Muchas veces escuchamos una frase que comienza con "tu niño interior..."

Pero, ¿Que es o quien es ese niño interior?

Hasta el día de hoy me cuesta aceptar que tenga un niño interior, porque se supone que ya crecí, que soy una adulta que tiene que planear su vida de acá en adelante.

Pero poco a poco lo voy entendiendo.

El niño interior no habla de que seas justamente un niño. Habla de la marca que te dejaron cuando eras niño. De las enseñanzas y los recuerdos que aún perduran en tu mente y alma. De los dolores y miedos que aún se encuentran dentro de ti y que tristemente aún no sacaste o superaste.

El niño interior es lo que somos ahora. Miedo, felicidad, enojo y añoranzas. Son cosas que hemos dejado en el pasado y que tal vez no pudimos resolver.

El niño interior jamás desaparecerá, se quedará dentro de ti hasta que vos puedas verlo y entenderlo aún siendo un adulto.

Porque crecer por fuera no implica que hayamos crecido por dentro. Tener muchos años no significa que ya hemos crecido.

El niño interior solamente necesita ser comprendido. Necesita ser escuchado. Necesita ser amado.

Porque al fin y al cabo, todos somos niños.