Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

3.

Era el primer día de clases después de todo lo que había pasado...después de casi morir de sobredosis. En realidad, como se sentía era confuso. La rabia que sentía cuando le habían quitado el internet, ahora se había atenuado hasta llegar a darle lo mismo. Ahora, es como si no le importase nada. Quizás, por ahora solo tendría que seguir asistiendo a clases, hasta que se le ocurriera que hacer con su vida, pues estuvo a punto de perderla, pero al último momento se arrepintió de hacerlo.

Se fue a la escuela como siempre lo había hecho, con el chofer. Es como si nada de lo que pasó antes existiera, como si nada hubiese pasado. Se preguntaba si todos sus compañeros sabrían de su situación. Al llegar, bajó, y entro por el corredor. Todos lo miraban, pero no distinto a como lo habían mirado desde antes. Sentía como susurraban mientras pasaba, pero como siempre, no respondió si no que ignoró. Siguió hasta la sala de clases. Se sentó y unos minutos después sonó el timbre de entrada. Todos tomaron sus lugares y de pronto entró una chica. Le parecía haberla visto en alguna parte.

—Alumnos—entró la profesora y comenzó a hablar —Hoy se ha integrado una nueva estudiante. Espero que la traten bien, su nombre es Katine Walczak

La profesora la miró y todos hicieron lo mismo
Algo alumbró en la mente de Dominik.

—Bienvenida —volvió a hablar sonriente

—Gracias —respondió Katine tímida, como muchas otras veces

Efectivamente, era la chica del hospital.

•••

Katine, consiguió que su padre pidiera un traslado en su escuela, para cualquier otra, con tal de no ver a sus compañeros. Este le consiguió matricula en un instituto muy bueno, bien calificado y de gran prestigio, por lo que él ya no estaba tan molesto con ella.

—Espero que con esto puedas estar mejor hija —la abrazó, pero ella no le devolvió el gesto —Sólo lo hago por hacerte feliz

—Gracias, no te arrepentirás papá 

Al llegar al instituto, le sorprendió lo grande que era. Entró y le comenzaron a dar un poco de nervios, pues era nueva y lógicamente llamaría la atención al cambiarse a más de la de mitad del año escolar, y más si era su último año. Al entrar al salón, busco algún lugar desocupado, aunque temía que fuese de alguien y le reclamase después, lo que para su suerte no ocurrió. La presentó la profesora, y todos volteaban a verla. Le dio algo de vergüenza, pero no le molestó.

—Que guapa eres, nueva —uno de los chicos que habían volteado le había dirigido esa frase. Se sintió extraña, pues en su escuela jamás le habrían elogiado.

—Gracias, supongo, aunque en vez de nueva podrías llamarme Katine—respondió un poco molesta

—Lo siento, Katine —recalcó su nombre —Soy Aleksander, si quieres puedo hacerte un tour por aquí... —le dirigió una sonrisa algo seductora.

Al mirar a su lado, notó que un chico lo miraba con odio. Al mirar bien, se dio cuenta que el chico era aquél a quien había salvado varias noches atrás.

—Silencio —habló la profesora —empezaremos la clase

•••

Al llegar el recreo, todos comenzaron a salir, aunque Dominik seguía allí y Katine decidió acercarse a hablarle, después de controlarse mentalmente porque sentía que iba a tartamudear o se iba a quedar allí muda.

—Hola Dominik —le sonrió —¿T...te acuerdas de mí?
Se estaba poniendo nerviosa.

—Hum...si —la miró unos segundos y luego apartó la mirada

Lo observó mejor. Tenía los ojos celestes, y llevaba un piercing en la ceja.

—Y...¿Te sientes mejor? —no sabía muy bien que decir

—Pues si... gracias por la preocupación —miró al suelo y luego alzó su mirada hacía ella —¿Porque te cambiaste aquí? ¿Sabías que yo estudiaba en este lugar o algo así?

Ella frunció el cejo

—Eh, no tenía idea que estabas aquí. Y me vine porque odio a mis compañeros...bueno, ex compañeros

—¿Si?

La miró más interesado

—Si, me aburrí de verles la cara. Todos son unos idiotas

Se le quedó observando un rato

—Sé de lo que hablas. Y lo entiendo

—Me alegro...pensé que era la única que no le gustaba la escuela por las personas

Él asintió.

En ese momento, entró un grupo de chicos. Katine pudo reconocer que uno de ellos era quién le había dicho guapa en la clase.

—¡Hey Dominik! ¿Te estás ligando a la nueva? pero pensé que yo te gustaba —Aleksander y los demás que iban con él comenzaron a reír

Dominik solo miró con rabia y volvió a llevar su mirada hasta el piso.
El grupo de Aleksander se alejó y volvieron a quedar casi solos

—¿Qué fue eso? —preguntó Katine

—Nada. Debo irme —Dominik salió del salón de clases

La chica solo lo dejó pasar, pero más adelante se dio cuenta a que se debían las burlas hacia él.

