Eyyy genteeee aquí os dejo el primer capitulo de la historia!!!! Espero que os guste, y no os olvidéis de votar y comentar!!!

A leeeer!!!! :)

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Podía sentir como mis pies comenzaban a arrastrar por el suelo y eso solo significaba que necesitaba descansar con urgencia. Llevaba más de un mes recorriendo diferentes pueblos, buscando huir por que quería alejarme todo lo posible de ellos, ya que mi prioridad en esos momentos era que no pudiesen encontrarme. 

Me encontraba a unas horas de llegar al siguiente pueblo, y cada vez me sentía más débil. El poco dinero que había logrado traer en mi rápida huida de Magnolia había llegado a su fin, y me había quedado sin comida y sin agua a mitad de camino.

He calculado mal las distancias.

Sabía que todavía me quedaba un largo camino para llegar al siguiente pueblo, pero en esos momentos me era imposible continuar caminando por que el agotamiento y las heridas me tenían al borde del desmayo. Agotada tanto física como mentalmente, pegue la espalda a un tronco y me deje resbalar poco a poco hasta acabar sentada en el suelo.

-Y pensar que de nuevo estoy como al principio.- reí sin ganas.- ¿Quién lo diría?- me lleve ambas manos a la cabeza. 

¡Quería gritar...!

¡...Necesitaba llorar...!

...Y deseaba golpear a alguien por mi mala suerte. 

Encogí las piernas hasta pegarlas a mi pecho y escondí la cara en ellas, y sin detenerlas por mas tiempo las lagrimas comenzaron a caer por mis mejillas sin descanso como si de una cascada se tratara.

Los recuerdos... dolían.... ardían...

***        ***        ***

Lo que no podía borrar de mi cabeza era sus miradas llenas de decepción, de odio y de enojo. Solo unos pocos tenían una mirada llena de sorpresa, siendo incapaces de reaccionar a lo que ellos dieron por hecho que había sucedido.

Y yo prácticamente estaba irreconocible.

Con la ropa rota y llena de heridas por los golpes recibidos y agotada por todo el esfuerzo. Pero todos parecían ignorar el estado tan lamentable en el que me encontraba y a nadie parecía importarle. 

Solo me miraban con desprecio.

Con un esfuerzo enorme intente ponerme de pie, y solo después de varios intentos (en los que nadie se ofreció a ayudarme) lo logre. Suspire de alivio y me coloque la mano en la frente, intentando detener la sangre que caía sin parar de la ceja, pero sin lograr mucho por que mi mano acabo tenida de rojo en cuestión de segundos.

-Yo... yo no quería...- intente explicar.- No hice nada malo.- acabé diciendo.

-¿Cómo puedes atreverte a negarlo?- escuche decir a Gray con rabia.

-No fue mi intención.- insistí intentando que me creyeran.

-¡Cierra la boca!- escuché gritar a Gajeel esta vez. 

-Fue un acciden....- no pude acabar la frase. Me lleve la mano a la mejilla izquierda. Ardía. Gire la cabeza y vi sorprendida a la persona que la había golpeado.

Mirajane.

-Mira.- susurre sorprendida.- Yo...

-No te queremos aquí.- retrocedió varios pasos alejándose de mi.- Ya no eres bien recibida.- me observo con rabia.- ¡Vete!- Elfman se acerco a su hermana mayor y la envolvió en sus brazos alejándola de todos sin echarme una sola mirada.

Como si no la mereciese...

¡...Como si fuese basura!

Desesperada por encontrar algo de apoyo empecé a mirar por todo el gremio buscando a alguien en específico. Buscando a aquel que me llevo a Fairy Tail, quien me apoyo en tantos momentos difíciles de mi vida, y quien siempre creyó en mi.

¡Él creería mis palabras!

Estaba segura de que él le permitiría explicarle lo que en verdad había ocurrido horas atrás, y cuando lo explicase todos entenderían y todo el malentendido quedaría como un mal recuerdo. Cuando varios minutos después lo encontré lo mire con intensidad y tristeza, esperando ilusionada a que el respondiera mi suplica por ser escuchada.

Pero no lo hizo.

Él solo miro al suelo y camino hacia mi. Al principio la esperanza de ser escuchada y comprendida creció en mi interior, pero esa esperanza no duro mucho.

Al llegar a su lado Natsu alzo la mano hasta mi cinturón y  me arrebato las llaves. No fui capaz de reaccionar, y solo fui capaz de mirarlo sorprendida y horrorizada por lo que mis ojos estaban presenciando. Pero lo peor es que no me miro a los ojos, y solo se dedico a reunirme la mirada hasta que estuvo lejos de mi de nuevo. 

-No te las mereces.- lo escuche susurrar cuando varios metros de distancia nos separaban.

