Baekhyun y Jongin intentaron escapar corriendo de vuelta hacia donde supuestamente debería ser un aeropuerto, pero fueron obligatoriamente atraídos por una fuerte ventisca con la cual era imposible caminar de vuelta. Pudo ver claramente cómo ese director movía su mano de un modo tan tranquilo mientras los atraía hacia ellos y Baekhyun casi estaba llorando porque estaba arruinándose todo con el movimiento.

—¿Podemos dejar de jugar? —la pregunta fue dicha amablemente, pero Baekhyun notó un tono retador de parte de Jungsu—. No tenemos exactamente todo el día y soy una persona muy ocupada.

Baekhyun volvió a mirar a Jongin quien estaba un todo despeinado y con la ropa por sin ningún lado.

—Creo que están diciendo la verdad —su amigo le susurró.

—¡No caigas tan fácilmente!

—Baekhyun, ese tipo está controlando el viento con sus manos —el moreno gimió.

Baekhyun abrió su boca pero no supo qué decir. Ya era su quinta huida pero todo era sinsentido, siempre eran capturados. A un lado de ese director —que francamente los trataba con títeres— aún estaba ese extraño chico con su sonrisa de comercial y extremidades largas y espantosas.

—I-Inténtalo de nuevo.

—¿El qué? —preguntó Jongin en el momento que intentaba correr en dirección opuesta al viento.

—Lo dijiste, ¿no? Eso, la teletransportación —Baekhyun soltó un grito cuando repentinamente su cuerpo se expulsó hacia delante por la fuerza del viento. Se agarró de un árbol y tomó a Jongin de la camiseta para que lo hiciera de igual manera—. Inténtalo de nuevo y sácanos de aquí.

Baekhyun jamás pensó que diría algo como eso —en realidad jamás creyó estar atorado en un extraño mundo con Jongin— pero algo tenía que hacer para salir de allí. Maldijo hacia en donde estaban los otros dos casi disfrutando de la vista y volvió a mirar a Jongin con exageración.

—A este paso vamos a volar con todo y árbol —gimió—. ¡Vamos, inténtalo de nuevo!

—¿No sería eso aceptar lo que esos enfermos están diciendo?

—¿Eh?

—Baekhyun —Jongin colocó la mano en su hombro y lo miró con curiosidad—. Escúchate a ti mismo. Me estás pidiendo que me teletransporte a quien sabe dónde.

Baekhyun se mordió los labios. Ah, tremendo dolor de cabeza que se estaban dando. Era verdad, definitivamente si Jongin hacia eso significaba que estarían usando su poder o lo que sea. Pero, ¿qué más podían hacer?

Sin más, Baekhyun escaló un poco más el árbol mientras intentaba que no le cayera algo de manera en el ojo porque el viento era jodidamente fuerte y ese imbécil medio rubio parecía no querer dejarlos en paz. Llegó un poco hacia donde estaba Jongin para mirarlo de frente y prácticamente tumbó su cuerpo sobre él para sostenerse.

—¡Byun Baekhyun-!

—¡Desea ir a un lugar y vámonos de aquí! ¡Oh! —su espalda se estaba haciendo hacia atrás y estaba a segundos se der expulsado hacia esos dos psicópatas—. ¡Desea estar en Los Ángeles! ¡Corre! ¿No lo hiciste antes? ¡Solamente tienes que desearlo! —chilló en el momento que logró sostenerse del cuello de su amigo, pero sus piernas estaban ya volando—. ¡Kim Jongin!

—¡Estás demente!

—¡Solo inténtalo!

De un momento a otro, Baekhyun sintió un fuerte retorcijón en sus entrañas. Había cerrado los ojos por puro miedo mientras apretaba con todas sus fuerzas en dócil cuerpo de su amigo. Hubo un intenso movimiento, incluso mucho más fuerte que cuando estuvo en el avión. Apenas se dio cuenta que volvió a respirar en el momento que sintió frío concreto bajo él y un Jongin algo muy pesado sobre sí.

—Mierda —fue lo único que pudo murmurar. De nuevo, por segunda vez en el día, Baekhyun se encontraba casi literalmente sin nada de azúcar en su sistema y sentía nauseas.

Jongin gimió por debajo, parecía más pálido pero mucho mejor que la primera vez que lo hizo. Porque sí, joder, ya no se encontraban colgados de un árbol a plena luz de día en una extraña extensión de pasto, sino que ahora parecían estar dentro de una habitación un tanto extraña. Cuando pudo ver claramente, lo primero con lo que se encontró fueron muchos pares de piernas.

