Capítulo 6.
Luna
— ¿Qué? —Mi voz tiembla, mis manos se empapan sudorosas de inmediato y mi corazón late con fuerza, ¡¿Por qué a mí?! ¿Por qué ahora?
—Luna... Creí que te había perdido para siempre, luego la conocí...
— ¡Me tengo que ir! —digo con los ojos cristalizados, me levanto rápidamente y tropezando, Dominik se levanta también y trata de taparme el camino.
— ¡Espera! No te vayas así.
No digo nada, sólo evado su mirada y camino rápidamente mientras miro hacia el piso, me toma fuerte del brazo y tengo que levantar la vista, respiro y tomo fuerzas para mirarlo sin tener que llorar.
—Te amaba, Luna.
—Sí, ese es el problema, yo aún te amo. No tienes que darme explicaciones —tomo fuerzas y lo digo, sin más me zafo de su agarre y salgo lo más rápido que puedo de allí.
Observo la calle, no sé qué dirección tomar, la brisa es helada y la respiración me falla, me ha afectado mucho escuchar esa noticia, creí que ya lo había superado, que había "pasado la página" pero no, lastimosamente él si había pasado la página de su historia conmigo, el ultimo recuerdo que tenía de él me vino de inmediato a la mente, sus promesas... Eran falsas, no lo culpo, debía seguir con su vida y así funciona el mundo.
Quería adelantar mi vuelo, así que tome un taxi para el hotel, los gastos que cubrían la aerolínea del avión en el que murió mi tía solo fueron dos noches en el hotel, esta era última. Llegue y subí rápido tomando el ascensor, al llegar a mi habitación comencé a empacar mis cosas, le escribí a la mayor de mis primas y le avise que todo estaba arreglado, ella respondió muy agradecida por todo lo que estaba haciendo por ellas, después de todo, era lo menos que podía hacer por ellas después de que recibí educación y a lo que se le puede llamar un "hogar"
Después de la noche horrible que tuve, no podía dejar de pensar en la cantidad de eventos desafortunados que me han pasado, la persona que amaba se iba a casar y no podía hacer nada al respecto.
Quería devolverme a casa hoy mismo pero luego lo pensé mejor, tome aire y espere a que fuera el día que estaba estipulado, mañana al anochecer ya estaría volando de regreso a casa.
Mensaje nuevo.
Gabriel: Hola, Luna. ¿Estás por allí?
Yo: Hola, estoy en el hotel.
Gabriel: Hm, yo igual. ¿Qué harás ahora? No quería parecer un acosador o algo así, pero estoy algo aburrido.
Yo: Creo que no haré nada ahora.
Gabriel: ¿Quieres salir? Disfrutar tu última noche aquí.
Yo: No creo que sea una buena idea...
Gabriel: Venga, ¡No seas aguafiestas! La pasaremos bien, te lo prometo.
Yo: Estoy algo desanimada.
Gabriel: ¡Con mayor razón! Veras que te animas en un instante.
Yo: Hm, no lo sé...
Gabriel: Por favor, déjame animarte.
Yo: Esta bien, ¡Pero solo un rato!
Gabriel: Vale, pasó por ti en veinte minutos.
En realidad no quiero salir, tengo ganas de quedarme durmiendo o tal vez llorando en la cama, pero este chico es muy insistente y no sabía cómo hacer para que me dejara de insistir.
Me desvisto y me pongo un vestido informal color gris y arreglo mi peinado, recibo un mensaje de Gabriel que decía que ya estaba abajo esperando, así que salgo con rapidez y en pocos minutos observo al chico, lleva su cabello castaño peinado, y se veía muy apuesto con una camisa blanca, lo saludo con un beso en la mejilla y le sonrió aunque sé que fue una sonrisa apagada.
— ¿Estás bien?
—Hm, sí lo estoy. ¿Y tú?
—Bien, aunque no estoy muy convencido de que tú lo estés.
—No te preocupes por mí, lo estaré.
—Eso espero, Luna —dice sonriéndome y luego camina, yo lo sigo.
