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Cap 23. Viaje.

(Últimos capítulos)

Viernes. Durante estos días Ross y yo hemos seguido con nuestros besos. No voy a negar que me encanta estar así con Ross, ya que es esto o nada. Pero, por una parte, lo estoy pasando mal porque casi nos pillan bastantes veces en una semana y cuatro días.

Luke nos ha pillado dos veces, pero nos ha prometido no decir nada. Nick casi nos pilla tres veces y Abby dos.

Flashback Nick 1:
Hoy es viernes de la semana de vacaciones. Y debería tener planes como todo el mundo pero no. Aquí estoy en el sofá viendo... bueno no sé ni lo que estoy viendo. La televisión está puesta, pero no la estoy mirando, estoy con el móvil.

De repente alguien salta sobre mí haciéndome tirar el móvil al suelo. Me quedo sin aire por lo que intento salir de debajo de él.

-Ross por favor bájate- le digo sin aire.

-¿Qué gano yo?- me pregunta.

-Tenerme con vida- le digo y él se ríe.- Lo que quieras Ross, te daré lo que quieras, pero salte- me estoy mareando.

-Vale, trato echo- dice y se sale de encima. Vuelvo a recuperar el aire.

-¿Por qué has hecho eso?- le pregunto.

-Bésame- dice y me quedo confundida.

-¿Qué dices?- le pregunto con el ceño fruncido.

-Me has dicho que me dabas lo que quisiera si me quitaba de encima y eso he hecho así que lo que quiero es que me beses- dice con una sonrisa pícara.

-Eso es jugar sucio- le digo entrecerrando los ojos.

-Has sido tú la que has dicho que harías lo que yo quisiera.

-Touché- digo rendida, tiene razón aunque ha jugado sucio.

Me acerco a él, que está sentando enfrente mío, y pongo mis manos en su hombro. Rozo mis labios con los suyos y lo beso. Nos separamos por la falta de aire, pero no duro ni 10 segundos y ya lo vuelvo a besar.

-Ya estoy en casa- dice Nick caminando hacia la sala.

Rápidamente, nos separamos y nos ponemos a mirar la televisión.

-Hey, chicos- nos dice.

-Hola- decimos nosotros dos a la vez.

-¿Qué hacéis?- nos pregunta.

-Ver la televisión- dice Ross. Nick gira la cabeza hacia la tele y frunce el ceño.

-¿Y qué se supone que estáis viendo?- Ross y yo giramos la cabeza, también, hacia la televisión y vemos que está puesto un documental de animales.

-Emm...- dice Ross nervioso.

-Estábamos viendo una peli, pero se ha puesto en anuncios así que estábamos haciendo zapping- digo rápidamente.

-Valeee- dice Nick poco convencido.

Flashback Abby 1:
Sábado de la semana de vacaciones. Hemos quedado todos para dar una vuelta. Todos han ido a por un helado, bueno todos menos Ross y yo. A Ross se lo trae Abby y a mí me lo trae Nick.

Ahora mismo estamos en el parque de enfrente sentado en un banco. Ross se acerca a mí para besarme, pero le pongo la mano en el pecho para frenarlo.

-¿Qué haces?- le pregunto.

-Besarte- me dice tan tranquilo.

-De eso ya me he dado cuenta- le digo.- ¿Pero como se te ocurre? Abby nos podría ver.

-Van a tardar un rato, hay cola- me dice poniendo su mano en mi mejilla.

-Ross...- le digo pero me interrumpe.

-Shh...- me calla.

Acerca su rostro al mío y me besa. Al principio no lo sigo, pero después de unos segundos le correspondo.

-¡Ross!- grita Abby y me aparto de golpe de él.

Giro mi mirada hacia atrás y veo que están a lo lejos, muy lejos. Miro a Ross quien me mira con nerviosismo. Cuando llegan Nick me da mi helado y Abby se lo da a Ross.

Abby se sienta junto a Ross y Luke a mi lado. Nick se sienta entre Ross y yo, con su novia en sus piernas.

-No os ha visto- me susurra, Luke, en el oído y yo suelto un suspiro de alivio. Me giro a verle y le sonrío como agradecimiento.

