—  ¿que?... — la mente que Rubius quedo en blanco —

— Se que no soy sicólogo o algo parecido, pero entiendo que te sientes mal con Vegetta cerca, así que pensé que irnos por un tiempo de los terrenos de Karmaland te hará bien — Hablo Willy sin soltar la mano del Oso —

— ¿pe-pero que pasaría con el resto? — Willy sonrió y posó una de sus manos en la mejilla del híbrido —

— ellos entenderán tus razones — Rubius no parecía muy convencido, pero el hilo de "ilegal" en medio le llamaba mucho la atención —

— ¿Qué razones? — sabia que no todos los héroes de Karmaland no sabían lo de él y Vegetta, aunque sospecharan, no lo habían confirmado y menos ahora —

— el de descansar de tanta bomba cerca de tu casa, las minas y... la de alejarte de Vegetta — Willy pensó que eran muchas cosas pasando en la cabeza de Rubius y que tal ves era muy pronto — se que es muy pronto y que tal ves nesecites tiempo para pensar pero...

— Ok — el híbrido miro fijamente al de traje verde que parecía sorprendido — voy a ir contigo

Por otra parte, en la comisaría, Alexby trataba de no entrar a la celda de Vegetta para exigirle la verdad de lo que sucedía entre él y su amigo hibrido a golpes. Fargan revisaba a cada rato su celular en caso de que Willy le avisase algo del estado de Rubius, pero hasta ese entonces no le había llegado nada, Suspiro resignado a quedarse con la duda y se acerco a Alexby, le quedaba poco tiempo a Vegetta para poder sacarlo.

Vegetta miraba el techo de la celda, pensaba en el híbrido y el como se comporto tan tonto con él, fue tan tonto de cometer la misma estupidez que hizo con Willy en su momento. Años habían pasado de eso, ambos habían terminado bien por suerte al no tener ambos el mismo sentimiento de antes, pero con Rubius era diferente, aun no lo dejaba de amar, y tampoco entraba en su cabeza la idea de que el otro no le amase de la misma forma. Escucho la puerta de la celda abrirse y vio a Fargan haciendo un gesto de "ya lárgate antes que te deje encerrado mucho mas tiempo", no espero mucho para ya estar fuera de la comisaría y caminando a la casa de híbrido, necesitaba su explicación, que se disculpara por hacerlo dudar tanto de su relación.

Pero cuando llegó no había nadie en la casa.......

No estaban Todas sus mascotas, faltaban algunas....

Había ropa por el piso de su cuarto, pero ni rastro del propietario de estas......

Solo había un nota....

"Nieves, cuida de las demás mascotas por favor, necesito tiempo para pensar en todo lo que sucedió y espero lo comprendas y avises a los demás chicos sobre mi decisión.... sobre nuestra decisión. Se que tu sabes a que me retiro.

Con cariño: Tu Osito."

Vagetta miro sin creer lo que leía en esa hoja pegada en el refrigerador. ¿Su Osito se había ido?, ¿Por qué no le dijo nada?, ¿a que se refiere con "Nuestra"? Su mente era un caos, quería destruir todo a su paso.

El cabalgar de un caballo, los silbiditos de un chocobo y algunas risas de quienes estaban encima de los animales se escuchaban a la par, ambos animales estaban corriendo a todo lo que podían, ya estaban bastante lejos de lo que consideraron en su momento hogar.

Unos metros más Rubius y Willy pararon para dejar descansar a ambos animales y darles de comer.

Rubius miraba el cielo, no habían casi nada de nubes y el sol se encontraba sobre ellos. El Albino miro unos minutos al hibrido, se le veía relajado a comparación de cuando salieron de la casa, puesto que Willy recordó que le quedaba poco tiempo para que Vegetta saliera de la cárcel. Nunca en sus vidas habían sido tan rápidos en guardar comida ropa y otras cosas en sus mochilas, Rubius tomo algunas de sus mascotas en redes y salieron a penas tuvieron todo listo y el Oso dejo la notita en su refrigerador para Nieves.

Ambos chicos decidieron que caminarían un tiempo mas hasta la noche y de ahí harían un refugio provisional para pasar la noche, durante su caminar estuvieron hablando de algunas anécdotas de su niñez y otras cosas. Willy no hablaba mucho en esa conversación la verdad, prefería ver la alegría y sonrisa con la cual Rubius contaba una que otra anécdota de él y de Mangel de cuando eran chiquitos. "que linda sonrisa" Pensó en su momento Willy, él si había visto reír al Oso en reiteradas ocasiones, en especial cuando hacían algo relacionado con la hermandad oscura, pero esas sonrisas desaparecían cada que peleaba con Vegetta.

