💠Narra Wooyoung💠

-Todos se preguntarán por qué narro yo. Bueno es porque la autora me quiere mucho. Además soy muy guapo y famoso. ¿Quién en su sano juicio se resiste a mis encantos? -hablo con el espejo. Es que me creo hasta un actor practicando con su libreto.

-Woo. Me pregunto cuándo dejarás de hablar solo. -dirijo mi atención hacia la puerta.

-¡Oh! Bora, cariño. ¿Cuándo llegaste? -cuestiono apenado.

-Pues hace unos minutos. Si te preguntas... Sí. Te vi modelando frente al espejo. La verdad no sé qué ven tus fans. -rueda los ojos.

-Yah! No seas mala bubu. -hago puchero.

-Yo sé que te encanto, no finjas indiferencia. -digo divertido y la abrazo mientras ella permanece sin mover un músculo y resistiéndose.

-Bubu. ¡Que preciosa estás hoy! -susurro en su oído.

Se separa de mí para mirarme a los ojos con una muuuuy pequeñita sonrisa en el rostro. Sí, yo puse esa minúscula sonrisita ahí. Que alegre me siento.

-¿Cómo me pude enamorar de alguien tan pesado? -dice agarrando mis mejillas para aplastarlas.

-Yah! Al menos hazme un cumplido también. -me debo ver bien ridículo mientras hablo con los labios como si fuera un pez.

-Eres tan tierno y tonto que no puedo resistirme. -dice y deja de torturar mis cachetes para besarme. No es un cumplido exactamente, pero el beso lo recompensa.

-Bien. Vamos. No podemos perder tiempo. JiEun y Jungkook nos esperan. Si llegamos tarde a su boda, seremos personas muertas. Sabes que habrán muchos reporteros y una tardanza es la muerte. -me hala de la corbata para salir de mi apartamento. Tendré que decirle en algún momento que deje la manía de arrastrarme por esa prenda. ¡Que autoritaria es! Tendré que usar corbatines en lugar de corbata para quitarle la costumbre. ¡Ya qué! Me arrastraría igual de cualquier lado.

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Llegamos a Busan bastante rápido ya que tomamos el primer vuelo de la mañana.

Al entrar a la granja vimos que en cada lado estaba adornada con girasoles, justo el concepto que JiEun pidió. Bora y yo portamos dos pequeños girasoles en nuestra ropa, yo en las solapas de mi traje y ella en su boina. Está demás decir que la zona está llena de cámaras y reporteros, ya que el CEO de nuestra compañía se encargó de todos los costos, ese es su regalo de bodas para los dos tórtolos.

Según recuerdo la granja que JiEun me enseñó en fotos, esta no tiene nada que ver con la anterior. Ahora está totalmente remodelada y muy elegante.

-¡Oh Wooyoung-ah! ¡Al fin llegas! Te estábamos esperando. Vamos, que tenemos que ensayar la presentación antes de que lleguen los novios o el CEO nos mata si cometemos un solo fallo. -Yunho, mi compañero de grupo se atropella con las palabras en lo que intenta recuperar el aliento por tanto correr hasta acá.

-Por cierto... Hola Bora. -dice cuando se reincorpora.

-Hola Yunho. -responde con un asentimiento de cabeza.

-Bueno cariño, voy con los chicos. -me volteo hacia ella.

-De acuerdo. Ve antes de que los periodistas nos noten. Yo iré a ver que tal está el piano. -responde alzando ambas comisuras. ¡Qué bonita es cielos santos!

-Está bien. Lo harás genial. ¡Fighting! -le doy ánimos.

-Tú también bebé. -me guiña un ojo y me quedo embobado mientras la observo alejarse.

-Vamos Woo. Deja de babear. -me reclama Yunho. Había olvidado que estaba aquí.

-¿La oíste Yunho? ¡Me dijo bebé! ¡Ay! Estoy que suelto corazoncitos por la boca. -doy pequeños saltitos mientras lo sigo.

-Sí. Sí. Ya lo veo.-ríe y me toma de la muñeca para avanzar rápido.

