Jungkook

Debo decir que admiro mi fuerza de voluntad, el solo hecho de poder haber olido el shampoo de su cabello me descoloco un poco, tal vez antes lo tenía cercas pero ahora es un contexto muy diferente, estoy siguiendo el consejo de Jin de darme a desear, aunque en realidad no me hubiera importado tomarlo en la sala de maestros, pero debo tener prudencia también, estamos en el trabajo, no es como si fuera a romper mi seriedad aquí, solo porque me guste el profesor Park.

—Siento toda esa aura de buen humor a tu alrededor —Seokjin se sentó a un lado de mi en la cafetería —pero a la vez me molesta, es raro verte así, te desconozco.

—Lo dices como si fuera un amargado 24/7 —bebí de mi botella de agua.

—¿Tienes idea de cómo te dicen los alumnos? —decidí ignorarlo — Jeon el tirano, dicen que no les tienes piedad en las evaluaciones y que tampoco con los temarios.

—Soy el que menos tiene reprobados, así que mi sistema de enseñanza es el adecuado.

—Pues tus alumnos tienen miedo de que les arranques la cabeza.

—¿Las ponga en una lanza y las deje como advertencia en mi salón?

Seokjin hizo un aman de escalofríos, y después se robó mi plato de fideos.

—Deberías de decirle a Namjoon que no vives de amor, también debería de alimentarte, así dejas de robarme mi comida.

—Soy tu mejor amigo, también debes alimentarme por eso, además solo te iba a robar un poco, tengo un herido en la enfermería, se cayó en educación física, y debo regresar a cuidarlo en lo que llegan sus padres.

—Ven aquí.

Le tome el rostro y limpie la comisura de sus labios con una servilleta, después le quite mi plato, el arrugo la nariz y después me mostro la lengua antes de regresar a la enfermería.

—Creo que el enfermero es muy capaz de limpiarse la boca el solo.

El profesor Park paso a un lado de mi mesa mirándome con algo de ¿Enojo? Pero no dijo mas solo se fue a sentar junto con el profesor Jung, metía los palillos a su plato de manera agresiva sin dejar de verme. Le sostuve la mirada un momento antes de volver a mi plato de comida, fue mejor terminar mi comida y regresar a mi salón.

A la hora de salida me quede un poco más pues debía de acomodar los trabajos que me había entregado, así que tenía una pila de carpetas en el escritorio, me había quitado el saco y la corbata, ya no necesitaba tanta formalidad, la escuela estaba prácticamente vacía, Seokjin me dijo que se iría con Namjoon a su casa, así que estaba tranquilo por mi amigo dramático.

Escuche que se abrió la puerta del salón.

—Si viene a entregar algún trabajo, le informo que es algo tarde, ya no recibo nada —hable pensando que era un alumno.

—Vamos, profesor Jeon, vengo a ganarme lo que me prometió.

Esa dulce voz melosa, me hizo levantar la vista de los trabajos, y ahí estaba el profesor Park con una mirada algo tímida y coqueta.

—¿Y qué es lo que le prometí según usted?

—Su número —se acercó al escritorio sentándose en una esquina enfrente de mi —pensaba mandarle otras fotos por él, pero en creo que lo puedo hacer mejor.

La verdad me encontraba muy nervioso, pero trate de no demostrarlo, sobre mi barbilla mientras él me observaba de arriba abajo, en eso hizo algo que casi hace que me vaya para atrás, se arrodillo frente de mí.

—Sabe una cosa profesor Jeon —sus manos descansaban en mis muslos, pero subían y bajaban de manera lenta —cuando me envió esa foto, lo único que atrapaba mi atención era ese bulto que se veía, así que deseo comprobar que sea usted y que no me esté tomando el pelo.

—¿No confía en mi palabra?

—Usted es un matemático, debería de pensar que los hechos son mucho mejor cuando se comprueban —ahora si me permite —se metió entre mis piernas quitando el cinturón de manera lenta, debería detenerlo, pero no quiero — si logro hacerlo correrse en menos de cinco minutos me dará su número.

