Park Chaeyoung

La carrera estaba a punto de empezar, así que sin mas remedio tuve que subirme a aquel auto color negro el cual su dueña era Jennie Kim. Ella me calmo, o tal vez un poco aun así me sentí protegida a su lado. Luego de unos minutos escuchando como el pitido sonó, no quite mis ojos de las manos hábiles de Jennie, su mano contra el manurio y sus pies contra el acelerador, mientras hacia una clase de expresiones al manejar, estaba tan concentrada.

Chille cuando pasamos por una curva, con miedo me pegue contra el pequeño sostenedor de brazos que estaba a mi lado, escuchando una risa burlona a mi lado. Inhale y mire hacia la pista de nuevo, no se en que lugar se encontraba Jennie pero podía jurar que era la número uno por la gran sonrisa que se curvaba en sus labios. Mi única idea fue pasar mis manos por sus brazos.

-Eres increíble. -la halague, viendo como sus ojos me miraban por un microsegundo y me sonreía. Kim era tan linda, de verdad si intentará describirla seria tan difícil, sus facciones eran de una mujer perfecta, de mí chica perfecta.

No se cuantos minutos dilatamos en hacer aquella carrera, solamente vi cuando llegamos y las personas nos esperaban, chillando y con pequeñas bocinas en sus manos. Intente incorporarme, pero volví a asustarme cuando el motor del auto rugió aun mas, haciéndome chillar y escuchando una risa de Kim.

-Ya hemos hecho esto, no entiendo por que te asusta tanto. -pude escuchar que dijo, dejando el auto justo en la meta, -Ganamos.

Era tipico, Kim siempre ganaba en las carreras así que nunca me sorprendía, la manera en que ella manejaba era algo atrevida, nunca le importo si alguien se le pasaba por su camino, su objetivo solamente era la meta y obviamente, el dinero que generaba en ello.

Las chicas, como eran de esperarse se acercaron, justamente a mi mientras yo salia del auto ellas brincaban. Mi cabeza dio una pequeña vuelta cuando intente sostenerme, exhale de nuevo volviendo a mi postura y sintiendo los brazos de Lisa alrededor mio. Diciéndome que fuéramos a tomar un poco de cerveza.

-¡yo sabía que ganarían! Digo, es Jennie Kim. -halago alguien, haciendo que mis ojos fueron inmediatamente hacia esa persona.

Joohyun; la chica que estuvo con Jennie Kim. sabia muy bien de ella, no lo se creo que es un odio estupido que nos tenemos. Podría decirse que ella tenía un poco de envidia de mi, por Jennie Kim, y yo solamente por el hecho que Jennie se haya acostado con ella. Demasiado patético de mi parte aun así no puedo cambiarlo. Pude notarlo justo al lado de ella, mi sangre se hirvió de inmediato cuando estaba bromeando con los demás y obviamente, la anteriormente mencionada.

Pensé que Jennie estaría celebrando ahora mismo con sus amigos, justo cuando iba a llevar a los pequeños estantes repletos de cerveza alguien me tomo de la cintura, haciendo que Lisa se alejara como si nada pasara.

-Vamos a celebrar, esta carrera lo hice por mi chica. -susurró, sintiendo su mejilla contra la mía.

-¿Te refieres a Joohyun? Quitate que me estas incomodando. -gruñi, intentando apartarme de su lado. No fue tanto trabajo, sus brazos me dejaron libre pero no del todo, pues me tomo de los hombros y me dio vuelta, su rostro están sudado. No entendía el por qué aun así me parece la chica mas linda que haya conocido

-Rosé, nena..-suspiro, colocándose cabizbaja y de nuevo observándome -No quiero que cuando yo este cerca de una chica tu..

-¿Yo este celosa? Demonios, eso quiere decir que tú si puedes estar con cualquier chica y yo no puedo ni ver a..a Taehyung. -tome mi primer iniciativa, la mandíbula de Jennie se apreto, tirándome una sonrisa algo desconocida, maliciosa. No lo se. Se que le he dado bajo, no le agradaba que yo estuviera cerca de Tae, me lo repetía cuando nos veía.

-Yo nunca me pongo celosa, nena, no se cuantas veces tendré que repetirlo y decirte que puedes estar con quien quieras. Somos amigas ¿recuerdas? -escupió, soltándome y viendo como se alejaba. Estaba enojada, tal vez ella también lo estaba.

Gruñi por lo bajo y camine de nuevo hacia las chicas quienes estaban ya bebiendo su cerveza, no dude ni un minuto cuando empuje aquel liquido ácido sobre mi boca. Este era nuestra rutina, estar bien, pelear y luego estar bien de nuevo. No era nada mas, y creo que era un gran problema, la cerveza y la marihuana juntas no eran muy buena para mi pues me hacían ser tan tonta cuando estaba junto a Jennie.

La cerveza como era de esperarse hizo efecto en mi e hizo que volviera a sus brazos, bromeando y terminando besándonos. Se lo que sucede después, se que ustedes también lo saben. Si, soy una estúpida, una estúpida que seguramente merece morir.

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