—Mañana estaré de regreso, será el funeral de mi tía, su cuerpo ya ha sido trasladado para allá.
—Quisiera acompañarte en eso.
—Oh, no te preocupes. Seguro tienes muchas cosas que hacer aquí.
—Puedo cancelarlas... —dice Gabriel, este chico no me conoce de nada y no puedo creer que haga todo esto por mí.
—No, no. ¡Por favor! No puedes hacer eso.
— ¿Por qué no?
—No dejaré que lo hagas.
—Está bien, pero tendremos que vernos de nuevo.
— ¡Sí! Claro.
Gabriel tomo un taxi y nos dirigimos a un centro comercial el cual no estaba tan lejos, al llegar al lugar pude contemplar lo grande que era, habían luces por todos lados y era hermoso, entramos y observe cada parte de ese lugar, nos dirigimos a la zona de los juegos.
— ¿Qué tan buena eres en los carros chocones?
—Era la mejor.
—Claro, pero nadie me supera.
— ¡Ja! Yo lo haré.
Nos subimos y Gabriel chocó contra mí unas cuantas veces de las cuales me vengué luego, fue tan divertido que olvide por un momento todos los acontecimientos que me habían pasado hoy.
Después de habernos divertido por un buen rato en las atracciones, Gabriel me toma del brazo y me lleva fuera del lugar.
—Vamos a comer con un amigo —dice sonriendo, yo sonrió de vuelta y asiento con la cabeza.
—Gracias por esto —le digo riendo mientras caminamos hacia la zona de comida.
—No es nada, Luna.
—Para mí lo es mucho.
—Es un placer, tu sonrisa es hermosa.
Le sonrió y seguimos caminando, nos sentamos en una mesa y al poco tiempo llegó un hombre no tan viejo y con aspecto amable, saluda a Gabriel con un abrazo y me sonríe a mí, esto se está poniendo raro, tal vez sea peligroso... Tal vez deba salir corriendo.
— ¡Oh! Esta es la bella chica de la que me hablaste.
—Sí, ¡Ella es Luna!
Ok, en estos momentos no estaba entendiendo nada y mi paranoia comenzaba a activarse.
—Mucho gusto, mi nombre es Barnett Hawkins y soy el director de L.A Times.
Mi boca casi cae al piso, ¡Gabriel era amigo o lo que sea del director de un periódico de Los Ángeles! Ni siquiera conocía a este señor pero por supuesto que conocía el famoso periódico L.A Times.
— ¡Mucho gusto! Mi nombre es Luna, aunque eso ya lo sabe —digo riendo.
—Es un gusto conocerte, Gabriel me ha hablado muy bien de ti ¡Esperen un momento! Voy por la comida —dice Barnett, es un hombre elegante y se nota que tiene una gran personalidad.
— ¿Qué fue eso? —le pregunto rápidamente a Gabriel.
—Es un viejo amigo, nos encontramos un día y le hable de ti, lamento no haber pedido tu permiso para poder contarle a Barnett que antes eras editora de un periódico en Inglaterra y que eras muy buena en eso.
— ¡¿Hiciste qué?!
—Calma, omití la parte en la que le tirabas los papeles a tu ex jefa.
— ¡¿Qué?! ¿Estás loco? ¿Por qué hiciste eso?
—Creo que es una gran oportunidad para ti, vamos, Luna.
—Ya has hecho mucho por mí, no sé cómo te pagaré todo.
—No me tienes que pagar nada, solo asegúrate de que nos volvamos a ver. Barnett fue el de la idea de venir a comer, quería conocer en persona a la grandiosa Luna...
— ¡Uf! Claro, sobre todo por lo de grandiosa —respondo sarcástica, Gabriel ríe y el señor Barnett se acerca con una caja de pizza en las manos.
Cada uno toma un trozo de pizza y come, el Señor Barnett parece un hombre humilde y amable, ¡La clase de jefe que me hubiera gustado tener! Es chistoso y de vez en cuando me hace preguntas sobre mi experiencia como editora, le he contado acerca de cómo fue mi renuncia y no ha podido dejar de reírse.
—Luna, me encantaría que fueras parte de nuestra empresa, de hecho estoy buscando personal que sepa hacer las cosas bien y se nota que tú eres una chica trabajadora.
— ¿En serio? —digo sin poder creérmelo, estoy muy sorprendida y a la vez feliz.
— ¡Sí, por supuesto! Solo lleva tu hoja de vida, te tendré en cuenta.
—Hm, hay algunos asuntos que debo resolver en Inglaterra, el entierro de mi tía...
—Oh, claro, entiendo. Puedes tomarte el tiempo que creas necesario, pero si quieres el puesto es casi tuyo —dice el señor Barnett sonriendo amablemente. —lamento mucho lo de tu tía, pero sé que esta puede ser una oportunidad para ti.
—Muchas gracias, ha sido difícil todo esto pero claro que quiero el puesto como editora, sólo debo arreglar asuntos como el hospedaje y esas cosas, mañana viajo de regreso a Inglaterra pero en cuanto pueda enviare mi hoja de vida y vendré a instalarme aquí lo más pronto posible —digo decidida, es la primera vez que tomo una decisión tan grande como está pero no puedo hacer más nada ahora que no tengo a nadie, debo trabajar y ser independiente.
—Así quedamos entonces, la esperamos para que se nos una muy pronto.
—Muchas gracias señor Barnett por esta gran oportunidad, no se arrepentirá.
Todos nos levantamos y estrecho mi mano con el que espero que sea mi jefe pronto, él se despide de Gabriel quien sonríe ampliamente, cuando el señor Barnett se va le doy un fuerte abrazo a Gabriel por primera vez; ha sido un ángel para mí en estos días, siento que le debo mucho y eso que apenas nos conocemos.
—Eso no lo veía venir —dice riendo, luego me mira fijamente y sonríe.
—Estoy tan apenada contigo ¡No sé cómo pagarte! en serio estoy en deuda contigo.
—Vuelvo y te repito, Luna. Solo asegúrame que nos volveremos a ver —dice mirándome y luego baja la mirada.
—Espero que sí.
Tomamos un taxi de vuelta al hotel, estaba cansada, ha sido un día ajetreado y debo dormir para poder levantarme temprano mañana, no quiero perder el vuelo. Después todo el final del día no termino mal, al contrario, pude reírme un buen rato y recibí una gran oportunidad que no pienso perder.
—Ya ves, señorita. No te paso nada por salir un rato conmigo.
—Muchas gracias, de nuevo. Es lo mejor que me ha pasado en los últimos años y todo gracias a ti —le digo a Gabriel y le doy un último abrazo antes de entrar al hotel.
—Ya te dije que era un placer, Luna. Buenas noches y buen viaje mañana—dice y me da un beso en la mejilla.
¡Gabriel! ¿Por qué no lo conocí antes...? Debo olvidar a Dominik, se va a casar y en pocas palabras no cumplió sus estúpidas promesa, pero Gabriel parece un buen chico.
Subo por el ascensor sonriente por la buena noticia que recibí del empleo, ya me emociona volver aquí y trabajar en lo que me gusta hacer. Llego a la habitación y abro la puerta con mi llave, una vez adentro intento cerrar la puerta pero algo me lo impide, abro la puerta con rapidez para ver qué es lo que me estorba y veo a... ¡Dominik!
HOLA MIS CHICAS, LAMENTO MUCHO LA DEMORA, PERDÓNENME POR FAVORRRRR ¡BAJEN LAS ANTORCHAS! AQUÍ ESTOY CON EL NUEVO CAP, ESPERO QUE LES GUSTE, SI ENCUENTRAN ALGUNA FALLA O ERROR ORTOGRÁFICO POR FAVOR PERDONEN, no había podido subir porque he estado muy ocupada y no he tenido tiempo... Pero ya volví y con las pilas puestas, déjenme sus lindos comentarios y votos, las amooo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro