Tardé más de lo que hubieras querido en entregar el final. Estaba pensando en todos los finales posibles que estaban en mi cabeza. Creo que eligi el correcto.

Espero que disfruten el final. Espero poder crear más contenido Chase X Everest en un futuro.

Y apresure el fic para que estuviera completo antes de febrero. ( no logré mi objetivo) Así que si sienten que esta apresurado, pido disculpas.
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Días después.

Vemos a todos los miembros de Paw Patrol en un funeral. Chase ya había sido declarado muerto. Nunca se encontró el cuerpo, pero era imposible que alguien sobreviviera esa explosión.

La lluvia caía suavemente sobre el cementerio mientras los miembros de Paw Patrol y otros seres queridos se reunían para despedir a Chase. Sus rostros reflejaban la tristeza y la pérdida que sentían por su valiente amigo y compañero.

Ryder se acercó al ataúd y colocó una pequeña insignia de la Patrulla de Cachorros en honor a Chase. La atmósfera estaba cargada de emotividad, y todos recordaban los momentos de valentía y lealtad que compartieron con el fallecido policía.

Ryder tomó la palabra, compartiendo anécdotas sobre Chase, resaltando su valentía y dedicación.

La lluvia persistía, como si el cielo también llorara la pérdida de Chase. Los miembros de Paw Patrol se mantenían en silencio, sus ojos enrojecidos por las lágrimas. Ryder, con la voz entrecortada, comenzó a hablar.

"Amigos, familiares, compañeros", dijo Ryder, mirando a cada uno de los presentes. "Hoy nos reunimos para despedir a un verdadero héroe. Chase fue más que un compañero; fue un amigo leal, un protector incansable de la cuidad".

Las palabras de Ryder resonaron en el aire, y todos asentían en acuerdo. Skye apretó la pata de Marshall, buscando consuelo mutuo. Rocky, con su gorro de ingeniero, se secó los ojos con una patita. Y todas las personas que el policía había ayudado estaban en presente en el funeral.

Ryder continuó: "Chase siempre estaba dispuesto a arriesgarlo todo por los demás. Recordemos cuando enfrentó a los ladrones en la mina abandonada, o cuando cruzó el río crecido para salvar al gatito atrapado en el árbol. Siempre estaba ahí, sin importar los peligros".

Marshall, el bombero dálmata, se adelantó. "Chase era más que un compañero de trabajo. Era mi hermano. Juntos compartimos risas, entrenamientos y misiones. Siempre estaba ahí para apoyarme, incluso cuando metía la pata".

Skye, con sus alas temblorosas, habló con voz suave. "Chase y yo trabajamos juntos en innumerables ocasiones. Él era mi ala derecha, Siempre me sentí segura a su lado".

Los demás cachorros asintieron, recordando las veces que Chase lideró misiones arriesgadas, enfrentando tormentas, avalanchas y peligros desconocidos. Su ausencia dejaba un vacío en sus corazones.

Ryder concluyó: "Chase, dondequiera que estés, gracias por tu valentía, tu lealtad y tu amistad. Siempre serás parte de Paw Patrol. Descansa en paz, querido amigo".

La lluvia seguía cayendo, pero en ese momento, todos sentían que el cielo también lloraba por Chase. Los cachorros se abrazaron, unidos en su dolor y en su determinación de honrar la memoria de su compañero caído.

Marshall se aclaró la garganta y miró a Skye. "Skye", dijo con voz temblorosa, "hay algo que necesito decirte. Tal vez no sea el mejor momento, aunque creo que es sido lo que Chase hubiera querido". Ella lo miró, sus ojos azules llenos de tristeza y curiosidad. "¿Qué pasa, Marshall?"

El dálmata tragó saliva y tomó una respiración profunda. "Desde el primer día que te vi, supe que eras especial. Tu valentía, tu sonrisa... todo en ti me atrajo. Pero Chase siempre estuvo ahí, y yo... yo nunca encontré el momento adecuado para decirte lo que siento".

Skye parpadeó, sorprendida por las palabras de Marshall. "¿Qué estás diciendo, Marshall?"

Él se acercó un poco más, sus patas temblando. "Skye, te amo. Siempre lo he hecho. Y ahora, con Chase... con Chase ya no aquí, no puedo seguir escondiendo mis sentimientos. No quiero perder más tiempo".

Los ojos de Skye se llenaron de lágrimas. "Marshall..." susurró. "También te amo. Siempre te he amado".

En ese momento, bajo la lluvia persistente, Marshall y Skye se abrazaron. Sus corazones se encontraron en medio del dolor y la pérdida. Aunque Chase ya no estaba físicamente presente, su espíritu parecía unirlos aún más.

En otra parte de la cuidad.

La noche era densa y cargada de tensión. En un oscuro callejón de la ciudad, dos hombres se encontraban al acecho, sus rostros ocultos tras pasamontañas. Eran narcotraficantes, inmersos en un negocio siniestro que trascendía la moral y la ley.

Juan, el líder del grupo, miró a su compañero, Carlos. "¿Estás seguro de que este es el lugar correcto?", susurró.

Carlos asintió, nervioso. "Sí, Juan. El comprador nos espera aquí. Dice que está dispuesto a pagar una fortuna por estas personas".

Las "mercancías" estaban atadas y amordazadas en el interior de una camioneta. Eran hombres y mujeres desesperados, víctimas de la pobreza y la desesperación. Sus ojos reflejaban el miedo y la impotencia.

En una ventana cerca del lugar donde estaban los narcotraficantes había una mujer de pelo blanco y con un traje del mismo color. Estaba preparando sus armas para los que parecía ser una emboscada.  "Por fin unos narcos que podré matar".

Everest agarró su máscara y se lo puso. "¿Listo para tu primera emboscada ayudante azul?"

En este momento apareció un hombre con traje tipo policía de fuerza especiales. "Siempre cuando tú estés lista primero mi amor".

"Gracias por confiar en mi Chase". Dijo la Sombra Blanca.

Chase sonrió con alegría. " me hubiera gustado avisarle a mis amigos antes. Aunque no sé si hubiéramos podido hacer algo cuando vi esos videos pedófilos del candidato. Ryder hubiera expuesto esos videos al público y Paw Patrol hubiera perdido toda su reputación".

Chase comenzó a ponerse su máscara. "Además sabía muy en el fondo que la Sombra Blanca no mataba por gusto".

"Ay, Chase" sin previo aviso se dispuso a darle un beso al ex policía. El se había exaltado con aquella acción. " creo que tenemos algunos terroristas que matar". Mencionó el chico.

Ambos sacaron sus armas y se dispusieron a disparar.

Ahora ambos hacían justicia, de la manera correcta.