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Mala Suerte

Narrador Capítulo 56

Habia pasado un mes completo desde que volvieron a Gravity falls, las cosas ha ian estado tranquilas este mes, Bill jugaba todas las noches ayudaba en la tienda como los demas, Mabel salia todas las tardes.

Mabel la semana que pidio hizo que Bill viera todos los anime que ella quiso entre ellos le gusto Noragami, Mahouka kou kou no rettusei, Nanatsu no taizai, SAO, entre otros y una pelicula del hilo rojo que era tambien de anime.

Bill junto con Dipper salian a sus citas seguido acercandose mas haciendo que Bill sintiera cosas que no lograba entender, pero que lo hacia sentir tan feliz, su corazon cada vez se aceleraba mas cerca de Dipper llegando a frustrarlo.

El cuaderno de Bill para dibujo se habia agotado, asi que se compro otro, en aquel cuaderno reinaban paisajes de Gravity Falls, las personas, las situaciones que vivia que le parecia dibujar, pero fundamentalmente el dueño de su inspiración era Dipper Pines, a tal punto que podia dibujar casi sin mirarlo sabiendo cada parte de su cuerpo, solo que a veces cambiaba la ropa eso lo hacia verlo.

La relacion de Stan con Bill se parecia a la de un padre y un hijo, que en una semana mas iban a ir a Las Vegas a los casinos por fondos para algo que no le quería decir Stan al demonio.

Wendy en este mes estuvo mas frecuente en la cabaña acosando de manera poco discreta al rubio quien no notaba su presencia, en cambio, los Agreste si y la alejaban todo lo posible siendo la adoracion de Dipper, ellos querian mucho a Bill como su hermano mayor y deseaban con fuerza que el castaño lograra ser la pareja de este, por ese motivo alejaban lo mas posible a la pelirroja del rubio cuando ayudaba en la cabaña.

Hoy un nuevo día viernes soliado y con buen clima, pero todo decaía en el pueblo cuando se declaro a las 12:00 pm el día de la mala suerte en Gravity Falls

Bill durante la mañana miraba extrañado como todos en el pueblo tienen mala suerte, algo totalmente anormal que la tuvieran todos juntos, como por ejemplo; se tropezaban entre ellos o chocaban, se caían de escaleras, se quebraban o caian vasos, platos u otros ocacionando accidentes. Tambien habian veces que osos los atacaban o animales robaran su comida.

A todos sin excepción alguna les ocurria un hecho desastroso, aunque los pueblerinos sentian tanta envidia del inmune rubio que "esquivaba" su mala suerte y se demostraba en como, en mas de una ocasión, iba a caer por las escaleras y siempre flotaba si estaba solo y sino daba un giro en el aire cayendo perfectamente.

Hubo un momento en que Mabel se tropezo al entrar a la cocina con la mercancia para vender esa semana que consistían en tazas, vasos, platos y otras cosas de vidrio. Bill entro a la cocina justo a tiempo alcanzo a agarrar a la castaña tomando la bandeja atrapando un par de cosas y otras con el pie, la cabeza, los dedos de la otra mano.

-Tienes que tener mas cuidado dijo acomodando todo en la mesa

-Lo siento -río la castaña- no todos podemos ser inmunes a este día.

Por aquello y mas razones el rubio era la envidia de muchos al tener una "protección" contra la mala suerte que en realidad sólo la esquivaba o evitaba toda esa mala suerte gracias a sus conocimientos y instinto.

-No entiendo como tu puedes salvarte de este día dijo celoso Stan quien ya se habia caido un par de veces seguidas y roto alguna mercancia, hasta entre un momento se le habia volado el dinero siendo salvado por Bill quien salto a atraparlo.

-Esto no es natural dijo extresado Ford quien miraba papel tras papel-¡¿Como es posible esto?!

Ford estaba estresado, no encontraba la razón de aquella mala suerte y frustrado al no encontrar nada sobre el chico quien se mantenia tranquilo en ese día.

-Creo que hoy es mi día de suerte -sonrio con burla

-No nos hace gracia -bufo el castaño que gracias a Bill no cayo por las escaleras.

-Si, pero por lo menos no fue como a los gemelos

Lo que paso hace apena sun instante fue que a los pobres gemelos agreste cuando salieron a dejar algo a fuera les cayo un monton de caca de pajaro que tuvieron que irse a bañar a su departamento.

