Platica amena.
Jimin
Debería de estar molesto con él, no ha querido tocar el tema de Seokjin, se que no es sencillo para él, fue su mejor amigo por muchos años, pero necesito que me diga todo lo que siente, que exprese su dolor, su ira, alguna cosa, pero se ha cerrado, siempre me cambia el tema de conversación, y busca una manera de que yo sea siempre él que hable.
Por eso debería de estar furioso, meterlo en la habitación y no dejarlo salir hasta que hable. Sin embargo, estoy aquí bebiendo una taza de te frente a mi laptop, mientras tengo su estúpida y sensual espalda ancha desnuda en mi campo de visión.
Estábamos de vacaciones de la escuela, por lo cual pasábamos mucho tiempo juntos, aunque estando él en casa, no me he podido controlar y quiero estar todo a cada rato encima de él. Se supone que debo de estar trabajando en el siguiente libro, pero ese tipo es una gran distracción aun sin hacer nada.
Lo vi removerse en la cama, se estiro un poco haciendo que los músculos de sus brazos se tensaran, podía ver muy bien ese abdomen duro y cuadrado cuando se sentó, su cabello revuelto de manera salvaje. Se trono el cuello antes de abrir los ojos.
—Deberías de venir con un letrero de advertencia pegado en la frente —bebi de nuevo mi te —son las ocho de la mañana y ya tengo una erección.
Sonrió de lado aun medio dormido y fue mi limite, deje el te en la mesita de noche y subí a la cama, quedando encima de él.
—¿Quieres jugar? —me moví un poco sobre de él, Jungkook mordió mi cuello.
—¿Entonces no iremos a ver a tu sobrino?
Me separe inmediatamente.
—Andando.
—Cariño —dijo con voz ronca —te quiero en la ducha en cinco minutos.
Después de que la ducha mas tardada del mundo, salimos camino a ver a Hoseok, ya estaba en casa con su bebe. Jungkook le compro como mil cosas, se había enamorado del pequeño desde que lo vimos en el hospital.
Cuando tocamos la puerta Yoongi nos abrió con mi tesoro en sus brazos.
—Dámelo yo lo cargo.
—Alto ahí, ¿Tienes las manos limpias? No tocaras a mi príncipe con manos sucias.
—¡Ya dámelo!
Se lo quité de los brazos y lo apreté contra mi, estaba despierto y sus ojitos pequeños me miraron de manera tranquila.
—¿Cómo es que te fijaste en esa cosa?
Yoongi saludo a Jungkook con gusto.
—En realidad es muy adorable.
—Conozco un oculista muy bueno.
Yo pase hasta donde estaba Hoseok, su aspecto de ama de casa me encantaba, lucia aún más radiante que cuando estaba embarazado.
—¿Ya dejé de ser tu alma gemela? —me pregunta sin mirarme.
—Eres mi alma gemela que parió a un nuevo amor de mi vida.
—Eso me reconforta.
—Amor, Jungkook trajo pañales y ropita como para un año, es oficial dejare de trabajar, que Jungkook nos mantenga.
—No debiste—Hoseok abrazo a Jungkook —en verdad te lo agradezco.
—No es nada, el pequeño me robo desde el día del hospital, además a Jimin le encanta comprar cosas para él también.
Estuvimos almorzando y después Yoongi se fue a trabajar. Jungkook se encargó del pequeño Yeonjun, estaba dándole de comer mientras le arrulla dijo que para que platicara tranquilo con Hoseok. Pero tanto Hobi como yo estábamos hipnotizado viéndolo.
—Será un papá perfecto, puede que sea muy pronto pero, ¿has pensado en un futuro con Jungkook?
—Si, el muy maldito se ha encargado de meterse en mi corazón, si deseo estar con él en todo sentido, es horrible.
—Terrible, cuando una persona se vuelve parte del corazón es lo peor y más maravilloso que nos puede pasar.
—Estúpido Jeon Jungkook ahora quiero darle todos los bebés que me pida.
Un pequeño balbuceo nos hizo quedar en shock, Yeonjun estaba haciendo sonidos adorables mientras Jungkook le sonreía.
Jungkook.
Tenia días con dolores terribles de cabeza, siento que es algo complicado todo lo que paso, Jimin me apoya demasiado en todo lo que puede. No mentiré. Mi estado de ánimo no ha sido el mejor.
Pero Jimin se ha vuelto todo lo que necesito.
Ahora me vine a quedar a mi departamento porque el no ha podido trabajar en absolutamente nada, quiere mi atención y yo encantado se la doy, pero debo dejarlo trabajar, al igual que debo de preparar las cosas para él regreso a clases.
Empezó a sonar el teléfono de manera insistente, no tenía el número registrado así que dude en contestar, pero era demasiada la insistencia.
—¿Jeon?
—¿Kim?
—Perdona, no sabía a quien más marcarle, estoy en un bar y no me dejan usar mi auto.
—Dame la dirección.
En cuanto llegue el seguía acostado en la barra del bar, le toque el hombro para ayudarlo a caminar. Aunque soy un hombre fuerte me fue difícil hacerlo. Se quedo dormido en el auto así que lo lleve a mi departamento, lo deje en el sofá y fui por unas sabanas y almohadas para que se durmiera.
Al regresar escuche su llanto, me quede quieto en la entrada de la sala. Pero me escucho y se limpió las lágrimas.
—Creo...creo...que es mejor que me vaya.
—Aun estas muy ebrio, quédate ahí, no me molesta, no creo que sea posible de todos modos que te puedas mover mucho.
—Siento que te debo de pedir perdón.
Negué con la cabeza mientras le pasé las cosas.
—No existe culpables aquí, fue una situación inesperada.
Rio con un poco de ironía.
—Eres un gran sujeto Jungkook —se froto el rostro —por eso nunca pude sacarte de la mente de Seokjin, tu casi mueres y aun así...
—No hablemos de ese tema por favor.
Me levante no es un tema que desearía tocar con él.
—¿Por qué no? Necesito escucharlo de ti, y soy el único que podría entenderte un poco, tu has perdido a tu mejor amigo y primer amor, yo perdí al amor de mi vida y futuro esposo —se volvió a cubrir el rostro — se que tienes a Jimin para apoyarte, pero no es lo mismo, no lo es.
—En realidad, no recuerdo mucho, no quiero verlo como una experiencia traumática, es algo muy diferente.
—¿Traición? —asentí — supongo que no has hablado con Jimin de esto —me quede en silencio —es entendible, no quieres que piense que tu relación con Jin aun era de manera romántica.
—No lo pienso denunciar tampoco, no podría verlo encerrado, fueron muchos años de amistad, todo el tiempo fue buena nuestra relación, es mi amigo.
Sentí algunas lagrimas rodar por mis mejillas, Namjoon me observo y se recostó en el sofá, para después mirar el techo de la sala, se quedo en silencio un momento antes de dar un gran suspiro.
—Ayer me lo tope, estaba saliendo de una clínica —sentí una especie de escalofrió —Jeon, Seokjin está en cinta, tendrá un bebe mío y aun así no desea verme.
Capitulo tranquilo, pero ustedes saben que no deben de confiar en mi...
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