Los rayos del sol acariciaban le acariiaban la piel , haciéndola ver más brillante. Se removió un poco y abrió los ojos. Marlene en vez de estar durmiendo en su cama estaba durmiendo en la cama que antes le pertenecía a Lily. 

 Se tomó el tiempo para arreglarse el cabello, pues se habia perdido en los pensamientos y habia estado haciendo las cosas sin pensarlas convenientemente. Cuando Marlene y sus demás compañeras se levantaron ella, ya estaba completamente vestida, pero no bajó, se quedó allí, esperando a que ellas terminaran de vestirse por el simple hecho de que no quería bajar sola. 

Marlene la ínsito a que fuera a desayunar algo con ellas despues de ir a devolver algunos libros a la biblioteca. Claire aceptó a medias pero aún así la arrastraron con ellas. ya en el gran comedor, la mirada de Claire decía que extrañaba a Sirius como nunca había extrañado a otra persona. Las chicas que estaban con ella trataban de animarla con cualquier cosa que se les ocurriera, ella mostraba una sonrisa de vez en cuando, pero no con el mismo entusiasmo que solía mostrar. 

Los días pasaban y Claire se había internado en la biblioteca al igual que muchos otros y solamente así pasaba tiempo con Lunático, en los entrenamientos hablaba con James y en las clases de Herbologia ayudaba a Peter, pero al el único que no había ni si quiera mirado era Sirius y eso la estaba matando. 

[....]

Habia llegado el fin de semana y con el esperado partido de Quidditch  entre Hufflepuff y Slytherin. Claire había quedado de ir con Lily y Marlene, por nada del mundo se iba a perder ese partido, había apostado diez galeones con Tom Hardyn a que los tejones conseguirían puntos primero. Los tejones tenían un buen buscador y buenos cazadores tenían todo de ganar a las serpientes.

— oh, vaya. Si que hay mucho movimiento — dijo Marlene haciéndose a un lado para dejar pasar a un chico  — por eso no es bueno llegar a lo último — añadió elevando un poco la voz en dirección a Lily 

— lo siento — se disculpo Evans — me retrasé, de verdad lo siento, tenia que dejar las cosas listas antes de salir...

Las tres encontraron de milagro unos buenos lugares. Marlene había llevado consigo Grageas y media caja de Ratones de azúcar chillones y le había invitado también a Tom Hardyn que por obra de Merlín estaba a su lado. El partido había comenzado y la castaña no perdía de vista a los jugadores de túnica amarilla.  Tanto ella como Tom estaban tan emocionados que aveces discutían por ello.

— ¡Vas a perder Claire!

— ¡Claro que no!

— ¡Si, Gryffindor! — chilló Marlene con una Gragea en la mano

— ¿Gryffindor? — preguntó Lily mirandola extrañada — Marlene, es Hufflepuff contra Slytherin — sonrió leve — nuestra casa no juega hoy, si lo hiciera Claire estaría allí — señaló a un jugador que pasó a toda velocidad sobre su Nimbus — no aquí ¡a tu lado y discutiendo con Tom!

— lo sé, pero aún así ¡Si Gryffindor!

Tom, Lily y Claire soltaron unas risitas.

— ¡oh, si! — gritó Claire alegre frente a Tom que miraba el marcador con esperanzas de estar viendo mal

— ¡tranquila Nclean! — gritó James un poco más arriba antes de que Tom respondiera a Claire.

Claire se giró para encontrarlo y al verlo le saludó con la mano y con una sonrisa. Se detuvo al mirar a Sirius al lado del pelinegro con gafas. Realmente deseaba estar junto a él, posiblemente hubiese apostado con él. Apartó la mirada y miró el juego pero ahora sin la misma emoción.

En la cena, Claire había aceptado sentarse con las chicas. Lily se había ido por que tenia que ir con McGonagall al igual que todos los prefectos de Gryffindor. Todas iban hablado sobre el triunfo de Hufflepuff. Más adelante Sirius estába hablando con la chica que estaba con el en el baile de mascaras. Claire al ver aquello perdió la agilidad de sus pies. La chica parecía estar hecha a molde, todo lo que gustaba Sirius de una chica. 