Literalmente había unas largas piernas frente a él y Baekhyun levantó la vista encontrándose con un pene.

Oh.

—¿Saben que está prohibido teletransportarse dentro del edificio? —escuchó la voz, aún algo lejana.

—Ah... —sus labios se movieron intentando ver más allá de piernas y penes por todos lados. Pudo divisar una banca a un lado de ellos, luego algunos casilleros detrás y un poco más lejos estaban unas duchas. Parpadeó un poco más e intentó levantar a Jongin para que lo defendiera de esos chicos que se veían tal vez no enojados, pero sí un poco extrañados—. ¿D-Dónde estamos?

—Los Ángeles.

Baekhyun abrió la boca mientras que lentamente sentía que volvía a la vida. Pudo jurar que sus ojos casi estaban llorosos mientras removía a Jongin de su lugar y chillaba lleno de felicidad.

—¡Lo hicimos! —movió a su amigo de atrás hacia delante—. ¡Estamos en Los Ángeles! ¡Hemos escapado de ese par de psicópatas!

Los chicos de pie —desnudos— se miraron entre sí. Había un rubio demasiado alto que parecía ser algo así como el que mandaba allí y éste simplemente se inclinó hacia Baekhyun mirándolo de arriba hacia abajo. Jongin fue el primero en encontrarse con la mirada de ese extraño chico y titubeó un poco cuando se dio cuenta que se encontraba en algo así como duchas públicas.

—¿Lo hicimos? —preguntó extrañamente.

—¡Este chico alto dice que son Los Ángeles!

—¿Pero por qué está hablando coreano? —Jongin se impulsó hacia arriba para levantarse. Su cuerpo aún seguía un poco mareado—. ¿Y por qué todo el mundo aquí es asiático?

Baekhyun, aún en su lugar, murmuró algunas cosas inentendibles mientras pensaba.

—P-Puede que nos encontremos en algún barrio asiático o-

—Aaah —el rubio desnudo asintió mientras se enderezaba y asentía—. Son nuevos, ¿supongo? —volvió a analizarlos—. Pero qué extraño, son demasiado viejos para estar aquí.

Completamente confundido, Baekhyun se levantó con ayuda de Jongin y ambos instintivamente caminaron hacia atrás alejándose de esos —guapetones— hombres. Baekhyun se tomaría sus miradas en serio si no fuera porque estaban desnudos, ¿no tenía toallas en Estados Unidos? Aunque, sinceramente, la vista no le incomodaba para nada.

—Yifan —un chico desde atrás murmuro mientras se hacía paso entre ellos. Yifan parecía ser ese rubio cara-odiosa—. Acabo de recibir un mensaje del director y me está preguntando si has visto a... —se silenció a sí mismo cuando miró a los dos chicos frente a él. Tras unos segundos, el otro chico asintió y volvió al teléfono—. Sí, director. Están aquí. Un chico moreno con cara de idiota y uno más pequeño con cabello castaño. Sí.

—De a gratis el insulto, eh.

—¿Qué está pasando? —Baekhyun apuntó hacia ellos. El chico recién llegado seguía en el teléfono—. ¿No se supone que esto es Los Ángeles?

—Así es —el rubio se cruzó de brazos—. Es el edificio de Los Ángeles. Los que volamos. Pero probablemente aún no lo sabes porque están huyendo de lo inevitable. Dejen de ser quejicas y escuchen a Jungsu.

Baekhyun tomó a Jongin de su chaleco y lo estiró hacia abajo. Entonces, ¡¿malditamente no habían salido de Exodia o lo que sea?! Suspiró con exasperación mientras se alejaba un poco más con su amigo a un lado.

—No se muevan —el chico al teléfono gritó—. ¡Ya vienen por ustedes! ¡No los dejen ir! —demandó a los otros chicos.

Con toda la intención de capturarlos, los desnudos se acercaron a ellos.

—Hora de irnos —Baekhyun le susurró a Jongin—. Piensa en cualquier otra mierda de lugar y sácanos de aquí.

Jongin se mordió el labio y pasó su brazo por el hombro de Baekhyun para mantenerlo firme a él y sin más, desaparecieron de ese lugar.

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Baekhyun se estaba congelando el trasero y eso que apenas llevaba diez segundos sentados en un extraño lugar. Era una sala grande, algo así como un gran salón cubierto de cristal y había un frío inmenso. Incluso logró ver algo de nieve colocada como decoración. Intentó levantarse, pero cuando lo hizo, sus pies se resbalaron cayendo de lleno sobre un Jongin quien apenas se componía del viaje.

—Idiota —siseó Jongin empujando a su amigo—. ¿Dónde mierda estamos?