— vamos a caminar unos kilómetros mas y armaremos el campamento — dijo Willy al Oso cuando ambos formaron silencio, uno por estar pegado en la sonrisa del otro y el otro por estar sintiendo la brisa en su rostro —

— entiendo, ya te iba a decir que me empezaron a doler los pies — hablo el híbrido cerrando sus ojos para sentir mejor esa brisa relajante, una idea paso por la mente de Willy por unos segundo y sonrió —

— Por cierto te ves mas que guapo así de relajado — hablo apresurando el paso dejando a un Rubius sonrojado por el alago repentino atrás —

— ¡¡Hey Espérame, no me dejes solito!!

En Karmaland todos buscaban con desesperación algún rastro del Oso, o al menos una razón, mientras que a Vegetta se le paso un poco la imaginación a lo que estaba pasando.

— ¿Dónde esta Willy? — pregunto de repente Fargan, no había visto al dueño de la casa con forma de árbol desde que peleó con Vegetta —

Vegetta quedo quieto en su lugar, muchos sucesos ficticios pasaban por su cabeza, Willy podría estarle haciendo cualquier cosa a su Osito; A penas reaccionó corrió a la casa del de suponía el su amigo, los demás le siguieron, podría hacer cualquier cosa y eso no era bueno.

Vegetta se adelanto demasiado y cuando a penas los demás estaban llegando vieron al de cabellos flama explotar con dinamita la puerta de la casa, Alexby le grito que se detenga o lo arrestaría, le valió muy poco, revisó todos los pisos en busca de su osito sin encontrar nada.

— Willy! — escucho a su espalda Vegetta, Fargan había logrado comunicarse con Willy por el celular, Vegetta estaba por quitarle el celular de no ser que los demás le agarraron para que se calmara —

—"¿donde estas, ratón?" — pregunto el búho viendo como Luzu y Auron trataban de que Vegetta no le quitase el celular —

— "No es importante eso Fargan" — respondió por el otro lado Willy, y a penas termino de hablar se escucho el silbidito de un chocobo —

— "¿Rubius esta contigo no?" — vio como Vegetta le miraba atento, al otro lado de la llamada se escucharon algunos susurros, Fargan entendió —

— "¿Vegetta esta contigo?" — pregunto serio —

— "¿donde estas?" — evito la pregunta del otro —

— "Fargan.... ahora mismo eso no es importante ok?, tal ves dentro de algún tiempo volvamos, pero necesitamos descansar de todo un tiempo, entiendes?" — Fargan suspiro mirando a Alexby frente a él —

—"¿Si, entiendo?" — respondió, ahora mirando a Vegetta —

— "Gracias amigo" — Tras ese dialogo escucho un grito a lo lejos, "gracias Fargan", obviamente era Rubius —

— "Cuídense" — dijo antes de colgar —

— Fargan — le habló Alexby viendo el rostro triste del búho —

— ¿Dónde esta Rubius?! — pregunto Vegetta —

— Se fueron — Respondió —

— ¿¡Como que se fueron?!, Willy le tuvo que haber dicho algo, Rubius no se iría así como así! —Vegetta no aceptaba que su Osito se fuera de Karmaland —

— ¿Fargan, ellos estaban bien? — pregunto Luzu, Lolito le cambió de lugar en caso que de Vegetta volvía a tratar de hacer un tontería —

— Si, si estaban bien, parece que estaban caminando cuando contestó la llamada — dijo Fargan — Yo necesito pensar lo sucedido, nos vemos mañana los demás estaban igual, ¿Por qué se  fueron? —

Vegetta al regresar a su hogar, fue directo su cuarto, en el encontró una polera vieja del Oso. Vivieron muchas noches de pasión en esa habitación, y no las supo valorar en su momento. Se recostó y pensaba en el porque se fue, estaba casi seguro que Willy le tuvo que haber dicho algo, pero igual sentía en alguna mínima parte de él, que algo que algo que ver él con su bocota.

Fargan mientras le escribía a ambos chicos, siendo Willy el único que le respondía, puesto que Rubius no sabia en que mochila dejo su celular. Aun no le entraba en la cabeza que no vería por mucho tiempo a sus hermanos oscuros, dejo de lado su celular y se concentró en el atardecer que se presentaba de forma hermosa en el cielo, Unos brazos abrazando su cintura lo hizo dar un saltito.

— ¿estas mejor? — reconoció su voz al instante, Alexby —

— si, solo que me va a ser difícil no ver a esos dos ratones por un tiempo — poso sus manos sobre las contrarias —

— estarán bien, si hubiera sido solo Rubius, ahí si me preocuparía — ambos sonrieron, Alexbh dejo  de abrazarle para pararse a un lado de él y tomarle la mano para ver junto como el sol caía y las estrellas pintaban el cielo poco a poco —

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