Hyung, en serio no quiero herir tu ego, —decía Minho con una mirada desafiante, —lamento tener que vencerte de esta forma.

Jisung bufó y sonrió altivo, —hablas más de lo que juegas mocoso, —retaba manteniendo su mirada en el joven alfa.

Minho sonrió de nuevo antes de rebotar la pequeña pelota en la mesa y golpearla.

Cuatro partidos se han jugado, dos ganados para el alfa y dos para el omega, justo ahora inician el partido que decidirá quién gana. Minho descubrió lo competitivo que es su novio y lo divertido que es competir contra él.

El partido seguía su curso, ambos dando lo mejor por ganar, divirtiéndose y pasando un momento agradable, de pronto el golpeteo de la pequeña pelota sobre la mesa se volvió más insistente, rápido, Minho moviéndose a lado y lado para responder a la evidente declaración de guerra de su novio, Jisung sonreía altivo al estar llevando al joven alfa al borde pues su coordinación al moverse comenzaba a fallar debido a los certeros golpes de su paleta.

Jisung podía saborear la victoria y se permitió pensar en que le pediría a Minho como premio, aquella ligera distracción fue el factor que lo llevó a dar un mal golpe, Minho sonrió y devolvió la pelota, Jisung estaba a muy poco de fallar, pero estiró su brazo con rapidez y logró defenderse.

Pero lamentablemente no pudo seguir el partido, soltó un quejido que alertó a Minho de inmediato, Jisung llevó su mano a la unión de su cuello y hombro con una mueca de dolor, ha pasado tiempo desde que no hacia tanto ejerció, su trabajo lo mantiene sentado casi todo el día y aunque a veces camina de camino a la agencia, no se compara con movimientos bruscos como el que justo acababa de hacer.

Tal vez los años comienzan a pasarle cuenta y ya que nunca fue muy atlético su cuerpo no está acostumbrado al ejercicio.

—Hyung, ¿Está bien? —preguntaba Minho con ese tono preocupado que hizo a Jisung sonreír.

—Estoy bien, solo es un poco de dolor en el cuello, —explicaba mirando a Minho, —creo que un descanso estaría bien.

Minho asintió y se dirigieron a las bancas junto a la mesa, Minho le dio una botella de agua ya abierta y se acomodó detrás de Jisung, movió la mano del omega de su cuello y comenzó con esos masajes terapéuticos que Jisung disfruta mientras el dolor desaparece.

—¿Está mejor? —pregunta Minho en su oído, Jisung asiente y suspira, el alfa no evita su sonrisa satisfecha al ver a Jisung tan cómodo con sus manos sobre él y en público, esto le dice que poco a poco Jisung se siente más cómodo a su lado sin importar la gente.

—Lamento haber interrumpido el partido así, —comenta Jisung cuando Minho terminó el masaje a su cuello y hombros.

—No te preocupes de todas formas ya habías ganado, ese último pase no alcancé a golpearlo, —excusa con entusiasmo, —creo que mejor dejamos que tu cuello y hombros descansen.

Jisung inconsciente formó un puchero en sus labios, —¿Arruiné la cita?

Minho se acerca despacio y le da un beso en la mejilla, —claro que no, estos han sido los partidos más emocionantes que es jugado nunca, además podemos pasar un rato más por aquí, escuché que venden un helado muy delicioso. —¿Quieres uno?

—Helado suena perfecto, —asintió Jisung dejando su mano derecha sobre la mejilla del joven.

—Bien, vuelvo en un momento, —se despidió.

Jisung suspiró feliz y... ¿Enamorado?

Si, bastante enamorado, aún le causa algo de conflicto estar saliendo con un chico tan joven, pero esos pensamientos cada vez son menos, no ha pensado en como contarle a sus amigos, Chan o sus padres, pero aún queda tiempo, Minho aceptó esperar tres meses, y apenas van en el primero, no hay prisa.

Cuando Minho caminaba de regresó a la banca con él unas chicas se acercaron a hablarle, el alfa mantuvo una expresión neutra, pero amable. Las chicas hablaban y hablaban, Jisung hizo una mueca cuando Minho sonrió para después señalarlo, las chicas lo miraron, Minho siguió caminando hasta llegar a su lado.

—¿Qué pasa? —preguntó Minho al notar la mirada seria de Jisung.

—¿Qué dijeron esas chicas? ¿Son omegas?

—¿Celoso? —preguntó devuelta el alfa con tono divertido, pero su diversión termino al notar que Jisung asentía con una expresión seria, —hyung, eres tan lindo, —halagaba dejando el helado a un costado y tomando las manos de su omega, —esas chicas me estaban invitando a jugar un partido dos contra dos, pero les dije que tenía que pedirle permiso a mi novio, o sea tú.

Jisung sonrió sintiéndose algo avergonzado. Minho le dio el helado y ambos comenzaron a comer, ya habían pasado algunos minutos cuando las chicas de antes se acercaron a ellos.