—Eso es lo que te preguntaría a ti —sentía el blanquecino vapor saliendo por su boca mientras que intentaba darse calor corporal con sus manos. Pero, por Dios, estaba con una camiseta de manga corta—. ¿A dónde deseaste ir?

—Un lugar no tan caliente —Baekhyun enarcó una ceja—. ¿Qué? Hacía un calor del demonio en esas duchas. Además, juraba que te estabas poniendo caliente con todos esos chicos desnudos allí.

—¡Yo no-!

Antes de acabar, algo extraño pasó rápidamente a un lado de ellos. Baekhyun ladeó su cabeza hacia esa figura y logró ver a un chico patinando sobre el hielo con total tranquilidad mientras los observaba con un rostro serio. Tenía los brazos hacia atrás y se deslizaba en la misma dirección sin apartar la mirada sobre ellos. Su vestimenta era un poco más adecuada: ropa térmica, cuello de tortuga, un gorro con una extraña forma de lobo y ropa deportiva gruesa.

Comenzó a dar vueltas por el lugar. Definitivamente no era una pista de patinaje sobre hielo, pero por la forma en que el chico se movía parecía serlo. Intento mirar debajo de él, era de puro cristal —frío, bueno, sí, mierda era hielo— y casi gritó en el momento que sintió un horrible vértigo. Estaban a muchos metros sobre el suelo y lo único que parecía sostener ese lugar era un gran muro de cemento al centro. Todo era transparente y parecían estar en una sección navideña o algo así.

—¿Se perdieron?

Baekhyun volteó y miró cómo ese chico más castaño que rubio estaba a tan solo un metro de ellos aún con las manos hacia atrás. Jongin y Baekhyun se miraron entre sí sabiendo completamente nada.

—¿Esto sigue siendo Exodia? —preguntó Jongin.

El otro chico sonrió demostrando unos grandes dientes blancos. Baekhyun casi sintió ternura por la forma en que los cachetes de ese chico se inflaron mientras asentía y daba un par de vueltas en su lugar ahora con las manos extendidas hacia arriba.

—¿Qué más sería si no? —respondió—. Estamos en el área Cristal. ¿Qué hace un chico teleport por aquí? Si se quedan más de diez minutos sin nada que los cubran se congelaran.

Bueno, mínimamente ese chico se veía más agradable que los otros voladores o lo que sea. Baekhyun carraspeó si saber ya qué decir o hacer. Por otro lado, el chico de pie, al no ver respuesta, comenzó a levantar las cejas hacia ellos esperando alguna explicación.

—Yah —los llamó con voz suave, pero potente—. Soy Kim Minseok. ¿Por qué no me están respondiendo?

—C-Creo que es hora de irnos —farfulló de forma rápida mientras intentaba levantarse, lográndolo y apenas obteniendo un poco de equilibrio—. Fue un gusto, Kim Minseok. Pero nosotros —comenzó a alejarse hacia lo que creía era la puerta—, nosotros tenemos que- ¡oh!

Se detuvieron de inmediato en el momento que un circulo de hielo se formó alrededor de ellos dejándolos sin escapatoria. Hizo mucho más frío y Jongin se golpeó en la cabeza contra el muro de hielo al resbalarse. Baekhyun intentó romperlo, pero era demasiado macizo y duro.

—¡¿Qué está pasando?!

—¿Quiénes son ustedes? —desde afuera, Baekhyun escuchó la voz del chico ya no tan amable. Baekhyun no dijo nada y repentinamente el hielo se hizo más opresivo dejándoles apenas un metro de diámetro—. Si no me responden tendré que aplastarlos hasta que digan la verdad. ¡Más vale no sean ustedes, malditas Hecks!

Baekhyun gimió y zarandeó a Jongin para que volviera en sí.

—Sácanos de aquí —imploró mientras escuchaba más gritos y el círculo que los rodeaba más pequeño—. ¡Date prisa!

—Creo que voy a vomitar... —susurró Jongin, sin embargo, por la presión de Baekhyun, logró ponerse a pensar.

Desaparecieron del hielo en un solo parpadeo.

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Baekhyun se quejó cuando ahora fue él quien se dio de llenó contra lo que parecía ser una mesa para posteriormente caer de cara contra el suelo. Prefirió quedarse quieto para reponer las fuerzas. Después del hielo, habían caído en una piscina solamente para encontrarse con un chico realmente sorprendido quien parecía instruir a otros chicos desde un lado. Los movimientos de agua iba de arriba hacia abajo y ese chico creó lo que parecía ser una burbuja para sacarlo del agua.

