Todo el mundo se sorprendió al conocer la noticia de que el nuevo autor había robado el libro de otro autor.

El otro autor (que permaneció en el anonimato) ya dijo que no demandaría a James e incluso le ayudaría en su próximo paso en la vida. Tras la noticia, todos los ingresos obtenidos con el libro se enviaron inmediatamente a organizaciones benéficas.

James cambió rápidamente su nombre y se marchó a los condados más pobres del país. Más tarde, crearía un documental sobre su vida y cómo enseñó a leer y escribir a muchos niños. Pero esa es una historia para otro momento.

Al ver las noticias, Calvin sonrió y apagó el televisor. No le hacía mella en el bolsillo si ayudaba a James.

Se preguntó hasta dónde llegaría el hombre.

Se levantó del sofá, se estiró y bostezó antes de volver a su habitación para cambiarse.

Se vistió con unos pantalones caqui ajustados y una camisa negra lisa. También llevaba zapatos negros. Se trenzó el pelo y se recogió el flequillo. Aunque era un look informal, seguía estando guapo.

Calvin iba a tener una "cita" con Ian. "Cita" porque aún no eran amantes ni compañeros, pero era algo más que "hablar". Ian seguía comprometido con Valerie. Ian, que perseguía a Calvin, declaró vagamente que había circunstancias que le hacían estar comprometido. Fue en esta cita donde le contaría a Calvin la razón.

Habían tenido varias "citas" desde la primera. También hubo muchos mensajes de texto y llamadas. Los dos se unieron y Ian se aferraba a él cada vez más. Realmente le recordaba a Damien del último mundo. Calvin no entendía cómo alguien podía permanecer con alguien durante tanto tiempo, aunque la relación nunca se hubiera establecido... Al mismo tiempo, se alegraba de que el Sistema Dios fuera así. Era un sentimiento egoísta, pero quería más de Sistema del Dios. Por supuesto, lo daría todo al hombre que tanto le quería.

En cuanto a Valerie, ella estaba en plena persecución con Lucy. Llevaba a Lucy de compras, a comer y al cine. Leían libros entre ellas y pasaban el rato. Valerie enviaba mensajes de texto y llamaba a Lucy todos los días, hasta el punto de que se hablaban casi todo el día, aparte de cuando dormían o estaban en el trabajo. Lucy pensó que era como tener una mejor amiga y aceptó encantada todas las invitaciones cuando no estaba trabajando. Las dos se hicieron más cercanas, pero para Lucy era más admiración que amor.

Lucy iba a tener una "cita" con Valerie mientras él iba con Ian. Este era su plan. Hacer que Calvin y Lucy se separaran para poder confesar su amor y explicar la situación. Calvin ya lo sabía, pero le seguía el juego. Era obvio por lo que había pasado hasta ahora.

Era feliz.

Pero aun así, cada vez que cerraba los ojos, podía ver a Ian y Damien dándole la espalda y saliendo por la puerta.

*****

Calvin e Ian estaban sentados en un restaurante de sushi. Debido a sus hábitos del primer mundo, a Calvin le seguía gustando el sushi y lo comía con gusto.

Estaban comiendo tranquilamente su sushi, disfrutando de la compañía del otro, hasta que Ian decidió romper el silencio

"Calvin, te debo una explicación". Ian dejó los palillos y suspiró.

"Sí, y te escucho". Calvin también hizo lo mismo y cogió su bebida. Estaba esperando. Más vale que sea una buena explicación para el desamor momentáneo.

"Valerie y yo somos mejores amigos, pero nunca podremos vernos como amantes. Verás, yo soy gay y ella es lesbiana. Valerie nunca podrá amar a un hombre como yo nunca podré amar a una mujer".

"Entonces, ¿por qué estáis juntos?"

Habló de que se conocían desde que eran niños. Siempre estuvieron juntas, pero siempre fue en plan de amistad. En un mundo hetero normativo, todo el mundo pensaba que también se casarían, pero a los dos les parecía tan repugnante que casi vomitan. Cuando la madre de Valerie rogó a los padres de Ian y a este que la aceptaran como prometida, fue difícil decir que no.