 Black al percatarse de que la castaña lo estaba mirando, se inclinó aún más a la chica. La sangre de Claire empezó a hervir, apretó las manos hecha puños sin apartar la mirada.

— ¿que pasa Claire? — preguntó Marlene al ver que Claire no avanzaba entre la multitud

— nada. pero... De pronto se me fue el hambre. Creo que.. pasare de la comida 

— ¡¿pero como mujer?! Si hacia unos minutos decías que te estabas muriendo de hambre ¿segura que está todo bien?

— si, Marlene estoy bien — al girarse se golpeó contra el pecho de Snape. — Auch — murmuró y alzó la mirada. — Sss.....— empezó a tartamudear. Penso haberse librado de Snape todos estos días

  — Torpe —  farfullo Snape irritado  

Marlene intentó sacar a Claire de esa situación pero al ver la mirada que le había lanzado Snape retrocedió. El pasillo se había despejado, ya todos habían entrado al gran comedor a excepción de ellos. Claire miró de soslayo a Sirius que aún seguía con la aquella chica,  pero en ese instante los ojos de Sirius estaban sobre ella y Snape. 

Snape rodó los ojos fastidiado, ya no queria saber mas sobre esa chica Nclean asi que con intenciones de entrar al gran comedor, esquivo a Claire de manera indiferente, cuando Claire lo detuvo por el brazo.

— espera — anuncio. Sirius seguía mirándolos con atención. ¿enserio estaba pensado aquello? ¿Claire ya estaba con Snape? Suspiró, no claro que no, pero eso no cambio el hecho de sentirse muy frustrado — no es nada — dijo por ultimo Claire, liberando el agarre del brazo de Snape

Marlene se acercó a ella y prácticamente la arrastró hacia el gran comedor. Sirius que de igual forma iba entrando se igualó a su lado, dejando a la chica atrás. 

— Snape ¿enserio Nclean? — murmuró Sirius sin siquiera mirarla. La frialdad y la apatía en sus palabras lo decian todo.   — no podías caer más bajo

—  ¿enserio Black? El que está cayendo al fondo eres tú

Sirius pasó de largo  hasta sentarse con el resto de los Merodeadores, mientras que Claire se sentó junto a Marlene y el resto de los jugadores de Quidditch. Susan una de las cazadoras le sonrió y siguió charlando con su compañero sobre la nueva revista que habían publicado sobre el Quidditch. 

Durante el desayuno, no había oído otra cosa que no fuese sobre esa nueva revista. Realmente el resto del equipo se habían obsesionado con ella, tal vez, la chica no mostraba tanto interés por los problemas que combatía en su cabeza. La mayoría había empezado a levantarse para disfrutar del día. 

Claire espero a que el Gran comedor quedara medio vació, sus ganas se habían esfumado y no tenia razón para salir rápidamente. Bebió un ultimo trago de Chocolate con canela y se dispuso a levantarse. Unos pasos apresurados captaron su atención. 

  — ¡Oye, Snape!

Snape que apenas estaba por levantarse, miro a Sirius hastiado y mascullo algo inteligible, tanto para Sirius, como para ella. Claire ahogo un grito al ver como Sirius iba por Snape y lo tomaba por el cuello de la camisa, sus pies quedaron a centímetros del suelo.  

  — ¡Dime serpiente retrasada subnormal ¿Que le hiciste a Claire?! — bramo Sirius con evidente furia —  ¡Dime! 

— No se a que te refieres Black — escupió Snape seco, con frialdad en sus palabras 

  — ¡No voy a preguntarlo una vez mas imbécil! —Con aquella furia, Sirius formo un puño con su mano, que iba directamente a la nariz de Snape. — Tal vez con esto se arregle tu desagradable nariz 

Por mas que deseaba correr hacia los dos chicos, sus piernas no le obedecían. ¿que pasaba? Urgentemente tenia que intervenir ante aquella pelea. pero la pregunta que le deambulaba por la mente era ¿Tras quien iría? Por la gracia de Merlin, sus piernas salieron del adormecimiento y corrió preocupada hacia los chicos. 

