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𝐷𝑖𝑒𝑐𝑖𝑠𝑒́𝑖𝑠

He perdido la cuenta de cuantas veces JungKook respira cerca de mí permitiéndome sentir su aliento chocar con mi piel, específicamente en mi cuello. Para entonces ambos respiramos agitadamente, el reflejo de ambos en el espejo es algo que no dejo de mirar, sobre todo para ver que hago bien o mal, mi cuerpo tarda un poco en reaccionar al ritmo como las otras tres personas, pero Jennie tiene mucha paciencia para explicarme que hacer. Hay un paso que me pone nerviosa y me cuesta hacer.

Mis manos suben por los brazos de JungKook deteniéndose en sus hombros, luego bajan por su espalda, cuando debe pasar a su torso es donde tiemblan. Literalmente estoy tocando su cuerpo y me hace sonrojar, puedo notar que me mira en el espejo con su rostro serio, supongo que debe burlarse internamente de mí.

Una vez salimos los cuatro del salón decidimos comer algo, todos nos hemos cambiado de ropa, mi cuerpo duele un poco al no estar acostumbrada al baile, JungKook va a mi lado mientras Tae y Jennie van abrazados delante a unos pasos de nosotros. Se ven muy bien juntos, se complementan bien.

— Lamento que Jennie te haya llamado.

Miro a JungKook cuando me habla, a esta hora ha comenzado a anochecer, pero hay personas en la calle como siempre.

— Está bien, me distraje mucho.

— ¿No debías trabajar? —acomoda la correa de su bolso en su hombro. Lleva esa chaqueta de cuero que se ha hecho costumbre ver en él.

— Irene necesitaba arreglar unas cosas de nuevo—comento—Otro día perdido donde no recibo paga.

Él guarda silencio mirando al suelo, lo imito repitiendo en mi mente los movimientos de baile, me sonrojo porque la forma del chico en tomarme de la cintura fue...muy firme.

— SoHee.

— ¿Sí?

Noto como duda un poco, se detiene y hago lo mismo, aunque Tae con Jennie siguen caminando.

— Lamento lo que te dije—me sorprendo ante eso. ¿Estoy escuchando bien? El chico rasca su cabeza moviendo un poco su cabello—Yo...—aclara su garganta, se nota muy incómodo.

— No tienes que decir nada si no te sientes a gusto—avanzo un paso, pero él toma mi mano. Volteo a verlo encontrándome con sus ojos, respiro profundo sin entender porque se obliga a algo que le hace sentir incómodo—JungKook...

— No debí decirte eso, no estoy acostumbrado a...esto, tú te preocupaste por mí, debí agradecerte, si hubiera estado solo las cosas habrían acabado peor—habla muy rápido de repente—Lo que hagas o no hagas con tu vida es tu problema, no debí tocar ese tema.

— Aun así, no voy a entrometerme—suelto su mano—No pasa nada, cada quien está metido en sus asuntos, lo entiendo—asiento—Dejemos la conversación hasta aquí-sonrío un poco caminando hacia Tae y Jennie quienes van muy adelante.

•••

— ¿Qué te pareció todo? —pregunta Tae asando la carne. Jennie me sirve un trago de Soju que acepto sin dudar, aunque esta vez no pienso emborracharme.

— Creo que ustedes dos son tal para cual—señalo a la pareja y ambos sonríen— ¿Cómo se conocieron?

JungKook se apresura a responder eso tomando un poco de la ensalada en la mesa con sus palillos.

— Todo fue gracias al licor—sonríe un poco mirándolos—Tae se enamoró ciegamente de esta chica, no dejaba de hablar sobre ella cuando la conoció.

— ¿No te parece algo absurdo que me señales por ello cuando tú también estás así? —acusa y noto que Jennie lo golpea en sus costillas levemente con su codo. Mastico despacio mirando a JungKook.

— ¿Estás enamorado de una chica?

De repente la tensión se siente en el ambiente, más bien en la mesa, TaeHyung ha dicho algo que no debía, lo noto en la cara de Jennie, JungKook aclara su garganta antes de responder.

— No, pero Tae se hace la idea de que me gusta alguien—lo fulmina con su mirada. Si las miradas mataran, ese chico ya estaría muerto. Sé que si pregunto no van a responderme por lo cual decido ni molestarme en averiguar a qué se refieren.

•••

Estoy anotando algunos pacientes para mañana por la mañana, el consultorio ha estado tranquilo el día de hoy, Irene se nota algo rara, siento que me ha estado ignorando todo el día y no sé si está molesta por algo que hice, algo que desconozco por completo. A la hora de cerrar, cuando ya no quedan pacientes, aprovecho de entrar a la sala donde atiende a las personas. Ella se encuentra esterilizando los instrumentos que usa.

— ¿Doctora Bae?

— ¿Mmm?

— Ya es hora de irme, ¿Hay algo que necesite?

— Sí, necesito hablar contigo—voltea a verme—Tengo una mala noticia, sé que debí avisarte antes, pero quería tener algo asegurado.

Frunzo el ceño sin entender por donde va.

— No la entiendo.

— Voy a cerrar el consultorio—aquello me cae como un balde de agua fría—Tengo un primo en Estados Unidos que también es odontólogo, tengo en mente irme a Ohio, de hecho...el próximo mes me iré.

— ¿Qué? —es inevitable que no reaccione— ¿Por qué no me dijo antes? Hubiera comenzado a buscar empleo desde mucho antes y...—hago una pausa—Me mudé por usted.

— Lo sé, sé que te animé a mudarte y fui yo quien te contó de JungKook.

— Irene—la llamo por su nombre—Necesito trabajar, ahora mismo nadie quiere darme trabajo, no puedo perder este empleo.

— Lo sé, SoHee—suspira—Lo siento mucho.

•••

Llego al departamento más que molesta, ni siquiera miro lo que me rodea, voy hacia mi cuarto azotando la puerta y dejando mis cosas en la cama. Me siento en ella llevando mis manos a la cabeza, respiro profundo varias veces, oficialmente estaba sin empleo, me quedaban unas semanas en el consultorio y nada más. Muerdo mi labio pensando en qué hacer, estoy cansada de buscar trabajo y que no me llamen.

¿Acaso hay algo que no estoy haciendo bien?

Miro mi celular dudando un poco, no puedo decirle a mamá ni mucho menos a mi hermano, Jimin querrá que regrese a casa junto a ella, tomo mi teléfono buscando un nombre en específico.

SoHee:
¿Estás en el departamento?

No pasa mucho en el que tengo una respuesta.

JungKook:
No, hoy debo trabajar.

SoHee:
Sé que no debo molestarte ni debo comentarte esto pero lo resumiré, ¿Puedes ayudarme a conseguir un empleo?

JungKook:
¿Por qué?

SoHee:
Eso también lo resumiré, Irene se irá del país y en unas semanas estaré desempleada, podrás imaginar lo desesperada que estoy, espero que por una vez no seas indiferente y me salves el trasero en esta ocasión.

Me dejo caer en la cama con un suspiro, miro el techo con un leve dolor de cabeza. Realmente no quiero volver a casa, pero tampoco quiero endeudarme con este chico, tiene que salir algo, tiene que salir un trabajo.

— Piensa positivo, SoHee—intento animarme—Piensa positivo—me digo a mí misma esperando convencerme de eso.

Espero saber explicar lo que viene uwu

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