"Nuestros padres, especialmente la madre de Valerie, estaban furiosos porque nos negábamos a casarnos con alguien. Aunque no hemos encontrado a esa persona, nuestros padres decidieron que debíamos comprometernos. Con su explicación, tenía sentido. Si no podíamos encontrar a nadie, ¿qué problema había? Podríamos conseguir un vientre de alquiler para nuestro hijo, sin tener que tocarnos nunca. Además, somos mejores amigos, podríamos tratarlo como compañeros de piso. Pero entonces encontramos a la persona con la que queríamos estar el resto de nuestras vidas..."

Calvin no dijo nada a eso. Se limitó a esperar. Miró fijamente a Ian, temiendo mostrar cualquier fluctuación de emociones, tratándolo como una simple salida del armario a un amigo.

Ian no esperó a que Calvin dijera nada y le agarró una de las manos. "Calvin, te quiero. Me enamoré en el momento en que nos conocimos en la Gala. Cuando te vi por primera vez, sentí esta conexión. Desde el momento en que nos tocamos, supe que quería pasar mi vida contigo. Cada uno de tus movimientos, tus ojos brillantes, tu aura, todo tu ser, me llena de calor. Tu existencia fue como una salpicadura de color en mi aburrido mundo. Tu sonrisa es como la luz para mi oscuridad, tu risa es como música para mis oídos. Amo cada parte de ti. Te quiero, Calvin".

La máscara de Calvin se rompió. No le mataría entregarse al amor con este hombre. Aunque no fuera real o fuera falso. Incluso si el hombre no lo amaba realmente, sino solo el cuerpo que ocupaba. Aunque supiera que Ian era el Sistema Dios que dijo que lo amaría por lo que era...

No le dolía valorar sus momentos juntos y mantenerlos cerca. El calor que sentía le daría fuerzas para seguir luchando contra sus monstruos.

Prometió que estaría con el Sistema de Dios en este mundo y en todos los mundos después de este. Sentía que nada podía impedirle amar tanto a alguien. Realmente cayó con demasiada facilidad, pero le ayudó a encontrar a la persona con la que quería estar para siempre. Realmente tenían un para siempre el uno con el otro.

"Tú también me gustas... Pero no sé si es amor".

Solo se "conocían" desde hacía unos meses. El Calvin original, que nunca había tenido una relación, no conocería los sentimientos del amor tan rápidamente.

"Está bien. Podemos salir juntos y ver cómo va. Si se te cae el cariño, entonces te apoyaré pase lo que pase".

El Sistema Dios fue demasiado amable con él. Si era él, sabía que los sentimientos de Ian eran verdaderos. Esto calentó un poco el corazón de Calvin.

"Hmm, después de romper tu compromiso, vamos a intentarlo".

Calvin ya lo sabía. Pasara lo que pasara, seguiría enamorándose de este hombre una y otra vez.

En cuanto al Sistema 225, cerró los ojos y los oídos porque... su todopoderoso y poderoso Sistema Dios estaba siendo empañado delante de él.

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Alrededor de la misma hora, Valerie había terminado de explicar su situación a Lucy. Era más o menos lo mismo que la explicación de Ian, pero se esforzó por no decir muchas palabras floridas y fue directamente al grano en pocas frases.

Agarró la mano de Lucy. "Lucy, me enamoré de ti en cuanto te vi en la Gala. Tu personalidad tímida, pero que intenta parecer segura de sí misma, tus vulnerabilidades, tu risa, tu sonrisa, todo ello. Me encanta cada parte de ti".

Valerie e Ian eran definitivamente los mejores amigos, y se nota en la forma en que ambos se confesaron. Extremadamente tópico y cursi hasta el punto de que daban ganas de vomitar de la cantidad de queso que les estaban metiendo.

Lucy estaba perdida. No estaba sorprendida por la salida, pero no sabía qué decir ante la confesión. Lucy nunca había pensado en salir con una persona de su mismo sexo. No le repugnaba la idea ni le asustaba.