En el trayecto saludo a los invitados y a algunos reporteros. Por suerte el número de personas de la prensa no es tan amplio o sino ya estaría volviéndome loco con sus preguntas, y ciego por el flash de las cámaras.

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🤠Narra Jungkook🤠

Ahora que las estilistas han salido, me encuentro solo mirándome en el espejo.

¡Cuánto he crecido y, cuánto he aprendido! No puedo evitar sentirme nostálgico al pensar en que hacía un tiempo debía prohibirme ciertos lujos, para ayudar a mi familia y, ahora puedo tener lo que quiera con solo una llamada a mi mánager. No solo eso, tengo a JiEun conmigo y me voy a casar con ella. Formaremos una familia. No digo que no me da temor, porque todos los primeros intentos dan miedo, pero estoy dispuesto a aceptar lo que sea con tal de perseguir nuestra felicidad y mantenernos unidos a pesar de las dificultades que sé que también vendrán.

-¡Vaya! ¡Pero que novio tan guapo! -escucho la voz de mamá al entrar a mi habitación. Mis hermanas vienen detrás de ella.

-Al fin me caso mamá.-sonrío con amplitud. No soy capaz de explicar cuanta euforia hay dentro de mí.

-Y nos alegra tanto hermanito. -Rosé viene corriendo a abrazarme seguida por Seulgi. Las dos visten bonitos vestidos amarillos, el color favorito de JiEun y el cual combina a la perfección con el concepto de la boda. Mis dos hermanas se ven tan lindas.

-Ya basta que me van a hacer llorar. -las separo de mí.

-No sabía que llorabas. -bromea Seulgi.

-Enfócate en terminar la universidad, anda. -hago amago de pegarle un coscorrón y ella comienza a reír.

-Sin duda alguna la terminaré. -dice llena de confianza.

Me alegra demasiado que al fin la deuda de las tierras se hayan saldado, que mi hermana Seulgi se encuentre a solo un año de terminar la universidad y que Rosé ya esté en 2do año de la misma. El tiempo pasa tan rápido que cuando miro hacia atrás siento como si todo hubiera sido un sueño. Se supone que no debería estar llorando, pero lo estoy haciendo. La fama me hace feliz, pero no tanto como ver a mi familia prosperar, estar unida, apoyarse, verles estar aquí para mí tanto en buenos, como en malos momentos.

-¡Oh vamos! No llores que se me estruja el corazón hijo mío.-mi madre seca mis lágrimas con sus pulgares mientras sostiene mis mejillas.

-Vamos. Debes sonreír porque hoy es un día feliz. Has pasado por mucho. Mereces esta felicidad, así que recomponte. -me sonríe arreglando las solapas de mi esmoquin y atando correctamente el nudo de la corbata, el cual yo me había encargado de aflojar por la ansiedad.

-Sí, lo haré. Ya quiero verla mamá. ¿Está muy bonita? Bueno ella lo es sin necesidad de mucho arreglo, pero ya sabes a que me refiero, radiante. -indico.

-Oh eso sí que no te lo puedo decir jovencito. Ya la verás. -pica mi nariz con el dedo índice mirándome pícaramemte.

-Buenas por aquí.-

-¡Hyung!-exclamo.

-¡Oppa!-chillan de alegría Rosé y Seulgi.

-Buenos días a todos.-sonríe achicando sus ojos. Estoy seguro que sonriendo de esa forma no puede ver.

-Madre.-va y la abraza.

-Vas a romper muchos corazones hoy en la TV.-ríe.

-Pasen mis amores. -lo oigo decir y entran mi sobrinita y mi cuñada.

-Buenos días.-saluda Aeri a mis hermanas, a mi madre y a mí.

- ¡Abuela! ¡Tías! -Sunny se lanza a los brazos de mi madre y ella la carga con gusto para acercarla a mis hermanas y que ellas también la saluden. Luego de ese instante, la niña repara en mí y pide ser puesta en el suelo para venir a abrazarme.

-¡Tío que guapo estás hoy!-besa mi cachete y acaricia mi cabello con ternura.

-Tú no te quedas atrás. -pellizco su naricita y ella empieza a reír.

Mis abuelos no pueden faltar en llegar a cotillear, así como mis tíos, mi prima Yeri y mis primos Taehyung y Taehyun.

Ahora mi habitación se ha convertido en un centro de reunión donde todos hacen chistes sobre el matrimonio, me hacen halagos y a la vez se burlan, pero me preocupa que JiEun esté sola preparándose. A parte de su padre y tío no tiene a más nadie. Bueno, pero en pocos minutos toda mi familia, será la de ella y eso me contenta en demasía.

🤠🌻💛🌻🤠

Ya es pasado el mediodía cuando finalmente el momento tan esperado llega.
Bajo a saludar a los invitados, al Ceo, a los reporteros y a los chicos de Ateez, que se presentarán en mi boda y me dispongo a hablar con mi amigo Hoseok.

-Felicidades campeón. -choca puños conmigo.

-Todavía no me he casado, pero bueno. -río.

-Pues lo harás pronto y estoy muy orgulloso de ti.-aprieta mi hombro.

-Y yo de ti Hyung. Has logrado muchas cosas gracias a tu empeño y eso es de admirar.-le devuelvo el gesto.

-Sí, es cierto. ¿Quién iba a pensar que yo crearía mi propia academia de baile y sería su presidente? -su expresión dice que también es algo increíble para él.

-Bien invitados. Vayan tomando sus asientos que se le dará inicio a la ceremonia. -oigo la voz del tío de JiEun a través del micrófono y dirijo mi vista hacia allá. Él es el que nos casará.

-Amigo. Llegó mi hora de ser un hombre casado. -doy un largo suspiro y luego de darnos un abrazo me encamino hacia el altar, donde la esperaré.

Justo a mi lado, a un metro de mí se encuentra Bora sentada en el piano, esperando a que le den la señal para comenzar a tocar.

Este es el momento en el que más nervioso me encuentro, podría decir que hasta más que frente a miles de personas. Ahora todos me miran a mí, las cámaras, los reporteros, los invitados, mi familia.

-¿Por qué JiEun tarda tanto? ¿Lo habrá pensado bien y se habrá retractado de casarse conmigo? -le pregunto a su tío entre susurros.

-Tranquilo que ella no hará eso. Estaba tan emocionada que hasta tuvieron que volverla a maquillar porque no dejaba de llorar.-me contesta sonriente y hasta diría que se está divirtiendo viéndome en este estado.

Me da ternura imaginar a una JiEun emocionada.

Mientras estoy entretenido comienza la marcha nupcial.
Me paro firme y no puedo contener la gran sonrisa de tonto que se me instala en la cara al verla caminar hacia mí, de la mano de su padre.

Frente a ella caminan mis hermanas y sobrina arrojando pétalos de flores por doquier.
Lleva un vestido blanco que se amolda a su figura, es muy sencillo pero eso resalta su belleza. Usa un centillo de girasoles adornando su cabeza y un ramo de las mismas flores en su mano. No pude esperar mucho así que la fui a recibir a mitad del pasillo y la besé.

-Oye. Se supone que es cuando yo diga "los declaro marido y mujer."-escucho las risotadas del tío de JiEun y también las de los invitados.

Ambos nos miramos algo sonrojados pero terminamos caminando juntos hacia el altar donde nos arrodillamos en las almohadillas para esperar los votos.

-Bien estamos aquí para unir en matrimonio a estos dos jóvenes cuyo amor inquebrantable los ha traído hasta aquí, juntos a pesar de los cientos de pruebas en su camino.

-Señorito Jeon Jungkook. ¿Usted acepta a la señorita Lee JiEun como su legítima esposa para amarla y respetarla, en la salud y...? -

-Acepto. -No le di tiempo a terminar el tan popular discurso.

-Señorita Lee JiEun acepta usted a Jeon... -

-Acepto. -

-¡Vaya! Aquí hay dos jóvenes con prisa. -ríe el señor Lee HyeonJae.

Una vez nos ponemos en pie, mi sobrina junto al niño de tres añitos de mi primo Taehyung vienen a traernos los anillos.

Deslizo el anillo por su dedo anular, ella me sonríe y coloca el otro anillo en mi dedo.

-Los declaró marido y mujer. Ahora sí puede besar a la novia. -se ríe el tío HyeonJae y el resto de invitados aclama por el beso.

Primero beso su frente, luego la punta de su nariz, y por último sus labios.

Todos aplauden contentos y nosotros nos abrazamos más que alegres.

El momento de lanzar el ramo a llegado. Hay varias parejas en el lugar, me gustaría que cada una de ellas fuera la siguiente, pero bueno, solo la afortunada tendrá la oportunidad.

-Bien. Lanzaré el ramo. ¡A la 1...a las 2 y a las 3! -grita JiEun y lo arroja hacia atrás. Mis ojos se abren de la sorpresa al ver quien lo atrapa. JiEun se voltea para ver cuál fue el resultado. Namjoon, el novio de mi hermana lo atrapó.

Camino hacia él para hablar, y felicitarle.

-Al parecer en esta granja pronto se celebrará otra boda. -sonrío y estrecho mi mano con la de Namjoon.

-Felicidades.-añado.

-Oh, no hermanito. Yo no seré tan rural y campechana como tú cuando me case. Yo me casaré en un lugar bien lujoso que mi Nam alquilará para nosotros. Quizás un yate en medio del Pacífico o una iglesia en San Fransisco.-sonríe mientras le hace ojitos a mi cuñado.

-Será como tú desees mi amor. -besa la cima de su cabellera, ahora con su color natural, negro.

Olvidé mencionar que Namjoon ha conseguido un buen negocio, digno y honrado. Le va bien siendo gerente general de un hotel de clase alta.

🤠💛🌻💛🌻🤠

Ya cayendo la tarde es la hora de hacer el brindis entre nosotros y cortar el pastel. Acto seguido de eso, cerrarán la fiesta el grupo de Wooyoung.
JiEun ahora lleva un atuendo más cómodo, un vestido amarillo holgado, y bastante casual, sin dejar de verse como la mujer más hermosa de la fiesta.

Ya estoy ansioso por irme de aquí. ¿Qué hombre no querría dejar a todos los invitados felices comiendo e irse corriendo con su mujer a la Luna de Miel? Más yo que no le he tocado ni un solo cabello en estos años. Algo casi imposible de creer, pero totalmente cierto.

La observo desde lejos mientras habla animadamente con Wooyoung, los chicos de Ateez y su amiga Bora.

-¿Deseoso por llevarla a la Luna de Miel? -mi hermano me toma de sorpresa.

-¿Por qué lo dices? -intento hacerme el desentendido.

-Porque yo estaba así el día de mi boda. Aeri por su parte, quería seguir disfrutando de la fiesta y no tenía prisas. Para mí fue una tortura bro.-ante su reciente confesión nos reímos juntos.

-Ya veo que entiendes el sentimiento. -le digo y chocamos copas.

-Bien. Voy a llamarla para acabar con todo estos protocolos de la boda e irnos de una vez.-le aviso.

- ¡Ah! De paso dile a Hoseok que tenga cuidado con el tío Kim. Si sigue cortejando a Yeri de esa manera pronto tendrá un rifle apuntándole los cesos.-añado con diversión.

-Jajjajaja. Se lo diré. -estalla en carcajadas y se dirige rumbo a nuestro amigo.

-Bonita. Hay un brindis que hacer y un pastel que cortar. No alarguemos más esta tortura cariño. -le susurro al oído mientras la abrazo por la cintura desde atrás y dejó besos castos en su mejilla.

-Estás loquito. ¿No Jeon?-se ríe al notar mi necesidad.

-Uyuyuiii. Esto se pone hot.-exclama Wooyoung con bellaquería y sus amigos le ríen la gracia porque han entendido.

-Candy, Candy. No lo tortures más. Cuanto antes se haga el brindis, más rápido se irán a su fiesta privada. -nos mira con picardía.

Gracias Wooyoung por entender mi padecimiento.

Me río internamente por el drama que he montado mentalmente.

-¡Cállate Woo! Mira lo sonrojada que está. -le reclama Bora y JiEun se queja.

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Nos ha costado irnos ya que el padre de JiEun no la quería dejar ir, lo mismo va para mi madre quien no paraba de llorar y abrazarme. Sumado a eso estaban los reporteros que se tardaron para hacernos la bendita entrevista. Al fin el cielo escuchó mis plegarias y en estos precisos instantes nos encontramos camino al aeropuerto internacional, la terminal 1. Viajaremos a Italia para nuestra Luna de Miel.

-Jeon... Tengo que darte una mala noticia. -dice repentinamente por lo que mi corazón se salta un latido debido a los nervios y la expectativa que se agolpan en mi sistema.

-Tengo la regla. Lamento decirte que tendremos que retrasar esto una semana más. -suelta con la cara más relajada del mundo.

-¿¡QUÉ?! Tú tienes que estar bromeando , ¿no es así?-me río incrédulo ante lo que acaba de decir.

-No. No lo es. -contesta escueta.

-Pero según yo recuerdo, hace unas dos semanas la terminaste. -

-Sí.-doy una palmada. -Que fue cuando estabas de mal humor y me plantaste un helado en la nariz cuando te insistí en entrar a la casa del horror en el parque de diversiones. Me dejaste plantado ese día, no se me olvida. Así que es técnicamente imposible que ya la tengas de nuevo. -concluyo mi argumento alzando una ceja expectante.

Gracias buena memoria.

-Cosas del organismo femenino. -se encoje de hombros y se acomoda en el asiento.

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-Jeon... Háblame Jeon, ¿sí?.-hace pucheros mientras mueve su cuerpo junto a mi brazo del cual se agarra en un intento de aegyo.

No respondo nada.

-¡Oh vamos! No te puedes enojar con eso. Me tendrás todo el tiempo que quieras para hacer lo que quieras. ¿Cuál es el desespero?-se ríe de la mala cara que tengo puesta. He decidido no hablarle desde que llegamos al aeropuerto.

-Ay Jeon... ¡Pero qué pesado que eres! ¿También sufres el climaterio?-se burla mientras juega a masajear mis mejillas como si fueran de plastilina.

-¿Sabes cuál es el desespero? Que llevamos años de novios y no te he tocado ni un pelo. Estás intacta. He respetado tus terapias. No tienes idea de cuánto duele allá abajo después de un beso de esos intensos que eres fan a darme. ¿Sabes lo que es un dolor de testículo? En fin que tu regla es muy injusta. -hago un berrinche a base de murmullos para que el resto de los pasajeros del avión no escuchen nuestra charla "íntima".

-Jeon. Era solo una broma. No pensé que te fueras a poner así. -se excusa.

-Ah... Una broma. ¿Te parezco un juego? Con eso no se bromea JiEun. -le protesto pero soy callado por un beso de su parte. Comienza a moverse ágilmente provocando el efecto contrario en mí. Mi calma viene junto con sus labios, pero luego procede a alterarse mi interior cuando desliza los mismos hacia mi cuello.

-Oh no, no, no, no. Zona prohibida por el momento.-la detengo y ella se echa a reír recostado la cabeza en mi hombro.

-Te amo Jeon Jungkook . -dice dulcemente.

-También te amo Jeon JiEun. -contesto. Que lindo se siente llamarla ahora por mi apellido. Beso la cima de su cabeza y acto seguido recuesto la mía en la suya para quedarnos dormidos.

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Me he encariñado tanto con esta historia que no quiero que se acabe. Falta un especial en el que puede que tengan lemon. Besotes. Y sin más disfruten de la multimedia que seleccioné para ustedes. UwU.

🌄Multimedia🌄🌻

JiEun🌻

Ateez

El bebi de Taehyung y Mel 🤗