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💛🌻Capítulo 11🌻💛

Narra Jungkook

La observé perderse detrás de los arbustos mientras me sobaba el lugar adolorido y mis dos primos me observaban. Seguro estaba de que ni ella misma sabía para donde estaba yendo, pero su orgullo era más fuerte.

Kook! ¿Por qué eres tan duro con una chica? Ella no te ha hecho nada malo, y burlarse no está bien.-esta vez habló Taehyun, quien había observado la escena desde más atrás.

Es cierto Kook!-alegó Kim Taehyung para apoyar lo dicho por su hermano.

Ash!! Ya! Ya! No lo hice con mala intención. Solo bromeaba y ella se ofendió.-me encogí de hombros.

Hey Kookie! Nosotros estamos adaptados a tus bromas de mal gusto, pero ella es una muchacha. -habló Kim Taehyung con esa voz calmada que le caracterizaba.

-¿Y eso qué?-me encogí de hombros.
-¿Qué tiene que ver que sea una chica?

-Jeon...Las chicas son susceptibles antes esas cosas. Su autoestima suele ser afectada con mayor facilidad.-suspiró Taehyung al final de su corto discurso.

-Es cierto. Le dijiste despistada y divulgaste ante perosnas desconocidas para ella, su forma de dormir. Creo que es mejor que vayas tras ella y le pidas una disculpa.

-¿Disculpas? Jaj-reí sin gracia.

-Kook!-dijeron al unísono, sonando como una advertencia.

Agh!-doblé los dedos frente a mi cara con algo de estrés.

-¿C...Cómo creen que va a aceptar mis disculpas? ¿Qué debería hacer?-pregunté.

Taehyung palmeó su frente y luego puso su mano en mi hombro apretándola en el mismo.

-Mira...trata de disculparte con algún obsequio.-

-¿Obsequio? ¿Y de dónde saco algo como eso si ni dinero tengo ahora mismo?-pregunté.

-¿Serás guajiro macho? A las mujeres no se le enamora con piedras.-bufó Taehyun.

-¿Y QUIÉN DIJO QUE YO LO QUIERO ENAMORAR?-Me sobresalté más de la cuenta. Cosa que los obligó a abrir los ojos bien grande.

-En todo caso. Solo fue una frase. Lo que quiero decir es que ellas prefieren los pequeños detalles, antes que obsequios costosos. Tratándolas igual que a los hombres, me refiero al aspecto de seco y brusco, eso las suele ofender.
Prueba con darle flores a modo de disculpas. Por aquí hay muchas.-señaló Taehyun a su alrededor y seguí su mano.

Vaya señor casanovas! Sí que sabes de mujeres.-sonreí pícaro.

Verás...Tengo una novia bastante peleona y celosa. ¿Cómo crees que la puedo calmar?-reímos los tres.

¿Y tú Taehyung? ¿No tienes alguna novia por ahí?-choqué mi hombro con el de él repetidas veces para insitarlo a hablar.

Llevó su mano a la parte trasera de su cabeza y sobó la zona.

-Emmm...Estoy conociendo a una chica en la facultad.-sonrió enternecido.-Su nombre es Melanys. Es muy bonita y tierna.-agregó con una amplia sonrisa.

-Oh vaya! Por aquí Cupido pasó sin apiadarse.-reí.

-Menos mal que a mí ni me vio.Soy camaleón-añadí orgulloso.

-Yo creo que tu camuflaje anda fallando, porque el bebé en pañales con una flecha te anda dando vueltas Jeon. Deberías cuidarte.-rieron los dos y me miraron sugerentes.

-¿Qué rayos les pasa?-los miré como si vinieran de Marte.

Los dos se encogieron de hombros con una sonrisa y se fueron por donde vinieron.

-Asegúrate de hacer una buena disculpa.-gritó Taehyung.

-Suerte Bro!-esta vez fue la voz de Taehyun.

Les rodé los ojos en respuesta y fui en busca de mis disculpas. Las flores. Pero a mitad de caminó se me alumbró una idea.

-¿Por qué no le das una manzana y flores?-dije para mí mismo.

Eres un genio!-me alabé.

Caminé hacia el pequeño jardín de mi tía. Allí ella siembra todo tipo de flores hermosas.

-Sobrino. ¿Vienes a buscar alguna flor para la chica?-preguntó pícara al verme rondando su sembrado.

-Emmm...sí tía. Pero NO ES LO QUE PIENSAS.-enfaticé esto último con un tono de preocupación.

-Ay pequeño! Las flores no siempre se dan para expresar amor de parejas.-rió ante mi actitud.

-Bueno...El caso es que me he comportado muy mal con esta chica. No la he tratado como se debe y ahora está enojada conmigo. Y quiero pedirle perdón.-bajé la cabeza mientras me acomodaba el cinto.

-Oh! Qué mal mi niño!- -Verás...Ella es una chica dulce. Te va a perdonar.-sonrió.

-Solo espero que no me vuelva a patear como una potranca.-comenté y ella soltó una carcajada.