-Pero...- alce la mano en un pobre intento de recuperar las llaves, esas llaves que tantos recuerdos y tanto significado tenían para mi.

¡Eran mías!

-Alguien que daña a su familia no merece ser maga.- esas palabras fueron dichas por Natsu, que en esos momentos me miraba con decepción y odio.

Me lleve la mano al pecho sintiendo como algo se me desgarraba por dentro. Esas palabras dichas con tanto resentimiento, dolían tanto que sentía que estaba a punto de caer al suelo desplomada. Mire Natsu a los ojos unos segundos antes de dirigir mi mirada a cada uno de los presentes, y fue en ese momento cuando me di cuenta de que nadie me creía.

Estaba sola.

No sabía la razón, pero antes de darme cuenta estaba riéndome a carcajada limpia. La situación era de todo menos graciosa, pero solo era capaz de reír y reír como si mi cordura dependiera de esas risas para mantenerse en su lugar.

Minutos después me lleve las manos a la cabeza y las risas paso a ser un llanto desgarrador con el que buscaba un poco de liberación y consuelo por toda la situación. Podía sentir como todos me miraban con atención, pero no me importaba.

Le estaba dando la bienvenida a la locura.

-Esta bien.- reí por lo bajo.- Nadie me cree y nadie quiere escuchar lo que paso de verdad.- dije con resentimiento.- Las dañe, pero no tengo intención de arrepentirme por que hice lo correcto, por su bien.- alce la cabeza y los observe con el poco orgullo que me quedaba.

Con pasos lentos por que las heridas no me permitían ir mas rápido, me acerque a la barra y me pare frente a Makarov, el maestro del gremio, y al que considere como un segundo padre desde que llegue al gremio. 

-Lucy...- susurro al tenerme frente a él.

-Quítela.- coloque la mano frente a él.- Hazla desaparecer...- ordene.- Ahora.

El pequeño maestro sabia perfectamente lo que había querido decir con mi frase, y por las miradas de los observadores solo unos pocos mas entendieron lo que esta quería decir. Los demás solo me miraban como si la cordura me hubiese abandonado.

Makarov la miro con ojos llorosos. Sus ojos me decían que no quería hacer eso, pero igual que todos los demás pensaba que había dañado a la familia, y que esa era la única opción. La ley del gremio lo decía. 

-¡Dije que la quitara!- grite al ver que se mantenía parado.- ¿¡No era eso lo que todos querían!?- le reproche.- ¡Bórrela!- grite por tercera vez, y Makarov obedeció. 

Y a cámara lenta... desapareció.

Makarov esperaba que algo sucediese, o que alguien se interpusiese para no tener que quitarle la marca del gremio a Lucy. Pero nada paso y la marca fue retirada de su mano. 

Al ver su ausencia escucharon a Lucy soltar un grito de falso jubilo. Con paso lento pero decidida y llena de una tranquilidad preocupante, se acercó a los que eran su equipo. Erza, Gray y Natsu la miraron con tristeza y rencor.

-¡Mirad chicos!- dijo riendo mientras les enseñaba la mano donde antes estaba la marca.

Los tres la miraron con sorpresa, recordando el día en el que ella llego a Fairy Tail diciendo la misma frase. Todos  recordaban con melancolía ese momento, deseando que todo fuera un sueño. 

Pero la marca había sido retirada...

 ...Ya no había marcha atrás.

***       ***      ***

Volví al presente al notar como un pájaro se posaba frente a ella en su rodilla, y no pude evitar sonreír con tristeza.

-No todo es para siempre, ¿Verdad amigito?- susurre acariciándole la cabeza. El pájaro me miro durante unos segundos antes de salir volando de nuevo.

Y riendo por la locura de hablar con un pájaro y llena de tristeza por haberlo perdido todo, me puse en pie y comencé a andar de nuevo. Suspirando seguí caminando intentando encontrar alguna evidencia de que estaba cerca de algún pueblo.  

Fueron largas horas pero al final encontré a varias personas en mi camino, y un amable anciano me indico el camino mas rápido para llegar al pueblo mas cercano.

Zoana.

-Un pueblo tranquilo con muy pocos habitantes, y sin magos.- fueron las palabras que el anciano me dijo antes de continuar con su viaje. Le di las gracias y  continué mi camino.

¿Con que Zoana eh? 

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Y hasta aquí llega el primer capitulo!!!! ¿Que os ha parecido? COMENTAD Y VOTAD!!!

Antes de nada aclaro que Lisanna no es mala, que no ha engañado al gremio para que echen a Lucy, ni nada que se le parezca jaja. Lo que paso se ira viendo mas adelante.

Y aclarado eso... Comentad, votad y decidme que os a parecido el capitulo. Si votáis y comentáis mucho, subiré el próximo capitulo rapidísimo jaja.

Hasta la proximaaa!!! ;)