Levante su rostro y delinee sus labios con el pulgar, debo decir que tenerlo en esta posición ya me hacía sentir duro.

—¿Y no es así?

Chupo mi dedo con descaro, y sujeto mi mano contra su rostro.

—Supongo que deberé buscar otra manera de ganármelo.

No tardo más en sacar mi miembro de entre los pantalones, aunque me encontraba algo excitado aún no estaba totalmente erguido.

—Es aún más grande de lo que imagine.

Se relamió los labios y lo tomo con una de sus manos, lamio el tronco haciéndolo a un lado metiéndolo a su boca poco después, sus labios se veían tan perfectos alrededor de mi miembro, que mi miembro empezó a recibir la sangre que necesitaba para la erección buscada por el doncel entre mis piernas.

Cuando sintió que estaba más hinchado sus pequeños ojos me observaron, lo saco de su boca, pero siguió masturbando con la mano.

—Pensé que usted se cuidaría de que nos vieran en la escuela.

—Profesor Park, si tengo una reputación en esta escuela es que no deben de molestarme mientras evaluó, preocúpese que ya van dos minutos y apenas ha logrado sacarme una erección.

—Es demasiado engreído —sonrió y lo volvió a meter a su boca, esta vez más profundo haciendo que los sonidos de ahogo se hicieran presentes.

—¡Demonios!

Jimin lo saco de nuevo, pero solo se concentró en la punta, sujete su cabeza para meter los dedos entre su cabello, esto no es esperarme, tampoco es darme a desear, sabe perfectamente cómo mover sus cartas y yo quiero que lo haga.

—Profesor Jeon, no tiene idea de las ganas que tengo de montarlo ahora mismo, me siento muy excitado.

—Esto lo está haciendo para que le de mi número, ¿Qué cree que le pediré para dejarlo montarme?

Volvió a chupar, yo no soportaría más, pero ya no era necesario resistirme, los cinco minutos había pasado y él había perdido, me permití pararme de la silla para poder sujetar su cabeza y poder follarle la boca algo agresivo, sus manos apretaban mis muslos, sentí el palpitar y quise sacarlo de su boca, pero él lo retuvo, me dejo correrme en su garganta, viéndolo como lo tragaba todo sin asco alguno.

Escuche de nuevo la puerta y el pánico se apodero de mí, me senté y empuje a Jimin al fondo del escritorio.

—Profesor Jeon.

—Director Seon.

—Qué bueno que lo encuentro aun, necesito ver si me podría ayudar con los preparativos del festival deportivo, sé que los alumnos son muy bien portados cuando usted está.

Trataba de regular mi respiración, mientras lo escuchaba, sentí la mano de Park sujetar mi miembro de nuevo bajo el escritorio, pero no la movió.

—Claro Director, sabe que cuenta conmigo.

—¿Algún profesor que quiera que lo asista?

—Me parece que el profesor Park es muy popular en estos eventos, creo que ayudaría con las promociones.

—Bien creo que aún estaba por la escuela también, iré a decirle.

El director salió del aula y Park debajo del escritorio.

—¿Estas loco? Ese evento es muy pesado, siempre trato de evitarlo, no te voy ayudar.

Lo jale hacia mí y le tome el mentón, me acerque a sus labios mirándolo a los ojos.

—¿Quieres mi numero o no?

—Eso...eso —podía sentir los latidos de su corazón contra mi pecho —en verdad es muy engreído.

Trato de besarme pero no lo deje, me acomode los pantalones y regrese a mis carpetas.

—Anote su número en mí en esa lista, si veo su nombre en la lista de maestros que ayudaran al festival, le marcare.

Me quito el bolígrafo de la mano y a regañadientes empezó a anotar en la hoja, salió molesto del salón, pero de alguna manera me sentía con el poder necesario para manipularlo, agradezco al director que llegara porque de lo contrario lo tendría contra el escritorio ahora mismo.

Jimin.

Me siento furioso, humillado, maldito Jeon Jungkook, jamás me había costado tanto acostarme con alguien, sé que le gusto y me desea, pero su estúpida actitud engreída no me deja provocarlo más.

Ni siquiera sé porque estoy haciendo los malditos carteles para las actividades del festival.

—Se te va quedar el ceño así —Hoseok me golpeo entre las cejas —¿Qué tienes?

—Ese maldito dijo que me llamaría si veía mi nombre en los ayudantes del festival, y no lo ha hecho, al contrario, se la ha pasado ayudando al maldito enfermero con sus actividades. Si tanto le gusta porque no se lo quita a Namjoon.

Arroje el rotulador contra el cartón, me cruce de brazos mientras veía al enfermero subirle las mangas de la camisa de vestir mientras el torcía los ojos.

—En verdad me tienes muy sorprendido, a estas alturas creí que ya te habrías acostado con él.

—No he podido pasar del oral que le hice la última vez, pero de ahí nada, es mas no me contesta los mensajes de Instagram.

—Han sido semanas de evaluaciones, él es muy estricto con todo eso, nadie te manda andar tras el profesor más dedicado de la escuela.

—Si su miembro no fuera tan delicioso, aun se me hace agua la boca de recordar cómo se siente dentro de mi boca.

Hoseok me arrojo un papel y me miro algo feo.

—No necesito detalles.

Lo mire y sonreí, me incline para acariciarle la panza que ya se notaba un poco más.

—Mi sobrino no se hizo con florecitas, hubo un pene pálido involucrado, no me vengas con tonterías —se rio de manera nerviosa —ahora deja que siga con eso no debes de estar agachado tanto tiempo.

Seguimos haciendo los carteles, termine lleno de pintura y pero me sentí satisfecho con el resultado todo quedaba muy bonito, al menos el festival deportivo tendría carteles decentes este año, y no todos horribles como el profesor Lee suele hacerlos.

Escuche algunos murmullos, además de que se sentía un ambiente algo animado, los estudiantes se juntaron al centro.

"Por eso me gusta venir"

Una de las chicas hablo entre chillidos, yo no sabía la conmoción hasta que mire al profesor Jeon que se había ido a cambiar, tenía una camisa deportiva con la cual se le notaban los pectorales marcados, sus brazos estaban apretados en las mangas, y el jogger que usaba a juego con la camisa solo acentuaba sus piernas musculosas.

—Voy a estar anotando a los que van a participar, por favor hagan una línea para que me vayan diciendo sus nombres.

—Jimin.

La mano de Hobi mi saco de mi trance, mire que traía una bolsa en la mano.

—¿Qué pasa?

—¿Qué mirabas?

—Nada —mire de nuevo la bolsa —¿Qué es eso?

—Ropa limpia, estas hecho un desastre, ve a ducharte para llevar esto a la sala de maestros y tener todo listo para mañana.

Solo asentí, seguí mirando al profesor que levanto su vista y esos enormes ojos negros me miraron por unos segundos. Cercas a las duchas de los alumnos el profesorado tenía las suyas, me metí quitando toda la ropa llena de pintura dejando todo en una de las banquitas, abrí la regadera y dejé que agua tibia bajara mis pensamientos indecentes sobre el profesor en traje deportivo.

Escuche que mi teléfono empezó a sonar, cerré la regadera y puse una toalla en mi cintura, camine hasta la banca donde había dejado mis cosas, tome el teléfono y de nuevo empezó a sonar con un número desconocido, conteste y la voz dentro del teléfono también estaba junto a la puerta.

—Se ganó el numero Profesor Park.

Me observo de arriba abajo y me quede helado tenía cierta pena por la manera en que sus ojos recorrían mi cuerpo, no sabía porque me sentía así, pero la sensación de que él me esté mirando casi desnudo hacia que mi corazón latiera demasiado rápido.

—¿Tiene algo que hacer más tarde?

*Chillido de emocion*