La enorme nariz de Snape chorreaba sangre tras el golpe que Sirius le había dado. Cuando Sirius apunto nuevamente el puño a la nariz de Snape, este se detuvo por la castaña. 

  — ¡Basta! ¡Es suficiente! —  grito prominente 

Sirius tenso la mandíbula. Sus ojos seguían mostrando desagrado hacia Snape, el odio que tenia antes hacia Snape, aumento. El corazón de ambos palpitaba con rapidez por la adrenalina a la que ambos habían recurrido. 

  —  Si quieres jugar Nclean, esta bien. juguemos — dio el ultimátum Sirius para después marcharse del Gran Comedor. 

La chica dejo salir el aire que había estado reteniendo y se giro hacia Snape que seguía chorreando sangre. 

  — Lo siento — se disculpo con evidente preocupación — Sirius es... 

Snape no la dejo terminar, la aparto bruscamente haciéndola retroceder. Los que habían presenciado aquel espectáculo, miraban a la chica con pena y disgusto. Tal vez hasta ya había empezado a hablar de ella como la vez anterior. 

  —  Déjame.. ayudar... 

El Slytherin se giro frenético hacia la castaña. Sus ojos estaban rojos de rabia y su mandíbula estaba tensa, Claire presto atención a la vena de su cuello que empezaba a resaltar. 

  —  ¡No necesito de tu ayuda Nclean! ¡Solo me has traído Problemas! — bramo, miro a la chica una ultima vez y salio colérico del Gran Comedor. 

[....]

Los días pasaban y la guerra de celos entre Sirius y Claire seguía. El pelinegro se la pasaba junto a la chica piernas largas, se sentaba con ella en la hora de la cena, se les podía encontrar en los jardines y en cualquier pasillo, completamente juntos. Claire por su parte había preferido pasar más tiempo con Snape, aunque fuese lo mas retorcido que jamas hubiese pensado. 

—  ¡es una locura! —  exclamo Marlene alzando los brazos al aire  — no puedes seguir con ese juego estúpido.  —  se cruzo de brazos —  vamos Lily, dile algo.

— Claire... ¿estas segura de lo que estas haciendo?—Lily se acerco un poco mas a la castaña, apartándose de Marlene—   Sabes lo que Severus me grito en el patio y el... tiene esas malas juntas que me dan mala espina. El no es el hombre indicado para ti... Aparte..

 — ¡No es el indicado para nadie! —interrumpió Marlene escandalizada. Lily le pidio que guardara silencio.

 —Piensalo bien, Claire, no quiero que arruines tu vida con alguien como el solo porque estas intentando rebajarte al nivel de Sirius. Lo de el sera pasajero, ya veras, solo lo hace para molestarte...

  — yo... — Claire intento decir algo mas pero sus palabras no procedieron... —  no se que hacer... el... muestra una actitud y luego otra... ¡Me hace enloquecer! 

  Lily dio un paso mas para abrazar a Claire, Marlene descruzo sus brazos y miro a Claire con ternura. 

— si de verdad te quiere dejara a esa chica... 

— y lo hará — añadio Lily  —  pero por favor...deja todo esto. No te dejaremos sola 

  —  gracias, realmente se lo agradezco   —  musito Claire 

Claire había pensado detalladamente las palabras y los consejos que Marlene y Lily le habían dado, en el fondo sabia que ese juego era bajo. Y las chicas no eran las únicas preocupadas por el asunto, puesto que James y Remus pensaban lo mismo: 

  — ¿se puede saber que pasa? — preguntó James mientras leía Quiddicth a través de los tiempos — Canuto está de aquí para allá con una chica... ¿como es que se llama?.....¡Dolores!...con ella y a ti te vi con Snape esta misma mañana. Por favor dime que solo es un juego, por que no iré a tu boda si te casas con Quejicus  

— trata de darme celos con ella, así que...

