Capítulo 25. |▪Tory vs Loki▪|

Ambientación: The Avengers.

Advertencia/Nota: Ninguna.

—Tenemos civiles atrapados allá arriba.—señaló Barton con severidad, mientras Natasha, Steve y él se agacharon para resguardarse al costado de uno de los cientos de taxis abandonados en medio de las calles. Los estruendos de cosas explotando y los zumbidos de los chitauri volando por encima de sus cabezas se anteponían a los gritos lejanos de civiles horrorizados. 

Steve asomó la cabeza por el techo del taxi y vio como las naves de los chitauri arrasaban por el cielo haciendo explotar todo a su paso en las calles, mientras las personas corrían de un lado a otro en un estado de completa conmoción.

—Son blanco fácil allá.—espetó seriamente, mientras Romanoff se asomaba y le disparaba a los chitauri que aterrizaron a pocos metros de ellos luego de saltar de sus naves, armados con sus lanzas y sus armas. Clint se adelantó andando en cuclillas hasta resguardarse tras un taxi más cercano a sus atacantes y comenzó a dispararles con sus flechas.

—Déjanos esto a nosotros.—pidió Romanoff con seguridad, a lo que Steve la observó un poco dubitativo. El Capitán volvió a mirar por encima de su hombro al escuchar más gritos de civiles.

—¿Crees que los puedan detener?—preguntó entonces, a lo que Clint lo observó subiendo la punta de su labio.

—Capitán.—dijo, enseñando su arsenal de flechas—Para mí será todo un placer.

Clint se puso de pie y disparó limpiamente contra uno de los chitauri, dándole justo en la cabeza y haciendo que el arma que tenía en sus manos disparase hacia los costados donde estaban sus aliados. Natasha disparó cubriendo la espalda de Steve mientras este salía de su escondite y se precipitaba por el puente, saltando hacia la calle y aterrizando sobre un autobús abandonado, siendo perseguido por disparos de chitauri que le pisaban los talones y hacían explotar el metal del techo por donde corría, obligándolo a saltar hacia los autos y luego hacia la calle mientras Natasha cubría a Clint para que este pudiese ayudar a los civiles atrapados en el tráfico.

En la siguiente calle, decenas de autos de policía habían estacionado unos junto a otros, con sus efectivos disparando hacia los chitauri que sobrevolaban sus cabezas. El oficial Saunders llegó corriendo a toda velocidad entre los patrulleros hasta llegar con su superior, el sargento Silva.

—¡La Guardia Nacional podría tardar más de una hora!—informó Saunders.

—¿¡Guardia Nacional!?—repitió Silva, incrédulo, mientras él y Saunders se agachaban rápidamente cuando un ataque de energía chitauri pasó por encima de sus cabeza e hizo explotar un patrullero—¿¡No sabe el ejército lo que está pasando!?

—¿Nosotros sabemos...?—musitó Saunders con una clara expresión de aflicción en su rostro, la cual fue sustituida por la sorpresa cuando el Capitán América cayó en cuclillas sobre el techo del patrullero delante de ellos, haciendo que el joven se sobresaltara y que Silva desenfundara su arma en estado de alerta.

—¡Vayan a los edificios!—exclamó Steve firmemente, señalando las edificaciones que los rodeaban a los costados de la calle—¡Hay civiles adentro y van a correr directo a la línea de fuego! Que huyan por el subterráneo o por los sótanos pero que no estén en las calles. Extiendan un perímetro hasta la 39.

—¿¡Por qué voy a seguir órdenes tuyas!?—exclamó Silva frunciendo el ceño. Tanto él como Saunders saltaron sobre sus lugares cuando un chitauri cayó justo al lado de Steve, recibiendo un golpe con el escudo antes de que pudiese si quiera atacarlo. Otro más apareció detrás de él pero Steve se protegió del ataque de su lanza con su escudo y lo derribó al piso de un golpe en la cara, para luego girar y sacar volando al tercer chitauri que había subido al techo. Silva giró sobre sus talones y señaló hacia los oficiales que estaban bajo sus órdenes—¡Quiero oficiales en las puertas, lleven a la gente lo más lejos posible!¡Extenderemos un perímetro justo hasta la 39!

