Aunque los hermanos ya tenían un plan, Luigi no se había quedado a gusto teniendo que esperar tres días y decidió ir a hablar con los Yoshi's por si ellos sabían algo más o por si Yoshi les había contado algo.

Cuando llegó a la Isla de los Yoshi's se encontró con Yoshi Azul y Yoshi Amarillo jugando con pinturas, la nariz de Yoshi Azul era ahora una calabaza.

- Yoshi's... - dijo su mamá, todos los Yoshi's miraron ilusionados -, Mamá Luigi a venido...

Todos los Yoshi's salieron corriendo hacía su mamá, la querían muchísimo.

- ¡Yoshi! - gritaron todos corriendo hacía ella, Yoshi Azul lanzó por los aires su baya, que se comió su hermano amarillo -. ¡Mamá Luigi!

- Mamá Luigi a venido para pasara tarde, nada más, ¿eh? - dijo Luigi entre risas mientras abrazaba a un montón de Yoshi's nerviosos por ver a su mamá.

Luigi se sentó en la hierba húmeda mientras todos se sentaban alrededor suya, él acariciaba la cabecita de Yoshi Rosa, está no paraba de ronronear como si fuese un gatito.

- Veréis chico, he venido para preguntaros algo y después, si me contestais con sinceridad, os daré bayas y puede que os cuente un cuento antes de dormir. - Cuando tenía claro que todos los Yoshi's le estaban mirando, preguntó -. ¿Habéis visto a Yoshi?

Los Yoshi's se miraron, ¿de qué Yoshi estaba hablando?

- Ah, claro. ¿Habéis visto a Yoshi Verde?

Todos se pusieron a hablar entre ellos, era cierto que llevaban todo el día sin verlo.

Yoshi Azul levantó la mano y se puso bien sus gafitas.

- ¿Si Yoshi Azul? - todos se giraron hasta poder ver al Yoshi que acababa de pedir la palabra.

- Yoshi fue a ver a Yoshi a mi laboratorio, me preguntó algo de un Eevee y me dijo que era Papá Mario.

Luigi no lo entendió del todo pero pensó que eran cosas de Yoshi's. Le dió las gracias a los Yoshi's y se puso a contarles cuentos para que se durmieran, luego iría a preguntarle a su hermano si sabía algo más.