Chevy
Swerve x Skids
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Las cosas siempre serian así, no cambiarían para el mini-bot detrás de una sonrisa llamada por muchos de oreja a oreja; seguirían siempre detrás de mostrador, como un <barman>, aunque eso no le molestara, si no, no tener alguien a su lado, con el que pudiera charlar, que se riera de sus chistes, que lo cuidara, ese alguien especial y que lo amara...
Aquel cybertroniano de un azul opaco se dirigió a un lugar, este quería beber algo, después de todo había pasado alguno tiempo desde que había tomado algo en el bar de Swerve. Encontró el lugar cerrado, decidió ir al cuarto de aquel guardián del bar; pero de la misma manera que el bar, aquel voluptuoso Bot no estaba.
Cabía la posibilidad de que estuviera con el propietario del bar y se encaminó al cuarto de este.
Cuando llegó, dio un golpesito —. ¿Ten? —Alguien había preguntado desde dentro de la habitación.
— Soy yo, Skids. —Aquel que había preguntado abrió la compuerta —. Hola Ten, ¿puedo pasar? —El guardián se hizo a un lado para dejarlo entrar.
Swerve se encontraba en recarga quien parecía enfermo y a su lado suyo estaba Chevy, un misterioso Bot que tenía una estreña empatía con el mini-bot.
— ¿Qué tal Chevy?, ¿cómo a estado este Swerve? —preguntó mientras chequeba a su compañero.
Chevy con su servo indicó un estado de <más o menos> —. ¿Y que ha dicho Ratchet? —les pregunto a Ten y Chevy.
Los cuales se miraron y agacharon sus cabezas apenados.
— No lo han llevado... Mejor vamos a que lo chequeen. —Los tres se dirigieron a la bahía médica, siendo Ten el que cargo a Swerve.
Al llegar fueron recibidos cordialmente por Firts Aid y quien al finalizar la revisión del mini-bot; diría.
— No hay nada de que preocuparse solo esta recargando del sobrefuerzo que a hecho, lo más recomendable es permitirle descansar un poco más.
Le agradecieron y se llevaron al bromista mech para seguir las indicaciones del médico. Cuando llegaron a la habitación acomodaron a Swerve en su litera y éste comenzó a despertarse.
— ¿Qué paso? —El menor se incorporó.
— Bueno, caíste en recargar por sobrezfuerso, Firts Aid nos dijo que tenias que descansar. —Ante la respuesta de Skids, el barman sonrió.
— Eso no significa que vayas a hacer lo que te plazca —dijo el de azul al ver las intenciones del menor y la sonrisa se transformó en una mueca de desilusión.
— No te preocupes, nosotros nos encargaremos de tu bar, ¿verdad? —Tanto Chevy como Ten a sintieron.
— Gracias... y también por cuidarme. —Swerve se apeno un poco ante lo dicho.
— Ten —dijo el gigante mech —.Digo lo mismo —comentó el teórico...
Para todos era bueno que aquel bar volviera abrir sus puertas, después de todo era el lugar en donde podían hacer todo lo que quisieran; o al menos las cosas que no permitía Ultra Magnus.
Aunque a todos se les hizo raro que el lugar fuera atendido por Skids y Chevy, a parte de Ten; en vez de Swerve.
— Amm, Chevy dime, ¿cómo está Swerve? ¿ya se siente mejor? —El color carmesí atendió el llamado del capitán.
Con su servo derecho, con su dedo pulgar y el índice; con una pequeña separación indicó un <poquito> mejor.
— Bueno... Sigue trabajando así. —Chevy alzó un dedo pulgar en respuesta y se retiró para seguir trabajando...
— Por favor me acabo de recuperar —dijo Swerve, quien resivio una mirada desaprobatoria de sus dos compañeros.
— Si, lo se, lo sé, tienen toda la razón pero no puedo hacerlo, ¿creen que todo va salir de color de rosa? —se dirigió frustrado a Ten y a Chevy.
Estos se miraron; el de carmesí al ser más pequeño que el de amarillo pero mucho más alto que Swerve se puso de puntillas y se acercó a los receptores de audio del guardián y le susurro algo; cosa que no entendió el más pequeño del trío y que lo dejó confundido. Ten asintió y junto con Chevy tomaron con facilidad al líder de aquel pintoresco grupo.
Aún cuando este se negara, lo jalaron y empujaron a la dirección donde estaba su objetivo. Skids, este mismo al darse cuenta que algo había chocado con su pierna miró para abajo y vio a Swerve.
— ¿Swerve? —preguntó sorprendido, el hábil mech.
— Y-yo, quiero decirte algo —tartamudeo, temío del resultado. — ¡Chevy puede hablar! —No tenía el valor de decírselo.
