Vakypandy avanzaba sin ningún rumbo definido observando cómo el Sol iba cayendo poco a poco,y empezó a temer la noche. Nunca había estado delante de una fiera,o,sin ir más lejos,nunca había estado sola de noche.

Cuándo tenía poco más de dos meses,Vegetta la adoptó,por lo que nunca había tenido recuerdos de una vida sin él. Y todas las noches con Vegetta habían sido bajo un techo seguro. Incluso la primera vez que habían estado allí,había tenido el techo de los VerdiPedruscos,y había estado una única noche sin Vegetta en su vida.

Aquellos pensamientos la llevaron a un punto de partida razonable; ¡los VerdiPedruscos la conocían! Si los encontraba,la ayudarían...

Teniendo ya un objetivo,empezó a razonar más sensatamente y a encaminarse en direcciones en la que creía que se estaría más segura de noche,pensando qué aquel sería el ideal que habrían tenido los VerdiPedruscos a la hora de hacer sus poblados.

Aunque,claro,su energía no era eterna. A medida que caía el Sol,más se daba cuenta de que llevaba aproximadamente 12 horas sin comer ni beber nada,sin dormir,y estando en un momento de estrés continuo. No era el mejor estado para caminar por la noche,pero Vakypandy no tenía ningún método para saber si la poca comida que veía era o no venenosa,y no podía subir a los árboles.

Su única esperanza era estar tomando la decisión correcta,y tampoco tenía muchas opciones. Sin embargo,para una cabrita que estaba acostumbrada a la buena vida bajo la lumbre comiendo sobras,no comer,beber,y probablemente dormir en más de 10 horas,sola y aterrorizada,de noche,no era un cambio repentino que su sistema fuera a aceptar muy fácilmente.

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Willy disfrutaba de la buena vida en aquella selva. Aunque la maleza era ligeramente más oscura,no había ninguna fiera o amenaza,así que iba cómo Peter por su casa: de paseo.

Sin embargo,la felicidad no le duraría mucho,pues no se había dado cuenta de que en el tiempo de ocio que había tenido,las hojas se habían ido oscureciendo gravemente...

Llegó a una extraña playa,después de que la maleza acabara y...lo vio....

Eran barcos. Barcos tochos. Barcos de ricos,barcos de científicos,cómo se quisiera decir.

Willy se agachó,al borde de la playa,y vio a un montón de personas vestidas con batas blancas y con cara de estudiosos,ir moviendo carpetas de papeles y hablar entre ellos.
De entre toda la gente que podría haberse fijado,se fijó en la única que estaba de espaldas.

¡Cuál fue la sorpresa de Willy al verle la cara a aquella persona!

— ¿¡Fargan!? — gritó tan alto que el eco retumbó por toda la playa,que estaba en una especie de cuenca de montañas...

Todos se giraron hacia la maleza que marcaba el final de la playa,tratando de distinguir alguna figura. Willy se tapó la boca.

— Encontrad al que ha gritado. ¡Encontradlo! — el que parecía el jefe militar dio órdenes a un grupo,que se desplazó rápidamente hacia el lugar.

Willy se dio la vuelta y se fue corriendo de allí,temiendo que le vieran o siguieran,pero haciéndose preguntas. ¿Qué hacía Fargan allí,cómo,y por qué?

Se suponía que nadie sabía de la existencia de la isla,nadie podía llegar hasta ella...¿y qué hacía Fargan con unos estudiosos? Si él era un tontito,cómo decía Vegetta.

No podía encontrar ninguna respuesta si no se lo preguntaba a Fargan directamente.
Eso le dio una idea. Podía buscar con los barcos a Trotuman,Vakypandy y Vegetta por la costa,tendrían una forma de salir de la isla,y,lo que era más importante,podría encontrar la respuesta a sus preguntas.

Así que,harto de correr de un lado para otro,volvió a la costa corriendo.
El grupo que habían mandado a buscarlo no le habían encontrado.

En un respiro hondo,salió a la parte arenosa de la playa,dejándose al descubierto. Se puso a gritar porque,a ver,estaban a una distancia considerable.

— ¡¡Faaaargaaaaaan!! — le llamó a lo lejos,consiguiendo llamar su atención.

