Para la siguiente visita Harry se había encargado de hornear 50 pastelitos, incluso los había decorado con crema especial y pequeñas estrellitas de colores. Louis, por otro lado, había comprado infinidad de juguetes, desde pelotas hasta muñecas y juegos de mesas.

Decir que estaban entusiasmados era quedarse cortos, realmente desde principios de semana que estaban planeando todo. Incluso, Louis tuvo que transferir varios casos que tenía a uno de sus compañeros y Harry dejó las tareas de la semana en el vicepresidente de la empresa.

—¿Llevamos todo? —inquirió el mayor mientras miraba el maletero de la camioneta a rebosar.

—Creo que sí, las 10 cajas de pastelitos y las 10 bolsas... —enumeró a cambio— está todo, alfa. Vamos.

Esta vez ambos se encontraban mucho más tranquilos. Según lo que Julia les había comentado, la primera visita generó reacciones muy buenas en el consejo que se encargaba de evaluarlos, por lo que si seguían así era muy probable que las cosas se agilizaran un poco.

Al estacionar la camioneta, Louis corrió dentro del lugar en busca de muchas manos que los ayudaran.

La beta que llevaba su caso sonrió en grande cuando vio el gesto y muy discretamente para que la pareja no lo notara tomó muchas fotos que ella estaba segura que luego serían de relevancia para el caso.

Entre los tres cargaron las cosas hasta el salón donde se daban las comidas, que en ese horario no estaba ocupado, y volvieron a ingresar a la otra habitación.

Como era de esperarse, apenas entraron varios niños se abalanzaron sobre ellos. Los alfas le sonreían a todos e intentaban dejar caricias en las mayores cabezas posibles pero sus manos no eran suficientes.

Louis, como pudo, buscó con la mirada a Lucas. Lo encontró sentado en el mismo lugar que hace 15 días, con la misma expresión de desolación.

Dirigió su mirada al rizado, quien para ese punto ya había notado lo mismo que él, y como si de telepatía se tratara decidieron que en unos segundos ambos iban a ir a hablarle juntos.

—¡Niños, tenemos una sorpresa para ustedes! —Louis elevó la voz para ser escuchado entre tanto bullicio.

—¡¿Qué es!? —chilló una niña omega a la que le faltaba uno de sus dientes superiores.

En ese momento un par de trabajadoras del lugar ingresaron a la habitación con los juguetes y pastelitos.

—Estos los horneé yo mismo con mucho amor para todos ustedes —dijo esta vez Harry sin dejar de sonreír. Su aroma cítrico se expandía por todos lados haciendo a algunos niños fregar sus mejillas contra sus piernas.

La combinación de emociones en los aromas no tardó en explotar por el espacio junto a gritos y victoreos. Una enorme fila se formó desde la mesa hasta el final de la habitación para lograr recibir aunque sea algo de lo que los adultos habían llevado.

—Esperemos con mucho amor que les hayan gustado las cosas que les trajimos.

—¿Qué les decimos a los señores Tomlinson-Styles? —Julia instruyó con sus manos en la cadera y una expresión algo severa.

—¡Gracias, señores!

Louis besó la frente de Harry mientras observaban a todos los niños disfrutar. Paseando su mirada por las mesas, notaron como un juego, un rompecabezas en específico, y un pastelito sobraban y como lo sospechaban, el único niño que no se había movido de lugar había sido Lucas.

Con un pequeño puchero tomó el pastelito con una mano, le tendió el rompecabezas a su compañero y se encaminaron.

—Hola, Lucas —Louis habló con la voz más tranquila que pudo para evitar sobresaltarlo— no fuiste a buscar tus regalos.

Lucas se encogió de hombros sin siquiera darse la vuelta, por lo que el puchero de Louis se intensificó.

Ahora,ya más de cerca, Harry se había dado cuenta de lo que su alfa había notado días atrás. La conexión con el niño era inexplicable, como que realmente sentía como si sus almas estuvieran entrelazadas. Su lobo aullaba en su pecho y su aroma buscaba expandirse para marcar al pequeño alfa.

—¿No tienes hambre? —volvió a intentar el abogado.

—Tal vez un poco... —murmuró Lucas.

—Ten entonces, es todo tuyo —le extendió el pastelito con manos temblorosas.

Lucas se giró lentamente y tomó entre sus pequeñas manitos lo ofrecido. Mordió lo más grande que pudo y luego se reclamió la dulce cubierta. Le había gustado tanto que incluso emitió un pequeño ronroneo que derritió el corazón de los alfas.

