Tras el acontecer del libro, me encontraba en un espacio en blanco donde no había nada mas que yo, flotando en el vacío.

"Donde.... Donde estoy?". Dije al aire, pero no sentia que mis palabras se dispersaran, el vacío blanco era absoluto, pero de alguna manera no sentía necesidad de respirar.

Me encontraba perdido en ese espacio blanco tratando de entender que sucedió, cuando sentí una voz igual a los susurros dirigiéndose hacia mi.

"Tu, que eres quien fue capaz de llegar a este espacio, que buscas? Poder? Sabiduría? Venganza? Amor?, todo esto ha sido lo que otros han reflejado al buscarme, dime... cual es tu motivación?" La voz resonó en mi cabeza, sin provenir de ninguna dirección pero también como si estuviera en todas partes.

"Quien eres? Por que estoy aqui?... ambición? Mi única ambición es poder hacer que la gente se sienta feliz, triste, enojada, de la manera que sea atraves de mis historias... yo... no necesito ser conocido, solo quiero que mis historias lo sean y que inspire a otros a hacer lo mismo". Dije algo asustado, no sabia el porqué de esto pero sentía que era importante.

"Alguien con ambición tan simple pero inocente, jamás pensé que el alma humana podría carecer de tal codicia que he visto atraves de los siglos". Dio una pausa para después de unos segundos una forma femenina se manifestó frente a mis ojos.

Una apariencia angelical que jamás había visto, cualquiera perdería el aliento con esta chica, lo que no se es porque esta frente a mi.

"Soy el libro que ha existido desde el principio de los tiempos y estaré para ver el fin de los mismos, me han llamado de muchas formas, pero jamás con un nombre propio, piensan que soy un ente maligno, pero solo le garantizo a aquellos que me leen todo lo que quieren 'los mil ojos para poder ver el final' pero mueren por ser incapaces de soportarlo, tu serás capaz?" Dijo antes de posar su mano sobre mis ojos y que empezara a sentir un dolor.

Era indescriptible, sentía cada pulso de dolor atraves de ellos, se sintió como si durara una eternidad pero estoy seguro de que fueron meros segundos.

Cuando estuve a punto de colapsar el dolor se detuvo y me sentía distinto como si pudiera ver más allá.

"Parece que si eres digno de ver el mundo como yo lo hago, joven, ahora eres mi dueño y aquel que será el escriba de los tiempos, no ha habido alguien como tú desde el creador que se desvaneció hace tiempo ya". La joven de cabello rubio, curvas en su lugar ideal y que posee una cara que demuestra calidez dijo.

"Eso implica que debo darte un nombre, no? Me podrías explicar que me hiciste?" Le pregunte queriendo salir de dudas.

"Correcto maestro, será difícil comunicarnos si no me da un nombre [susurro: a menos de que prefiera llamarme esclava]...*se aclara la garganta*, con respecto a lo que hice, fue el proceso para determinar si eras digno de los ojos del escriba, y de alguna manera eres digno" dijo el libro que estaba personificado en una mujer

"Ok... si necesito darte un nombre... que tal Lyra, te gusta?" Dije dubitativo, no es que sea el mejor haciendo nombres.

"Me parece bien, será mejor que lo saque de este espacio maestro, una chica peli-verde lo está sacudiendo ahora mismo". Tras esas palabras todo se aclaro y abrí los ojos nuevamente, lo primero que vi fue el rostro preocupado de Micaela, pero en cuanto reaccione ella se aparto.

"Jyrou-San esta bien!?, tendría que haberle advertido sobre el libro, mis disculpas por ello, si usted lo pude acabare con mi vida". Diría antes de sacar un cuchillo de su ropa, no termine de entender porque pero aparte su cuchillo y traté de hablar.

"No seas estupida, quizás esto haya sido lo mejor". Digo tras arrojar el cuchillo lejos y levantar, la sensación distinta todavía seguía ahí.

Cuando me levante escuche un sonido similar al de un truco de magia barato y me volteé para ver a Lyra en una túnica Blanca, sentada sobre la mesa.

"Que!?, por que el libro ahora es una chica!?, ese solo era un libro maldito del cual no nos podíamos deshacer!". Micaela dijo alarmada, era de esperarse después de todos los muertos provocados por Lyra.

"No tienes de que preocuparte semi-elfa, ahora Jyrou-sama es el escriba del mundo y mi dueño, yo he estado presente desde el principio, y me encargué de otorgarle a jyrou-sama la habilidad de 'ojos del escriba' por lo que ahora es puede saber todo sobre todo solo viéndolo y queriendo ver su historia o definición". Lyra hablo en un tono altanero mientras se dirigía Micaela, pero nos dejó anonadados a ambos, por distintas cosas pero a ambos.

"Acaso Micaela-San es un semi-elfa?, eso es fascinante" dije mientras me mostraba asombrado pero feliz, conocer una especie mágica como un semi-elfo era una de mis fantasías.

"C...como que ahora puede ver t...todo sobre otros?" Micaela estaba asustada por algún motivo, pero no quise decir nada y limitarme a probar mi habilidad sobre ella.

Mis la iris de mis ojos se tornó dorada mientras usaba la habilidad, cuando se habrio la pantalla de estado de ella.

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Nombre: Micaela Zaria Von Ganeria

Edad: 25 años y 2 meses

Genero: mujer

Especie: semi-elfa

Lvl 500, maga lvl 300, arcanista lvl 100, maga de runas lvl 70, bibliotecaria lvl 30.

Hp: 70000/700000

Mp:20000/20000

Sp:10000/10000

Str:200

Def:10000

Int:100000 [sellado]

Wis: 10000 [sellado]

Dex:4000

Habilidades: [SELLADAS]

habilidades pasivas:[SELLADAS]

Titulos: ex-princesa de faeria, traicionada,esclava del reino, bibliotecaria leal, maga prodigio, amenaza global, einhejar.

Estado emocional: asustada, nerviosa, enamorada?.

Historia: antigua princesa del reino de Faeria, fue traicionada por sus súbditos y vendida como esclava, por suerte terminó siendo salvada por el rey de Siviheim haciendola la bibliotecaria real, sin saber su estatus de princesa, tras años de trabajo superó sus traumas y trabajo tranquilamente en la biblioteca real, pero ahora está en frente de alguien que cambió el ritmo de sus latidos, un joven de pelo azabache que poseía una mirada inocente, que le deparará que ambos?.

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Me quedé congelado tras leer esto.