Lentamente, los labios de Loki curvaron una sonrisa cuando sus ojos azules reflejaron la destrucción a su alrededor. Desde la torre Stark, parado en medio de la plataforma y oyendo el cántico inigualable de la desesperación, se sentía el dios más invencible del universo. El rey que era y que nació para ser. Midgard sólo era el comienzo, y aún así, se veía increíblemente glorioso y a la vez insignificante comparado a sus grandes planes. La dicha que estaba sintiendo por dentro a penas fue interrumpida por una pequeña punzada de su herida en el hombro, y las yemas de sus dedos tantearon suavemente la zona, recordando vagamente lo sucedido.

Y como si sus recuerdos hubiesen invocado a un demonio acechante, los suaves pasos de Victoria se detuvieron a pocos metros de él.

—¿Recordando mi pequeño regalo de bienvenida?—preguntó calmadamente, provocando que Loki se tensara levemente ante el tono sedoso de su voz, una reacción muy similar a la que él solía inspirar en las personas con su tono elegante. Incluso sin estarla viendo, Loki podía sentir la intensidad de su mirada y el leve cambio macabro en su hablar—Te dije que sería mejor que me recordaras.

—Sería difícil no hacerlo...—respondió suavemente, dándose la vuelta y encontrándose bajo la fría mirada de los oscuros ojos avellana que estaban puestos sobre él. Los labios de Loki volvieron a curvarse sutilmente—"Satanás".

Victoria no reaccionó pero por su mirada a Loki le resultó curiosamente evidente que el apodo no era precisamente algo que le agradara demasiado, o que simplemente no le importaba.

—Sabía que vendrías por aquí.—admitió Loki tranquilamente, cerrando su mano fuertemente alrededor de su cetro y acercándose a paso lento—Después de todo, estás tan desesperada por devolverme un poco de todo el daño que te estoy haciendo.

Los labios de Tory curvaron una sonrisa divertida y negó con la cabeza como si acabara de oír un chiste muy divertido. No era la reacción que se esperaba, lo cual hizo que Loki entrecerrara un poco los ojos.

—No tan desesperada como tú lo estás por un trono...—aventuró con un tono levemente inocente, observando el cambio en la expresión de Loki, evidenciando que se sentía desafiado. La pequeña sonrisita juguetona en los labios contrarios se acrecentó levemente—¿En serio elegirás el poder por encima de tu vida?

—Los dioses no tenemos que elegir, todo nos pertenece.—espetó Loki en un siseo orgulloso y altanero, haciendo que sus hermosos ojos azules se oscurecieran ante el despliegue de ambición de su alma. Victoria amaba los ojos azules y pensó que los de Loki se verían bien en un frasco de plata en su oficina—El poder viene a nosotros, no como en tu caso, que lo buscas a toda costa.

—No sabes eso.—señaló Victoria calmadamente, mientras las corrientes de aire que generaban las naves chitauri que volaban por encima de ellos hacían sacudir las ropas de ambos. El cabello lacio de Tory se meneaba suavemente en su espalda—No sabes lo que busco ni lo que soy capaz de hacer...

—¿Por que no te conozco?—aventuró Loki alzando una ceja, dando un par de pasos hacia su dirección, sin lograr que aquella se inmutara. Ya había comprobado antes que no le tenía miedo.

—Exactamente.—asintió Tory tranquilamente, esbozando una sutil sonrisa al ver la expresión expectante de Loki, como si tratara de adivinar qué es lo siguiente que diría—Si quieres saberlo, entonces conóceme.

Loki arrugó a penas la frente, confundido e intrigado, viendo con sorpresa como Victoria se daba media vuelta y caminaba tranquilamente hacia adentro de la torre. Loki cerró su mano alrededor de su cetro con más firmeza y no dudó en ir tras sus pasos. Sabía que Victoria no estaría dispuesta a hacer nada contra él en plena terraza, a la vista de todos. Incluso en el fin de su mundo se negaría a demostrar lo que verdaderamente era, por lo que no fue muy sorprendente el hecho de que se arriesgara a que Loki la atacara por la espalda con tal de poder resolver su asunto pendiente a solas, sin riesgo de que descubrieran su naturaleza.

—Ya te lo he dicho, pero insisto...—habló Loki, viendo como aquella se detenía en medio de la sala y lo miraba de reojo por encima de su hombro—Te conozco mejor que todo ese grupo de idiotas que está luchando allá abajo.

—¿En serio?—dudó Tory alzando una ceja y dándose media vuelta, con los brazos cruzados sobre su pecho. Su expresión, calmada e inescrutable, le resultaba sumamente curiosa, pero Loki evitó demostrarlo, a pesar de que sabía que sentían la misma curiosidad el uno por el otro.