Vuelvo la mirada a Ross quien me mira con preocupación y yo le niego con la cabeza, refiriéndome a que no nos han pillado. Él, como yo antes, suelta un suspiro de alivio.

Flashback Nick 2:
Lunes de clase. Ross y yo estábamos en la entrada esperando a Nick para ir a clase. Mamá ya estaba en el coche esperándonos. No sé por qué, pero hoy está tardando más Nick que yo.

Estoy de pie caminando de un lado para otro. Ross se levanta y me para agarrándome de la cintura por la espalda. Me giro, pero él no quita las manos de mi cintura.

-¿Puedes parar? Me pones nervioso- me dice cerca de mí.

-Es que vamos a llegar tarde- le digo.

-Solo se está retrasando un poco- me intenta tranquilizar.

No soy de las que suelen llegar tarde a clase. Bueno tampoco me importaría llegar tarde de no ser porque el profesor que me toca a primera hora es estricto con la puntualidad.

-Ya, pero...- y me calla de la forma que más me gusta. Besándome.

Obviamente, le correspondo el beso. Por casi nos pillan dos veces, pero aun así continuo arriesgándome a que haya una tercera.

-¡Ya estoy!- grita Nick a punto de bajar el primer escalón.

Nos separamos y cogemos las mochilas. Voy hasta la puerta principal y abro.

-Genial, vamos- digo rápidamente, saliendo.

En el resto del día Nick no dice nada así que supongo que no nos ha pillado.

Flashback Abby 2:
Miércoles de clase. Estamos en mi casa todos, ya que no tenemos ni deberes ni exámenes. Así que hemos quedado todos en mi casa para ver unas películas y/o jugar a algún juego. Decidimos ver una película y después ya jugaremos a algo.

Han puesto la película Un canguro superduro y el protagonista es Vin Diesel. A mitad de la película me levanto para ir a hacer más palomitas porque se han acabado. Como ya me he visto la película antes me da igual perderme alguna parte.

Voy a la cocina y saco una bolsa de palomitas de microondas. Lo meto en este y lo pongo tres minutos. Saco mi móvil del bolsillo y me pongo a mirar Instagram. La puerta se abre y dirijo mi mirada a esta.

-Hola- me dice.

-Hola- digo acercándome y pasando los brazos por sus hombros. Él me coge de la cintura y me acerca a él.

Lo beso. Besarlo ya se me ha hecho de lo más normal. Lo malo es que siempre me pongo muy nerviosa, siento que nos pueden pillar en cualquier momento. Por eso últimamente nuestros besos no duran mucho. Me suelo separar antes para evitar que alguien nos vea.

-¡Lau!- grita Abby desde detrás de la puerta. Ross y yo nos separamos.- ¿Ya están hechas las palomitas?- pregunta al entrar a la cocina. Me giro y me acerco al microondas.

-Sí, ya están- digo sacando la bolsa del microondas.- Ahora las llevo.

-Vale. ¿Vamos, Ross?- le pregunta a él.

-Claro- le dice y Abby lo coge de la mano.

Abby arrastra a Ross hasta la puerta de la cocina y antes de salir este me da una mirada de disculpas.

Flashback Nick 3:
Ayer, jueves de clase. Estoy en mi habitación leyendo en el sofá cuando Ross entra sin tocar. Se sienta delante de mí y me quita el libro de las manos.

-Oye- me quejo.- Estaba leyendo.

-Pues ya no- me dice y deja el libro encima de mi cama.

Vuelve a sentarse delante de mí y pone su mano en mi mejilla. Se acerca para besarme, pero yo aparto la cara.

-¿Qué ocurre?- me pregunta confundido.

-Lo siento, Ross, pero tengo miedo a que nos pillen.

-Eso no va a pasar.

-¿Y como lo sabes?- le pregunto.- No sería la primera vez que estamos al borde de que nos pillen. Si Abby nos pilla nos odiará y a mí me matará. Y si nos pilla Nick es capaz de decir que ya no es mi hermano y a ti te matará.

-Ya lo sé, Lau. Pero eso no va a pasar, te lo prometo- me dice.

-No prometas lo que no sabes si vas a poder cumplir.

Vuelve a poner su mano en mi mejilla y me acerca él para luego besarme. Es un beso dulce y lento en el que me transmite tranquilidad y seguridad.