No fue muy diferente a lo que sucedió con los otros dos, el chico con el cabello lleno de gomina les preguntó quienes eran y por qué andaban jugueteando en un lugar prohibido con la teletransportación. Como no hubo una respuesta de su parte, el chico procedió a darles una buena tortura con el agua hasta que soltaran palabra alguna. Baekhyun rescató el nombre el tipo, era Junmyeon y decía una y otra vez que no podían ser infiltrados y muchas cosas más. Por suerte, lograron tomarse de las manos y salir del lugar antes de volver al agua.

Ahora, Baekhyun agradecía estar sobre algo sólido. Extrañamente su ropa ya no estaba mojada, no entendía eso, pero poco le importó. Abrió los ojos para encontrarse con una habitación no muy diferente a la que tenía en casa. Se veía como toda habitación de un chico normal, salvo que parecía estar un poco más limpia y ordenada.

Levantó la vista para encontrarse con solamente una luz encendida y reviso su alrededor más próximo: su cuerpo estaba entre una cama y una mesita de café —con la que probablemente se había golpeado— el suelo estaba envuelto en alfombra.

Después, oyó un extraño quejido proviniendo de la cama y levantó la vista. ¿En dónde mierda se había metido Jongin? Sintió el pánico consumirlo rápidamente, pero respiró aliviado en el momento que se puso de rodillas y encontró el cuerpo de su amigo sobre la cama. Aunque, en realidad, volvió a sentir su corazón acelerarse cuando, sí, su amigo estaba prácticamente cansado y acabado sobre la cama, más bien sobre alguien.

Lo más divertido era que Jongin se estaba besando —accidentalmente, intuyó— con un chico que probablemente estaba en un estado de completo shock.

—Oh... —Baekhyun murmuró, absorto en la escena que no terminaba. Los labios de Jongin seguían pegado con los del otro chico.

Miró detenidamente cómo era que el chico debajo levantó con lentitud sus manos colocándolas en los hombros de Jongin con intensiones de alejarlo. Lo intentó, de hecho, dándole un par de empujones, pero el cuerpo de Jongin estaba mucho más pesado y éste mismo parecía no tener intensiones de moverse por sí solo por el cansancio.

—¿Debería simplemente dejarlos solos?

Lo susurró sin realmente pensar, pero pareció que el chico debajo apenas se dio cuenta de su presencia y, en tan sólo dos segundos, el cuerpo de Jongin salió volando con una gran fuerza hacia arriba para chocar posteriormente contra la pared y caer de lleno en el suelo con un gemido lastimero.

—¡Jongin! —chilló Baekhyun mientras iba de tropiezos hacia él—. ¡Oh Dios! ¡¿Estás bien?! ¡¿Qué sucede contigo?! —se volteó hacia el chico de la cama quien ya estaba sentado y con una de sus manos en los labios.

—Yo... —el chico intentó hablar, pero pareció no lograr pronunciar nada.

—Acabo de conocer al amor de mi vida —Jongin parecía una extraña combinación entre borracho y moribundo. Baekhyun lo miró con un poco de lástima y se paniqueó mucho más cuando sostuvo la cabeza de su amigo y sintió la viscosa sustancia roja—. Labios esponjosos. Corazones, jeje.

—Creo que finalmente te han dejado un cien por ciento idiota —Baekhyun intentó ver el daño de su amigo, por lo menos seguía vivo—. ¡Yah! —gritó hacia el chico aún desconcertado en la cama—. ¡Está sangrando! ¡Haz algo al respecto!

—Ah, sí —el chico salió de la cama. Traía puesto una camisa gris y pantalones cortos negros, pareció buscar algo sobre su mesita de noche y encontró lo que eran sus lentes, eran redondos. Su cabello era corto, no tenía flequillo y tenía una pequeña cicatriz en la frente.

Baekhyun bajó su vista cuando sintió a su amigo removerse para sentarse y señalar al chico.

—Encontré a Harry Potter —se rió—. Acabo de besar a Harry Potter. Seré tu Ginny, ve aquí baby —Jongin extendió sus brazos para llegar a él, pero Baekhyun lo sostuvo en el suelo.

Por otro lado, el chico de pie —que aún no hacía nada productivo más que intentar matar a su mejor amigo— parecía demasiado avergonzado y confundido. Seguía tocándose los labios como protagonista de drama fluffy. Baekhyun volvió a mirarlo y el chico pareció captar su pedido ya que inmediatamente tomó el teléfono de su escritorio y marcó con rapidez.