—¿Quién es él, Louis? —señaló con la mirada mientras tragaba el último trozo de panecillo.

—Mi alfa —respondió mientras tomaba la mano de su compañero.

—¿Ambos son alfas? —la confusión latente.

—Sí.

—Que bien.

Y ahí acabó el tema. Ambos mayores pensaron que diría algo más, que le parecería raro o incluso curioso, pero otra vez el destino les demostró que los niños eran almas puras que terminaban siendo corrompidas por adultos envenandos.

—Esto también es para ti, cachorro —Harry le extendió el rompecabezas con una sonrisa.

—¡Nunca tuve un de estos para mi solo! ¡Muchas gracias! —Lucas sonaba genuinamente entusiasmado tomando el juguete entre sus manos y examinando todo de cerca.

—¿Quieres que lo armemos juntos? —Louis se tomó la libertad de sentarse a un lado de la ventana como habían hecho la noche anterior.

—¡Claro!

Entre los tres bajaron al suelo donde tomaron asiento y posicionaron el juego en el medio. No era un gran rompecabezas, contaba con pocas piezas, pero luego de indagar un poco descubrieron que ese era el juego de mesa favorito del alfita, por lo que al notar que lo armaba con suma facilidad le prometieron traer otros más complejos las próximas visitas.

—¡Eso no va ahí! —chilló Lucas entre risas al ver que Harry intentaba encajar una pieza donde no iba.

—¡Lo siento! mejor dejo que los expertos armen —el rizado frunció su ceño mientras depositaba la pieza entre los diminutos deditos.

—Te enseño... —murmuró Lucas— está como es redonda debe ir en alguna de las puntas, como... ¡Aquí!

Louis aplaudió al ver que el rompecabezas por fin estaba terminado y festejó con muchas cosquillas en la pancita de Lucas, quien reía a carcajadas intentando evitarlas.

La hora pasó más rápido de lo esperado y pronto tuvieron a Julia sobre los niños apurandolos para que vayan a tomar la merienda.

—¿Volverán? —preguntó el menor en voz bajita, casi un susurro, mientras jugaba con el borde de su camiseta agujereada.

—Claro, cuando menos te des cuenta estaremos aquí de nuevo, pequeño alfa —Louis se acuclilló para conectar sus ojos.

La mirada llena de tristeza que Lucas le dirigió rompió un poquito más su corazón. No pudo contenerse y lo estrechó entre sus brazos. Lo sintió fregar su mejilla sobre su hombro intentando llenarse de su aroma protector, por lo que liberó un poco más. El cachorro gimoteó un poquito y tembló nervioso.

—Nada de tristeza, cariño —murmuró el mayor— te prometo que nos veremos pronto y podremos armar muchos rompecabezas juntos.

Lucas asintió antes de separarse y caminar hasta Harry. El rizado no pudo contenerse, de igual forma, y le dio un fuerte abrazo. El alfa también lo cubrió con su aroma, dejando en su piel una deliciosa mezcla amaderada y alimonada.

—Nos vemos, pequeño.

Harry y Louis se quedaron solos en el medio del amplio salón viendo como Lucas era arrastrado por una de las empleadas hasta el comedor.

—En serio ese niño tiene algo especial.

—Lo tiene.

Luego de unos momentos, y de pactar una nueva cita, ambos regresaron a casa. Intentaron concentrarse en sus trabajos, adelantar pendientes o llenar formularios; pero Lucas no lograba salir de sus mentes.

—No sé como voy a aguantar sin verlo por 15 días más —Harry corrió la silla de su alfa y se sentó en su regazo.

—Ni yo, de verdad sentí algo fuerte...

Louis llevó sus manos a la cintura contraria mientras Harry escondía justo en el lugar donde el aroma del mayor era más fuerte. Tomó una gran bocanada y se dejó relajar.

—No pensé que esto iba a ser tan difícil —murmuró Louis— siento que los días no pasan... quiero tenerlo ya en casa, corriendo por todos lados y riendo a carcajadas.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
voy a llorar yo también quiero que Lucas ya esté con ellos 😭

ni siquiera recuerdo cuando pasa eso, pero espero que pronto!!!

déjenme saber si la fic les viene gustando y como siempre muchas gracias por el apoyo <3

que tengan linda semana!

nos leemos pronto ❤️

A.