Nick entra a la habitación y Ross y yo nos separamos y giramos a verlo. Para nuestra suerte se está frotando los ojos, creo que estaba durmiendo.

-Lau- dice y suelta un bostezo. Sí, estaba durmiendo.- Necesito tu ay...- no acaba la frase.-¿Qué haces tú aquí?- dice refiriéndose a Ross.

-Estabas dormido y me aburría así que he venido a ver que hacía Lau- le dice Ross.

-Aah- dice con el ceño fruncido.- ¿Puedo hablar a solas con Lau, por favor?

-Claro- dice Ross y se levanta para irse de mi habitación.

Fin de los Flashbacks.

Ahora estoy tirada en mi cama boca arriba mirando al techo, sin hacer nada más. He cerrado la puerta de mi habitación, ya que no quiero que nadie me moleste. Necesito paz y tranquilidad. Esta semana he estado muy estresada, sobre todo con lo de Ross.

Mi móvil suena y estiro mi brazo para cogerlo de la mesita de noche. Sin mirar la pantalla contesto y me lo pongo en la oreja.

-¿Diga?- pregunto.

-Hola, cariño- dice mi abuela, pero se le escucha diferente.

-Hola, Abu. ¿Qué tal?- le pregunto.

-Mal- dice y se pone a llorar. Rápidamente, me siento en la cama.

-¿Qué ha pasado?- le pregunto preocupada.

-Tu... tu abu... tu abuelo- le cuesta decirlo porque su respiración está agitada.

-¿Qué pasa con él?- digo con los ojos cristalizados. Me temo lo peor.

-Está ingresado en el hospital- dice y yo me quedo en shock.

¿Hospitalizado? No, esto tiene que ser una broma. Pero se le escucha muy mal como para ser una broma además mi abuela no es de hacer bromas y menos de este tipo. Mi abuelo está hospitalizado. Rompo a llorar.

-¿Qué le ha pasado?- digo entre sollozos.

-Un infarto, cariño- dios, lloro aún más.- Iba a llamar tu padre, pero está trabajando y tu madre no contesta.

-Mi madre tiene fiesta hoy así que seguramente está echándose una siesta. Ahora hablaré con ella para que te llame y a papá se lo diré cuando llegue- le digo sin parar de llorar.

-Gracias, cariño- me dice.- Ahora debo colgar.

-Vale. Pero llámame si pasa cualquier cosa- le digo.

-Claro que sí. Adiós, cariño- se despide.

-Adiós, Abu. Os quiero, mándale un beso al Abu- me despido y cuelgo.

Llorando dejo el móvil en la mesita de noche y me levanto de la cama. Arrastrando los pies por el suelo voy hasta la puerta y quito el pestillo. Salgo de mi habitación y me voy a la de mi madre. Toco a la puerta pero nadie contesta. Vuelvo a tocar, pero nada, así que decido abrir la puerta sin esperar respuesta.

Veo a mi madre tumbada en la cama durmiendo. Me acerco a ella y la muevo despacio hasta que la despierto. Se sienta en la cama y se frota los ojos. Cuando me ve su cara cambia de adormilada a preocupada.

-¿Qué te pasa, amor?- me dice.

-El abuelo- le digo y vuelvo a llorar.

-¿Qué abuelo?- me pregunta.

-Francisco- digo refiriéndome al padre de mi padre.

-¿Qué pasa con él?- me pregunta muy preocupada.

-Está hospitalizado- le digo.

-¡¿Qué?!- grita.-¿Qué le ha pasado?

-Infarto- le digo. Se queda en shock.

-Voy a llamar a tu abuela- me dice llorando.

Coge su móvil y marca el número de mi abuela. Se acerca el móvil a la oreja y se pone a hablar.

-Hola, Gin- le saluda.-Sí, ya me lo ha contado. ¿Qué tal está? Me alegro. ¿Cómo ha pasado? Vale. Ojalá pudiéramos ir, pero es imposible, él está trabajando y no puede pedirse fiesta- dice y una idea se cruza por mi mente.- Sí, claro. Cualquier cosa llámanos. Vale, adiós.

Deja el móvil donde estaba y se gira a verme.