—Hola, sí, ¿sección de Vida? —el más bajo enredó el dedo en el cable del teléfono mientras se mordía los labios—. Comuníquenme con Zhang Yixing, por favor —hubo un momento de silencio y ese chico miró hacia ellos y dio un extraño brinquito de la impresión cuando Jongin seguía mandándole corazones. Cuando pareció haber ruido en el otro lado, volvió al teléfono—. Ah, sí, Xing. ¿Puedes venir a mi habitación? Hay un herido. Tiene lo que parece ser una contusión en la cabeza... ah, no, no. Nada que ver con las Hecks, fui yo... ¿Podrías dejar de reírte? Realmente creo que se volvió loco. Sí, está bien, gracias.

Cuando colgó el teléfono, el chico se volteó mirándolos con escepticismo.

—El equipo de sanación viene en camino, no tardarán mucho —informó mientras se pegaba a su escritorio. Parecía totalmente decido a no acercarse a ellos—. ¿Quiénes son ustedes?

Esa pregunta de nuevo, Baekhyun pensó. La verdad ya estaba malditamente cansado.

—Mi nombre es Byun Baekhyun y al que intentaste matar se llama Kim Jongin-

—Yo no lo intenté —lo interrumpió el otro—. Él... él hizo eso y-

—Lo que sea —retomó la conversación—. Estábamos por ir a unas fabulosas vacaciones en Estados Unidos pero pasaron algunas cosas y terminamos aquí y un viejo estúpido nos está diciendo que tenemos poderes y comenzamos a huir porque este retardado puede teletransportarse. Todo el mundo quiere capturarnos, creo que Jongin se sobrecalentó y terminamos de algún modo aquí.

El de lente pareció mirarlos extrañamente, pero su nerviosismo inicial desapareció. Ahora tenía un rostro sereno y tranquilo.

—¿Son nuevos? —Baekhyun asintió sin más—. Oh, ya veo. Deben estar muy fastidiados con todo esto. Pero es normal, a todos les pasó, creo.

—Crees.

El otro se encogió en hombros.

—Estoy en este lugar desde que nací, de hecho, la mayoría lo está —por más que su voz parecía firme, su cuerpo seguía completamente pegado al escritorio. A veces la mirada del chico pasaba a Jongin quien ya estaba más allá que acá—. Es raro que gente mayor a cinco años llegue. Creo que es la primera vez que gente tan grande termina aquí.

—¿Cuál es tu nombre, dulzura?

Baekhyun miró a Jongin con cara de asco. ¿Desde cuándo alguien cambiaba su sexualidad con un golpe en la cabeza? El chico parpadeó durante unos segundos, pero luego pareció forzarse a recobrar la compostura.

—Soy Do Kyungsoo.

—Entonces, Kyungsoo —Baekhyun continuó—. ¿Cómo mierda hiciste que este idiota volara tres metros hacia arriba y luego hacia atrás?

—¿Mierda? —Kyungsoo pronunció con dificultad—. ¿Qué es eso?

Baekhyun enarcó las cejas. ¿Realmente tenía que explicarle lo que significaba eso? Bueno, probablemente era porque estaban en un lugar raro. Aunque bueno, creía que la palabra 'Mierda' era universal o algo así y era considerado de la familia de insultos.

—Olvida eso —Baekhyun negó con la cabeza—. Responde a lo otro.

—Bueno, soy fuerza. ¿Qué tanto tengo que explicar?

Va. Baekhyun ya ni siquiera entiende por qué preguntó. Estaba por decir algo más, pero hubo un par de toques en la puerta y ésta se abrió con el tercer toque. A quien vio primeramente fue a un lindo chico entrando con una suave sonrisa y tenía en sus manos un pequeño libro con él. Baekhyun estuvo por dejar a su amigo, levantarse y preguntarle algo como 'Eh, bonito, a qué hora pasas por pan' pero cualquier movimiento se vio detenido cuando por la puerta pasaron ese maldito director y el gigante con patas chuecas.

Cuando cruzó miradas con Chanyeol, éste simplemente apretó los labios mientras que su mirada decía algo así como 'Uh, estás en problemas' y vio aquello cuando pasó al director quien no se veía feliz tampoco.

—¿A quién intentaste matar otra vez? —preguntó el lindo chico recién llegado.

—Yo no lo intenté matar, Yixing —respondió Kyungsoo finalmente separándose de su escritorio—. Aparecieron de la nada y ese chico... —volvió a tocarse los labios—. Hizo cosas extrañas.

Yixing  pareció no preguntar más, simplemente se acercó a su amigo. Entre los dos, hicieron que Jongin se acostara en la cama boca abajo mientras que Yixing inspeccionaba la herida en su cabeza. Al parecer, la sangre se había detenido, pero estaba hinchado.

