TREINTA Y NUEVE
Leonardo subió al avión junto con su equipaje, sus hermanos quedaron en casa descansando; una vez que el avión despego, leonardo miro por la ventana y comenzo a pensar en todo lo que había pasado. la muerte de su padre, el próximo matrimonio de su hermano Raphael y su nuevo viaje definitivo a Paris, en donde se convertiría en el próximo entrenador de la academia de policía.
ni siquiera se dio cuenta cuando comenzo a cerrar los ojos y caer en un profundo sueño, sentir que no estaba tocando el suelo lo relajaba profundamente; no sabía cuanto tiempo había dormido, pero la voz de la azafata llamo la atención de todos los pasajeros del avión.
-estamos presentando pequeñas fallas técnicas- comento manteniendo la calma- por ese motivo, debemos detenernos en el aeropuerto mas cercano, el retorno del vuelo llevará entre 2 a 3 horas. lamentamos las molestias
Los pasajeros fueron desalojados del avión rápidamente, Cuando Leonardo estaba bajando escucho un raro sonido en la parte de atrás, en los últimos asientos del avión; al mirar hacia allá, se vio frente a frente con una explosión, la gente comenzo a salir desesperadamente del avión mientras que la azafata trataba de calmarlos.
-bajen rápido, pero tengan cuidado!- Leonardo grito, se hizo a un lado para que las personas que se sentaban en los últimos asientos bajaran lo mas rápido posible
Una nueva explosión se escucho en la parte de atrás, la gente gritaba y los niños lloraban con terror; Leonardo vio como todos se abalanzaban entre si para ser el primero en salir, el avión se estremecía con violencia ante las explosiones causadas. el conductor del avión ya había desalojado junto con su copiloto, solo quedaban algunos pasajeros. De pronto, Leonardo vio como una mujer embarazada trataba de desabrochar su cinturón, corrió rápidamente hacia ella y la ayudo a desabrochar su cinturón para luego ayudarla a bajar del avión
-¡rompí fuente!- grito asustada, Leonardo suspiro mientras veía como otra explosión amenazaba con destruir el avión.
-tranquila, saldremos de aquí y te ayudaré a dar a luz- le aseguro el pelinegro, la mujer asintió mientras sentía miles de punzadas dentro de su vientre
El pelinegro ayudo a la mujer a salir del avión, una vez que ambos salieron del avión este exploto dejando a todos medios aturdidos; con mucha rapidez Leonardo acostó a la muchacha sobre una manta uso un bolso como almohada y recostó a la joven madre sobre ella.
-¡necesito que llamen una ambulancia!- alego mientras abría las piernas de la muchacha, y ponía una manta sobrante sobre ellas- ¡esta mujer tendrá un bebe!
-¿y usted piensa recibir al bebe?- pregunto una mujer caminando hacia el pelinegro- no parece apto para recibirlo, ni siquiera creo que usted sea medico
-señora por favor-Leonardo trato de guardar la compostura, mientras cuidaba a la mujer- necesito que alguien se comunique al hospital y les digan que envíen una ambulancia al aeropuerto
-no creo que este apto para este trabajo jovencito- le siguió otra señora, Leonardo suspiro mientras apoyaba a la mujer con las respiraciones
-respire tranquila- apoyo- y puje cuando lo sienta así
la mujer asintió mientras pujaba con fuerza, Leonardo tomo su mano mostrándole apoyo moral; poco tiempo después un joven casi de la misma edad de la muchacha se acerco, se arrodillo a un lado de la muchacha y comenzo a acariciarle la cabeza.
-estoy aquí amor, tranquila que ya viene nuestro bebe- sonrió mientras recibía una sonrisa débil de la muchacha- ¿esta todo bien con ellos?
-el parto se adelanto- comento el pelinegro palpando la zona abdominal de la muchacha- al parecer tiene 7 meses de embarazo, intentaré ayudar a tu novia mientras la ambulancia llega al lugar
-muchas gracias- agradeció el muchacho con una sonrisa
la mujer seguía pujando con fuerza, Leonardo tomo una toalla que le facilitaron en el aeropuerto; al ver entre las piernas de la muchacha noto que sus pantalones estaban llenos de sangre, una señal de un posible aborto espontáneo. Leonardo tembló mientras sacaba los pantalones de la muchacha.