-Luego se lo contaré a tu padre- dice y se pone de pie para salir de su habitación, pero yo la detengo.

-Mamá- le llamo y para de caminar para girarse a mirarme.

-Dime- me dice.

-¿Vais a ir a ver al Abu?- le pregunto aunque ya sé la respuesta.

-No, cariño. No podemos- me dice triste.

-Quiero ir yo- le digo y ella me mira sorprendida.

-¿Qué?- me pregunta.

-Quiero ir a Litton- le repito.

-No, cariño- me dice dulcemente.

-Por favor mamá. Estas dos últimas semanas he estado muy estresada y necesito desconectar. Qué mejor manera que ir al pueblo de mi infancia. Además, el abuelo está mal y la abuela va a necesitar ayuda y yo se la puedo dar. También os tendré más informada sobre su estado. Ya sabes como es la abuela seguro que no llama para no preocupar. Por favor mamá- le digo y le pongo carita de cachorrito.

Parece que se lo piensa durante un tiempo y después me sonríe. Creo que eso es buena señal.

-¿Cuánto tiempo estarías ahí?- me pregunta.

-Pues está semana que no tengo clase.

-¿Te perderás la feria?- me pregunta sorprendida.

-Es más importante el Abu- le digo.

-Vale.

-¿Eso es un sí?- pregunto ilusionada.

-Sí- dice.

-Gracias- digo y la abrazo.

-Ahora iré a comprarte el billete de avión y llamaré a tu abuela- dice después del abrazo.

-Vale- digo saliendo de su habitación.- Por cierto- le digo y se gira.- No le digas nada a los chicos por favor.

-¿Por?- me pregunta.

-Emm...- no quiero que lo sepan.- Quiero decírselo yo.

-Vale cariño- me dice y salgo de su habitación.

A la hora de la cena mi madre dice lo de mi abuelo y todos empieza a llorar, incluido Ross. Ross no lo había visto tanto como nosotros, obviamente, pero sí que lo había visto alguna vez cuando era pequeño y le tenía un gran cariño.

-¿Vamos a ir a verlo?- pregunta Nick.

-No- dice mi padre.

Mi madre me mira a modo de pregunta por si puede decir que yo voy, pero yo niego con la cabeza.

Después de cenar me subo a mi habitación y me tiro sobre la cama. No paro de pensar en los chicos. ¿Debería decirles que me voy a ir toda la semana?

Deberías.

Pero no lo voy a hacer. Nick querría venir, Luke me daría una charla sobre que estoy huyendo de los problemas y Ross me diría que no fuera.

<<Toc-Toc>>

-Adelante- digo alto para que me escuchen.

La puerta se abre y se cierra en menos de cinco segundos.

-Cariño- dice mi madre mientras se sienta al lado mío. Yo me siento en la cama y la miro.- Ya tengo tu billete- me dice.

-Genial- digo en un intento de sonar alegre.- ¿Cuándo me voy?

-Mañana a las 7 de la mañana- dice y yo abro los ojos como platos.

-¿Tan pronto?- le digo.

-Sí, ya he hablado con tu abuela y todo.

-Vale. Pues ahora haré las maletas.

-Vale cariño- dice y se va hacia la puerta. Antes de salir le llamo.

-Mamá- le digo.

-Dime- me dice.

-No se lo digas a los chicos.

-¿Por?- me pregunta confundida.

-Tú solo no se lo digas por favor- le suplico.

-Vale, pero deberías decírselo- me dice y se va de mi habitación.

Me levanto de cama y cierro la puerta con pestillo. Saco la maleta de debajo de la cama. La pongo sobre esta y la abro. Voy desde mi cama hasta el armario y la cómoda y voy metiendo cosas a la maleta. Media hora después ya está hecha. La cierro y la vuelvo a poner debajo de la cama para que no la vean.

Me tumbo sobre la cama y me pongo a pensar en Litton. Hace mucho que no voy. ¿Habrá cambiado mucho? Tengo muchas ganas de ir pero a la vez miedo.

Miro la hora en mi móvil y pone que son las 12. Decido irme a dormir porque mañana me espera un largo día. Me levanto y quito el pestillo. Vuelvo a mi cama y me tiro boca arriba.

Nos vemos mañana Litton.

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