Narrador Capítulo 78

Dipper en el momento que salió Bill vio que detrás de él las llamas seguían presentes destruyendo todo lo que tocaran, pero en ningún momento pasando por la puerta. Dejando el increíble control del demonio con su principal poder elemental se quiso acercar a su cuerpo, pero este dio un paso atrás.

-Ni se te ocurra tocarme -Habló con una voz cansada

-¿Por qué?

-Mi temperatura está demasiado alta -Explicó tambaleándose hacia delante- Debes mantenerte por lo menos 3 metros alejado de mi

-¿Por cuánto tiempo? -Preguntó afligido

Dipper sentía que debía tocar a Bill de alguna manera, sentía que el temblor de su cuerpo no se debía al esfuerzo por ocupar su fuego azul con su cuerpo humano. Era algo más que iba a preguntar, pero sus palabras murieron cuando el demonio cayó de rodillas sacándose la máscara dando bocanadas de aire.

-Bill

Antes de que siquiera dar un paso se encontró pegado a la pared, frunció el ceño al ver que fue obra del rubio quien mantenía su brazo izquierdo extendido con el otro pasando la manga por su frente quitando el sudor. Además, que su cuerpo expelía vapor junto con cada respiración salía vaho de su boca con sus mejillas y rostro sonrojado, todo eso aseguraba lo caliente que estaba el demonio.

-¿Qué puedo hacer por ti?

-Agua -Jadeo

Dipper al ser libre corrió hacia uno de los pasillos doblando para entrar por una puerta, había visto los baños cuando estaba con Bill buscando el lugar donde se estaba creando el virus. Al entrar lo primero que hizo fue buscar alguna botella deseando una con desesperación, se sobresaltó cuando una apreció en sus manos en una cálida luz azul eléctrico.

El castaño pensando que la repentina aparición de la botella de dos litros fue obra del demonio, por lo que se acercó a una regadera que estaba implementada en el baño. Abrió la llave asegurándose de que saliera fría empezó a llenar la botella impaciente por volver con Bill lo antes posible.

Cuando la botella estuvo completamente llena corrió con cuidado de regreso con el rubio, este todavía se encontraba en el mismo lugar luchando con normalizar la temperatura de su cuerpo y su agitada respiración.

-Traje el agua

El rubio levantó la mirada sonriendo alegre de algo con que refrescarse, el castaño se acercó y le entregó la botella sorprendido del calor que irradiaba el demonio, por lo que apenas entregarle el objeto se alejó viendo como Bill en vez de beber aquel líquido vital se hecho más de la mitad encima lo que provocó que saliera vapor por el contacto, no se sorprendió al ver que lo que sobro lo bebió.

Dipper se sonrojo al ver al demonio con el cabello totalmente húmedo pegándose a su frente, pequeñas gotas recorrían su rostro pasando por su barbilla pasando por su cuello y perdiéndose en algún lugar bajo su ropa que se pegaba a su cuerpo. Agitó la cabeza desviando la mirada alejando esos pensamientos dando gracias a que Bill no podía ver su rostro o notaria lo sonrojado que estaba.

-¿Estas mejor?

-Sí, tengo menos calor -Se levantó lento- Vamos

-¿A dónde? -Preguntó siguiéndolo de lejos

-Aún tengo que borrar y agregarles recuerdos a esas personas, además de buscar en sus mentes si hay alguien más involucrado.

-Entonces no perdamos más tiempo

El rubio junto al castaño que iba unos pasos más atrás que el rubio caminaron en dirección a los cuerpos lo único que faltaba para terminar la misión, aunque había un tema en particular, si ya habían destruido el virus ¿Por qué el cuerpo de Bill seguía temblando?

>...<

Dipper miraba inquieto al rubio borrar la memoria y reemplazar recuerdos por las últimas dos horas, no pensó que se demoraría tanto.

Quiso acercarse más de una vez con la necesidad de tocar su piel, pero Bill no lo dejó en ningún minuto, además de prohibirte sacarse el traje hasta que estuvieran afuera.

Bill por su parte con la respiración más normalizada y un calor casi normal en su cuerpo ya solo le faltaban pocas personas para terminar de una vez por todas.

-¿Cuánto te falta?

-Si dejaras de interrumpirme lo haría más rápido -Replicó con los ojos cerrados

Dipper bufo viendo fascinado el aura dorada que rodeaba las manos del rubio quien mantenía estas en la cabeza de cada humano concentrándose en terminar lo antes posible.