—No he dicho más que la verdad.—corroboró Loki con su elegante tono sedoso, mientras daba lentos pasos hacia ella, rodeándola y observándola con su fulminante mirada—Esa forma en la que te proyectas, a veces incluso sin pretenderlo; la desconfianza que generas en los mortales más astutos; tu forma de afrontar lo que amenaza tu territorio...

Victoria evadió su mirada, indiferente, incluso cuando los pasos de Loki se detuvieron a centímetros de distancia de su cuerpo. Si no estuviese tan determinada a destruirlo, se habría dado cuenta de que su aura seguía siendo tan intimidante como la primera vez. 

—Todo lo que haces y como te mueves, es una ilusión...—siseó sobre su rostro. Podía sentir su frío aliento rozando su mejilla, y aunque no lo estuviera observando, se sentía atravesada por la intensidad de su mirada. Por un momento hasta dudó de que pudiese mirarlo a los ojos a pesar de que estaba a centímetros de su rostro. El tono áspero y acusador de su voz la devolvió a la realidad, recordándole como la rabia que le tenía Loki seguía burbujeando en su garganta, ahuyentando su inseguridad—Un cruel y elaborado truco conjurado por una mente débil en un intento para infundir miedo, tener el control y poseer poder.

—Dices que eso es todo lo que ves en mí...—murmuró Victoria, levantando la mirada y estableciendo un tenso contacto visual de miradas oscuras que intentaban sobreponerse a la otra. Loki la observó atentamente, viendo como sus labios a penas se movían para dejar que su suave voz se manifestara en sus oídos como si fuese un susurro arrullador—¿Entonces por qué siento que te estás describiendo a ti mismo?

Loki frunció el ceño y se inclinó levemente, imponiéndose como si esperara que aquella retrocediera, pero no lo consiguió. Victoria se tensó pero permaneció de pie, desafiante, sin alejarse.

—Te equivocas, humana.—negó Loki con vehemencia, evidenciando con su expresión que de alguna forma Victoria había logrado dar en la llaga. Si no estuviese tan nerviosa de lo que podría pasarle en ese momento, haciéndose la valiente buscándole pleito a un dios, entonces se habría permitido sentirse orgullosa de su ingenio—Yo nací para ser rey, y lo conseguiré porque tengo el talento natural para ello.

—Si tuvieses un poco más de autoestima, te darías cuenta de que tienes más talento de lo que presumes.—admitió Victoria de mala gana, ya que no estaba muy contenta con decirlo. Loki la miró con cierta sorpresa por lo que había dicho, ya que no era la primera vez que reconocía sus habilidades a pesar de que era evidente que quería destruirlo—Tal vez demasiado para desperdiciarlo gobernando.

—Les facilitaría sus vidas.—aseguró Loki con altanería, levantando la cabeza orgullosamente y apoyando su cetro en el suelo. Victoria tuvo que usar todas sus fuerzas apra mantener sus ojos en los de Loki, ya que si cedía ante su tremendo impulso de mirar el cetro en su mano aquel se daría cuenta de lo que pretendía. Tory creyó que tal vez los nervios del momento eran la fuerza antinatural que trataba de doblegarla para que pusiera sus manos sobre ese cetro de una vez, pero el aliento de Loki sobre su rostro la mantuvo concentrada—La primera y más opresiva mentira jamás enunciada fue la idea del libre albedrío. Para casi todos los seres, elegir produce incertidumbre, tristeza y arrepentimiento. Todo camino se bifurca, y siempre acaban tomando el incorrecto.

Si Tory y Loki no hubiesen estado completamente determinados a aniquilarse el uno al otro, ambos habrían notado la extraña forma en que Loki accedía libremente a exponer su filosofía de manera más abierta, como si estuviese frente a alguien que podría comprenderlo. Inconscientemente, ambos reconocían el tamaño de su ambición y el como se asemejaba a la del otro.

—Apuesto a que creíste que un dios como tú no entraría en esa categoría...—respondió Victoria con calma, viendo la confusión en la mirada contraria. Loki, en cambio, arrugó a penas la frente al ver como los ojos de Victoria parecían oscurecerse—Pero te equivocaste de camino, Loki, jamás debiste cruzarte conmigo.

