Círculo de confianza

Hermione había llevado un libro que le prestaron en una fundación muggle y conversaba con Blaise al respecto, mientras que Pansy tomaba té y Ron veía a Harry andar de un lado al otro de la casa, usando una falda.

—Oye, Harry- —Ron hizo una pausa y adoptó una expresión pensativa—. ¿Hoy eres mi amigo?

Harry se rio desde la cocina.

—Sí, Ron, hoy prefiero "él".

Ron asintió con una expresión que parecía decir que todavía no estaba muy seguro de entender, pero estaba bien siempre que Harry fuese feliz.

Harry regresó al comedor tras un momento con una bandeja de galletas. Puso frente a la silla vacía un plato de panqueques y una taza de café casi al mismo tiempo que oían una puerta abrirse y a alguien balbuceando algo.

Draco se le acercó por detrás, lo rodeó con los brazos y se apoyó en su espalda. No tardó más de dos segundos en enterrar el rostro en su hombro, ignorando a su "público".

—¿Cómo está mi persona favorita? —murmuró Harry, girando un poco el rostro para decirlo cerca de su oído y que Ron no volviese a fingir arcadas por su "exceso de cursilería".

—Cansade —replicó Draco con suavidad—. Demasiadas cartas escritas en una noche. Y después te levantaste temprano y no estabas para abrazarte...

Harry hizo que se sentase a desayunar y Hermione comenzó a hablar de lo que estaba leyendo y de sus ideas sobre cómo presentarlo al Ministerio.

Draco llevaba varios meses intercambiando cartas con miembros importantes del Ministerio para conseguir que los géneros no binarios fuesen reconocidos en la comunidad mágica británica, pero en sus propias palabras, eran sólo "magos viejos y demasiado tontos para que la identidad de género les entrase en la cabeza" y "brujas igual de viejas lloriqueando sobre que las mujeres cis eran el único grupo vulnerable y les quitarían algo si reconocían otros grupos".

A veces se cansaba bastante. Por suerte, Harry le entendía bastante bien y además tenía personas de confianza que intentaban ayudarle a preparar los argumentos para esa gente atorada en el siglo XX.

No siempre lograban comprenderle, claro, pero esto incluso lo hacía gracioso de vez en cuando, como ese día.

—Mira, amigue, te voy a decir la verdad —declaró Blaise, poniéndose muy serio mientras Draco desayunaba— y no quiero sonar como un imbécil, pero ya me perdí y creo que Pansy también-

—¡A mí no me metas! —se quejó Pansy, dándole una patada por debajo de la mesa.

—Pero si eras tú la que estaba preguntando cuál era la diferencia entre...—Ron entrecerró los ojos, hizo una pausa y se movió hacia Hermione.

—Entre agénero y no binarie —recordó Hermione.

Harry y Draco intercambiaron miradas mientras la mesa se volvía un caos y Blaise interrumpía la diatriba de Pansy gritando algo sobre que la idea no era sonar como si no hubiesen entendido nada de lo que leían.

De alguna manera, Blaise acabó empujando algo de miel contra el rostro de Pansy y luego él y Ron tenían piernas de gelatina y Ron decía que no era su culpa lo que su novio dijese.

Harry sólo se empezó a reír y Draco rodó los ojos y siguió comiendo. Esperó a que se calmasen un poco para explicarles las diferencia, y como todavía tenían expresiones pensativas, Harry se apiadó y soltó un:

—Está bien, calma, incluso nosotres nos confundimos al principio —Codeó a Draco, divertido—. ¿Recuerdas que no sabía si era bigénero o género fluido?

Draco asintió.

—Y luego el conflicto del nombre porque no sabías si conservar el "Harry"...

—¡El nombre! —Hermione saltó en su asiento y tomó notas en el pergamino que tenía al lado—. Tomaste en cuenta el cambio de nombre, ¿verdad, Draco?

Draco emitió un sonidito afirmativo e hizo levitar las últimas cartas que recibió en respuesta de los miembros del Ministerio para que el resto también las leyese y pudiesen ayudarlo a elaborar sus contraargumentos.

Pansy recogió un par de cartas y las leyó en voz alta, haciendo imitaciones ridículas de la persona que las escribió a medida que soltaba sus comentarios absurdos que creían que eran "argumentos" para no reconocer a gente como Draco y Harry.

Reírse ayudaba a que esto fuese un poco más ligero. Y a que se sintiesen más acompañades.

Les voy a comentar dos cosas sobre esto, la primera me dio risa por lo wtf (pero tiene tinte transfóbico y no está bien) y la segunda ya va en serio

Hace unas semanas, alguien me dejó un comentario por una palabra EXIGIENDO que no fuese a usar la e y el plural inclusivo en mis historias, y perdón, pero yo todavía me rio cada vez que lo pienso, porque pedirlo es tonto y seguramente viene con tinte transfóbico, pero decírmelo A MÍ. Pídeme que no exista y ya, oye, no, WTF

Para fines informativos, utilizo elle como pronombre de varios personajes y el plural con e en varios de mis libros que están en la cuenta de originales y hasta en mis libros publicados en físico, si me da por meterlo en los fics...lo voy a meter en los fics y ya (?)

Ahora sí hablando del tema serio, es extremadamente difícil tener un espacio seguro, aunque sea un poco seguro, siendo trans. Y a mí ya me harta todo lo que me ha salido del tema, pero sí les digo que si uno de los grupos más vulnerables que existen se está quejando de que les violenten o apoyen a la gente que lo hace y tu reacción es ponerte en su contra, juzgar esa reacción o salir con un cisplaining (venir a explicarnos la situación trans a las personas trans), en vez de fijarte en quienes les violentan y en lo que ese grupo denuncia...pues igual es que eres parte del problema

Y para mis flancitos trans: dobles besitos de serpiente para ustedes estos días y sean muy felices. Como les molesta que seamos felices, hay que serlo el doble /corazón, corazón