
Cap. 79
Recapitulación:
—¿Aun no terminas? ¿Te entregaron los resultados?
—Salió negativo, no funciono. El futuro líder de tus tierras tendrá que esperar —dijo, manteniendo la mirada en los papeles. Sus manos, se encuentran cobijadas por unos guantes de encaje que suben hasta sus codos.
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—Hablare con el Líder de los Aslandar, requerimos del león que trabaja en su laboratorio.
—¿No hay progresos? Si necesitas a alguien más, puedo buscar también.
—Hazlo, por favor —pidió, observándola de reojo—. Las cosas se están volviendo complicadas.
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—La niña humana... Amelia. Ella... ¿Cómo explicarlo? Creo que sería mejor que leyeras la carta.
—¿Podemos ir?
—Sí... —dijo en un susurro poco audible, sin despegar la mirada de la carta.
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—¡Ella lo sabía! ¡¿Como lo sabía?! —Exclamo exasperada, caminando de un lado a otro frente a sus amigas.
—Nos ha tenido muy bien vigiladas —hablo Wangari.
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—Podría escuchar su parloteo por más tiempo, pero quiero saber el por qué acudieron mi presencia.
—Oh, Reina de Anglacia lamento quitarte de tu "valioso" tiempo en tus preparaciones para atacar a las tierras llenas de bestias. Pero, te recuerdo que nosotras también estamos incluidas en tus planes.
—Y ustedes me necesitan también —dijo, con una sonrisa curva en sus labios—. La seguridad se ha aumentado. La Líder superior de los Baristar no podrá mandar a más de sus investigadores expertos en el camuflaje nocturno. No tienen por qué preocuparse por los familiares que habitan en esas habitaciones de sus palacios.
—¿Por qué quieres atacar en ese tiempo?
—Mis inventos e investigaciones están inconclusas. Necesito tiempo para acabarlas. Y como vamos, me tardara mucho más conseguir lo faltante. Mientras, ustedes pueden disfrutar de esta tranquilidad y entrenar al mismo tiempo a sus nuevos soldados jóvenes. Serán de mucha utilidad más adelante. —Levanta su dedo índice—. Recuerden: cada una de ustedes tiene un papel importante. Y espero... no desinclinen —dijo lo último, mirando a la mujer rubia que la observa con el ceño fruncido y sus brazos cruzados.
—Una cosa más —hablo, deteniendo la acción de la Reina de Anglacia—. Exactamente, ¿cuál es el plan?
—Irnos de casería.
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—La Reina de Benum.
—Tiene dos bebes.
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—Aviso, mi reina. El cachorro de la Líder del Oeste, ha escapado del palacio hace aproximadamente tres semanas.
—¿Cual? —pregunto curiosa.
—El Kaiser.
—Tráiganmelo enseguida.
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—Algunos Kaiser no conviven bien con las diferentes especies de este mundo.
"Pero es su madre"
—Me perdiste gracias a que desobedeciste mi orden. Di mi vida para que gobernaras, pero ahora... ¿En qué te has convertido?
"¿De qué hablas?"
—No eres un buen Kaiser, si eso es lo que piensas; no has sido mejor, por tenerla a ella. ¿Aun recuerdas el sabor de la carne del hijo de Majorlaine? Estuvo sabroso, ¿no es así? Creo que te falto añadirle una pisca de pimienta antes de devorártelo y no dejar algún rastro para pasar desapercibida y ocultar perfectamente lo que hiciste. Oh, espera, tal vez dejaste alguno.
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—Sí... Ahora lo entiendes. Si lo piensas aún más, lo comprenderás mejor. Los humanos son razas débiles que no debieron existir en primer lugar, por esa y otras razones nuestras tierras estaban divididas. —Suspira con pesadez y agarra la taza de té con elegancia—. Puedes buscarlo, o puedes... dejar que el venga a ti.
"¿Venir a mí?"
—Eres su madre; la madre que admira y quiere, no la que odia y desprecia.