— tu tratas de hacerlo con Snape — cambió de página — eso de dar celos al cuadrado es uno de mis planes pero, no lo puse en marcha para esa causa Claire. Lo único que hacen es lastimarse ambos y ciegamente lo saben

— ¿Por que no arreglan las cosas? — preguntó Remus que estaba haciendo los últimos deberes — eso es mas fácil que estar con otra persona por la cual no sienten nada y se hacen mas daño, sin mencionar que solamente están jugando con las otras dos 

—  no creo que él esté dispuesto a escucharme

— y tú tampoco estás dispuesta a enfrentarte — terminó la frase James

En ese preciso momento entró Sirius a la sala común y al detenerse frente a ellos, Claire tomó sus cosas y subió las escaleras de caracol para continuar en el dormitorio.  James y Remus solo miraron el recorrido de la castaña y miraron a Sirius que tomaba asiento en uno de los  sofás. 

[...]

Sirius entró al aula de pociones junto a Dolores y le sonrió cuando ella fue a sentarse a otro lugar. Claire suspiró con fuerza y entró al aula. El profesor Slughorn ya se encontraba detrás del escritorio, la castaña dejó sus cosas sobre la mesa y miró a Snape que de igual forma estaba acomodando sus cosas.

Una vez que todos guardaron silencio Slughorn los miró a todos con una sonrisa.

— mis muchachos, hoy haremos algo simple — dijo con varita en mano — esos pergaminos les indicarán la poción que tendrán que dejar en mi escritorio, es algo sencillo. Cada quien su suerte muchachos

Los pergaminos volaron a la mesa de cada uno. Claire tomó el que había aterrizado en la mesa que estába compartiendo con Snape, antes de que el se apresurara a tomarlo, lo desenrollo y empezó a leer.

FILTRO DE MUERTOS EN VIDA

Los ingredientes necesarios son:

Colmillos de serpientes aplastados
Moondew
Ajenjo
Asfódelo
Raíces de valeriana
12 Granos de sopóforo
Pereza cerebral
judía soporífera

La poción debe ser similar a una pasa de color liso, negro líquido en la etapa intermedia, sino que debe entonces dar vuelta un tono claro de color lila, entonces claro como el agua, después de revolver la poción a la izquierda en siete ocasiones.

Al terminar de leer bajó el pergamino y Snape se lo quitó de las manos, le bastó solamente leer el nombre para empezar a preparar todo. Los demás ya estabam empezando a buscar los ingredientes para hacer la poción que les había tocado hacer.

— ¡oye Brahms! — gritó la Gryffindor. El chico de corbata roja con dorado se giró hacia la castaña — ¡¿que poción harán ustedes?!

Snape miró de soslayo a la castaña. 

— poción del olvido — respondió feliz por que le había tocado una poción con dificultad simple.

La castaña se puso de pie y fue en busca de los ingredientes. El profesor Slughorn no les había permitido sacar el libro para ver el procediendo por que según él, sus alumnos ya lo tenían que tener aprendido del derecho al revés. Claire se quedó un momento mirando los ingredientes mientras recordaba el procedimiento, una vez que le vino a la mente empezó a trabajar mientras Snape ponía el caldero a la temperatura adecuada.

Tomó los doce granos de sopóforo listos para agregarlos a la poción. Antes de que los dejara caer Snape la detuvo.

— aplasta uno más — sugirió en murmullo

— ¿Que? Pero... sólo pide doce, no trece

— haz lo que digo Nclean y de preferencia aplastalos con el borde del cuchillo

Claire dejó los granos de Sopóforo aplastados y fue a buscar uno más para hacer los mismo que había hecho con los otros doce. Una vez los trece los agregó a la poción al igual que los demás ingredientes. La última vez que habían preparado el filtro de muertos en vida a ella le había tocado la parte del caldero y a Snape los ingredientes.
Snape se encargó de lo demás mientras que ella se encargaba de colocar el nombre de ambos y el de la poción en la etiqueta del frasco.

