Mis ojos se abren lentamente, siento mi cuerpo algo pesado, mi nariz capta un olor raro, creo que es lejía, eso me hace arrugar la nariz intentando cubrirla con mi mano, pero noto que tengo un cable conectado al dorso de mi mano, la habitación en la que estoy es totalmente blanca, su tamaño es pequeño, puedo ver por la ventana de mi derecha algunas personas que pasan por el pasillo, ¿Qué hago en el hospital? Reviso el brazo que JungKook me inyectó en el departamento, la zona tiene un moretón algo pequeño, pero en el otro brazo tengo el mismo, no recuerdo que me hayan inyectado otra vez.

— No recuerdo nada—susurro tocando mi frente. Intento sentarme en la camilla en la que estoy, hay unos chupones en mi pecho que indican mis latidos en una máquina, tengo una bata de hospital, debajo de la bata estoy desnuda— ¿Dónde están los demás? —aclaro mi garganta sintiéndola algo seca.

La puerta de la habitación se abre, Jimin aparece escribiendo algo en su celular, pero al percatarse de mí deja eso de lado.

— ¡SoHee! —corre hacia mí luciendo aliviado— ¿Cómo te sientes? ¿Estás algo mareada? ¿Te duele algo?

Tantas preguntas no me ayudan, acaricio mi frente queriendo hacer memoria, pero no recuerdo absolutamente nada después de la inyección. Si estoy en el hospital alguien tuvo que salir herido, ¿Dónde está JungKook?

— Estoy perdida por completo—hablo en un tono bajo— ¿Qué pasó, Jimin? —lo miro.

Acerca una silla acomodándose a mi lado, parece pensar si contarme o no, toma una bocanada de aire y se endereza.

— ¿Qué es lo último que recuerdas exactamente?

Mi mente trabaja en segundos, las imágenes son claras, pero poco a poco se vuelven borrosas hasta convertirse en una pantalla negra, como si hubiera un error en el sistema.

— JungKook y yo estábamos en el departamento—él asiente escuchando—Yo llegaba del trabajo y...quería comer con él, pero cuando entré por la puerta...—la imagen de JungKook en la mesa con la vista perdida me hace sentir dolor—Él se había inyectado—miro a Jimin—Su padre estaba en el departamento, estaba armado, tenía drogas y apestaba a alcohol.

— ¿No recuerdas nada más? —frunce un poco el ceño.

— Su padre le dio la orden de drogarme, quería que le dijera donde estaba su esposa, JungKook me inyectó algo aquí—indico la zona en mi brazo—Después de eso no recuerdo nada.

— ¿Entonces...ambos estaban drogados?

— ¿Cómo llegué al hospital? ¿Y JungKook? ¿Dónde está su padre?

Jimin no me responde al momento, parece tener un debate mental consigo mismo, intento tener paciencia y esperar a que hable, pero tarda demasiado causándome ansiedad, ¿Qué tanto piensa?

— Me incomoda decirte esto, cuando me lo dijeron quise golpearlo por haberte tocado, de no haber sido por sus amigos lo hubiera hecho...

— Espera, ¿TaeHyung y Jennie estuvieron aquí? —pregunto parpadeando varias veces—Jimin, ¿De qué estás hablando? No entiendo nada...

— Nos llamaron desde el hospital, mamá respondió y le dijeron que estabas aquí por una sobredosis de droga—contengo el aliento ante eso—No podíamos creerlo, mamá le preguntó varias veces a la persona si realmente eras tú, no voy a mentirte, lo primero que pensé fue en JungKook.

— ¿Sobredosis? —miro mi otro brazo donde tengo la misma marca de la primera inyección, quiere decir que volvieron a inyectarme, pero... ¿En qué momento? ¿Por qué? ¿Acaso lo pedí?

— Cuando llegamos él estaba aquí con sus amigos, dos policías lo estaban interrogando.

— ¿Qué? —sigo sin creer lo que escucho.

— JungKook no recuerda nada como tú, pero dijo que cuando despertó apenas podía sentir tu pulso—indica, se levanta caminando a los pies de la camilla, aclara su garganta cruzándose de brazos.

— ¿Quieres ir al punto? —me estresa las vueltas que está dando.

— SoHee, creo que esas drogas...les hizo perder el control—me mira fijamente—JungKook y tú estuvieron juntos, en unos exámenes...aparecían...rastros del chico y...ya...sabes.

— Espera un momento, eso no puede ser, JungKook jamás me tocó...

— ¿Puedes asegurar eso?

— No, pero...

— Despertó en la misma cama contigo—su tono se endurece—Él fue quien te trajo aquí, ambos fueron víctimas del loco de su padre, pero quiero que entiendas una maldita cosa, SoHee, tienes que alejarte de este chico, mira lo que pasó—señala—Casi mueres por ese asunto de las drogas, te dije que iba a terminar mal.

No estoy escuchando lo que dice, mi cabeza trabaja a mil, mi cerebro quiere recordar, pero no puedo, niego para mis adentros, no puedo creer que JungKook y yo hayamos estado juntos de esa manera, no quiero creerlo, pero contengo las lágrimas, mis manos tiemblan un poco cuando las llevo a mi cabeza, Jimin se calla al verme así, sollozo quizás por confusión o frustración, me siento vulnerable al no poder recordar nada, me siento como una inútil al no poder defender a JungKook esta vez.

"Esto no tuvo que ser así"

— Oye, SoHee—se acerca a mi lado abrazándome—Tranquila, lo siento.

— No recuerdo, Jimin—sollozo mirándolo—No puedo recordar que pasó, pero no puedo evitar sentirme mal—oculto mi rostro en su pecho.

Acaricia mi espalda y mi cabello, sollozo por unos minutos hasta que logro calmarme un poco, Jimin toma asiento de nuevo limpiando mi rostro, toma mi mano dando un suave apretón, no quiero decirlo, pero...es como si hubieran abusado de mi cuerpo.

— No voy a mentirte, mamá está muy afectada con esto—comenta—Estuvo toda la noche aquí contigo, le dije que fuera a descansar y comer algo, cuando despertaras le avisaría.

— Jimin, ¿Por qué la policía estaba con JungKook?

— Su madre desapareció del lugar donde estaba.

"¿Le dije la verdad a ese hombre?"

— ¿Cómo es que pudo sacarla de allí? Esto...empeora más—niego con la cabeza—Es un desastre.

— Lo sé, pero, aunque suene grosero tienes que saber que mamá y yo nos preocupamos por ti.

— Es la madre de JungKook, esa mujer padece de Alzheimer, su esposo la volvió la adicta—quiero levantarme, pero cuando saco mis piernas de las sábanas noto las marcas en mis muslos, las marcas son...rojizas y parecen ser dedos.

"JungKook"

— No puedes levantarte ahora—Jimin me detiene—Deja que avise a un doctor.

— Jimin.

— ¿Sí?

— Realmente no puedo recordar nada—miro sus ojos. Él se acerca depositando un beso en mi cabeza.

— Lo sé, tranquila.

Lo miro alejarse dejándome sola, mis lágrimas regresan, pero intento controlarme, si me altero no recordaré nada, si el doctor dijo eso sobre mí debe ser verdad, pero sé que ninguno de los dos pudo haber disfrutado eso, estábamos drogados, JungKook nunca hubiera seguido en sus cinco sentidos, yo...yo...

No quería que mi primera vez fuera así.