Despierto a la mañana siguiente haciendo mi rutina de cada día antes de irme a trabajar, es imposible no pensar en JungKook cuando paso cerca de su puerta, ésta sigue cerrada pero no se escucha nada, probablemente siga dormido. Cuando estoy aseada y vestida, abro el refrigerador consiguiendo el envase de comida que traje anoche con sobras de la cena, sé que JungKook no come como debe, ¿Estaría mal si le dejo ese envase para él? Sé que el contrato dice que no tocaremos la comida del otro, pero literalmente es mi comida siendo ofrecida a él.

Decido acomodar aquellas sobras en un plato luego de calentarlo un poco, preparo unos rollos de huevo colocándole cuatro para él y tres para mí, desayuno algo rápido con cierta prisa, a un lado del plato en la mesa le dejo una nota.

"Creo que estaría bien si comieras esto, pocas veces te veo comer saludable, hay que mantenerse fuerte. Fighting"

Miro la puerta de la habitación del chico antes de retirarme tomando mi bolso.

•••

El autobús está lleno como cada mañana, todos se dirigen a sus trabajos o sus centros de estudios, cada quien va con la cabeza en sus asuntos, la mayoría mira su celular mientras el autobús va en marcha por la calle. Mi teléfono vibra en mi bolsillo, me extraña y me sorprende que sea papá, respondo la llamada colocando el aparato en mi oreja estando de pie en el vehículo, me agarro firme al pasamanos para no caer.

— ¿Hola?

— SoHee, hija, ¿Estás ocupada?

— No, ¿Ocurre algo? —su voz se escucha un tanto alegre.

— ¿Ya estás en el trabajo? No recordaba a que hora entrabas.

— Está bien, ¿Qué ocurre? —mi voz es neutra. Realmente no lo odio, pero tampoco lo amo.

— Te llamaba para saber tu opinión, en una semana se reunirán tus tíos y primos como cada año—ya sé por dónde va. A mamá nunca le agradó esas reuniones, incluso Jimin las odiaba, pero a mí me incomodaban—Quería saber si aceptarías ir este año.

— Ah—pienso bien que decir. Mi padre siempre nos invita a esa reunión, es algo que la familia Park suele hacer, sé que para algunos es agradable estar con sus familias, pero es incómodo cuando estás en medio de personas que se creen perfectas y no dejan de recordarte que estás por debajo de ellos—No lo sé, estoy algo ocupada con el trabajo.

— Sólo es un almuerzo, hija.

— ¿Jimin ya aceptó? —pregunto como si nada sabiendo la respuesta.

— Tu hermano suele llegar cansado del trabajo, eso me dijo—comenta. Era de esperarse—Hace mucho que no vas a una, SoHee.

La última vez que fui tenía diecisiete años, hace cinco años.

— Intentaré hacer un espacio, te estaré avisando.

— Gracias, cuídate—dice antes de colgar. Cómo puedo aprovecho de escribirle a mi hermano.

SoHee:
Papá acaba de llamarme.

Jimin:
No me digas, ¿Te invitó a la reunión familiar Park?

SoHee:
Así es.

Jimin:
Dime que no aceptaste.

SoHee:
Le dije que lo pensaría.

Jimin:
Felicitaciones, acabas de ilusionarlo.

SoHee:
¿Qué querías que hiciera? Se emociona con esas reuniones, no pienso ir pero no podía decírselo a la cara.

Jimin:
Así que prefieres jugar con sus emociones, bien por ti, hermanita.

— Idiota—susurro.

— ¿Disculpe? —el hombre que va sentado frente a mí me mira.

— No es con usted, lo siento—me sonrojo de la vergüenza. Unas paradas después bajo del autobús con otros pasajeros, mi celular recibe otro mensaje que no dudo en ver mientras camino.

JungKook:
Gracias por el desayuno.

A pesar de que es simple sonrío un poco, al menos el chico no lo rechazó. No sé que escribirle exactamente, no puedo ser obvia al preguntarle por anoche, siento que se enojaría conmigo por ser chismosa.

SoHee:
No hay de qué, espero que te haya gustado.

Camino hacia la esquina esperando a que el semáforo cambie. Mi ánimo se ha levantado por ese simple mensaje, en todo este mes esto ha sido un gran avance.

Un mensaje llega a mi celular.

JungKook:
Lo hizo.

Envío una carita sonriente pero esta vez no recibo respuesta. En su perfil hay una foto que me atrevo a ver por primera vez, alguien se la tomó definitivamente, JungKook mira seriamente la cámara al lado de una moto, su mano descansa en ella.

 — ¿Tiene una moto? —susurro curiosa—Nunca lo he visto con una—hago memoria, de hecho, no sé si va al trabajo en auto o en transporte, no sé nada de mi compañero de departamento. En la foto sale tan guapo como en la vida real, sonrío tontamente negando con la cabeza—Es atractivo, sigue siéndolo—guardo mi celular suspirando.

•••

El día de trabajo fue tan normal como otros días, el amigo de JungKook había ido de nuevo pero esta vez fue solo, su cabello ya no era rojizo, había pasado a ser un castaño claro. De camino a casa compré algunas cosas para mi uso personal, en el camino voy considerando la opción de encontrar otro trabajo, lo que la doctora Irene me está pagando no me está alcanzando para pagar mi parte del alquiler, el pasaje, la comida y parte de los servicios como la luz, el agua, etc.

Ser independiente es difícil, había hecho planes para comprar mis cosas para la habitación, pero eso tendrá que esperar.

Entro al departamento un poco más temprano de lo normal, huele bien y mi estómago ruge. JungKook está sentado en el sofá con una laptop en sus piernas, al verme parece sorprendido.

— Llegaste temprano.

— Salí antes, no había muchos pacientes—dejo mi bolso en la mesa buscando un vaso para beber agua. En la cocina noto la caja de pizza que hay.

— Pedí algo de pizza, puedes tomar un poco si quieres.

Se escucha normal, no pareciera que anoche estuvo llorando. Mi curiosidad va en aumento, quiero preguntarle.

— Gracias—saco un plato del estante sirviéndome dos pedazos, tiene mucho queso y eso me encanta. Mi celular vibra en mi bolsillo, es mi madre quien llama en este momento tan importante— ¿Hola? —respondo llevándolo a mi oreja. No puedo evitar las ganas de darle un mordisco a la pizza antes, todavía está tibia y el queso da el toque mágico.

— ¿Ya estás en casa, cariño?

— Sí—corto el queso que se alarga con mis manos. Me sirvo un vaso con agua bebiendo un trago, realmente moría de hambre— ¿Todo bien?

— Tu hermano me dijo lo de la reunión.

— Ah, supongo que te dijo que no iré.

— Me parece bien, esos tontos se creen dioses—la escucho decir. Me sirvo más agua pisando el celular con mi hombro y mi oreja, tomo el plato y el vaso caminando a mi cuarto, no sé si es idea mía, pero me parece que JungKook me sigue con la vista.

— Está bien, mamá, pienso decirle a papá que no iré a ese lugar.

Cierro la puerta de mi cuarto con el pie.

Me causa gracia como todo está muy tranquilo, muy aburrido y normal pero de repente en un instante puedo romperles el corazón a varios xD

Sorry, me río de mi crueldad literaria.

PD. Lo de las reuniones familiares al año si es real, pasaba mucho con mi padre y la reacción de SoHee, de Jimin y su madre también es real, porque me pasaba.

PD2. La chica de multimedia es como me imagino a SoHee, es la que más se parece a como la tengo en mente pero pueden imaginarla como quieran.