-Mira...Aquí hay una serie de flores que se pueden usar para pedir perdón. -una sonrisa tiraba de sus labios mientras me guiaba hasta donde se encontraban.

-¿Cuál crees que le gustará?-pregunté al ver tantas. Me parecían muy bonitas todas. Si fuera por mi escogería de cualquier tipo y punto, pero no quería arruinarlo más.

-Bien cielo....En este tipo de ocasiones, lo ideal es regalar flores de color amarillo, azul o blanco. Las gerberas blancas y los lirios son una buena elección cuando quieres decir 'lo siento'. Aunque siempre puedes optar por un ramo de rosas amarillas de tallo corto.-mi tía era toda sonrisas mientras me hacía una breve explicación. Mis primos habían sacado su sonrisa cuadrada, Yeri había salido más a mi tío.

-Mmm...me parece una buena idea.-dije arrascando mi barbilla.

-Oh! También puedes coger girasoles. Ellos simbolizan la amistad y el cariño.Puedes elegir una mezcla de flores azules y lilas para acompañar a los girasoles, ya que representan la calma, lo cual puede ayudarte a conseguir tu objetivo.-eso estaba bien, pero ella y yo ni siquiera llegábamos a ser amigos, tampoco le tenía mucho cariño que digamos.

Me quedé pensativo. Solo esperaba poder encontrarla.

Mi tía notó mi debate mental, entonces prosiguió con su explicación.

-Mira...Te recomiendo el junquillo, es de color amarillo y tiene un intenso perfume. En el lenguaje de las flores, regalar un ramo de junquillos significa pedir perdón y el deseo manifiesto de que vuelva el afecto.-

Levanté la vista mostrándome interesado.

-Tía...¿Cómo sabes tanto de flores?-sonreí.

-Son mi pasión-rió.

-Antes de casarme con tu tío, yo trabajaba en una floristería. El muy travieso me engatusó diciéndome que en su granja tendría un espacio para sembrar las que quisiera.-tenía una mirada de persona enamorada. Se veía que lo amaba mucho y que adoraba esos pequeños recuerdos de cuando se conocieron.

Sonreí ante su respuesta.

-Ya sé cuales llevaré tía. Los junquillos.-

-De acuerdo. Iré a por la tijera de jardinería y prepararé un ramo para ti.-

-Tía...-la llamé antes de que se fuera hacia el interior de la casa.

-¿Qué sucede cielo?-

-Puedes también traerme una manzana. En el caso de que no acpte las flores.-reí nervioso y algo avergonzado.

-Me parece una buena idea. Jajajaj.-

Después de aquello ya estaba buscándola. Caminé en la dirección que la había visto por última vez.

Puede que haya parado llegando al riachuelo. Es el lugar más desolado de aquí y que por demás quedaba en la dirección por la cual ella había cogido.

A unos metros de mí la divisé, agachada abrazando sus piernas con una de sus manos, mientras qie con la otra dibujaba cosas en el suelo fangoso.

Oye! Toma!-le dije extendiéndole el ramo de flores.

Ella solo me miró con mala cara y volvió a desviar su mirada hacia el agua.

Narra IU

Imbécil...Imbécil...IMBÉCIL-Grité al viento.

Ash! ¿Por qué me tratas a tu antojo eh? ¿Por qué eres tan idiota conmigo?

El bullicio de la corriente de agua fluyendo y el canto de las aves, esos eran los únicos sonidos que se podían escuchar en el lugar.

Estaba acuclillada en la orilla mientras dibujaba al azar con una pequeña rama en la tierra húmeda.

Tsh! De verdad me veo tan mal durmiendo?-murmuré para mí misma.

El sonido de pasos y ramitas quebrándose me puso en alerta. Yo estaba sola aquí y si alguien había venido a hacerme daño, nadie lo notaría ya que este lugar está desierto, en cuanto a vida humana se trata.
Pero antes de entrar en histeria me puse a pensar...
Si alguien quisiera venir a atacarme, vendría sigiloso y no lo sentiría, pero estos pasos son firmes y seguros.

Vi de reojo un par de botas a un costado mío.

Oye! Toma!-era esa voz.

¿A qué venía? ¿A molestar más?

Lo miré sin ninguna expresión. Llevaba un ramo de flores, pero traté de no sentirme conmovida por aquello y mantener mi actitud. Así que lo ignoré.

JiEun! Deja de hacerte la de rogar! Acepta mis disculpas.-habló algo molesto.

Me puse en pies quedando a la altura de su pecho.

-JAJ! Genial! Claro. Estoy obligada también a aceptar tus disculpas y por encima te molestas. -solté con ironía.

-¿Qué piensas? Que con un ramo de junquillos lo vas a resolver todo? No Jungkook, a mí no me importa con lo que vengas para hacer tus supuestas disculpas. Es la manera en la que te diriges a mí la que me molesta. Agggh!!! Eres tan arrogante.-chillé y pateé en el suelo.

-Desde que nos conocimos, no haces más nada que humillarme y tratarme como a uno más de tus colegas. Eso me ofende, sabes?

-JiEun...-pasó su mano libre por su cara con frustración.