Al día siguiente casi no vio a aquél chico, excepto en las clases. En una de ellas se detuvo una vez más en sus detalles; su piel era muy pálida, y resaltaba un poco las ojeras bajo sus ojos delineados. Llevaba una expresión tan desafiante, que junto con el piercing y el negro de la pintura lo hacían ver rudo y atractivo.

"¿Atractivo?" pensó "¿Qué rayos estoy pensando?"

Le dio un poco de vergüenza la idea de que Dominik oyera sus pensamientos y el color rojo le subió a las mejillas de una manera muy rápida. Dejó de mirarlo por un rato, pues de seguro más de alguien se había dado cuenta. Al salir de clases unas chicas se le acercaron.

—Hola, veo que eres nueva —le dirigió la palabra una chica de cabello negro

—Eh... Hola —sonrió —Si de echo llegué ayer

—Ah, ayer no vine, por eso no me enteré —hizo una pausa —Soy Karolina...

—Y yo Katine —sonrió inquieta

—Hay otra cosa que vengo a decirte

—¿Q-que cosa? —respondió nerviosa y extraña

"Cielos, ¿Cuándo dejaré de tartamudear así?"

Tranquila, no es nada... —sonrió con una mirada extraña —Solo noté que mirabas mucho a Dominik

Katine se paralizó. De hecho, no dudaría que sin darse cuenta el color rojo volviera a subir a su rostro.
—¿A Dominik? ¿Yo? Para... ¡para nada! Solo es que lo conozco de fuera, es eso —respondió tratando de sonar bien. Le costaba sobrellevar las situaciones así.

—Ah, ya veo... ¿Y por eso lo miras tanto? —sonrió — No te preocupes... pero no te armes ilusiones

—¿Porque? —Katine pausó unos segundos — Demonios... no me digas que tu eres su novia, o... o tiene novia y actué mal al mirarlo, y aho...

—Shh... ¿Qué? ¡No! —se echaron a reír todas —Él no tendría novia, bueno...novio quizás —le tocó el hombro —Mejor fíjate en otro

Y se alejó por el pasillo con las demás chicas que la acompañaban.

Katine sintió algo parecido a la decepción. ¿Ese chico era gay? No debería sorprenderle en todo caso, apenas venía, casi, conociéndolo. Pero es que su aspecto...no lo parecía.
De todos modos lo iba a averigüar.

•••

—Estudiantes —comenzó a hablar el profesor —Todos sabemos que los días se hacen escasos para llegar a los exámenes. Y saben que hay varios que no están muy preparados. Así que decidí, que harán un informe. Con todo lo que hemos pasado en el año en mi asignatura. Armen parejas. Se entrega pasado mañana.

Recordó la última vez que estuvo en su escuela y tenía que hacer un trabajo en grupo...terminó mal.
Y también recordó que siempre estaba sola en los proyectos y esta vez sería igual.

Alguien le tocó el hombro. Se giró confundida

—Hum...¿Lo hacemos juntos? —alzó las cejas, inquisitivo

Lo quedó observando como boba.

—Eh...¿Katine?

—Lo siento, lo siento... Claro, si juntos

Terminó la clase, y sonó el timbre de salida. Su segundo día no había sido nada de malo. Todos salían, incluyendo a Katine. Iba saliendo del instituto, cuando alguien le gritó desde atrás.

—¡Katine! —oyó pasos agitados que se dirigían hacía ella, y al fín paró —Oye...hum, iba a decirte si podías ir mañana a mi casa

—¿A tu casa? —preguntó Katine extrañada

—El informe —respondió Dominik

—Ah... bueno

—Bien —sonrió con la boca cerrada —Nos vemos

Dominik se alejó y entró en un auto.

Esta vez, y quizás por primera, Katine volvió más feliz a su casa. O al menos iba menos seria que de costumbre. Iba pensando, en algo que se negaba a salir de su cabeza; Le gustaba el aspecto de Dominik. Pero se obligaba a quitarse eso de la cabeza, porque sabía que no era nada bueno si se fijaba en alguien. A nadie le iba a gustar una chica como ella. No era bonita y era aburrida. Eso es lo que le decían todos. Y además si lo que Karolina le había dicho era verdad, entonces era peor que lo mirara tanto.
Era salir mal o salir mal. Así que su relativa felicidad se fue muy rápido.

••
En galería la carita de Dominik al pedirle a Katine hacer el trabajo juntos [La foto del lado izquierdo]

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro