Namjoon

Desde el primer momento que mire a Seokjin quede perdido, tiene una mirada tan linda, sus ojos brillan siempre y cuando sonríe sus labios gruesos se arrugan de una manera tan divina que es tan simétrica y armoniosa. Nunca había visto a un doncel tan hermoso como él.

Sentía que me faltaba el aire apenas me acercaba y cuando su personalidad extrovertida se asomo me dejo perplejo mi corazón fue absorbido con rapidez y me deje llevar sin temor alguno.

Pero Jeon Jungkook siempre estaba a su lado, notaba como lo buscaba todo el tiempo, en los almuerzos se la pasaban juntos, no pensaba acercarme, se notaba que no se podía entrar en la relación de los dos, aunque nunca los vi besarse, me confirmaron que no eran pareja, pero aun así el aura que Seokjin despedía cerca de ese sujeto era tan melosa que debías ser ciego para no saber que se gustaban.

Pero mi torpeza me hizo terminar en manos del destino. Había roto un estante de la librería y me habían caído encima algunos de los libros incluida una enciclopedia, la cual me dio de lleno en la frente abriéndola un poco, cuando llegue a la enfermería sus ojos se abrieron de par en par.

—Creo que fui un poco descuidado.

—¡Por dios profesor Kim! —me ayudo a sentarme y fue corriendo por su kit de primeros auxilios — ¿Qué estaba haciendo?

—Un poco de investigación, y creo que no me fije que había un tornillo suelto del estante.

Empezó a limpiar la sangre, se concentro en observar la herida y yo en observarlo a él, se que estaba diciendo algo, pero la verdad no preste ningún tipo de atención pues yo estaba admirando su belleza y ese delicioso olor a vainilla que despedía su piel. Hasta la fecha no sé qué me dijo.

—No va a necesitar puntos, le daré algunos analgésicos y también una pomada, mantenga la herida limpia, ¿Tiene alguna duda?

—Si, ¿Tienes libre el fin de semana?

Parpadeo algunas veces y una extraña risa, me atrapo, sacudió la cabeza y suspiro.

—¿Siempre es tan directo? —se relamió los labios —pensé que usted no salía con el personal de la escuela.

—Me estuvo investigando.

—Jungkook me lo dijo, le pedí que me diera dato de usted.

—Que conciencia, yo pedí datos de usted.

Después de nuestra primera cita todo fue más sencillo, podía hablar con él por horas y jamás me aburria, aunque la mayor parte del tiempo yo lo escuchaba, pues habla demasiado, sin mencionar que exagera los gestos al platicar.

La primera vez que tuve el placer de probar sus labios, me eleve al paraíso, cuando su cuerpo estuvo en mi poder, sabía que no quería a nadie más, que no podría desear otra figura que no fuera él.

Pero mi trabajo a veces me absorbía y no podía verlo, lo deje plantado varias veces y su interés en mi disminuyo lo pude notar, mas porque corría a brazos de su mejor amigo para consolarse, debo de aceptar que Jungkook siempre se mantuvo al margen, no se inmiscuyo más allá de la relación de amistad que tenía, y trato siempre de aconsejarme el cómo mantenerlo feliz.

—¿Nunca estuviste enamorado de Jeon?

—Lo estuve, pero él jamás se intereso en mí, siempre me dejo irme a brazos de otros hombres, no pase nunca de ser su amigo.

—Eso te decepciona.

—No, pues aún está conmigo.

Tal vez esa respuesta fue la que me hizo pedirle matrimonio, sentía que lo perdía, que lo que sentíamos al principio se disipo tan pronto Jungkook encontró pareja, las platicas ahora eran sobre la relación que su amigo tenia, el como no estaba de acuerdo, el como no deseaba verlos juntos, la rabia que le daba no pasar tanto tiempo con él.

Aun esperaba que se olvidara de eso y siguiera viéndome solo a mí, yo en realidad esperaba que buscara consuelo conmigo, no esperaba esto, no quería creerlo.

—¡Si Jungkook no te metió en la cárcel, al menos te dejare sin dientes maldito enfermo!

Jin estaba en el suelo, después del golpe que le había dado Jimin con el puño cerrado, Jungkook lo tenia sujeto por la cintura viendo con tristeza a mi Seokjin.

—¿Qué está pasando?

—¡Tu maldito prometido violo a Jungkook!

—¡No es una violación, ambos lo deseábamos!

Se que es físicamente imposible, pero en este momento alguien apretaba mi corazón tan fuerte que dolía.

—Jinnie, ¿Cielo?

—Namjoon, lo siento es que ambos estábamos tomados y creo que me sentía en mis días fértiles.

—¿Días fértiles? CASI LO MATAS.

Jimin escupió con los ojos llenos de lágrimas.

—Jimin vámonos, debemos ver a Hoseok.

—¿Todo esto es una broma verdad?

Sentí que el mundo se derrumbaba, solté las bolsas de compras y fui a sujetar a Jungkook por la camisa, el me esquivo la mirada.

—Dime Jeon, ¿Es una broma?

—¡Suéltalo! —Jimin se colgó de mi brazo —en todo caso quien te debe alguna explicación, es la basura que está en el suelo.

No se en que momento las lágrimas recorrían mis mejillas, Jin se había levantado sosteniéndose la mejilla.

—Nam sabias que yo sentía algo por Jungkook, él también lo siente por mí, las cosas pasaron sin darnos cuenta.

—Estas enfermo —Jimin tomo del brazo a Jungkook para tratar de separarlo de mí.

Solté a Jungkook, camine hacia Jin y acaricie su rostro.

—Amor, esto se puede solucionar, se que el calor de un doncel los hace actuar por instinto —seguía llorando —podemos olvidarlo, podemos irnos.

—Nami, el también me ama lo sé, solo que Jimin se interpone.

—¿Y lo que yo siento Jin?

—Encontraras a alguien mejor, sé que lo harás.

—¡No quiero encontrar a nadie! ¡te quiero a ti!

—Pero yo ya no quiero estar mas contigo, luchare por el amor de Jungkook, espero lo entiendas —se quito el anillo de compromiso y me lo entrego —recogeré mis cosas después, también dejare de trabajar en la escuela, necesito organizar mis cosas.

Se fue, me dejo, deseaba morirme, quería hacerlo, no puede pasarme esto. Aprete tanto el anillo en mis manos que los nudillos me dolieron, llore hasta el cansancio, quería borrar este día, que todo lo que dijeron no era verdad, que en realidad estoy soñando, y mañana vere a Jinnie acostado a mi lado, sonriéndome diciendo "buenos días Namu"

¿Creian que no podian odiar mas a Seokjin?

¿ACASO ME ESTAN RETANDO?

Consolemos a Namu.

Samm te amo. No me mandes a dormir al patio.