-Verás JiEun...yo, yo no estoy adaptado al trato flojo con las personas, nunca he sido de dar mi brazo a torcer y con lo que he hecho ha sido querer enseñarte que la vida es dura y que la brubuja en la que vives solo es un refugio bien frágil, que se romperá en cualquier momento y la caída será dura. Quiero evitarte dolor.-quizás percibía una pizca de arrepentimiento en su mirada, pero no me era suficiente. Ya estaba harta de sus malos tratos. Y me iba a tener que escuchar.

-Escucha Jungkook...No busques una excusa para tus actos. La excusa, es prostitución del carácter. ¿Nunca has escuchado eso?

-No...es eso.-protestó pero le corté antes de que pudiera segui hablando.

- En primera, no tengo la culpa de que tu vida haya sido dura, por lo que no me debes tratar como a ti se te venga en ganas y en segunda, no me conoces como para decir que vivo en una burbuja. Sí, es cierto que el campo no es lo mío, pero eso no quiere decir que sea completamente una mimada y chiquilla malcriada. ¿Me entendiste?-le dije con voz dura. Las lágrimas amenazaban con fugarse de mis ojos, pero no las permitiría salir, no delante de él.

-JiEun...yo...yo lo siento. Aceptarías esta manzana?-puso mirada de cachorrito mientras me extendía las bonitas y olorosas flores y la manzana en la otra mano. Algo en mí se ablandó. Pero la verdad, yo soy un hueso duro de roer cuando me lo propongo.

Comencé a caminar dejándolo atrás. Si quería conseguir alguna de mis disculpas, debía esforzarse y perder su orgullo. Con unas flores, una manzana y una mirada de cachorrito no iba a lograr nada. Diganme trágica, pero de verdad me sentí muy humillada la primera vez que me dijo que dormiría en el granero. Me sentí como un animal. Luego cuando preguntó si sabía cuánto medía mi cerebro, me estaba llamando idiota. Aaagh...lo que le puso la tapa al pomo fue cuando me llamó despistada delante de su primo y quiso decir que era horrible durmiendo con el comentario que hizo. Eso sin contar como me dejó en la estación ferroviaria sin mirar atrás, aún cuando oyó que le estaba llamando, o lo que me dijo en el tren.

No sentí ningún sonido proveniente de donde se encontraba. Sí, ya veía que él también era un orgulloso y no se iba a dejar dominar. Eres un maldito caballo cerrero Jeon Jungkook.

¿Qué te cuesta pedir disculpas de una forma sincera? Me estás intentando comprar con flores bonitas y una manzana. Pero cuando yo me empeño, la palabra ceder desaparece de mi diccionario.

Comencé a caminar, sin siquiera saber con exactitud hacia dónde me dirigía.

Caminé por el camino de piedras lisas del río. Pero un movimiento en falso y ya estaba de cabeza en él. Comencé a gritar y chapoletear porque, a pesar de ser un riachuelo, no sentía mis pies tocar el suelo y la corriente era fuerte. Sumándole el terror que sentía de tan solo pensar la de animales que pudieran estar en él, me ponía paranoica. Solo esperaba que Jungkook no se hubiera ido o moriría por terca. Sentí que algo agarró mi pie y mi corazón bombeaba sangre a millón. Mi grito fue ahogado al hundirme en el agua. No puedo describir el miedo que me estaba consumiendo al tratar de subir a la superficie y ver que no podía.

Pero en pocos segundos, sentí un cuerpo hundirse en el agua, era él. Ya estaba pasando mi mano por su hombro y desenredando lo que sea que hubiera en mi pie.

Como respuesta al pánico, me agarré fuerte de sus hombros.

-P...por favor no me sueltes.-me aferré a él y enterré mi cabeza en su cuello.

Me llevó cargada al estilo princesa hacia la orilla. Sí, si se preguntan....el río me había arrastrado bastante lejos.

Jeon me dejó en el suelo y se sentó a mi lado dejándome toser por el agua que había tragado mientras daba palmaditas en mi espalda.

-¿Estás bien?-fue su pregunta.

-Claro. Estoy totalmente bien luego de casi ver pasar mi vida entera delante de mis ojos.-no quería sonar tan borde ni sarcástica con quien me salvó la vida, pero salió solo, sin pensarlo mucho.

-Jajaja! Tu sarcasmo está aquí. Así que estás bien.-rió.

-Y no seas tan exagerada, que no estaba tan hondo. El miedo creo que fue lo que causó que te pusieras así.-añadió esta vez más serio.

Iba a soltar algo más pero observé como despeinaba su cabello y las palabras se borraron. Se veía tan...tan guapo. Las gotas caían por su frente, su camisa blanca pegada a su piel se transparentaba mostrando su torso bien trabajado.

Vamos...que aún con todo lo insoportable que lo consideraba, yo ne dejaba de ser una chica y no podía negar lo sexy que era.

-J...Ji Eun?-me miró dubitativo.

Espera...¿Por qué rayos estoy haciendo esto?-me dije mentalmente.

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XOXO~🌻✨

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