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EPÍLOGO

Tres años habían pasado desde aquel incidente con Mike.

Tres años desde que él había salido de sus vidas para siempre, desde que eran felices de nuevo junto a su nuevo mánager, Towntrap.

Freddy y Joy llevaban desde entonces saliendo y no se habían separado desde entonces. Incluso le quitaron el puesto de "Pareja melosa" a Golden y Chica.

Bonnie había acudido con un psicólogo un par de meses para tratar sobre el maltrato físico y psicológico que había sufrido con Mike, y por el cual no se acercaba mucho a las personas, pero gracias al apoyo de sus amigos y a la fuerza de voluntad, Bonnie logró salir de aquello y ahora se relaciona normalmente con la gente, sobre todo con los fans, ya que habían vuelto a hacer conciertos y salir a público pocos meses después del incidente de Mike.

Bon, por su parte, logró poco a poco que Bonnie superara su trauma y se acercó nuevamente a él, ésta vez con extrema libertad y sin que nadie intentara separarlos. No eran pareja, no aún, pero se trataban como tal y, aunque ninguno se lo hubiera propuesto al otro, muy en el fondo ambos sabían que sí tenían una relación.

Foxy y Mangle, un año después de que él le pidiera a ella un tiempo, se hicieron pareja, pues ya ambos estaban seguros de que eso era lo que querían y ésta vez ninguno de los dos dudaba.
Se tenían confianza y había seguridad en la relación. Ésta vez sería diferente y ya no la tomarían a la ligera como la última vez.

Jeremy se encontraba bien. No salía con nadie, pero no le hacia falta.
Veía a sus chicos felices, ¿qué más podía pedir?
Además, había superado su enamoramiento a Joy hace tiempo atrás.
Y desde aquel incidente con Mike, cautivó a una linda policía albina que no paraba de seguirlo a todas partes, a pesar de que él le pedía espacio siempre.

Decidieron hacer una pequeña reunión para celebrar los tres años sin Mike. Lo hacían cada año desde entonces.

Todos seguían viéndose cada día, ya que las bandas estaban muy unidas, tanto que parecían una sola, pero hacer una pequeña fiesta para relajarse un rato del trabajo y la fama no les caía mal.

—¡Freddy, sirve de algo y ayúdame a voltear la carne del asador! —Gritó Eak mientras preparaba la carne cruda en una mesa para ponerla a cocinar.

—Eak, ¡ya te dije que yo no sé asar carne! —Gruñó Freddy, pero aún así se paró y se colocó frente al asador.

—¡Solamente tienes que voltearla, pende...

—¡Shh, cállense! ¡Ya casi es hora! — Habló Chica, parándose de su asiento y llamando la atención de todos los presentes.

—Oh, ¿ya tan pronto? —Soltó un fuerte suspiro la de mechón rosado, mientras el pelirrojo sentado a su lado le tomaba tiernamente la mano.

—Falta un minuto— Les recordó Mai, quien se encontraba aferrada al brazo de Jeremy, el cual ya tenía rato que se había rendido por apartarla de él.

Bonnie tomó delicadamente la mano de Bon, la cual acariciaba suavemente su pierna y la apartó de él para pararse de su asiento.

Golden dejó que Chica se parara de sus piernas y después el la siguió, tomando su mano cuando ambos ya se encontraban fuera del asiento.

Freddy se apartó de Eak y su parrillada para colocarse a un lado de sus tres amigos y dedicarles una pequeña sonrisa.

Fox, por su parte, miró a Mangle y sonrió un poco. Ella rodó los ojos mientras soltaba una risita y asentía.

—No vamos a tardar mucho, volveremos aquí en pocos minutos —Aseguró Foxy, depositando un beso sobre el cabello que cubría la frente de su novia.

—Siempre dices eso y terminan tardándose más cada vez— Aquella le revolvió el cabello al mayor y soltó su mano para que éste pudiera irse —. Anda, vayan, aquí vamos a estarlos esperando.

Foxy se integró a sus amigos, quienes lo estaban esperando para avanzar, y los cinco caminaron juntos hasta perderse de la vista de los que estaban en la fiesta.

No muy lejos de ahí, había una pequeña colina no muy difícil de subir a la que a los cinco les encantaba ir.

Los chicos subieron y se recostaron en ella, mirando hacia el cielo y admirando el estrellado y oscuro firmamento que los rodeaba.

Cada año, a las 10 P.M, a los cinco les gustaba apartarse de la fiesta e irse a mirar las estrellas juntos. Para conversar, para pensar en ellos mismos, para rememorar sus logros y metas cumplidas, para mirar atrás y observar todo lo que han logrado juntos.
Y duraban ahí un buen rato, quizá media hora, e incluso a veces una hora completa, ya después regresaban con los demás.

Mientras tanto, en aquella pequeña fiesta, aún se encontraban conversando los que quedaban en la reunión.

—Me pregunto qué tanto harán cuando se van... —Comentó Bon, mientras aún los veía alejarse.

—Freddy siempre  dice que es un secreto de los Animatronicos y que no podemos saber —Joy se cruzó de brazos en forma de berrinche, lo que provocó la risa de Jeremy.

—Ni siquiera a mí me lo han querido decir, ¡y se supone que soy uno de ellos! —Dijo Towntrap, severamente desanimado e indignado.

Puppet rió ante el lloriqueo de Towntrap y miró a su hermana, quien ahora se encontraba sentada a horcajadas en el regazo de Jeremy.

—¡Mai! —Gritó, intentando sonar seria pero sin evitar reír — ¡Pobre Jeremy, lo vas a asustar más de lo que ya está!

Mai ignoró el regaño de Puppet y se colocó las manos de Jeremy en la cintura, mientras juntaba sus frentes para mirarlo fijamente. El rubio simplemente mostraba nerviosismo e incomodidad ante la cercanía de la albina.