— aborrezco está poción — murmuró la castaña — una gota y nos mandaría a dormir eternamente

— está poción la usan en San Mungo como anestesia

— lo sé... Pero... Aún así la aborrezco, al igual que la Amortentia

Severus la miró por un momento y después introdujo un poco de la poción en el frasco que ella sostenía con magia. Slughorn los felicitó a todos por el gran trabajo que habian hecho. Al terminar la clase el aula ya estaba impecable y todo estaba en orden. Las mazmorras estaban frías y oscuras como siempre, los alumnos de tercer año habían hecho una avalancha. Empujaban y pasaban en cualquier hueco que quedara, sin importar nada.

Claire intentó salir por los costados y los empujones que le habían dado no eran demasiado. Snape aún seguía atrapado en ese remolino de magos desesperados por entrar a tiempo a la clase de Pociones.

« ¿Por qué? » se dijo así misma. Penso en si debía ayudarlo o no...tras unos segundos lo tomó del brazo y lo sacó como pudo mientras a ambos los estaban empujando. De una forma u otra, mortifago o no, Snape era una persona con sentimientos y emociones y ella no seria capaz de abandonarlo de aquella forma. Aparte le debía por la golpiza que le había dado Sirius. 

Snape había quedado pegado a las frías paredes, un chico de enormes ojos junto a su grupo de amigos empujaron a Claire haciendo que la castaña se incrustara con el cuerpo de Snape.

— ¡¿Pero que les pasa?! — exclamó la castaña, quejándose — ¿que clase de magos son?

Al momento que Claire alzó la mirada encontró los oscuros ojos de Snape. Claire sentía el aroma a hierbas y a madera más intensos y Snape logró oler aquel aroma a Vainilla y estaba más incómodo que nunca. 

— ¡cuida....! — la castaña no alcanzó a terminar la frase. Sus labios se habían estampado a los de Snape por culpa de aquellos magos incontrolables.

Todo había pasado tan rápido que no les dio tiempo de reaccionar. Un disparo de luz los hizo separarse inmediatamente. Claire había besado a Snape, accidentalmente ¡pero había besado a Snape!

Brahms estába en el otro extremo con la cámara en las manos y una sonrisa en el rostro.

— ¡para el Anuario de Gryffindor! — miró a Snape — y posiblemente para el de Slytherin

Claire se separó de Snape de golpe mientras el pelinegro seguía pegado a la pared atónito por lo que había pasado. Brahms salió corriendo antes de que Claire pudiese acercarse a él.
Brahms era un vil chismoso, por algo le gustaba tomar fotos de todo. Seguramente iba a ir con el chisme a la sala común.

— ¡Diablos, esa sabandija! — exclamó la castaña contrariada. Snape seguía en el mismo lugar sin decir ninguna palabra ofensiva como era costumbre de él — lo siento Snape....

Claire supuso que era la primera vez que Snape era besado, su expresión lo decía todo. Snape apartó a Claire con brusquedad y se fue a su sala común. La castaña empezó a caminar por el pasillo como si estuviese montando guardia. No podía ir a la sala común de los leones, a esas alturas Brahms ya debía de haber llegado y no quería que le hicieran preguntas sobre el "asunto" así que fue a la torre de astronomía a tratar de calmarse un poco. 

Claire miraba el paisaje que ofrecía la altura de la Torre astronómica. La castaña se sentía confundida, no procesaba perfectamente por todo lo que había ocurrido y se sentía extraña. ¿cual iba a ser la expresión de sus amigos al enterarse que había besado a Snape aunque fuese accidentalmente? Posiblemente iban a sacrificarla ( a excepción de Remus)  ¿podría pasarle algo peor?

El campo de Quidditch resplancedia a lo lejos. Quidditch la única cosa que despejaria la mente de Claire. Suspiró y decidió despejar su mente al máximo. 

Claire se encontraba en el campo de Quiddicth, el campo tenía rastros de que habían entrenado hace poco. Se dirigió a la escobera y tomó una de las muchas escobas que habían, una vez arriba de la escoba, ascendió. Volaba como si estuviese entrenando, como si estuviese en un partido. Empezó a sentirse de maravilla cuando el viento le azotaba la cara, el pelo le volaba despeinandola por completo pero eso no le preocupaba tanto.