-Eso si fue una desgracia dijo Stan- Por suerte no me paso a mi

-Estamos en el día de mala suerte no cantes victoria Stan -canturreo burlon el rubio

El resto de la mañana y parte de la tarde paso de manera normal, todos estaban asustado de si quiera moverse por si recibia algún tipo de tragedia y mas para Mabel quien saldria en la tarde.

-Deberias correr tu cita -recomendo el castaño caminando a la cocina

Bill se acerco por detras de Dipper y justo a tiempo al resvalarse con la nada logro atraparlo justo a tiempo siendo recibido agradecido por la mirada aliviada del castaño quien le beso la mejilla a vista de todos los presentes.

-Gracias Bill -le sonrio

-D-de na-nada -respondio apenas se alejo apresurado de Dipper a seguir su camino- y-yo tengo que irme deje algo arriba

Bill con la cabeza algo baja camino apresurado a las espaleras subiendo de dos por dos, al llegar arriba se toco el pecho apretando ese lugar, se apoyo en la pared dejando su cabeza apoyada ahi mismo.

-Mierda ya para de latir así -se quejo

Bill no sabia como podia detener los fuertes y rápidos latidos de su corazon que hasta llegaba a sentirlos, se toco las mejillas tratando de bajar el calor de ellas, siempre le pasaba eso cuando el castaño hacia ese tipo de cosas.

Mabel quien veia desde una distancia prudente lo que pasaba con el rubio, sonrió al darse cuenta ella antes que el lo que le sucedía, sonrio, tenia que saber que era lo que sentia su hermano, aunque era obvio, tendria yaoi gratis si se hacian una pareja.

-Por Lucifer ya deja de la...tir...oh gracias maldito organo inútil -sonrio el rubio

Mabel bajo las espaleras apresurada y se cayo en el intengo, pero finalmente llego con los demás que al ver al rubio bajar com un cuaderno o supieron que no tenia caso pedirle algo.

El rubio dibujo un par de minutos hasta que termino en el estaba Dipper en sus brazos evitando la caida, sus labios contra su mejilla sonrojada mirandose a los ojos, lo paso a color con fascinación sin areuinar ningun detalle que había hecho.

-Oye Bill

Bill apenas cerro su cuaderno lo llamaron, se giro a ver a Stan quien estaba vestido junto a él estaba Ford quien estaba algo preocupado como si no quisiera ir a ningun lado.

-¿Que sucede? -pregunto curioso

-Tenemos que salir al medico

-¿Por que? ¿Le paso algo? -pregunto preocupado

-no a mi, a Ford

Stan mostro el brazo del cientifico que estaba tomando un color verde, se extraño por aquello ya que eso si que no era natural.

-¿Que rayos le paso?

-No se como se me volteo un químico sobre mi brazo y pues necesito la cura que esta en el hospital.

-Bien, cuidence

-La cabaña esta a su cargo, no la habran no queremos mas desastre de nuestro alcalde, Mabel se ira con nosotros para ir a su cita, los gemelos se quedaron en su casa por temor a salir nos llamaron y Soos esta con una mana de lobos o algo asi -decia apresurado caminando a la salida.

Bill sus ojos brillaron en dorado al pasar por la puerta, miro a Stan y lo empujo quedando en su lugar, dio un quejido al ver el futuro dentro de la cabaña y fue que no sabe como del techo de la cabaña cayo por lo que sabe agua con pescados molidos.

-Bill dijo impresionado Stan al ver al rubio cubierto de aquello

-Usted vaya con Ford yo ire a darme una buena ducha dijo asqueado

-Gracias -sonrio Stan

Bill entro en la cabaña con asco se encontro con Dipper que se rio a carcajadas provocando un leve sonrojo en Bill quien desvio su mirada cruzándose de brazos algo molesto y sintiendo algo calido en su pecho al escuchar reir al castaño.

-Ve a bañarte -le sugirio

-A eso voy Pinetree y por favor por mientras que no estoy no hagas nada.

El rubio se fue a la ducha empezando a bañarse con una sensación incomoda, ademas del mal olor a pescado, sentia un mal presentimiento, bufo con molestia al ver que no se iba.