—¿Va a vivir? —Baekhyun le preguntó a Yixing mientras que este leía algunas cosas en su libro con total atención.

Tras un segundo, Yixing cerró el libro y asintió con suavidad. Baekhyun miró hacia un lado para mirar exactamente lo que el chico estaba haciendo ya que no traía consigo nada para curar a Jongin. Sus ojos se abrieron extensamente en el momento que éste comenzó a mover sus dedos sobre la cabeza de su amigo mientras murmura cosas que parecían hechizos o esas mierdas de bibidi babidi bu.

—Ya está —un segundo después, Yixing se puso de pie y sonrió en dirección a Baekhyun—. Estará bien con respecto al golpe en la cabeza, pero su cuerpo se debilito casi hasta su límite por tanto uno de su poder. Debido a que no está para nada entrenado aún y estuvo en lugares prohibidos para los teleport, su poder se fue aminorando.

—Ahí tiene, señor Byun Baekhyun —desde la puerta, escuchó la voz de Jungsu. Baekhyun volteó encontrándolo con un rostro cansado—. Una vez más y su amigo pudo caer en coma. ¿Está realmente seguro que prefiere poner sus vidas en riesgo de nuevo? Es mejor si usted nos escucha.

Baekhyun miró nuevamente a Jongin totalmente dormido. Definitivamente su rostro estaba pálido y desgastado. ¿Realmente pudo caer en un coma si lo hacia una vez más? De todas maneras, aún se reusaba a creérsela del todo. Es que, ¿cómo quieren que lo acepte así como así?

De un momento a otro, Chanyeol cruzó la habitación con tan sólo dos grandes zancadas y se posicionó a un lado de Baekhyun con una extraña intensión de relajar la situación. Colocó la mano sobre su hombro y palmeó el lugar un par de veces compartiéndole una dulce sonrisa. Incluso invadió su espacio personal.

—Vamos, simplemente escúchalo. Si no lo haces, no sabrás lo que está sucediendo aquí —repentinamente se acercó más cerca de lo que una persona normal lo haría. Baekhyun juraba que los labios del chico estaban a dos centímetros de los suyos. Incluso el maldito podía sostener su mirada a esa distancia—. Si no lo hacen, este hyung va a impacientarse y descargar toda su ira conmigo —susurró hacia él y puchereó—. También se va a poner completamente insoportable y nos hará entrenar el triple, te diría el doble, pero eso ya lo hace —se rió con suavidad.

Baekhyun quería golpearlo en la cara por agarrarle tan rápido la confianza.

—¿Byun Baekhyun? —el directo instó.

Fue él quien se tuvo que alejarse ya que parecía que ese alto no tenía la intención. Apenas y logró respirar de nuevo —¿ya cuántas veces se le había ido la respiración?— y carraspeó sonoramente.

—No es como si tuviera opción de todos modos, ¿verdad?

Jungsu sonrió.

—Exactamente.

---

Fue llevado fuera del edificio en donde había terminado. Por lo que supo, era una de los dormitorios del lugar. A su derecha y un poco más al frente iba Jungsu caminando amenamente y arrastrando una gran capa creyéndose la gran cosa. A su izquierda y levemente más atrás, iba Chanyeol quien tarareaba y era callado por Jungsu cada dos minutos porque ese gigante parecía que no podía estar mucho tiempo en silencio.

Por otro lado, Jongin fue dejado en la habitación de Kyungsoo. Jungsu pareció darse cuenta que el chico con fuerza inhumana no tenía compañero de habitación y qué mejor que tener ya allí a un chico desmayado y dormido en el lugar. Obviamente —como Baekhyun se lo esperó— Kyungsoo peleó intensamente el hecho de compartir el lugar con un chico extraño como él. El director le había preguntado por qué era extraño y el menor simplemente se había inhibido, vuelto a tocar sus labios y fundirse en lo más profundo de sus pensamientos. También, Baekhyun casi imploró que no, que Jongin era su amigo del dedo meñique y que debería estar con él un veinticuatro siete, pero Chanyeol saltó diciendo algo como que no eran del mismo 'estado' y que él debería quedarse en la habitación frente a la suya sólo porque sí.

—Muy bien —tras cinco minutos de caminata y ya afuera del edificio, habían llegado a un jardín central. Éste parecía dividir dos grandes secciones de edificios—. Como puede ver, Byun, está éste edificio —señaló al de la derecha del que habían salido y tenía un aspecto más limpio— y éste otro —ahora fue el de la izquierda, que se veía más desgastado, pero no tan mal.