— ¿Cómo? —preguntó el teórico, mientras que escondidos en su rincón Chevy al ver la cobardía de Swerve estampó su cabeza en el pecho de Ten.
Skids fue corriendo y accidentalmente arrastrando al dueño del bar, llegó a una oficina y puso el código —. Chevy puede hablar —soltó la frase, así asustando a su pareja y a su paciente.
— ¿Qué? —La confusión de Rung era notoria.
Ahora todos sabían que el silencioso pero expresivo Chevy podía hablar, todo gracias a su culpa, y a su cobardía.
Los tripulantes de la Lost Light hacían todo lo posible para que el misterioso mech hablara; el pobre se sentía abrumado, no solo era acosado por desconocidos, si no, hostigaron hasta la saciedad a Ten para que les dijera como era la voz del Bot' de color rojo.
Sus intentos eran inútiles y él haría que estos intentos pararan, había llegado la hora para decirles que dejaran en paz a sus dos amigos.
— Bien hecho Swerve —lo felicito Rung ya que había dado la cara para proteger a Ten y a Chevy.
— ¿Ustedes lo creen? —preguntó aquel que apachurrado por el gigante guardián y el mech carmesí en un fuerte abrazo.
— Pues claro que sí —dijo un mini-bot de blanco y azul.
— Tailgate tiene razón, tuviste el suficiente valor para protegerlos. —Ante las palabras de Skids; Swerve rió felizmente.
— Así que te vas —dijo Tailgate, quien apenas habían entrado al bar para celebrar la victoria de la defensa de Chevy y Ten.
— Bueno, Chevy me invitó a pasar un tiempo con su familia, además tengo curiosidad sobre esa "familia"; tu no negaras que tienes curiosidad —dijo el barman quien sacó dos cubos de energon.
— Es cierto, pero dudo que a Cyclonus le guste, dice que Chevy tiene algo... Algo que no le gusta —menciono Tailgate.
— Lo estás diciendo como si Chevy fuera malo —dijo ofendido Swerve.
— No, pero aún así ten cuidado el espacio es peligroso —dijo preocupado el de azul y blanco.
— No te preocupes —El de rojo y blanco tomó un trago de su cubo.
— Pero dime, ¿Ten va ir con ustedes? —Este jugo un poco con el energon.
— No quiere ir, desea estar donde están ustedes; además alguien debe cuidar de Swerve's. —comentó Swerve.
— Pero cambiando de tema; ¿le dijiste a Skids lo que sentías? —Tailgate era de los pocos que sabían sus sentimientos hacia el teórico.
— No, bueno; sabes él ya está con Rung y no creo que sea muy cómodo saber que alguien más esta interesado en él, alguien como yo. —Al finalizar solo recibió un golpe en hombro por Tailgate.
— ¿Puedes tener un poco más aprecio a tu persona? —preguntó molesto su compañero...
Ya todo estaba listo para irse, algunos estaban ahí para despedirse, entre ellos Skids, al menos podía consolarse con el podían ser "amigos".
Chevy metía los víveres y provisiones en la pequeña nave. Se despidieron de todos aquellos que estaban allí.
No sabía el porqué tenía esa mala sensación como si algo malo pudiera pasar; que debía decir su querer al teórico pero alejó ese pensamiento de su procesador y pensó que no tenía derecho a interrumpir la bonita relación que tenían el teórico y psiquiatra.
Salieron de la Lost Light y pensó que sólo sería un tiempo, uno que le ayudaría a mejorar y soltar las cosas innecesarias. Después de unos ciclos viajando siendo él como el copiloto, Chevy empezó actuar raro o al menos más de lo normal; no contestaba a sus preguntas, se empezó a poner nervioso y hasta podía decir que estaba enojado.
En un momento dado sintió un fuerte golpe en su cabeza que lo dejó inconsciente y recargo bastante, para cuando despertó Chevy lo estaba bajando de la nave, en un lugar amplio y enorme.
No sabía que estaba pasando; estaba amarrado y Chevy le jalaba con suavidad para que caminara.
— Bien hecho Swerve. —Una potente y áspera voz se escuchó en el fondo causando eco. Dudo si se refería a él o alguien más ya que se empezó a ver varios cybertronianos.
Fue jalado a mayor profundidad del lugar, mientras escuchaba como se burlaban de él; se había convertido en prisionero de Unicron.
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Chevy Swerve, es uno de los personajes más raros de Transformers, (de ahí saque su personalidad); no por su historia dentro de la ficción, si no, en el mundo real que a llegado a tener ciertos elementos, como aspectos, que lo hacen uno de los personajes más engnimaticos como desconocidos.
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