"El... No. Me niego a creer que rechace a Akko"
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"Pierdo el tiempo"
—Como todas las veces que vienes a hablar conmigo, pero... déjame decirte una sola cosa antes que te vayas.
"¿Qué quieres?"
—Algún día... seremos una, Diana. Juntas gobernaremos.
"Eso es ridículo. Estas muerta"
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Han pasado tres semanas desde la desaparición del heredero de las tierras del Oeste...
—Mi reina —llamo, a la vez que cerró la puerta detrás.
—Lotte vendrá.
—Barbara, viene en camino.
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—¿Estoy enferma? —pregunto en un tono inocente y confundida.
—No —le contesto de inmediato la Líder del Oeste.
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—No le harás daño. No le haremos daño.
—Lo encontraremos, mi reina.
—Es mi hijo... —dijo débilmente, dejando escapar más lagrimas.
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"El pasado, es pasado. Y el presente, es el que vivo ahora"
—Tu hijo es enseguida sentenciado a muerte por intentar quitarle la vida a su madre; a una reina.
—Tienes dos opciones, aunque la primera es difícil si el no escucha.
—No despojare a mi hijo de mis tierras.
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—Si Amelia, muere, el recupera su bestia. Es una leyenda que está escrita en los tres libros más importantes que aún se conservan en las tierras del Sur.
—¿Quieres decir que...?
—Matara a Amelia, para recuperar lo que le pertenece —interrumpió, Barbara.
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—¿Cuál es esa segunda opción?
—Matarlo.
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Inicio
Diana Cavendish Pov
«Dos vidas importantes corren peligro». Sus palabras no han abandonado mi mente desde que salieron de sus labios. No he dormido bien en las noches anteriores tratando de asimilar todo lo que ha pasado hasta ahora. Mis trabajos siguen inconclusos. Y mi reina... ha dejado mis tierras el día previo con mi hija humana, Amelia.
Amelia... Su cabello es rubio, largo y ondulado, y sus ojos son rojos como los de mi hermosa reina. Los cambios de su cuerpo empiezan a notarse cada vez más. Su busto levemente empieza a crecer; su estatura aumenta; y su inteligencia avanza. Si me pongo a imaginarla en unos años más adelante cuando cumpla sus seis años, tendrá un parentesco de una niña de ocho o diez. Su desarrollo apresurado se debe a la bestia que descubrió a sus tres años y lleva consigo hasta el momento.
Aun me cuesta comprender el choque de fecha que hubo. Honestamente, no le había dado la menor importancia, hasta ahora. Nunca imagine que esas leyendas y mitos escritos en uno de esos tres libros importantes se hicieran realidad; nunca creí que fuera posible. Pero, la vida me ha jugado otro de esos juegos haciéndome quedar como alguien sin conocimiento previo de las cosas que son tomadas con relevancia en este mundo; me veo como alguien que no toma enserio el peligro y las consecuencias.
Es ridículo pensar e imaginar que una gran fuerza se guarda dentro de uno de los líderes. Es más que obvio que esa fortaleza proviene de la Líder superior de los Baristar. Luego de ella le seguiría la Líder de los Ranter; su padre antes de traerla a la vida y concederle el puesto. Asesino a los dos líderes de las tierras divididas para así convertirse en el superior; así es como se hace y nace un líder superior.
Lo que quiere decir que la cría proveniente del que tuvo la voluntad de luchar contra esos dos grandes tigres, nace con una fuerza mayor que la hace de inmediato una líder superior.
Mi madre no lo consiguió. Y las tierras de los Kaiser están dividas en tres líderes con diferentes capacidades. La Líder del Sur: su mejor habilidad antes de la maldición era la velocidad. Ahora, es inmortal cuando su bestia de pelaje castaño cambia a una tonalidad oscura. La Líder del Norte, es resistente y fuerte. Sin embargo, su resistencia llega a un límite cuando se sobreexpone demasiado. Causando en sí, que su cuerpo comience a tener contracciones que son una clara señal de "alto". Si llega a ignorar esas advertencias, puede causarle la muerte.
Por último, me encuentro yo. Mi fuerza, velocidad, reflejos, capacidad y resistencia, me hacen superior a ellas por poseer varias cualidades fuertes. No obstante, mi entrenamiento siempre ha sido considerado por mi persona el más básico de todos. Aunque, no muchos lo vean de esa manera y crean que estoy llevando mi cuerpo a esa vitalidad que se asemeja a un líder superior.
Suspire ligeramente observando los puntos marcados con una "X" roja en un mapa que refleja mis tierras y las demás. Dando a entender que esos lugares han sido explorados en busca de mi cachorro. Sin embargo, después de un año cerca del cumpleaños numero de cuatro de Amelia... no he recibido ninguna señal o noticia positiva.
Mi reina está preocupada. Y en cada momento que hemos tenido la oportunidad de vernos me pregunta acerca del paradero de Dylan, pero... me entristece decirle las mismas palabras que lastiman su corazón para después entregarme una mirada llena de tristeza.
"No lo hemos encontrado"
Escuchar su llanto; consolar su llanto y desesperación por verlo otra vez sin importarle lo sucedido. Me hace considerar el aprecio y cariño que le tiene a nuestro primer hijo, sin embargo, no me gusta que de sus bellos ojos salgan esas lagrimas de tristeza. Ella, se aferra a mi como su protección. Y mis brazos... le entregan esa sensación que calman sus emociones y la hace descansar plácidamente en mi pecho.
Hace unos meses hice una búsqueda personal con algunos guardias, pero nuevamente... volvimos sin encontrar alguna pista. «¿A dónde habrá ido?» Es lo que siempre me pregunto cada vez que regreso con las manos vacías y mi mente hecha un rompecabezas en busca de las piezas faltantes.
"El regresara, no lo encontraras"
No me cansare de buscarlo, aunque me dijeron que no lo hiciera.
"Si lo buscas, solo empeoraras las cosas"
Mi reina está preocupada. Yo también me encuentro preocupada. Él es mi hijo. Y no lo abandonare.
—Mi líder —dijo a mi costado una Kaiser de cabello anaranjado con mechas de la misma tonalidad, pero más oscuro. Mis pensamientos se vieron interrumpido por su llamado repentino.
He estado horas realizando el trabajo que he dejado al pendiente el día anterior. Y Emma, ha permanecido sentada a mi lado con su libreta en mano. Previamente le ordene que viniera a mi despacho para hablar de los siguientes cambios que tendrá mis tierras por las llegadas de los nuevos humanos que se comprometieron (o, mejor dicho, hicieron el lazo) con gente de mi raza. Algunos decidieron vivir en el terreno donde nacieron aquellos Kaiser, y otros... se mudaron al Reino de Benum.
Sebastián, es uno de ellos.
—... Tomando en cuenta la información que me fue proporcionada por uno de los constructores, necesitaría... expandirse un poco más.
—¿Que área podemos tomar? —Consulte, observando de reojo su mirada concentrada en su libreta y sus orejas grises moverse ligeramente.
Ella, acerco su plumón a su barbilla y analizo un pequeño mapa con dobladillos pegado en su cuaderno.
—Por lo que conocemos gracias a los exploradores. Estas tierras están habitadas por Kailer.
Kailer, son Kaiser que no le sirven a ningún líder. En otras palabras, son... salvajes. La mayoría de los Kailer poseen un gran grupo que supera en pocas ocasiones en numero la mayoría de los soldados que poseen las tierras de los Kaiser. Sin embargo...
Extendí mi mano, pidiendo en silencio que me entregara la libreta. Emma obedeció. Examine las zonas cerca de mis tierras y por lo visto... los territorios de los Kailer parecen ser los más favorables. No obstante, no deseo matarlos.
—Lo tomaremos —dije con firmeza, regresándole su cuaderno.
—¿Reúno a los guardias?
—No.
Emma, arqueo una ceja. Voltee a verla, causando que se tensara un poco en su silla.
—... Iré personalmente a hablar con ellos.
—¿Hablar...? —Susurro confundida.
