En eso que leí el mensaje, Dominik salió del cuarto de baño con una toalla envuelta en su cintura.

—¿Qué veías tan concentrada? —frunce el ceño con una sonrisa

—Hmm...nada en verdad —sonreí falsa

Solo el mensaje de esa zorra. Le arrancaría el cabello.

>>Que no seas grosera, ni violenta, joder...<<

No me estaba saliendo bien. Parece que si alguna vez fui reservada con la ira y la rabia, fue solo porque no la había sacado a flote, pero siempre fui violenta.

—Ah, bueno —asintió

—¿Por casualidad si entro a tu baño será todo negro? —me reí mirándolo

Hasta su toalla. Dominik ya me daba risa con su obsesión.

—Yaaa, no entiendo por qué te burlas. Tú siempre estás de negro también

Me miré

—Claro que no, estos shorts son de mezclilla, no son negros —le saqué la lengua

—Pero son oscuros, admítelo te crees darks —se rió

—Cállate gótico

—¿Me acompañas? —tomó una remera de su clóset

—¿A dónde?

Lo miré confundida

—A la ducha —sonrió sin mostrar los dientes —Vamos

Ladeé la cabeza

—¿Crees realmente que iría?

—Sí, ¿Por qué no?

—¿Por qué tendría que sacarme todo, y no quiero que me veas? —respondí obvia

—Y eso que, igual te vi el otro día —volvió a alzar sus labios, sonriendo

Sentí calor en mis mejillas.

—N-no...pero, es que no me viste en si —me tomé el pelo

Se comenzó a reír.

—Sólo bromeaba, a ver tu reacción —se alzó de hombros —Pero...que raro que no quieras que te vea. Cuando estabas en la fiesta estabas desnudándote casi con el imbécil de Aleks —se alejó y entró en el baño cerrando la puerta

No supe descifrar su tono. Si era de enojo, si estaba bromeando...

Volví la vista a la pantalla. Sylwia no había escrito nada más. Eliminé todos los mensajes que habíamos intercambiado.

//

Cuando salimos a comprar, Dominik iba muy serio. No me hablaba.

Pasó una pareja a nuestro lado. Iban tomados de la mano y luego se abrazaron. Me sentí extraña, porque nunca nos tomábamos de la mano ni esas cosas en público. Tampoco es que quisiera...o no lo sé. Me imaginé que quizás no lo hacía ahora porque estaba enojado.

O porque no era su costumbre.

Lo miré de reojo. Seguía con cara de pocos amigos.

—Dominik

—¿Qué? —me miró

—Estas muy serio —me quejé

No respondió nada

—Dominik... —empecé

—¿Qué prefieres, dulce o salado? —me interrumpió

Maldición, estaba muy serio.

—No sé lo que quieras tu —me alcé de hombros

—Hmmm...quiero palomitas. Compraré palomitas.

—Bien —respondí

Seguimos caminando. Entramos a un supermercado, y estábamos viendo que comprar. Pero se puso extraño.

—Oye...tengo que ir a comprar algo al frente, elige y ahí ves lo que compras —me tendió dinero

Lo miré extrañada.

—No te preocupes puedo pagar yo, pero...¿Qué tienes que comprar y porque no vamos después de aquí?

Me negó con la cabeza, y me metió el dinero en el bolsillo.

—Katine, es por ahorrar tiempo solamente —contestó frío y se alejó

Me quedé mirando las palomitas, hasta que elegí una, y también cogí unos chocolates...y bueno también pedí unos pasteles, se veían buenos. Creo que la diabetes vendrá por mí.

Cuando pagué salí en busca de Dominik. No lo encontraba. Dijo que iba al frente, pero al frente estaba cerrado.

Hasta que lo vi acercarse y fui hasta él.

—Hola —no supe que decir

—Tienes que quedarte esta noche —me observó atento

—¿Ah? ¿Quedarme?

—Sí, quédate en mi casa. Son como las nueve y media ya.

Lo dudé un poco. Esto era...extraño. Digamos que como nunca tuve amigos jamás me quedé en la casa de nadie.

Si, que triste ¿no? 

—Supongo...luego llamo a mi papá para avisarle. No creo que le importe, cuando fui a la fiesta no me regañaron ni siquiera me mencionaron nada —me alcé de hombros

No sé si eso me gustaba o me apenaba.

—De acuerdo

—Oye...¿Y esa caja? —lo miré curiosa

—Ah...bueno —miró la bolsa que marcaba la forma cuadrada —Nada, es solo un remedio. Estoy medio resfriado

Tosió.

Lo miré confundida y me eché a reír

—¿De qué te ríes? —habló molesto

Cambié la cara al instante

—Nada Dominik, ¿Qué te pasa? Estás muy serio conmigo

No contestó.

Llegamos a su casa, y cuando subimos a su cuarto, me senté en su cama, mientras él iba a decirle a la señora que trabajaba ahí, que hiciera las palomitas. Yo prefería que las hiciéramos nosotros, pero bueno...

Me quedé pensando. ¿Cómo le callaba la boca a Sylwia? Recordaba su estúpido mensaje y me hervía la sangre. Que no estuviera segura. Claro que estaba segura.

Tomé mi celular. Le envié un mensaje a mi papá y a Julia por si no cogía mi mensaje, uno nunca sabe, y luego sin querer abrí la cámara. Sin querer también sonreí. Se me había ocurrido algo.

Dejé la cámara grabando, en un ángulo que daba a la cama. Lo dejé bien escondido en la mesa que estaba al lado. No se veía. Justo cuando lo terminé de acomodar, llegó Dominik.

Casi salto del susto y ahogué un grito

—¿Qué sucede? —me miró

—N...nada —sonreí —Sólo que... me...—lo pensé —Me estaba arreglando el bra —volví a sonreír como una tonta

Asintió despacio.

—Ok

Me volví a sentar en la cama.

—Traje las palomitas —entró y cerró la puerta.

Luego las dejó en la mesita. Estaba tapando la cámara del celular.

—Y Dominik...¿Qué haremos?

—Ver algo...dime que quieres ver y lo busco —tomó su notebook—Abrí cuenta en netflix así que...

—De acuerdo... —él estaba concentrado en el notebook

Aproveché, y saqué palomitas, y con ello las corrí para que dejara la cámara como estaba. Pero la fuente se cayó al suelo.

Ay demonios...

—Rayos...ay no —me tomé la cabeza

Dominik me miró y comenzó a reírse

—Nah... ni quería palomitas —siguió riéndose

Recogí la fuente, y quedaron menos de la mitad.

—Lo siento —me tapé la cara avergonzada

—Tenemos más cosas —se alzó de hombros

Recordé que mi celular no tenía tanta memoria disponible que digamos. Así que comencé a pensar rápido.

—¿Y tus padres? —pregunté

Me miró

—Mi papá está en otra ciudad, por trabajo —alzó sus hombros —Mamá llega tarde, por trabajo también

Dejó el notebook a un lado

—¿Por qué? —me miró riéndose —¿Quieres hacer cosas sucias?

Me reí negando

—Si —sonreí —Como ensuciar todo, por ejemplo

—No me dio risa —me miró serio pero luego comenzó a reír

—No era broma

—Como digas Katie

Vamooos, la batería y la memoria no son eternas.

Me acerqué a él.

—¿Dominik?

—¿Mmmm? —respondió mientras seguía con el notebook

—¿Estabas enfadado por lo de Aleks? —pregunté apenas audible —¿Por qué a él según tu si me mostré y a ti no?

Pareció dejar de buscar y se quedó quieto

—Necesito decirte algo —seguí hablando —Yo, voy a serte sincera. No recuerdo haberme acostado con él. Sólo recuerdo hasta el punto en él que tú te fuiste enfadado, y él también ya se había ido, por lo menos de la habitación.

—¿Y antes de eso? —me miró —Por que llegué y te encontré sin polera

—Eso si recuerdo algo —suspiré —Te seré sincera. No estoy segura. Sólo sé que hasta que tú llegaste no pasó nada, y luego de eso se me borró todo. Solo sé que desperté en mi casa y ya

Se quedó callado. Le quité el notebook del regazo.

—Dominik

—No pasa nada enserio —me miró

Asentí

Tocó su regazo indicándome que me sentara.

Me subí en él, y me quedé observándolo.

—La caja de remedios no es caja de remedios —se comenzó a reír

—¿Y que es entonces?

—Condones —se alzó de hombros —Te dije que quería repetirlo

—Pero ya habías comprado...¿Para qué más?—miré a un lado, avergonzada 

—Se me perdieron los otros —se alzó de hombros. Pero luego empezó a reírse de nuevo

Lo miré mal. 

—¿Cuál es el chiste que no entiendo?

—Estoy bromeando —siguió

—Tus bromas están muy...—hice una mueca 

—En realidad es un regalo, mañana te lo entrego—miró al suelo, y se tomó el cabello

Iba a decirle algo, pero se acercó a besarme, y no me dejó responder. Le seguí el beso, y lo tomé del cuello.

>>La cámara...esta más al lado<<

Me bajé de él y me recosté de espaldas en el espacio de al lado.

Él se recostó encima de mí, y lo rodeé con mis piernas. Se acercó y comenzó a besarme, tirando de mi labio una y otra vez.

—¿Me quieres? —pregunté en voz alta alejándome

Pero volvió a besarme

Sonrió alejándose solo un poco

—Te amo —respondió

—¿Sólo a mí?

—Sí, solo a ti —volvió a contestar como cabreado, pero luego sonrió

Bien, era eso suficiente. Pero igualmente Dominik siguió besándome, mientras acariciaba mi cintura. 

—Oye —lo interrumpí

Se quejó.

—Veamos alguna película —me comencé a reír 

Se salió de encima de mi, y se posicionó a mi lado. Aproveché de tomar mi celular disimuladamente, mientras buscaba algo en netflix, y saqué la grabadora.

//

Vimos una película recostados en su cama. 

—¿Dominik?

—¿Hmmm? —respondió algo soñoliento 

—¿Me prestas algún cable usb?

—¿Para...?

—Necesito pasar una foto, para entrar a una parte...y subirla —sonreí

—Bueno... —cerró los ojos un momento —Está en ese cajón —apuntó 

Lo saqué y lo dejé a un lado. Dominik se veía cansado, así que empecé a acariciarle el cabello y la frente con los dedos. En menos de unos minutos ya estaba durmiendo, y roncando un poco. Entonces paré la película y conecté mi celular al notebook

No había estado tan segura antes de lo que iba a hacer, pero como era de noche, y ahí es cuando me pongo más segura de las decisiones que tomo, corte algunas partes del vídeo que había grabado. 

Luego lo envié al chat de Sylwia

dOm!N!k: [Archivo de vídeo] 

dOm!N!k: Ábrelo, te conviene

Borré los mensajes de la conversación para que Dominik no lo viera. Pero me llegó un mensaje.

Sylwia: Ok lo veré

*PD:Siento la demora de actualización, pero estaba inconforme con lo que había escrito aquí, así que modifiqué bastante esto. Mañana actualizo. :3 enjoy.