Esa noche, cuando llegó la hora de dormir, Niall y Liam se despidieron con una broma interna entre ellos y sonrisas muy sospechosas para Louis, por suerte Harry no captaba nada fuera de lo común. Ambos tomaron la habitación cerca del baño, y Louis llevó a Harry a la otra habitación. La cama era muy, demasiado, pequeña para dos personas, y recordó que sus tíos tenían un niño, seguramente esta era su habitación.

Maldición, Niall debió saberlo, por eso las sonrisas traviesas y la elección de habitación tan premeditada.

Idiota.

Louis tenía las mejillas muy rojas cuando miró a Harry con vergüenza.

—Mejillas rojas. —Acusó, señalándolo con una sonrisa alegre. Louis quiso morir.

—Ugh sí, lo siento. Debe ser a causa del frío. Tienes... ¿tienes sueño ya? —Harry sacudió la cabeza inmediatamente.

—Quiero cuentos. —Louis levantó una ceja.

—Harry, los cuentos se quedaron en casa.

—No. —Dijo, sacudiendo la cabeza—. Cuentos de casa. —Louis no entendía.

—No comprendo. —Admitió.

—Cuenta tu vida, el tiempo nu-neuvo. —Arrugó la nariz al no poder pronunciar la palabra, pero Louis lo entendió.

—¿Quieres que te cuente sobre mi época? —Harry asintió con euforia—. ¿Sobre ahora, el tiempo presente?

—Sí, sí. Quiero conocer. —Dijo, con ojos brillantes llenos de curiosidad. Louis no pudo evitar sonreír ante esa hermosa imagen.

—Bien. Te contaré, ven, siéntate.

Ambos tomaron asiento en la pequeña cama, Louis jugando con sus manos mientras sentía mariposas en el estómago por la cercanía que Harry puso entre ellos. Sus piernas rozándose sutilmente, y Harry mirándolo fijamente expectante. Cuando Louis levantó la mirada, sintió las mariposas revoloteando con más inquietud, enloquecidas. Harry estaba muy cerca, su rostro estaba a centímetros de Louis. Sus mejillas ardían.

—Uhmm, bueno... —Louis se aclaró la garganta, demasiado incómodo para encontrar las palabras correctas. ¿Qué le pasaba? Actuaba como un adolescente nervioso—. Es más fácil la vida en esta época, ya no hay tantas prohibiciones ni tabues.

—¿Pro-hiciones?

—Prohibiciones. Es cuando no te permiten hacer algo.

—¿Por qué?

—Reglas tontas que impone la sociedad. Ahora existen menos prohibiciones que en tu época, hay más libertad. —Harry asintió con la cabeza, comprendiendo a su modo.

—No acuerdo. —Louis ladeó la cabeza, sin entender su lenguaje, aún tenía problemas con la R.

—¿No recuerdas? —Harry sacudió la cabeza.

—Yo no conocí esas reglas, pero prometo que buscaré sobre eso en internet. Solían ser estrictos en tu época.

—Mama estrita. —Dijo con el ceño ligeramente fruncido, como un niño enojado. Louis quiso reír, pero no lo hizo.

—¿Lo era? Mi madre también lo es. —Harry asintió con una pequeña sonrisa.

—Sueño.

—Sí, claro. Vamos a... dormir muy apretados en esta cama, lo siento, pensé que las camas serían más grandes...

—Me gusta. —Harry lo interrumpió. Louis lo miró perplejo.

—¿Te... Te gusta? —Preguntó confundido, no hablaría de...

—Muy bonita. —Louis observó la cama, y sintió vergüenza, queriendo golpearse con un bloque en la cabeza. Claro que hablaba de la cama, ¿de qué otra cosa pensó que estaría hablando? ¿De dormir apretado con él? Claro que no.

—Sí, es muy bonita, pero pequeña. No caben dos personas... —Harry sacudió la cabeza.

—Caben.

—No, es una cama individual, y es incluso más pequeña que eso porque está diseñada para un niño de siete años. No recordaba que tengo un primo... —Dejó de hablar cuando Harry se recostó en la cama con la cabeza sobre la almohada, bostezando con cansancio.

—Louis, aquí. —Dijo, dando golpecitos en el colchón a su lado. Louis lo miró con las mejillas ruborizadas, pero se dejó caer a su lado, todo su cuerpo rígido como una piedra, dándole la espalda. De esa forma, acostados de medio lado era la única manera de que ambos pudiesen entrar en la cama.

—Esto... Esto era parte de una de las prohibiciones de tu época. Sí, uhmm, parte de ellas. —Murmuró, con su corazón bastante acelerado para negar sus nervios.

—¿Dormir? —Louis asintió, muy nervioso por la respiración de Harry en su nuca.

—Sí, hmm, dormir con otra persona de tu mismo género. Es decir, era más un tabú que una prohibición. Dos personas del mismo... Uhm, sexo. No sé si lo entiendes. Me refiero a que no estaba bien dormir entre dos chicas, o entre dos chicos... Así como... pareja. No como amigos. Nosotros somos amigos, pero en tu época no era aceptable, era mal visto. Tenían ideas absurdas. Pensaban que podrían pecar al dormir juntos.

