Toad, Yoshi, Goomba e Eevee Mario seguían andando por las praderas cuando, de repente, el pequeño Goomba empezó a temblar. Todos lo miraron sorprendidos y el Eevee se acercó a él.

Los Goomba's no pueden hablar pero si pudieran, éste hubiese gritado. Eevee Mario se adelantó un poco para ver lo que le aterraba y se encontró con un Koopa Troopa verde metido en su caparazón y a un Pinchon boca arriba. Justo detrás de ellos se encontraban un Koopaling, Lemmy.

- ¡Cuidado Eevee! - gritó Toad cuando se percató de Lemmy -. Sal de ahí, ¡rápido!

Eevee corrió con todas sus fuerzas mientras Lemmy, montado en un Helikoopa, le perseguía por detrás. Este no paraba de lanzarle pelotas amarillas con estrellas naranjas. Una de ellas le derribó.

- ¡Papá Mario! - gritó Yoshi enfadado y preocupado mientras iba corriendo a por él.

- Yoshi, rápido, sacalo de allí.

Mientras todo esto pasaba el Goomba se había quedado paralizado por el miedo, ya se había topado con él antes... Antes de encontrarse con Yoshi, Toad e Eevee.

Lemmy siguió lanzando las pelotas, cada cual más grande que la anterior. Yoshi las esquivaba con agilidad.

El Eevee tenía dolorida una pata, la trasera derecha. Aún así, decidió ayudar a sus amigos y realizó un Golpe Cabeza, seguido de un Ataque Rápido.

Lemmy se quedó debilitado y salió corriendo, ni sin antes gritar unas palabras indescriptibles e incomprensibles.

- Menos mal que se ha ido... - dijo Toad.

El Goomba saltó de alegría y se acercó al Koopa y al Pinchon, le pidió a Yoshi que les ayudará a levantarse mediante saltos.

Toad le curó a herida al pobre Eevee Mario y emprendieron de nuevo el camino.

Toad llevaba al Eevee para que no tuviera que andar y Yoshi pedía una baya. Sin embargo, el Goomba no tenía intención de continuar sin sus nuevos amigos Koopa y Pinchon.

Yoshi se dió cuenta y le dió un golpe con el codo a Toad para que se parase y mirase a los amigos del Goomba.

- Bueno, Goomba, Yoshi tiene hambre, ¿sigues andando? - dijo Yoshi mientras su estómago rugía.

El Koopa verde se metió de nuevo en su caparazón y sacó una baya que le entregó a su amigo verde.

- Vaya, ¡una baya! - Yoshi se la comió en un pis-pas y le dió las gracias a la tortuguita.

- Bueno, Goomba, ¿qué quieres hacer? - le preguntó Toad, el Goomba le miró extrañado -. Es decir, ¿te quieres quedar aquí con ellos?

El Goomba miró primero a Toad, Eevee y Yoshi y luego a Koopa y Pinchon, era la decisión más difícil que te tendría que tomar en su corta vida, como la de cualquiera de su misma especie.

Goomba empujó con la cabeza a Koopa y Pinchon y los acercó a Toad, este sonrió.

- De acuerdo, se pueden venir con nosotros.

Todos saltaron de alegría y el Eevee sonrió, estaba haciendo un montón de amigos en este nuevo mundo.