El castaño frunció el ceño entrecerrando los ojos viendo fijamente al rubio, se dio cuenta al poner más atención que el cuerpo del demonio temblaba, es casi imperceptible si no veía con esmero.

Quiso acercarse para tocar su brazo descubierto, pero fue alejado por la magia del rubio que lo miró serio con sus ojos dorados brillando con la pupila alargada.

-Quédate ahí

-Estas temblando -Comentó serio- ¿Por qué?

Dipper no creía que el temblor del cuerpo del rubio fuera por el uso excesivo de su poder de fuego. Quiso obtener respuestas, pero no llegaron en ningún momento, es más el demonio lo ignoró completamente volviendo a su tarea.

El castaño se sobresaltó que al Bill terminar con aquella joven todos y cada una de las personas desaparecieron frente a sus ojos.

-¿A dónde los llevaste?

-A su recuerdo, todos ellos fueron a hacer una excursión a un bosque, viviendo unos cuantos meses ahí, hoy es su último día para volver con sus familias

-Fue algo conveniente

-Sí -Se levantó lento frunciendo el ceño

-¿Me vas a con...?

-Salgamos de aquí, tengo que terminar de destruir este lugar -Lo interrumpió dándole la espalda

Dipper cansado de la poca comunicación del demonio lo siguió a regañadientes poniendo una distancia de 5 metros entre ellos por orden de rubio.

Necesitaba respuestas, quería saber porque Bill temblaba, porque su cuerpo estaba tan tensó y caminaba casi robótico.

-Sabes que puedes contar conmigo ¿Verdad?

-Sí, lo se Pinetree

-Entonces si lo sabes ¿Por qué no me dices lo que te sucede?

-No es nada -Expresó serio

-¿Puedes ser honesto conmigo Bill? -Pidió el castaño

-Lo soy

Dipper escuchó frustrado un tono de voz neutro y tenso, él no lo sabe, pero Bill estaba mordiendo su labio con los ojos apretados, trataba de controlar en lo que podía el temblor de su anatomía y obligar a su cuerpo a moverse.

El rubio suspiró aliviado de ver la escalera interminable, dejó pasar a Dipper primer que a regañadientes obedeció subiendo tan rápido como podían sus extremidades siendo seguido por Bill.

Al llegar arriba el castaño se alejó unos metros de la entrada por orden del rubio que murmuró un hechizo letal que le serviría para eliminar el laboratorio. No tardó más tiempo en lanzarlo y verlo explotar en la tierra siguiendo el rastro que le pudo.

El rubio se estremeció, un fuerte temblor sacudió toda su anatomía siendo visto por un preocupado Dipper quien se acercó, pero no pudo ni dar dos pasos cuando sintió a Bill chocar con su cuerpo tirándoos a la arena.

-Ya no lo soporto -Se quedó con la respiración agitada

-¿Bill qué...?

Dipper no pudo completar su frase cuando fue levantado bruscamente por el rubio para luego verlo chasquear los dedos afirmando. fuertemente su mano.

El castaño se sorprendió cuando la imagen del desierto cambio por completo a un bosque frondoso con clima cálido, soltó un quejido ante el repentino choque de Bill con su cuerpo haciendo que terminen en el piso.

Sintió de inmediato las manos del demonio en su cuerpo, sorprendido de la falta de traje que cambio a un jeans azul y una simple playera roja manga corta con unos tenis del mismo color a juego.

-¿Bill qué te sucede? -Trato de apartarlo preocupado

-No, no me apartes -Suplicó temblando, aferrándose a los brazos del castaño

Dipper se sorprendió de escuchar esa suplica cuando tiene el conocimiento de que a Bill no le gustaba hacer eso, detestaba que la gente suplicara. Frunció el ceño extrañado hasta que cayó en cuenta de algo que paso por alto.

En pleno apogeo de la cercanía del virus Bill se apartó de su cuerpo varios minutos, sin contar las horas que se demoraron en borrar la memoria de los demás. Comprendió por fin el comportamiento del demonio.

