Día 24/Apodos Cariñosos

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Peter come helado mientras ve a Tony trabajar en su nueva armadura, le gusta verlo hacerlo, se le hace sexi y hermoso la forma en que se enoja cuando falla o cuando su mandíbula se tensa al concentrarse.

—Si no supiera que te gusto, me asustaría que me vieras así —le dice Tony riendo.

—Ah, yo eh, perdón, Sr. Stark. —Peter se pone colorado.

—Si estuviese en tu lugar, estoy seguro que también me vería de la forma en que lo haces. —Le guiña el ojo—. Ven aquí.

El castaño se acerca, dejando el bote de helado sobre la mesa.

—¿Qué pasa?

—Deja de decirme Sr. Stark. No me molesta, al contrario, creo que siendo pronunciando por ti, suena muy caliente, pero, ahora puedes tutearme.

—Me gusta decirle Sr. Stark. —Se queja.

—Mocoso, deberías-

—No me diga Mocoso —interrumpe.

—Creo que ambos debemos trabajar en eso, ahora... ¿Por qué no me besas?

—¿Por qué no lo hace usted? —regresa.

—¿Esto se volveré una guerra por ver quien hace o deja de hacer algo primero?

—Tal vez.

Tony se ríe, pero se acerca y une sus labios a los del castaño rebelde frente a él.

º º º

Con el paso de su relación, comienzan a sentirse más cómodos, los besos siendo más espontáneos, las caricias siendo menos accidentales y los abrazos más frecuentes.

Ambos conscientes de lo que sienten y de la forma en que todo comienza a cambiar su corriente, y están felices con eso, Peter se siente seguro y Tony siente que comienza a sanar.

Iron Man aterriza en la torre, al entrar la armadura comienza a guardarse en su recipiente de nano partículas. Voltea esperando a Peter entrar, quien venía de cerca columpiándose.

Habían salido a probar sus trajes, dando algunas vueltas a la ciudad. Tony sonríe y coloca sus manos detrás de su espalda cuando ve a Spider-Man aterrizar.

—El traje es asombroso, Tony —dice, emocionado.

—Te queda bastante bien.

—¿De verdad?

—Jamás miento, spidey.

Peter sonríe, dispuesto a quitarse el traje pero se detiene cuando escucha la forma en que Tony lo llama.

—¿Co-cómo me dijiste? —pregunta sorprendido.

—No lo recuerdo, pequeño spidey.

—¿Spidey?

—¿No te gusta? —le pregunta curioso.

—Es solo que, no, nada, es muy lindo...

—Justo como tú.

Peter se ríe y se acerca para abrazar al mayor.

º º º

Ve su reflejo en el espejo, acomoda su cabello y revisa que su vestimenta luzca bien. Desde que vive con Tony se volvió más cuidadoso con su apariencia, entendió que es parte de una buena presentación ante las personas, y más allá de eso, le comenzaba a gustar sentirse atractivo.

Termina de hacerlo y camina hasta la sala, esperando que Tony siga ahí.

—¿Saldrás? —pregunta Tony al verlo.

—Sí, iré a una fiesta con Harry, Ned y MJ.

—¿Osborn?

—No, como crees, Harry Styles. —Peter rueda los ojos.

—No te pases de listo, cariño.

Peter se ríe y menea su mano queriendo restarle importancia.

—Volveré mas tarde.

—Si necesitas que vaya por ti, avísame, ¿sí?

—Gracias. —Se acerca hasta su novio dejando un beso sobre su mejilla—. Me voy. —Señala el ascensor—. ¡Hasta luego, Tonas!

Peter se da la vuelta, pero Tony lo detiene.

—¿Me dijiste, "Tonas"?

—Efectivamente

—Okey, no suelo molestarme por estas cosas, pero, no me parece lindo.

—Pero tú si lo eres. —Peter ve que Tony va a decir algo pero lo detiene—. Y si me disculpas, me están esperando.

—¡Mocoso espera! —Grita, pero ya no lo escucha porque Peter ya se encuentra en el ascensor—. Yo le digo Spidey y él me dice tonas, no me parece justo, ¿A tu sí, Friday?

—Creo que es igualmente lindo, Señor Stark.

Suspira.

Quizá después de todo puede ser, todo lo que venga de Peter Parker es hermoso para él.