sus superiores de la universidad es el actual CEO de Ajya, que no había de que preocuparse pues todos conservarían sus trabajos, pero eso aun no estaba confirmado.

—Pero seguro estarás bien hijo, no pueden despedirte como si nada eres un empleado de antigüedad, —decía su padre.

—Tu padre tiene razón cariño, eres muy bueno en tu trabajo, seguro que no habrá problema, así que no tienes porque limitarte nada, —siguió su madre.

Jisung no sabía que decir, tuvo la intención de buscar ayuda en Chan de nuevo, pero si su mellizo tuviera algo para decir ya lo hubiera hecho así que solo sonrió a sus padres.

—Le diré a hyung si tiene tiempo.

***

Seungmin miró a Chan, el alfa mantenía su atención en su teléfono móvil con una expresión tranquila y relajada, de pronto una publicación de Yuna, una de sus alumnas llamó su atención, una fotografía de un joven omega de apellido Yang durmiendo sobre sus brazos casi babeando, Chan sonrió.

—Mmm... es bastante lindo. —La voz de Seungmin lo alertó y apagó el móvil de inmediato. —Luna, pero tranquilízate, no soy de protección de menores.

—No es gracioso, —replicó el alfa.

Seungmin sonrió, —creo que estás dándole muchas vueltas a ese asunto.

—¿Y qué sugieres que haga?

Seungmin miró a un lado del restaurante donde se encuentran esperando.

—No lo sé, pero puedo decir que tienes que tomar una decisión definitiva y no arrepentirte después.

Chan lo miró detalladamente, estudiando el aspecto de su mejor amigo omega, ciertamente hace algunos meses podría decir que aún sentía atracción hacia su primer novio, Seungmin es hermoso, tan directo como eso, pero el omega al frente no se compara con lo que él conocía.

—¿Ya vas a decirme porque dejaste a Hyunjin?

Seungmin desvió la mirada de su vaso de jugo mirando de nuevo al mismo lugar, las puertas de un hotel bastante discreto en Busan.

—Changbin debe estar por salir, —dijo cambiando de tema.

Chan bufó, —cobarde, —soltó sabiendo que eso daría justo en el orgullo de Seungmin.

El omega no lo miró, —estoy embarazado, —confesó.

Chan pensó que era una muy mala broma, pero después de analizar la expresión en el perfil de su amigo, soltó una maldición por lo bajo.

—¿Eso es todo? —se atrevió a preguntar, —bien, ustedes dijeron qué sin hijos, pero ya que decidiste tenerlo, ¿Porqué no hacerlo con él?

Seungmin seguía sin mirarlo, —Hyunjin tiene una vida muy equilibrada, no es precisamente un maniático del control, pero no le gusta el desorden, es como yo, pero yo puedo adaptarme a un cambio como este, él no.

—Y eso lo decidiste después de hablarlo con él, supongo.

Seungmin por fin giró a mirarlo, —no le dije nada.

Chan ni siquiera se sorprendió, —¿Eres consiente de que estás actuando tan irracional como nunca en tu vida?

Seungmin sonrió sin gracia de nuevo mirando a las puertas del hotel, —en algún momento tomaría una decisión que parezca demasiado estúpida. —Chan estaba por decir algo, pero Seungmin siguió, —allí están.

Chan miró al hotel frente al restaurante, Seo Changbin, el alfa menos favorito de Seungmin acababa de convertirse en el más odiado.

Seungmin y Chan salieron del restaurante a toda prisa y cruzaron la calle para llegar hasta Changbin y su amante.

Seo tragó duro al verlos y a como pudo alejó sus manos de la bonita omega a su lado. —Escuchen, esto no-

—Cállate, —lanzó Chan.

—Hablemos en la habitación que siempre usan, —siguió Seungmin con una expresión más fría que el hielo.

Changbin asintió caminando de vuelta al hotel, la omega que ha sido su compañera en el programa de radio lo siguió tomando algo de distancia, Seungmin y Chan detrás de ellos.

En la habitación y a puerta cerrada, Seungmin miró a Changbin y estuvo a nada de golpearlo con todas sus fuerzas, pero Chan lo detuvo.

—Ni siquiera merece que gastes tu energía Seung, —decía el alfa Han.

—¿No vas a decir nada? —dijo Seungmin a Changbin, —y tú, siquiera sabes que este tipo tiene familia, su segundo hijo está en camino.

Changbin desvió la mirada, la chica asintió, —por favor no se molesten con él, yo... yo lo sabía, él siempre me lo dijo, pero yo quería-

—¡Maldita descarada! —gritó Seungmin, giró a mirar a otro lado.

—Se acabó, bien, no hay nada más que decir, —por fin habló Seo. —Ya puedes decirme lo horrible que soy y que no merezco nada, y todos los insultos que se te ocurran.

Seungmin volvió a mirarlo y casi se lanza sobre el alfa, el muy maldito aún sonaba arrogante a pesar de haber estado engañando a su omega y ser descubierto.

—Seungmin, —reprendió Chan de nuevo, —calma, —susurró, —esto es por Felix, él no necesita ver a Changbin molido a golpes aún que es lo que se merece.

Seungmin respiró profundo y miró a la chica, —vete, —soltó con una expresión y tono que podían aterrar a cualquiera, —y si tienes algo de dignidad te alejaras de este imbécil.

La chica parecía querer decir algo y miraba a Changbin como si pidiera ayuda, pero el alfa Seo solo desvió la mirada, la omega salió de la habitación.

Seungmin respiró profundo nuevamente, dio algunos pasos lejos de Seo y Chan, trato de calmar el horrible sentimiento de traición por Felix, el no merecía esto.

—Tienes que decirle a Felix, —habló Chan.

—No lo haré, —respondió Changbin.

Entonces Chan si se lanzó sobre él tomándolo por el cuello, —¿Qué mierda dijiste idiota? Crees que te vamos a guardar el secretito como si nada, ¡Se lo dirás a Felix!

—Chan, suéltalo, —decía Seungmin acercándose a ellos, y poniendo sus manos sobre el brazo de Chan, el alfa Han obedeció, —escucha Seo, tienes una semana, solo una, si no dices nada yo lo haré.

Changbin asintió, sin objetar nada. Seungmin se sintió mareado y algo débil, Chan lo ayudó a salir del hotel y llegar al auto, para volver a Seúl.