Gotas de lluvia calleron sobre la castaña, aquellas gotas repentinas no fueron nada para ella, ya había volado con lluvia antes y la sensación en un cierto punto era grata. La lluvia arreció, Claire tomó el mango de la escoba con fuerza para descender, un rayo cayó demasiado cerca de ella que la sorprendió. Perdió el control de la escoba por un momento, dejándola suspendida por los aires, tomándose con ambas manos del mango de la escoba, en su intento de reincorporarse de nuevo, otro rayo cayó. Una de las manos de la castaña resbaló del mango, su única mano no soportaba todo su peso, y que el mango de la escoba estuviera mojado no ayudaba mucho. Sus dedos le dolían, ya no podía soportar más su peso, cada uno de los dedos fue perdiendo el agarre hasta que soltó la escoba por completo, Claire soltó un grito, mientras que con intentos sin éxito intentaba tomarse de la escoba, que ahora se alejaba de ella conforme caia.

Claire sintió como alguien la tomaba de las manos evitando la desagradable caída. Al levantar la mirada vió a Sirius, él la tomó con fuerza de la cintura hasta subirla a la parte trasera de la escoba. El agua le azotaba a ambos con fuerza y los rayos caían con más frecuencia. Black aterrizó en la entrada del castillo. El corazón de la castaña latía con fuerza tras lo que había pasado en el campo de Quidditch. Claire bajó de la escoba y pensó en irse pero algo no la dejaba marcharse.

— gracias, supongo que te debo una  — murmuró mirando a Sirius. 

Sirius dejó la escoba a un lado. Ambos estaban empapados por la lluvia y el viento aumentaba el frío en sus cuerpos. Ella asintió al ver que Sirius no hacia más que mirarla y se decidió a entrar al castillo. No sabía cómo sentirse exactamente, por una parte quería regresar y decirle todo lo que sentía pero por otro lado sabía que al hacerlo caería en llanto.

Black iba tras ella de una forma tranquila, sin molestarla ni corretearla. Sus pasos provocaban ecos entre los pasillos. La castaña estaba tan contrariada que se dirigió a la sala común sin pensar ni un momento en el "asunto" que había tenido con Snape.

Al pasar por el retrato de la señora gorda y ver a sus compañeros se detuvo. En el tablero de anuncios estaba la fotografía de ella y Snape. La fotografía mostraba exactamente el momento exacto en que los labios de Claire se estampaban con los de Snape; y se podía leer claramente la leyenda "Amor Prohibido"  Las miradas y los murmullos se hicieron presentes y en ese momento Claire no podía pensar en otra cosa que buscar al chimoso de Brahms Loureiro.

Sirius que iba detrás de la castaña se detuvo al lado de ella y su expresión de enfado y arrepentimiento se esfumaron, más la de arrepentimiento. El pelinegro miró con atención la fotografía, su mandíbula se había puesto tensa y se le podían notar las venas del cuello, realmente estába enfadado.

— Veo que tu plan con Quejicus va enserio Claire 

— no es lo que piensas, tampoco lo que todos piensan. Fue un accidente — habló Claire aún con la vista en el tablero. No sé sentía extremadamente fuerte como para mirar los alterados ojos de Sirius.

— un accidente, si... claro. Es un accidente que beses a Quejicus y después que aparezca una fotografía en el tablero de la sala común

— ¡Fue un accidente Sirius! 

Los demás guardaron silencio, no había rastros de James, Remus y Peter y Claire agradeció aquello. La castaña miró a sus compañeros y ellos en aquel momento de incomodidad empezaron a crear conversaciones.

Sirius negó aún con la sangre hirviendo y salió de la sala común, las escaleras y las miradas de las chicas no eran impedimento para él, simplemente no podía creer que Claire había besado a Quejicus, cuando él ni por un momento se le había pasado por la mente besar a la chica de Slytherin. 