Baekhyun bostezó de manera desinteresada.

—Ajá, ¿y? —nunca iba a perdonarle a esos locos privarle de sus hermosos Los Ángeles.

—El de la derecha, en donde se encuentra su amigo, es el edificio Físico. Allí se encuentran las personas quienes tienen los dones relacionados con su cuerpo y mente —Baekhyun miró con recelo. Bueno, tenía sentido. Ese Kyungsoo con fuerza inhumana y Jongin con teletransportación—. Y el de la derecha, en donde pertenece Chanyeol y probablemente usted, es el Elemental. Allí se encuentran las personas con dones relacionados con la naturaleza. Como yo, por ejemplo, aunque soy el director y ya no duermo allí, pero es donde pertenezco. Por si no lo has intuido ya, soy viento.

Sí, idiota, recuerdo cómo casi me haces volar la cabeza. Baekhyun rodó los ojos.

Baekhyun miró a Chanyeol estudiándolo un poco. Se preguntó qué tipo de poder tenía ese chico quien parecía un poco torpe con cada movimiento. Al sentir la mirada, Chanyeol sonrió horriblemente y Baekhyun simplemente le correspondió con una muy, muy forzada sonrisa.

—Pero, de todos modos —Baekhyun regresó a Jungsu aún un poco temeroso de la sonrisa del otro—. ¿Qué es este lugar? ¿Qué es Exodia en sí? ¿Por qué Jongin y yo terminamos aquí? ¿Qué mierda son las Hecks y por qué todo el mundo tiene miedo de ellas? ¿Qué exactamente es lo que hacen aquí? Y, lo más importante, ¿cómo vuelvo a casa?

Jungsu caminó un poco más, alejándose de los edificios y dirigiéndose a lo que parecía ser un límite. Ahora que Baekhyun estaba más lejos del lugar pudo ver casi con detalle todo: en el edificio Físico a parte de los dormitorios había tres secciones adyacentes en el lugar. Había una gran cadena de grandes árboles alrededor y algunos de ellos tenía pequeñas cabinas en donde parecía haber gente —Baekhyun no entendía cómo llegaban allí si no había escaleras ni nada por el estilo— había también algunos terrenos rocosos y algunos cultivos. Por el otro lado, en el edificio Elemental, era más un completo caos: había un gran lago —ese que se veía desde el aeropuerto o lo que fuera—, ese espacio de cristal (o hielo), un edificio un poco más aparte con muchas quemaduras y cosas caídas y una gran bola de extraña energía de colores pasteles. Parecía algo así como un extraño portal y Baekhyun sintió esa sensación de tener que ir y ver qué pasa con él.

Mientras más se alejaban, más veía: había lo que parecía ser un cementerio un poco muy grande.

—Cuidado —sin saber cuándo, sintió una mano rodeando su brazo deteniendo su paso.

Miró hacia Chanyeol que era quien lo había sostenido. Se relamió los labios y miró alrededor. Sus ojos se abrieron cuando se encontró con lo que definitivamente era un límite y había una gran capa de energía que cubría el lugar. De repente se sintió dentro de una bola de nieve, era como si estuvieran encerrados dentro de una.

—¿Qué es esto? —intentó tocar, pero Chanyeol rápidamente lo alejó con fuerza—. ¡Hey!

—No tocar —Baekhyun no recordaba cuán grave era la voz del chico—. Es mejor que hagas caso a lo que dicen los letrero, novato —sonrió al final.

—Primeras dos preguntas —Jungsu interrumpió el momento mirándolos con el rabillo del ojos—. Exodia es esto. Todo lo que estás viendo. Para ponértela simple, tú vienes del mundo ideal creado por una sociedad a parte de la nuestra. Es como si alguien hubiera duplicado el planeta tierra, partirlo unas ocho veces a la mitad y dejarnos este espacio. Tercera pregunta —Jungsu pasó la vista a él—. Ustedes dos se subieron al avión elegido y se sentaron en los asientos elegidos para ser parte de nuestro mundo, aunque bueno, he de confesar que nuestros cálculos fallaron un poco. Pensamos que serían la familia Geum en donde hay puros niños pequeños, pero algo sucedió. No obstante, no hay cambios, así que probablemente tuvieron muy mala suerte —el hombre se encogió en hombros. Mala suerte, el segundo nombre de Baekhyun, genial—. Cuando un niño desaparece en los aeropuertos, cosa que sucede mucho, no es porque alguien lo secuestró ni nada por el estilo. Es porque fue llevado a Exodia, aquí. Cuarta pregunta. Las Hecks son, precisamente joven Byun, nuestro mayor miedo y con quienes luchamos. Nuestros poderes no son más que para combatir con esas horrendas bestias que intentan destruirnos cada semana y casi nunca tenemos resultados favorecedores. Su única misión es matar cruelmente a cualquiera quien esté aquí —Jungsu suspiró y pareció ver melancólicamente hacia el cementerio—. Aún no sabemos sus motivos. Probablemente simplemente sea su naturaleza.