—Disculpe señor, —dijo una chica, Jisung olfateó el aire buscando un aroma, pero nada consiguió, la chica debe ser beta. Ignorando el hecho de que la chica acababa de llamarlo señor, Jisung asintió, —bueno es que mis amigas y yo queremos jugar un partido dos a dos, pero nos falta uno, así que pensábamos si ¿Podría darle a él permiso de juagar con nosotras?

Jisung miró a Minho quien con una mirada le indicó que era su decisión, entonces Jisung pensó que debería dejar que Minho se divierta un poco más ya que él no está en condiciones de seguir jugando.

—Está bien, solo si él quiere, —respondió con una ligera sonrisa, la chica asintió y miró a Minho quien no apartaba su mirada de Jisung, —anda, sé que aún tienes ganas de otro partido y bueno yo estoy algo cansado, —explicaba Jisung quitando la preocupación del alfa, este asintió y dejándole a Jisung lo que queda de su helado caminó hasta la mesa para dos donde se encuentran las demás chicas.

Jisung se divertía mirando a Minho muy concentrado en el partido mientras disfrutaba de porción doble de helado. Minho lo miraba cada que lograba un punto, mostraba esa esplendida sonrisa e incluso le dedicaba un guiño coqueto cada cierto tiempo, Jisung solo podía responder con sonrisas y algunas señas indicando que lo apoya.

Al fina terminaron jugando tres partidos, Jisung diría que fue demasiado, que Minho demoraba demasiado jugando con esas chicas, pero no, el alfa estaba realmente concentrado jugando, no prestaba mucha atención a lo demás, solo el partido y su omega.

Las chicas agradecieron a Minho por su tiempo y a Jisung por el "permiso".

—¿Muy difícil? —preguntó Jisung extendiéndole a Minho una botella de agua, el alfa bebió hasta la mitad y negó.

—Juegan bien, pero no tanto como tú.

—Parecías estarte divirtiendo. —Dijo tentativamente para ver qué diría Minho.

—Pues sí, son buenas chicas, pero no se compara con el tiempo que paso contigo, —se sentó al lado de su novio y le dio un beso rápido en la mejilla. —¿Nos vamos a cambiar para ir a mi departamento?

Jisung asintió, por ello empezaron a guardar sus cosas. El omega mayor compro otra porción de helado, una más grande y una pequeña, su intención era darles a las chicas el bote más grande, se dirigió a los vestidores para cambiarse, sabía que esas chicas estarían por allí, quería agradecerles adecuadamente por jugar con Minho, ya que él no podía.

En cuando sus ojos las encontraron, sonrió y aceleró su paso, aunque tuvo que detenerse al escuchar la conversación.

Ellas estaban sentadas de espaldas en una banca, no podían verlo.

—Ese omega es algo viejo para ese chico ¿No creen? —preguntó una de ellas, sentada al medio, cabello castaño y largo atado en una coleta.

Una pelinegra con el cabello trenzado respondió, —sí, seguramente está con él por dinero, un compañero de un grupo hace lo mismo, sale con omegas mayores solo para que estos le regalen cosas. Es funcional, pero algo humillante.

—Igual no creo que duren, digo ¿Si notaron que el pobre omega no pudo seguir jugando? —le siguió la tercera de las chicas, también pelinegra, pero de cabello corto.

Las tres empezaron a reír asintiendo, el corazón de Jisung sintió el peso de las consecuencias de estar con Minho.

No todos lo entenderán.

Se dijo para ganar algo de confianza, pues no necesita arruinar de nuevo el buen ambiente que tiene con Minho en estos días, se dijo que esos comentarios no debían afectarle y tragándose las ganas de arrastrar a las tres chicas habló.

—Hola chicas, sabía que las encontraría por aquí, —las tres se giraron a mirarlo, Jisung quiso burlarse de sus expresiones de culpa y vergüenza, —les traje un helado para agradecerles que jugaran con mi novio, —continuaba antes de que su impulso de valentía terminara, —mi alfa de verdad tenía ganas de seguir jugando y yo ya estaba algo cansado, así que tengan, —extendió el bote pequeño de helado, —lamento que solo sea uno.

—No, está bien, igual gracias por permitir que tu novio jugara con nosotras, —dijo la castaña tomando el helado.

Jisung asintió sonriendo grande, por un momento estaba orgulloso de su actuación.

—Que lo disfruten, el helado de este lugar es muy bueno, —se despedía tomando una buena cucharada del helado más grande en sus manos, dijo adiós moviendo la mano derecha y giró para alejarse de ellas. —No se merecían el bote grande, —gruñía molesto mientras llenaba su boca de helado. Siguió al vestidor para finalmente cambiarse de ropa.

...
Disculpen, sé que tardé demasiado.
Por la tarde subiré el siguiente.

Besos. May.