— ¡Sirius! — exclamó la castaña, llamándolo. Sirius ni por un momento se detuvo. Se sentía furioso, traicionado

Sirius recordó el momento donde había salvado a la castaña, no podía ocultar que le aterraba perderla de cualquier manera, aún la quería y la quería de vuelta; si ella prefería estar con Snape eso él no lo iba a permitir.

Las escaleras se movieron de lugar y eso le dió la ventaja a la castaña de poder alcanzar a Sirius.

— ¿Por que no te vas con Snape? — preguntó con recelo pero se podía escuchar que se encontraba dolido

—  No estoy con él. — contestó Claire con la voz tenue que apenas se podía escuchar — pero veo que ya no crees en mis palabras... ¿Aun recuerdas cuando Tania Tomlinson te besó el día de nuestra primera cita en la torre de Astronomía? Dijiste que había sido ella y que confiara en ti ¡Lo hice! ¿por que tú no confías en mí ahora?

Las escaleras se posicionaron perfectamente para dejarlos pasar. Sirius avanzó mientras que Claire permaneció en el mismo lugar. Se sentía desganada, se sentía mal; Sirius nuevamente por su orgullo no la había dejado hablar, no le había dado la oportunidad de explicarle lo que en realidad había pasado. Fue escaleras​ arriba hasta encontrar el retrato de la señora gorda, dijo la contraseña y pasó sin problemas.

Al entrar Claire se negó a ver aquella fotografía y de esa manera la quitó del tablero de anuncios. Brahms había descendido de los dormitorios de varones y al ver a Claire intentó subir nuevamente, pero ya era demasiado tarde, la castaña ya lo había visto. Con pasos marcados se acercó a Brahms.

— ¡Eres una sabandija Loureiro! — exclamó — ¿Como te atreviste a hacer algo así? — preguntó, esta vez de modo que sólo fuera audible para Brahms

Brahms tartamudeo antes, sabía que pronto tendría a los Merodeadores cerca buscando una buena explicación.

— yo..yo... Lo siento, pensé que sería algo... Divertido, digo... Ya sabes para relajar la tención

— ¿Esto te parece divertido Brahms? solo creaste mas problemas....— dijo por último dejando a Brahms allí para ir a su dormitorio.

Los leones que estaban en ese momento en la sala común había presenciado aquello, algunos estaban del lado de Claire mientras que otros no. Marlene estaba reacomodando sus sábanas cuando la castaña entró en silencio.  Marlene la miró arrojar aquella fotografía al baúl y después se tumbó en la cama para cubrirse con las sábanas, después de pocos segundos se empezaron a escuchar sollozos por parte de la castaña.

Marlene miró a Soria, una de sus compañeras y con sigilo se acercó al baúl de Claire y tomó la fotografía. Al verla, Marlene abrió los ojos de la sorpresa, se esperaba otras cosas menos ver a Claire besando a Snape. Miró a la castaña preocupada, pensó que tenía que hacer algo, había visto a Claire llorar ya muchas veces y no quería seguir viéndola así. Dejó la fotografía en su lugar y se volvió hacia Soria.

— ¿Que vamos a hacer? — preguntó Soria en susurro mientras Claire seguía llorando bajo las sábanas

— no creo que este con Snape, aún quiere a Sirius....se le nota demasiado — Marlene pensó un poco, haciendo muecas con la boca hasta que tuvo un idea — ya sé que tenemos que hacer... Será complicado, pero tenemos que hacerlo. — fue a su baúl para tomar su Jersey roja — vamos por Lils y después a lo principal

Marlene y Soria fueron a buscar a Lily quién estaba detrás de una pila de libros sentada en el suelo, le contaron todo y Evans estaba que no podía creer nada.

— ¿Seguras que era Clay? ¿Severus y Clay? pero... ella dijo que dejaría ese juego en paz...

— ¡Que si mujer! — contestó Marlene — yo vi la fotografía. Brahms es el creador de esto ¿quien más tiene una cámara y siempre va por allí tomando fotos? y siendo sincera....no creo que Claire besara a Snape por que ella quisiera...debe de haber una explicación 

Lily y Soria asintieron.