Baekhyun tenía un completo caos en su cabeza, apenas lentamente podía ingerir todo lo que le estaba diciendo. Sintió un extraño escalofrío correr por todo su cuerpo y él miró en cambio hacia fuera de esa bola de nieve —así lo llamaría a partir de ahora— encontrándose con borrosas imágenes de tierra y planetas.

—Quinta pregunta. Supongo que nuestro objetivo aquí es sobrevivir. Así como los humano en la tierra lo hacen trabajando, acá es luchando por proteger nuestras tierras. Además, somos una masa totalmente masculina —Jungsu se acercó un poco a él al darse cuenta que Chanyeol estaba un poco ocupado en su teléfono. El director miró a Chanyeol asegurándose de que no mirara y se agachó un poco para llegar a la altura de Baekhyun—. Aquí no existen las mujeres, probablemente yo sea uno de los poco quienes conocen este término. De hecho, hay muchas palabras y acciones que la gente de aquí no conoce y, señor Byun, preferiría que se quedara así. Cosas como malas palabras o todo lo relacionado con las relaciones sexuales jamás fueron enseñadas aquí. Para ellos lo más lejos que llega el amor es a una relación de amistad. Lo más cercano físicamente para ellos es un abrazo. Así que no hay nada más.

Eso sí que sorprendió a Baekhyun. ¡¿Acaso eso era posible?!

—¿Cómo demonios se reproducen aquí si no hay mujeres? —preguntó de manera casi ofendida.

—No nos reproducimos, señor Byun. Ya se lo dije, la gente llega aquí por elección de la naturaleza y normalmente son niños entre meses de edad y los cinco años. Sexta pregunta. La única forma de salir de aquí es eliminar a las Hecks antes de que ellas nos terminen a nosotros. Es todo.

Lo miró con incredulidad.

—Espere —Baekhyun levantó la mano y cerró los ojos—. Me está diciendo que estoy atrapado en un lugar en donde hay bestias asesinas sin piedad, un lugar en donde no saben lo que es el amor y ¡malditamente que no tengo oportunidad de perder mi virginidad aquí! ¡Espere! —chilló de nuevo—. ¡¿Aquí hay puro niño virgen?! ¡¿Toda esa bola de chicos calientes?! ¿Ni siquiera besos? ¿No se han hecho jamás ni una jaladita?

Jungsu pareció un poco incómodo con lo último, pero simplemente carraspeó y asintió.

—Nunca, señor Byun. Y, lo repito, preferiría que se quedara así.

La mandíbula de Baekhyun casi cae al suelo. ¿Qué?

—¿Jaladita? —Baekhyun dio un pequeño brinco cuando escuchó la gruesa voz desde atrás—. ¿Jalar qué? ¿Qué es un virgen? ¿Qué clase de palabras son esas? —nuevamente, Chanyeol estaba peligrosamente cerca.

Definitivamente no les enseñaron nada acerca del espacio personal y no era para menos, Dios, si esos chicos no sabían nada de nada. Ni siquiera lo teórico. ¡¿Cómo vivían?! Oh, Jongin iba a morir. ¡Ni siquiera había chicas para él!

—Oh —Baekhyun volvió a mirar a Chanyeol y éste abrió sus enormes ojos hacia él—. Estás brillando.

Baekhyun enarcó las cejas y después Jungsu se acercó con las cejas alzadas y una mano en su barbilla.

—Vaya. Luz. Eres luz.

Por un momento, Baekhyun miró el rostro de Chanyeol quien extrañamente ya no sonreía, parecía un poco preocupado de hecho. Pasó la mirada hacia los dos, Jungsu con rostro pensativo y Chanyeol un poco en pánico.

—¿De qué están hablando?

—Tu poder es la luz —Jungsu lo miró a los ojos y asintió sin detenerse—. Definitivamente no fue un error después de todo —eso último lo susurró.

Baekhyun se miró las manos y sí que había algo de brillo en él. ¿Acaso era Edward? ¿Era un vampiro? Eso sería cool. Y le alegraría, tal vez un poquito, de no ser por la seria mirada ya convertida en miedo que le estaba mandando Chanyeol.