—¡Pero Puppet! ¡Observar sus hermosos ojos a la luz de la luna es mi pasatiempo favorito!

Puppet soltó una última risa para dejar que su hermana siguiera intentando gustarle al mánager de los Toys.

—Oigan, ¿qué no se supone que Mike tenía solamente tres años de cárcel? —Preguntó Bonbon mientras los miraba y dejaba de ayudar a su novio con la comida
—¿Será que ya salió de ahí?

—Me da igual, que haga su vida como quiera mientras sea alejado de nosotros —Habló Bon mientras tomaba un sorbo a su refresco de cola.

—Solamente espero que haya cambiado, no por nosotros, sino por él mismo — Mangle se cruzó de brazos mientras se paraba del asiento para servirse más bebida gaseosa.

—Ojalá encuentre su lugar en el mundo y haya cambiado su forma de ser —Suspiró Joy, mirando a sus amigos y dándoles una pequeña sonrisa de ánimo.

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—¡Ah! ¡M-Mike!... — Gemía una chica mientras sentía las manos del mencionado recorrer sus pechos por encima de su camiseta mientras desabrochaba los botones de ésta — ¡D-Detente! S-Sabes que el policía puede venir en cualquier momento y si nos ve así...

La chica fue callada con un beso en los labios por parte de Schmidt, cuya boca bajaba lentamente hacia su cuello mientras sus manos dejaban el torso femenino únicamente vestido con un sostén.

—Doll, no me interesa si viene el policía o no, únicamente quiero sentirme dentro de tí ahora mismo —Mike despegó su boca unos segundos del cuello de ella para hablar, y después volvió a unirlos a ella mientras escuchaba los jadeos de la contraria.

—¡N-No! Mike, hablo enserio... — Doll le soltó un fuerte empujón a Mike, separándolo bruscamente de su cuerpo. — Agh, Mike... No podemos utilizar todas las sesiones de "ayuda psicológica" para esto... Mucho menos hoy.

Mike soltó un fuerte gruñido al ser separado de ella y cruzó los brazos mientras veía como ella se ponía nuevamente la camisa que formaba parte de su uniforme de trabajo que él acababa de quitarle.

—Se supone que sea tu psicóloga, no tu pareja... Estoy haciendo mal mi trabajo —Se quejó Doll mientras se sentaba en los únicos dos asientos de toda la celda de la prisión.

—Claro, sería muy malo que alguien se enterara que eres novia del preso loco que ayudas en la cárcel —Mike rodó los ojos y habló sarcásticamente.

—Sí, sería muy malo porque perdería mi trabajo y no me ofrecerían uno jamás—La psicóloga suspiró con pesadez mientras veía al chico sentarse delante de ella.

Se miraron unos segundos mientras Mike golpeaba con su pie el piso, esperando a que ella dijera algo.

—¿Sabes qué día es hoy? —Le sonrió la chica, finalmente rompiendo el silencio de unos segundos que habían hecho.

—Eh... ¿Hoy cumplimos un año y medio de pareja? — Preguntó Mike, algo inseguro de sí mismo.

—No, tontito... Más bien, hoy hace tres años que estás en ésta cárcel... ¿Y sabes qué significa? —Doll lo miró emocionada con una gran sonrisa.

—¿Me darán una celda más grande? —Se burló Schmidt.

—No —Soltó una risita— . Significa que ya te dejarán salir de aquí, y podremos vivir nuestra vida juntos fuera de éste lugar.

Mike abrió los ojos como dos platos al darse cuenta de que lo había olvidado.

Al fin, iba a salir de ahí.
Ya no iba a estar preso por esas cuatro paredes que lo tenían atormentado todos estos años.
Iba a ser libre.

Y de repente, le vinieron a la mente un montón de recuerdos de su pasado.

Sus chicos, su banda.
Los seis eran felices antes de la llegada de los Toys.
Todo era perfecto para ellos, hasta que llegaron ellos a arruinar sus vidas. A arruinar su vida.

Y pensó en él.

Bonnie

Aquel pequeño del que siempre estuvo enamorado, aquel que no había visto hace tres años, pero que aún podía recordar todos los aspectos de él.
Lo tenía retratado en su mente.
Su rostro, su cuerpo, su altura, su aroma, recordaba absolutamente todo de él.

—¿Mike Schmidt? —Habló un policía en la puerta, sacando al castaño de sus pensamientos.

—¿Ah? — Doll y él se pararon al mismo tiempo y miraron al hombre con rostros muy serios.

—Mike Schmidt, al haber cumplido los tres años de prisión que exigían sus denunciantes tras la demanda, y al haber superado con éxito las pruebas que le realizó su psicóloga todo el tiempo de su estancia aquí, se le informa que está ahora en libertad condicional como fue establecido en el juzgado a petición de sus demandantes —Habló el policía mientras sacaba la llave de la celda de Schmidt y la abría con lentitud.

Doll dio pequeños saltitos de la emoción y miró a su pareja, quien caminaba lentamente y sin expresión hacia la puerta de la celda.

Cuando la abrieron, él salió y sus piernas caminaban temblorosa y torpemente. Mientras avanzaba, podía notar como sus pies tomaban más confianza y se apresuraban rápido a la salida mientras una enorme y maliciosa sonrisa se formaba en su rostro mientras tenía una sola cosa en su mente...

"Oh, mi pequeño Bonnie, iré por ti y podremos estar juntos de nuevo, como siempre lo hemos querido".

¿Fin?
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OH CIELOS AKHSKAJS

Ay amiguitos, no , tengo muchas cosas que decirles, pero lo pondré aparte, así que espero puedan leerlo después de esto, ¿bien?

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