Antes de que Loki pudiese procesar la amenaza, Tory le dio un tremendo cabezazo en medio de la nariz que empujó su cabeza hacia atrás, dándole la oportunidad de tomar el cetro con sus manos. Loki reaccionó jalándolo hacia él pero Tory hizo lo mismo, y mientras ambos giraban en el forcejeo por ver quien se quedaba con el cetro, la parte superior que apuntaba hacia Loki se activó, soltando un disparo de energía que le dio en el estómago, empujándolo lejos, al mismo tiempo que la sacudida del cetro empujó a Victoria hacia el otro costado, haciendo que chocara contra uno de los muebles. Victoria se deslizó por el suelo para tomar el cetro antes que Loki pero este lo pateó lejos de ella.

Victoria se reincorporó con rapidez y le dio una patada alta que Loki bloqueó con su brazo derecho, dándole un golpe curvo con su otro brazo que Tory esquivó agachándose y deslizándose hacia un costado para golpearlo en el abdomen. Al golpe de Loki le siguió otro que Tory frenó con su antebrazo para luego intentar darle un rodillazo pero Loki lo bloqueó y le dio un golpe en medio de la nariz que hizo crujir su tabique, provocando que esta le devolviera el mismo golpe y haciendo que la cara de Loki se volteara bruscamente hacia un costado. Loki le dio una patada que rozó la mejilla de Victoria cuando esta giró sobre sus pies y le dio una patada de revés que atinó en su pecho y lo empujó hacia atrás, haciendo que trastabillara en el suelo y se cayera. Tory no había dado ni tres pasos hacia él cuando este ya se había reincorporado de un salto.

Victoria trató de golpearlo de inmediato pero esta vez Loki desvió su brazo y se deslizó tras ella y le aplicó una palanca en su hombro, inclinando su cuerpo hacia abajo.

—Tengo curiosidad...—confesó Loki en un jadeo, ya no tan sorprendido de que aquella tuviese la misma velocidad que él. Se habían intercambiado todos esos golpes en menos de treinta segundos y eso sólo le ocurría cuando luchaba contra Thor. Victoria gruñó cuando Loki aplicó más fuerza en la palanca de su brazo—¿Cuantas mujeres como tú hay en Midgard?

Loki fue tomado desprevenido cuando Victoria torció más su brazo sin sentir dolor y le dio una patada con su pierna derecha en el estómago que lo sorprendió, empujándolo violentamente hacia atrás mientras el hombro de Tory regresaba a su lugar de manera instantánea y los ojos de Loki volvían a cruzarse con su mirada.

—No hay mujeres como yo.

—Bueno...ya tengo su atención...—balbuceó Tony, viendo con los ojos muy abiertos y cierto nerviosismo a la criatura gigantesca que flotaba en el aire y que lo perseguía, rozando o derribando edificios en su peligroso serpenteo—¿Cuál era el paso dos?

Clint escuchó su voz por el audífono pero no pudo responder ya que tuvo que usar su arco para derribar a un chitauri, para luego clavarle una flecha en el pecho, mientras que detrás de él Natasha estaba trepada a uno de ellos electrocutándolo con sus piquetes de viuda. Un chitauri se tiró contra Clint tomándolo de las piernas y empujándolo contra el suelo, pero Clint le clavó una flecha en la cabeza quitándoselo de encima. Natasha acabó con dos de sus atacantes utilizando la propia lanza de uno de ellos, justo cuando Steve llegaba saltando de uno de los autos y embestía con su escudo a dos chitauris que se habían acercado para atacarlos.

Los tres voltearon hacia al menos una docena de guerreros que se avecinaba hacia ellos pero unos rayos de electricidad cayeron del cielo, electrocutándolos de inmediato. El posterior aterrizaje de Thor hizo que la calle se sacudiera como un sismo.

—El poder que rodea ese cubo es impenetrable..—jadeó Thor, acercándose hacia Steve.

—Thor tiene razón, ya mandé a Tory a ver qué puede hacer con el portal pero nosotros tenemos que lidiar con esto.

—¿¡Mandaste a Victoria a la máquina del cubo!?—repitió Steve frunciendo el ceño—¡Es demasiado peligroso!

—Tranquilo, sabe disparar y tiene la mano pesada.—comentó Natasha mientras disparaba hacia los chitauri que se avecinaban hacia ellos—¿Tienen alguna idea de qué hacer con ellos?

—Luchar en equipo.—respondió Steve de inmediato.