Cuando finalmente terminó de hablar, notó la respiración pausada de Harry en su nuca, y supo que se había quedado dormido. Lo que no sabía era hasta qué punto de la conversación había escuchado. Suspiró resignado, cerrando los ojos para viajar al mundo de Morfeo, todavía con el cuerpo rígido, intentando moverse lo menos posible para no caer de la diminuta cama.

Esa noche, sin proponérselo, Harry soñó con unos brillantes y cálidos ojos azules, azules como el cielo nocturno, con tonos gris a su alrededor, creando un hermoso contraste. Una suave y sedosa cabellera rubio ceniza, moviéndose con la ligera brisa del atardecer, soplando directamente su flequillo.

Harry lloró en su sueño, y Louis despertó en la madrugada con los brazos de Harry enroscados en sus caderas, apretándolo fuerte mientras se quejaba en sueños.

Louis asumió que se trataba de alguna pesadilla, y volvió a cerrar los ojos, disfrutando la calidez de los brazos de Harry a su alrededor.

Por la mañana, Louis se despertó abruptamente por el grito ahogado que emitió Harry. Se levantó de inmediato, mirándolo con preocupación.

Harry mantenía los ojos cerrados, y algunas lágrimas corrían por sus mejillas.

—Harry, todo está bien. Hey, despierta. —Lo zarandeó un poco hasta que finalmente abrió los ojos. Louis lo miró atónito. Sus ojos estaban inyectados en sangre de tanto llorar—. ¿Qué sucede? Dime, ¿tuviste pesadillas? ¿Sueños feos? —Él asintió, con un puchero limpiándose las lágrimas de sus mejillas.

—No entender. —Louis se sentó a un lado de la cama, apartando el flequillo de su cara, acariciando sus rizos en el proceso.

—Los sueños son así. —Harry sacudió la cabeza.

—Era real. Sentí feo, aquí. —Se llevó una mano al corazón. Louis frunció el ceño.

—¿Qué soñaste?

—Eran... —Arrugó la nariz, recordando el nombre del color—. Azules. Sus ojos. Azules como el cielo tormenta, y su cabello como la arena del mar. —Louis asintió, mirando el susto todavía reflejado en sus ojos.

—¿Era alguien conocido? ¿Recuerdas a esa persona de ojos azules? Puede ser algún familiar o amigo del pasado.

—No. No sé quién es. Pero dolió aquí. —Repitió, con su mano aún sobre su corazón. Louis lo miró con angustia.

—Ya pasó, solo fue una pesadilla. No te preocupes.

Pero Harry volvió a soñar con esos ojos azules durante toda la semana que estuvieron en la cabaña, lloraba durante la noche hasta que Louis lo despertaba con una caricia en sus rizos, ahuyentando las pesadillas.

Niall correteaba a Harry cerca de la playa mientras Louis tomaba un café con Liam, sentados en las sillas playeras.

—Debemos irnos de aquí. Harry tiene pesadillas cada noche, este lugar le recuerda a alguien de su pasado, y sufre con su recuerdo constantemente. —Habló Louis sin apartar la mirada de un alegre chico de rulos correteando y riendo.

— ¿Seguro que no es su madre... O su padre? —Louis sacudió la cabeza.

—Harry no recuerda a esa persona, no puede ver más allá de unos ojos azules y cabello rubio.

—Tal vez su hermana, o hermano. —Liam hizo una mueca, antes de morderse el labio. Louis siguió su mirada y se sintió asqueado cuando supo lo que miraba. Niall correteaba a Harry en ropa interior, y Louis sinceramente no le veía nada de sexy a eso. Soltó un bufido antes de continuar.

—Volveré a ver el álbum de fotografías que encontré en el laboratorio. Tengo que ayudarlo a recordar, no me gusta verlo sufrir así.

—Louis, no has pensado, tal vez... Harry tal vez tenía esposa. Hijos... —Louis lo miró con el ceño fruncido, y Liam dejó de hablar automáticamente.

—No. No lo creo. Igual ya están muertos, no importa eso. Debemos regresar a la ciudad. —Louis habló bastante serio, sin ocultar su descontento.

— ¿Te das cuenta lo cruel que ha sonado eso? —Liam no pudo creer lo que había escuchado. Louis no era así—. No me digas que tienes celos.

—Bueno, lo siento, no pensé en decirlo tan mal. —Louis mordió su labio inferior, realmente había sentido celos al pensar algo en esa posibilidad—. Necesito terapia. —Puso sus manos sobre su cabeza, dramatizando la situación.

—Lo que necesitas es que Harry recuerde todo de una vez y descubrir si tienes oportunidad con él. —Louis desvió su mirada hacia Liam y este soltó una carcajada.

—No ayudas mucho, amigo. —Refunfuñó.

— ¿Por qué no vas a jugar con Harry? No pierdas la oportunidad. —Liam le indicó el lugar donde Harry estaba jugando con Niall bastante alegre.

—Tienes razón, pero tú también vienes conmigo. —Louis le tendió su mano y Liam gustoso la aceptó.

Esa tarde volvieron a ver la gran puesta de sol, pero esta vez los cuatro terminaron abrazados.

Dos semanas después.

Harry se encontraba soltando algunas carcajadas junto a Niall mientras veían televisión. Había sido un regalo de parte de Liam y Louis le agradeció de inmediato, ya que Harry lograría distraerse un poco durante el día. Habían visto algunas películas animadas y descubrieron que esas eran las favoritas del rizado, por lo tanto, Louis había prometido llevarlo un día al cine para que pudiera disfrutar de una buena animación.

—Oh ¡Ellos están bailando! —Harry exclamó al ver cómo Cenicienta bailaba junto al príncipe, sí, estaban viendo aquella película, ya que a Harry le llamaron demasiado la atención los ratoncitos que salían en ella.

—Sí, es un vals. —Niall habló.

—¡Bailemos! —Harry se levantó de su asiento y le tendió la mano a Niall, quien frunció el ceño, pero terminó aceptando, ya que si se negaba Harry era capaz de hacer cualquier berrinche como el bebé que era.

Harry se movió torpe al igual que Niall, terminaron bailando cualquier cosa menos un vals, pero aun así Niall estaba satisfecho al ver lo feliz que Harry se veía.

Louis entró en el momento justo cuando los dos estaban culminando su baile, los miró a los dos con el ceño fruncido al verlos estallar en carcajadas, nunca había visto reír tanto a Harry, por un momento también se contagió con su alegría.

—Harry, es hora de tomar un baño. —Louis interrumpió, ganándose la atención de los chicos. Harry comenzó a soltar demasiados suspiros, estaba claro que iba a comenzar a lamentarse.

— ¡Cenicienta! —Indicó la pantalla de la televisión e hizo un puchero bastante adorable.

—Louis, deja que termine de ver la película. —Niall se interpuso.

—¡La has visto cinco veces! —Harry esta vez bajó la mirada algo triste.

—A mí me gusta, gusta mucho. —Louis soltó un suspiro y terminó aceptando que Harry terminara de ver la película antes de ir a tomar un baño.

—Pareces su padre, Louis. —Niall se burló.

—Es solo que toca su baño, vamos. ¿Qué tiene de malo que se lo diga? —Niall volvió a reír.

—Nada, Louis, de hecho, estás haciendo un buen trabajo como padre de Harry, ahora pronuncia mucho mejor las palabras y además comienza a entender todo, creo que has aumentado su edad mental al menos unos años. —Louis sonrió algo orgulloso, realmente había estado trabajando duro para que Harry siguiera aprendiendo y mejorando su lenguaje.

—Gracias, Neil. —Su mejor amigo soltó un bufido al escuchar el sobrenombre.

—Me llamo Niall.

—Es lo mismo. —Niall no siguió bufando, porque Liam apareció detrás de Louis robándole la mirada de inmediato.

—¿Qué pasa? —Liam besó cortamente los labios de Niall y Louis puso sus ojos en blanco.

—No besos frente a Harry, por favor. —Louis repitió.

—¡Las princesas que tu Harry ve se besuquean con los príncipes! —Niall se defendió.

—¿Qué es besuquean? —Harry los interrumpió. Louis mandó una mirada fulminante hacia Niall.

—Cuando dos personas se dan muchos besos. —Liam explicó antes de que Louis le inventara algo más.

—¿Puedo besuquear a Lou? —Preguntó con inocencia

Las mejillas de Louis se encendieron.

— ¿¡Ven lo que han hecho!? ¡Cómo se les ocurre! —Louis exclamó furioso. —No, Harry, solo ellos pueden hacerlo, nosotros no. —Louis negó y Harry asintió despacio. Al ver a Louis tan enojado no quiso seguir preguntando.

—Lo sentimos, tiene razón Louis, Harry. —Niall agregó.

—Ahora es hora de que vayas a tomar un baño. —Louis recordó, Harry asintió y comenzó a correr hacia el baño.

—¿Lou, vienes? —Se detuvo a mitad de camino para preguntar, y Louis asintió, pero antes de que pudiera comenzar a caminar, empezaron a tocar la puerta principal.

—Ya te alcanzo, Harry, prepara tus juguetes. —Harry le dio un grito de afirmación desde el baño.

Caminó hacia la puerta dejando a sus amigos en la sala de estar, pero cuando la abrió pensó ver un fantasma de inmediato. El viejo Styles estaba parado frente a la puerta, aquel hombre que le había vendido la casa hace unos meses quien había jurado no volver a visitarla, aquel señor que era un familiar directo de Harry.

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Sorpresa!!!❤

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Dedicado a:  Moon_Stylinson, Nalybeth03, ChupxlaCTM, EnyaAAv1524, harrvtomlinson, Its_Larry28, yuriko111999, SrtaDreew, mausfelix.

Pregunta: ¿qué clase de conflicto creen que hay entre Liam y Zayn? 

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