— ¿Cual es el plan? — preguntó Lily interesada.

— James Potter — respondió Marlene con obviedad

— ¿Que? No entiendo por qué James — añadió Lily — por favor dime qué hay un plan "B"

Marlene negó con los brazos cruzados.

— Potter es amigo de ambos y bien sabemos que puede hacer que Sirius y Claire hablen, aunque no te guste la idea de acercarnos a Potter sin que te sonrojes lo suficiente

Lily miró a Marlene que se estaba amarrando las agujetas de sus zapatos. La pelirroja sabía que lo que Marlene decía era cierto, nadie más podía convencer a Sirius y a Claire de hablar, no quería hablar con James Potter pero por ver feliz a su amiga  nuevamente lo iba a hacer.

— bien, vamos con James — cedió Lily tomando su bufanda de Gryffindor.

Abajo en la sala común las tres chicas ya habían identificado a los Merodeadores o por lo menos a tres de ellos. Estaban sentados en el sofá que estaba cerca de la ventana, trataban de ver cuántas Bolas de Chocolate le cabían a Peter en la boca. Lily miró a James y su especial forma de pasar el rato; Marlene le dió un leve empujoncito para acercarla más a aquel sofá, James miró hacia esa dirección y sonrió de lado con los ojos destellandoles de alegría.

— Lily — la llamó. La pelirroja se limitó a sonreír y a tomar un mechón de su rojiza cabellera para colocarlo detrás de su oreja — estás encantadora hoy

— gracias. — dijo, nerviosa. Después recordó el motivo por el cual se encontraba parada frente a Potter — Estoy aquí por Claire

— ¿Claire? ¿Está bien? — preguntó Lupin con preocupación que casi saltaba del sofá

Marlene se acercó al igual que Soria. Peter miró a Marlene con atención y con las mejillas coloradas trató de tragarse aquellas Bolas de chocolate que tenía en la boca, como si fuese una ardilla.

— ¿Se lo digo yo o prefieres decirlo tú? — preguntó Marlene nerviosa por lo que podía pasar

Lily la miró de la misma forma pero decidió hacerlo.

— Ella y Sirius volvieron a discutir, pero esta vez....

— ¿Otra vez? — la interrumpió James 

—  Resdpetamos su intimidaoad — agregó Peter con algo de trabajo por que aún no había masticando todas las bolas de chocolate

— es que no entienden... — continuó Lily — Claire se la ha pasado desganada estás últimas semanas y algunas noches se las pasa llorando... No es bueno para ella y... Nos pone mal verla así ¿a ustedes no?

— completamente — habló Remus — hemos intentado de todo para que ambos estén bien, pero ninguna cosa funciona. Los dos están de la misma manera. La última vez ambos estaban dándose celos — negó disgustado por la situación

— bueno....

— ¿Que hicieron? ¿Que hizo Sirius? ¿Que hizo Claire? — preguntó James tratando de adivinar la respuesta a sus preguntas

Lily sabia al igual que Marlene y Soria que no podían mencionar nada sobre la fotografía hasta que Claire les diera su versión de la historia, pero los chismes volaban y podían llegar a los oídos de los caballeros en cualquier momento.

— tenemos que hacer algo para que se reconcilien — dijo Lily, mirando a Potter principalmente — sólo un pequeño empujón

James notó que la pelirroja había hablado con cierta preocupación, y él pensó que Lily estaba en lo correcto, su amigo del alma y su hermana pequeña tenían que estar juntos de nuevo.

— bien — dijo seguro — es definitivo que tenemos que hacer algo...

Los seis se quedaron hasta tarde planeando todo para volver a juntar a Sirius y a Claire. James aportaba sus ingeniosas ideas, Lily sólo se limitaba a ver lo muy concentrado que estaba Potter en juntar de nuevo a sus amigos y ese interés que tenía por él creció. El plan estaba hecho, sólo tenían que esperar al día siguiente, la clase correcta y el ambiente correcto.