Además, había hablado mucho con Calvin y le parecía que era natural que la gente amara a quien amaba sin importar el género. Sólo que nunca se le pasó por la cabeza la posibilidad de estar con alguien de su mismo género.

Al ver su silencio, Valerie trató de disimular su expresión sombría. "No tienes que responder a mis sentimientos ni tienes que aceptarlos, solo quería que lo supieras". Valerie sabía que su amor probablemente no sería correspondido. Lucy solo había salido con hombres. Ella estaba muy lejos de lo que Lucy estaba acostumbrada.

Valerie sentía todo tipo de emociones. Sabía que a Calvin también le gustaba Ian, así que estaba un poco celosa de que su mejor amiga pudiera encontrar el amor de su vida. Aunque había pequeños sentimientos de envidia, sentía más felicidad al ver al amigo que conocía de toda la vida viviendo su mejor vida. Ella también quería vivir así...

Lucy se recompuso y agarró la mano de Valerie para asegurarse de que no saliera corriendo. "Yo... no me opongo a que estemos juntos y no me disgusta la idea. Es solo que nunca había pensado en salir con otra mujer, especialmente con una a la que realmente admiro, así que... ¿Podemos, por favor, empezar despacio? Quiero conocerte mejor y los sentimientos y..." Sentía que se le acababan las palabras y podía sentir que se le escapaban de la lengua. Lucy tenía miedo de que Valerie no la tomara en serio.

Lucy nunca pensó realmente en quién salir y a quién amar. Nunca se limitó y pensó que si se enamoraba, se enamoraría. Nunca se le ocurrió ser consciente del género o del sexo de la persona, así que al enfrentarse a ello, necesitaba tiempo. Necesitaba tiempo para organizar sus pensamientos y aceptarlos. Estaba dispuesta a intentarlo con Valerie porque sabía que Valerie era importante para ella.

Al escuchar esto, los ojos de Valerie se iluminaron y asintió. "Gracias. Una vez que rompa el compromiso, déjame perseguirte de corazón". Esto era mejor que ser rechazado directamente. Incluso si las cosas no iban bien románticamente para los dos, ella esperaba que al menos pudiera seguir siendo buena amiga de Lucy.

"Mmm." Fue un zumbido de acuerdo de Lucy.

Lucy tenía miedo de las cosas nuevas, pero sorprendentemente, estaba emocionada de comenzar el nuevo viaje con Valerie.

*****

Después de sus citas, Valerie e Ian se reunieron para idear un plan para decírselo a sus padres.

Fue una larga noche para estos dos gays.

"¿Deberíamos decírselo directamente?" Ian dijo que no era tan paciente como parecía. "Solo quiero acabar con esto para poder mostrar al mundo mi amor por Calvin".

"No necesito tu queso". Valerie apretó los dientes al ver la felicidad que rezumaba Ian. "Tenemos que reunirlos y decírselo juntos. Si estamos juntos, no intentarán gritar o golpearnos".

Eso era cierto. Cuando los dos pusieron caras de cachorro a sus padres, estos se derritieron inmediatamente y ya no pudieron enfadarse con ellos. Sus caras juntas eran como un arma letal que sabían utilizar bien.

"Muy cierto, su voluntad es débil ante nuestras caras, así que hagamos esto cuanto antes. Cuando estás libre porque puedo hacer esto cuando sea".

"El viernes, tiene que ser el viernes porque tengo una cita con Lucy el sábado". El viernes era en 2 días.

"Tienes suerte porque yo también tengo una cita el sábado, así que estoy de acuerdo en que el viernes es un buen día".

Como siempre, estos dos eran demasiado parecidos. Tenerlos juntos era un puro caos.

"No podemos retrasar más esto. Cuanto más tiempo tenga que ver tu cara con este anillo, más ganas me dan de vomitar", dijo Valerie mientras su cuerpo se estremecía y se encogía ante la idea de seguir con su falsa relación por más tiempo.

"Me has quitado las palabras de la boca". Los dos fueron sinceros el uno con el otro, aunque fuera brutal...

Practicaron sus líneas una vez más antes de dar por terminada la noche.