-Maldita sea espero equivocarme

Continuará ahora mismo

Narrador

Un grito desgarrador se escucho por la cabaña, Dipper tomó su brazo y cayo de rodillas el castaño se habia cortado la mano por culpa de un extraño metal que cayo del techo. Al parecer el presentimiento del rubio habia acertado.

No había tiempo para nada ni llevarlo al hospital y comúnmente en este momento no estaban ni sus tíos que aún estaban en el hospital ni Mabel que estaba en su cita para socorrerlo. Sin embargo, Bill si estaba en la cabaña aun después de 2 horas seguia bañandose, este corrio escaleras abajo al escuchar el grito del castaño.

El rubio llego abajo sólo con un pantalon y boxer puesto aun estaba algo mojado y el cabello le goteaba, eso no le importo en lo mas mínimo, llego con Dipper que se estaba desangrado logrando alterar demasiado al demonio.

Bill rápido tomó la mano del castaño y la colocó en su lugar velozmente la apreto en su muñeca rodeando con sus manos tratando de detener el sangrado y acomodarlo perfectamente.

Los ojos del rubio brillaron en un intenso dorado, al segundo aparecio una aguja de amarillo opaco junto con un hilo azul brillante. Bill empezo a mover sus manos manteniendo con magia fija su mano logro comenzar a cocer de manera precisa y rápida.

Dipper por otro lado, antes sentia un insufrible y inexplicable dolor desde su muñeca hasta poco mas arriba del codo y ahora con su mano siendo cocina a la muñeca no sentia dolor alguno como alguien se lo hubiera quitado.

El castaño miró asombrado como la aguja pasaba por su piel, pudo sentir sus musculos, sus nervioso ser unidos haciendo que cada vez sintiera más su mano.

Bill al terminar de cocer se aseguro de que por donde paso ambos materiales dejara una cicatriz que parecia un tatuaje de una pulcera no una herida. Desaparecio la aguja junto con el hilo, envolvió con sus manos la muñeca del castaño y empezo a hacer los últimos detalles con rapidez esforzándose para terminar a tiempo.

Ese tiempo es lo que se le estaba acabando, podía sentir el fuerte dolor en su cabeza, su cuello en tensión, el dolor en sus hombros y en todo su cuerpo este lo sentia agotado y pesado.

Su vista se fue nublando, su cabeza habia empezado a girar desde que activo esa magia tan particular, pero eso no lo detendria, no se iba a rendir solo por ese malestar. No dejara que el castaño perdiera su mano por simples dolores, daría todo y más por el castaño.

Apenas termino de hacer aquello cayo desmayado al suelo con la respiración acelerada y a la vez entrecortada, las mejillas rojas y el cabello humedo esparcido por el suelo.

Narra Dipper

Me había cortado la mano por el fierro que cayó del techo, nublando por mi dolor no sé cuando llegó Bill conmigo, pero al llegar empezó a curarme con una magia azul y dorada brillante. Cocio mi mano al punto de dejarla perfecta, pero todo lo que hizo era muy peligroso, ya que el campo debio afectar lo tanto al grado de desmayarse.

Me siento mal por haberlo preocupado al punto de hacerlo actuar sin pensar, ni que tomara en cuenta el dolor que le causo curarme la mano por el maldito día de mala suerte.

Lo levante con cuidado y lo lleve a la habitación, aunque sólo el tocarlo note que tiene fiebre, lo deje en la cama y corri escaleras abajo, casi cayendo, hasta la cocina donde tomé hielo para la fiebre y una toalla para secarlo.

Espero que se recupere...

[...]

La fiebre de Bill con el paso de las horas iba mejorando, lo bueno de todo esto que encuentro es que primero tenemos la cabaña para nosotros dos y segundo que pude atender a Bill con tranquilidad y sin ningún problema.

En el rato que estuvo desmayado preso de la fiebre limpie mi sangre del piso para que mi familia no se preocupara ni sospechara que me ampute la mano por accidente con un objeto no identificado del techo.

Al terminar de limpiar muy bien el living, limpie la cocción, ordene un poco el living y verificaba el estado de Bill cada tanto.

Los gemelos por suerte llegaron después de 20 minutos que limpiara la sangre, asi que les dije que atendieran la cabaña ya que se enteraron de que bueno Bill se desmayo y me dejaron atenderlo. Ahora bajaba para cambiar el paño de su cabeza.

-¡DIPPER!