Fargan se giró hacia él,intrigado,y no pudo describir la sensación que le entró en el cuerpo al ver a su amigo allí,en una isla en la que no debería estar,llamándole desde la otra punta de la playa.

Se hizo las mismas preguntas que él al verlo,pero Fargan no era una persona que se quedara media hora parado tratando de resolver preguntas que no podía resolver,así que soltó los papeles que tenía en la mano a la primera persona que tenía delante,que curiosamente era el tipo con aspecto de jefe militar,y se lanzó a por su amigo.

Willy se esperaba cualquier cosa menos eso,no sabía por qué. Pero ver qué Fargan le había reconocido ante la distancia le hizo bastante feliz,y corrió hacia él.

Y allí estaban,en medio de la playa,abrazándose con decenas de científicos mirando sin entender un pimiento,con cara de pasmados. Por no mencionar al jefe militar,que estaba bien enfadado con el mundo en ése momento,con una cara de Poker Face con la que parecía que iba a liarse a tiros con cualquiera.

— ¿Qué haces aquí,Willy? — Fargan se separó un poco del abrazo para mirar a su amigo a la cara.

— ¿Y tú? ¿Y ésos? ¿Te has sacado un título de estudioso o qué? Porque mira la batita blanca de listo que me llevas...

— Muy graciosito. Ahora te lo explico todo... Pero sigo sin entender,¿estabas aquí después de tanto tiempo?

— ¿Tanto tiempo? No ha pasado ni un día,Fargan.

A Fargan se le quitó la cara de alegría enseguida,y Willy pensó que la había cagado bien.

— Eso es en el Hemisferio Sur,en el que estamos ahora. Depende en qué hemisferio y punto cardinal estés,hay un día de diferencia,aparte de el cambio de hora... Ambos factores añaden dos días. En España,es cómo si hubieseis estado tres días fuera... han denunciado vuestra desaparición,la tuya,la de Vegetta,y la de vuestras mascotas.

A Willy también le cambió la cara. No se había enterado de que aquello funcionara así,pero,si Fargan lo decía tan serio,en teoría debería ser así.
Tres días... y estaban desparecidos.

— He estado preocupado por ti y por Vegetta. Nadie os había visto en el Pueblo,ni dónde estábais,ni dónde podríais haber ido... por un momento me asusté. Pensé que os habrían secuestrado o algo así... ¡y resulta que estabas aquí! Es para matarte...

— No iba a ser por mucho tiempo,unos días y volvíamos... — trató de excusarse Willy.

— ¿Y no se lo decís a nadie? Se ha formado un revuelo increíble,estábamos que nos subíamos por las paredes. ¡Estábamos asustados! Y no sólo yo,Auron,Luzu,Alexby,todos. Si nos lo hubierais dicho,nos habríais ahorrado cuatro ataques de estrés y ansiedad a cada uno.

Willy volvió a abrazar a Fargan. Se imaginaba que tenía que ser horrible por lo que habían pasado.
Aunque,por lo menos,ahora podrían volver todos a casa,si su plan iba bien. Y,si se había encontrado con Fargan,tan mal no podía ir.
Aunque estaba vez,se equivocaba de nuevo.

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Vegetta se había quedado paralizado ante aquel núcleo,sin saber cómo reaccionar. Decidió ir en busca de los VerdiPedruscos para advertirles de que estaban en peligro.

<< Si no aviso a Petra y Esmeralda,la sustancia morada podría destrozar toda o una fran parte de la isla... ¡Tengo que ayudarles advirtiendo! >>

Se giró hacia la salida,pero,las piedras que hacían aquella cueva se derrumbaron estrepitosamente,dejándole encerrado...y con un líquido asesino delante,sin comida ni agua.

¿Se podía ser más desgraciado?
¿Se podía tener más mala suerte?

Sí; que tú única esperanza fuera que alguien pasara por allí y te oyera morirte o tus gritos a través de una pared de piedra que casi parecía inamovible.

Eeeeen fin,ésta ha sido toda la intriga por hoy XD

Espero les guste que esté actualizando tanto últimamente,y no me refiero sólo a éste libro,sino a todos en general

Nos vemos ¡!