-Tu presentimiento se fue ¿No es así? -Se sentó dejando al rubio en sus piernas

-Sí -Se abrazó a su cuerpo ocultándose en su cuello temblando

-Pero los síntomas no se han ido -Afirmo lo dicho serio

-Tienes razón

-¿Por qué no me dijiste? Bill estuviste sufriendo bastante tiempo toda esa necesidad de tenerme cerca

-Tenía que terminar con el trabajo

-Pero pude estar cerca, Bill tu cuerpo no ha dejado de temblar a pesar de estar pegado a mi -Lo abrazó contra su cuerpo

-Lo siento, no puedo evitarlo, estuviste tan cerca de esa cosa...siento que aún estas en peligro a pesar de que lo erradique

Dipper suspiró para empezar a frotar la espalda del demonio con sus manos repitió que estaba en perfecto estado mientras dejaba caricias en el cuerpo del demonio quien se juntaba cada vez más a su cuerpo sonando su mejilla en su hombro y el hueco de su cuello.

-¿Qué tan alta es la necesidad? -Preguntó preocupado luego de unos segundos

-A tal punto que ya no pude soportar tenerte en ese lugar -Susurró estremeciéndome

-¿Dónde estamos?

-En la otra punta del mundo -Aseguró apegándose más al castaño

-¿Alivia un poco la sensación?

-Necesito que Kazuo saque su hechizo -Se levantó

-Espera Bill, si el aparece ahora mismo...

-Lo más probable es que quiera matarlo -Se encoge de hombros- En estos momentos estoy con las secuelas del presentimiento, nunca las sentí tan fuertes que supongo que alejare a quien sea que intente siquiera tocarte

-No tenía idea...

-Yo pensé que sería igual que otras veces, pero de verdad esto es insoportable

Bill chasqueo los dedos apareciendo dibujada la rueda de indicación del ángel, no tardó en empezar a hablar llamando al peliblanco que apareció igual que antes.

-Hola de nuevo Bill, hu...

-Ni siquiera lo nombres -Gruño el rubio protegiendo al castaño- Saca ese hechizo ahora

Kazuo notó de inmediato lo inestable que estaba Bill sobre su presentimiento, dado el lugar en el que se encontraban no tardó en acercarse cauteloso viendo de reojo al demonio cerrar sus ojos.

El peliblanco tocó al castaño teniendo su vista en el demonio cuando se estremeció. No probando más su suerte empezó a romper tan rápido y eficiente como pufo el hechizo.

Solo bastaron unos pocos segundos para que el hechizo fuera roto, Kazuo se despidió y desapareció del lugar aliviado de haber sobrevivido.

Dipper por su parte sintió al rubio apegarse a su cuerpo mientras borraba la rueda del ángel. Bill solo se aferró a su cuerpo frotando su mejilla en su pecho y parte de su hombro continuamente tratando de calmar la sensación.

-¿Estas mejor?

-Sí -Susurró

-¿Dónde estamos? -Preguntó viendo alrededor

-Lejos del peligro -Cerró sus ojos un momento

-¿Y eso es en...?

-Okinawa, Japón

-¡¿Japón?! -Se exaltó

-Te dije que te llevaría al otro lado de tu mundo -Se encogió de hombros restándole importancia

-No pensé que...

-Lo siento -Apoyó su frente en su pecho separando sus brazos- Quise resistir, pero ya no lo soporte

-Oye, no es tu culpa, era inevitable que esto pasara, hiciste un esfuerzo enorme para eliminar el virus teniéndome ahí, debió ser insoportable para ti ¿No es así?

-Sí...-Susurró

-Te mereces este descanso y poder estar relajado conmigo -Beso su cabello- ¿Quieres dar un paseo?

-Me gustaría -Sonrió leve

-Andando

Dipper baría hasta lo imposible para hacer que Bill se relajara, que las secuelas de su presentimiento se desvaneciesen de su cuerpo. Y si tenía que tocarlo para lograrlo, lo haría con gusto, en especial cuando recordó perfectamente lo que le debía el rubio a su persona.

Un beso.

Continuará

Hola gente! 

Aquí un nuevo capitulo para esta historia, tengo que admitir que seguí el horario publicando su capitulo el primer jueves del mes, lo tenía escrito y todo ¿El problema? Olvide publicarlo xD así que lo hago ahora, no se que hora es en su hogar, pero aquí son las 1:23 de la madrugada, viernes. 

En fin, perdón mi retraso de dos horas, pero les traje el capitulo como corresponde xD. Espero de corazón que les haya gustado. 

Muchas gracias por sus comentarios y votos, cuídense beban mucha agüita y nos veremos en un mes. 

Bye bye 💕✌