-no podemos seguir esperando a que la ambulancia llegue- comento el pelinegro mientras miraba a los dos futuros padres- la mujer tiene signos de un aborto espontáneo, si seguimos retrasando el parto, el bebe y la madre podría morir
-¿¡QUE?!- gritaron los dos al mismo tiempo
-no se preocupen- Leonardo sonrió- tratare de hacer lo mejor posible
Todas las personas que estaban alrededor no paraban de ver lo que sucedía, algunos creían que el chico no estaba preparado para recibir un bebe; pero a Leonardo no le importo, solo tenía en su cabeza la idea de salvar tanto al bebe como a la madre.
no los dejare morir- pensó el pelinegro
-comience a pujar nuevamente- la mujer gimió- se que duele, pero es la única forma para que el bebe nazca con bien, ¿esta bien?
-toma mi mano- sugirió su pareja sonriéndole, la mujer comenzo a pujar mientras apretaba la mano de su pareja
-con dos últimos empujones el bebe saldrá- comento el pelinegro, fue entonces que la mujer se preparo y comenzo a pujar con mayor fuerza.
pronto en toda la sala del aeropuerto se escucho el llanto de un bebe, Leonardo mantuvo al bebe en sus brazos revisando que todo se encontrara bien; luego se los entrego a sus padres, los aplausos se escuchaban alrededor de todo el aeropuerto, Leonardo seco el sudor de su frente mientras sonreía y veía a los nuevos padres.
-al parecer su bebe nació con bien- sonrió mientras limpiaba sus manos- la ambulancia ya viene en camino, muchas felicidades
-muchas gracias- agradecieron los dos nuevos padres, Leonardo asintió mas tranquilo
(.............................)
el vuelo hacia japón se retraso unas horas, Leonardo comió algo para aligerar un poco la espera; pasaron al menos 2 horas hasta que la azafata le indico que el vuelo se relocalizo y regresaría a curso, todos los pasajeros subieron al avión y tomaron sus asientos. Leonardo respiro con tranquilidad mientras volvía a cerrar los ojos para nuevamente quedarse dormido.
2 horas después..........
-si chicos, hubo un pequeño inconveniente en el vuelo pero por fin pude llegar a japón- continuo mientras sonreía y caminaba hacia la comisaria- no se preocupen, estamos bien, solo fue un nuevo pequeño atentado contra el avión
-¿te encuentras bien?- pregunto su hermano menor- ¿te hiciste daño?
-estoy bien- sonrió-
Leonardo entro a las fuerzas especiales de japón, saludo y continuo hablando con sus hermanos
-tengo que dejarlos- comunico- si, acabo de entrar. no se preocupen, hablamos mas tarde
Llego hasta el tercer piso en donde hablo con el agente que lo había llamado, permitieron su acceso al área prohibida de los presos.
-este es el sujeto que es el causante de la explosión- Leonardo miro al hombre de mediana edad, piel bronceada, ojos claros y cabello oscuro- necesitamos la información que tenga, depende de lo que diga, dirá cuanto tiempo en prisión necesita
-déjenme solo con el- indico el pelinegro- yo hare que hable
-esta bien oficial- el comandante los dejo solo, Leonardo se sentó frente al sujeto, este ni siquiera levanto la mirada hacia el oficial.
-te voy a preguntar una sola vez ¿entendiste? solo una vez y quiero la verdad- le dijo mientras golpeaba la mesa con fuerza
-¿y que harás si no quiero ayudarte?- pregunto con una sonrisa siniestra
-te golpeare tan fuerte que no sentirás tu rostro ni tu trasero por mas de 1 mes- indico sonando amenazante- ¿Quién te ordeno que hicieras volar ese avión?
-...........-
Leonardo comenzo a desesperarse, el sujeto parecía no dispuesto a hablar.
-quien te envió a matar a mi papa- alego furioso, el hombre lo miro y con sonrisa sarcástica hablo
-Destructor- sonrió
CONTINUARA
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