El grito de Bill me alerto y informo que ya estaba despierto, subí las escaleras corriendo al escuchar un estruendo de arriba. Llege en segundos y azote la puerta aun de cartón contra la muralla viendo a Bill sentado en el suelo con una mano en su cabeza y la otra en la boca.

-¿Bill estas bien? Dije preocupado.

Bill tomó mi mano verificando que estuviera bien, la tocaba y giraba con sus ojos brillando demasiado para ser normal que se toco la cabeza con una mueca de dolor.

-Estas bien...-murmuró- Al parece funcionó dijo bastante aliviado

-Bill no tenias...

-Claro que tenia -gruño-

-No, mira lo que te causo hacer eso ¡Estas fatal!

-¡A mi no me interesa! ¡Es simple dolor! ¡No permitiría que no tuvieras mano si puedo hacer algo al respecto! -grito exaltado

-Bien -suspire- ¿Que magia hiciste?

-Es una magia que se usa en combate es para desintegrar a los demas lenta y dolorosamente que desean estar muertos, pocos demonios tienen la autorización de usarla o si quiera sabee que existe, pero en este caso la magia que se usa para desintegrar la inverti para poder conectar tu mano a tu cuerpo otra vez paso a paso como el proceso invertido a su uso original.

Bill se levanto con cuidado con una mueca de dolor, le sostuve su mano viendo que se detuvo, Bill no estaba bien para hacer algo ahora mismo.

-¿Donde vas?

-A un lugar

Bill se solto y se fue, yo lo seguí tratando de hacer que se detenga, pasamos por la cabaña y fue que me tropece con algo y me cai al suelo llamando la atención de los gemelos Agreste y la mayoria de la cabaña incluso Bill.

Él se me acerco a mi me dolia mucho el tobillo al parecer me lo torci, entre los gemelos y Bill me llevaron a la habitación, los Agreste se fueron a seguir atendiendo la cabaña, maldito día de mala suerte.

Narrador

Bill como todos tiene un limite y ese fue primero ver al castaño sin mano haciendo todo lo que hizo y segundo ver caer a Dipper sin poder hacer nada al respecto, ya que estaban muchas personas lo que impedia curarle en el momento, aunque lo haría mas tarde porque ahora tenia algo muy importante que hacer para acabar con todo esto.

-Bill no me cures estoy bien

-Ya basta, me arte -gruño al ver al castaño con un esguince

-Bill en serio estoy bien dejalo se curara sólo dijo recostado

-Nada de esas mierdas ya me aburrio ese sujeto -bufo apretendo los puños.

-¿Que sujeto? -pregunto confuso

-¿Crees que es normal toda esta mala suerte? ¿Que te cortaras las mano con un objeto que cayo sin razón del techo? Dijo antes de salir

Bill algo molesto salió de la habitación esquivando a las personas con mala suerte incluyendo a los pobres hermanos pelirrojos. El rubio se dirigía a un sólo lugar en especifico para encontrarse con lo que buscaba en el centro del pueblo.

-Te encontre bastardo -gruño el rubio.

Bill con furia se sento en una banca mirando al sujeto que buscaba hacer caer a una pobre anciana repetidas veces, al ver sus rodillas raspadas algo en el rubio lo hizo levantarse y acercarse a ella.

-¿Se encuentra bien? Dijo ayudándola

Bill le ayudo a recoger sus cosas y apararse, la señora agradecida le sonrio regalandole una manzana, ella iba a seguir caminando, pero extrañamente tropezo con un clavo que se cruzo en su camino y antes de caer el rubio lo impidio tomando su brazo ayudando a estabilizarse.

-Gracias muchacho -sonrió agradecida

-No hay de que

Bill un poco menos furioso regresaba a su banca, el sujeto miro al rubio con curiosidad tratando de saber a quien le recordaba, asi que hizo que apareciera un agujero en su camino, pero este simplemente lo esquivo como si supiera que aparecio de la nada.

Eso nunca le habia pasado, ya que este siempre hacia su trabajo de manera perfecta por lo que las personas siempre caian en sus travesuras, pero ese rubio no, hizo que sobre el cayera agua, pero este solamente se deslizó en la banca antes de que lo tocara.

-Has perdido practica Fuun -se burlo el rubio con el ceño fruncido

-No puede ser...-murmuró sorprendido recordando a alguien que le fastidio su travesura haciendo doble de travesuras

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