—Tengo un asunto pendiente con Loki.—señaló Thor severamente, empuñando con fuerza su martillo.

—¿Sí? Pues no eres el único.—comentó Clint, ajustando la punta de una de sus flechas.

—Olvídenlo, necesitamos enfocar la atención de Loki en nosotros, sin él estas cosas se dispersarían.—declaró Steve firmemente, adelantándose y echándole una rápida mirada al panorama—Stark está arriba, pero tenemos que ayudar...

Steve dejó de hablar cuando los estruendos lejanos fueron invadidos por el sonido de un motor, y se dio media vuelta al ver llegar a Banner en una motocicleta, como si no estuviera manejando entre una de las calles de una ciudad en plena invasión alienígena. El cuarteto caminó hacia él visiblemente sorprendidos y Bruce se bajó del vehículo.

—Esto se ve espantoso.—comentó calmadamente, echándole una breve mirada a su alrededor.

—Stark, volvió.—anunció Steve curvando una pequeña sonrisa—Tenías razón.

Desde su sitio en las alturas, Tony también sonrió.

—Pues que se prepare, la fiesta va para allá.

A penas terminó de decirlo, su brillante armadura apareció doblando por la esquina de un edificio, siendo perseguida por una gigantesca bestia metálica que destrozó la mitad del edificio con sus escamas afiladas con tan sólo pasarle por al lado. El rechinar de su acorazado podía oírse a metros de distancia junto con el profundo zumbido que hacía al deslizarse por el aire. Romanoff pasó saliva y ladeó la cabeza.

—Yo no creo que esos sea una fiesta...

Victoria trató de darle un rodillazo pero Loki bloqueó su rodilla y respondió con un codazo que Victoria bloqueó con su antebrazo para luego darle otro cabezazo en el puente de la nariz que finalmente se la rompió, haciendo que apareciera en su rostro una mueca de dolor. Aprovechó su distracción para hacerle una llave y tirarlo hacia adelante, lo tomó del cabello e hizo que su cabeza se estrellara contra su rodilla, más luego del primer impacto Loki atrapó su pierna y la empujó hacia adelante, haciéndola caer de espaldas al suelo bruscamente con su cuerpo encima, pero Victoria metió una de sus rodillas entre ambos cuerpos y tomó impulso con sus caderas para tirarlo hacia adelante y así quitárselo de encima. Loki cayó de cabeza dando una vuelta en el suelo y se reincorporó de inmediato, mirando a Tory con el ceño fruncido. Ambos, jadeantes y furiosos, despojados de todo rastro de su usual elegancia, se miraron como si quisiesen arrancarse la piel de los huesos.

—Tengo que preguntar...—siseó Loki arrastrando las palabras, con sus puños cerrados y en alto, esperando por algún ataque de parte de Tory—Si no hay mujeres como tú, ¿como conseguiste ese poder?

—¿Cómo se obtiene el poder?—preguntó Victoria alzando una ceja, alzando sus puños a la altura de su rostro, viendo como Loki arrugaba la frente al darse cuenta de que estaba imitando su posición de guardia a la hora de pelear, como si ya hubiese aprendido algo de su patrón de combate. Ante la falta de respuesta contraria, Tory esbozó una imperceptible sonrisa irónica—Es muy obvio: haciendo cualquier cosa para obtenerlo.

Curiosidad N°14 sobre Victoria Stark:

Independientemente de que Victoria quiera obtener poder para proteger a Tony, también siente una atracción hacia el poder que aún no es capaz de ver o que no reconoce, y es algo que no puede controlar. La primera vez que esto se manifestó fue cuando tuvo su primer contacto con el Teseracto, pero creyó que la fascinación que sentía por su energía cósmica era por su amor a la ciencia y no algo innato de su mente que aún no es capaz de notar ni de manejar.

[Holaaa, ¿Cómo están? Espero que les haya gustado el capítulo, me gustaría leer sus opiniones <3 Ya casi se acaba la historia y estoy interesada en una segunda temporada, si es que les gustaría <3 Creo que es muy claro el interés que Tory tiene por conseguir poder y aunque esto se va a mantener, quisiera saber ¿qué creen que piensa Tory con respecto a la forma en que obtuvo su poder? Hablando de los experimentos ya que su regeneración es algo natural, ¿creen que Tory realmente haya querido parecerse a Steve?¿por qué piensan que Ancestral apareció en el capítulo anterior? Me gustaría leerlos <3 ¡Nos vemoss!]