Normalmente para conquistar otras tierras que no son gobernadas por otros líderes, es necesario pelear y asesinar al que los guía.
—Sí.
Además... es probable que Dylan... se encuentre con ellos.
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Harry Parker Adele de Vilain Pov
Es increíble. Las palabras de mi madre cada vez se asimilan más a los hechos. Amelia no posee la fuerza, velocidad y cualidad de un animal. Solo... posee a esa bestia que poco a poco hace que su edad no se asemeje a su físico y su inteligencia aumente como la de un cachorro Kaiser. Su cambio fue a los tres años y está cerca de cumplir los cuatro. La Reina de Benum ha estado ocupada planificando su celebración y expandiendo su reino.
Tengo la responsabilidad de aprender de sus nuevos cambios. La protección no es requerida, ya que los guardias se encargan de ese trabajo. Una vez al mes, vengo a quedarme una semana en el palacio de la Reina de Benum. Poco a poco voy a conociendo más de la siguiente reina de estas tierras y también... de su actual reina.
Atsuko, se comporta y mantiene una mirada firme delante de su gente. Sin embargo, cuando la Líder del Oeste viene de visita, es como si sus defensas bajaran e inconscientemente refleja en sus gestos ese dolor que le provoca la desaparición de Dylan.
La he visto sonreír débilmente y acercarse con seguridad a la líder. Su mano derecha siempre agarra el brazo izquierdo de la líder y lentamente la guía a otra parte del palacio mientras habla de diferentes temas relacionado con su reino.
—¿Crees que le guste?
—Absolutamente —respondí, observando el dibujo que ha creado.
Es probable que ella recuerde a su hermano. Y es entendible que desee saber de él, puesto que, Amelia no estuvo en el momento que intentó asesinar a su madre. Y aunque no estuviera tanto tiempo con su hermano Kaiser, un cierto cariño de aprecio se ha guardado en su corazón. Tal vez pronto... ella entienda la situación y los pensamientos de Dylan.
Están conectados, después de todo. Pero... Amelia sería capaz de... ¿entregarse al entender los sentimientos de Dylan? No. No la creo capaz de sacrificarse para acabar con el sufrimiento de su hermano, sin embargo...
"Todas las posibilidades son consideradas importantes. Siempre hay que tenerlas en cuenta"
Las palabras de mi madre dichas con anterioridad en mis enseñanzas, cobran sentido.
—¿Cuantos años tienes? —pregunto nuevamente, sacándome de mis pensamientos.
—Once —conteste un poco extrañado, ya que normalmente Amelia no es de dirigirme tanto la palabra.
—Eres seis años mayor que yo, pero no lo aparentas. Creí que tenías quince.
Arquee una ceja, mirando con atención sus acciones. Ella giro a verme de reojo y sonrió sutilmente.
—... Eres bonito.
—Gracias por el alago. Igualmente me pareces una hermosa dama.
—Gracias —respondió con simpleza y cordialidad, para después continuar con su dibujo.
Asentí ligeramente y levanté la mirada contemplando las nubes moverse con lentitud. El día se encuentra soleado, pero refrescante gracias a la brisa suave que nos regala hoy la bella naturaleza. Honestamente me encanta más el invierno. Es probable que eso se deba a mi parte leopardo de las nieves de mi abuela y mi madre. Mi padre... es muy extrovertido y a eso mamá le gusta. Nunca antes la había visto tan... feliz. Me alegra que Barbara tomara la decisión de quedarse con nosotros.
¿Como se sentirá enamorarse apasionadamente de alguien? Tengo en claro que mi futura pareja obligatoriamente tiene que ser una Kaiser o... una Baristar. No puedo hacer el lazo con Ranter, Aslandar y... Humanos.
Esas... son las reglas; nacer especial tiene sus pros y contras.
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Amanda O'neill Pov
—¡¿Enserio puedo ir?!
La líder asintió. Kara, movió agitadamente su cola y me miro con emoción. Sonreí con sutileza y cariño dándole la orden de alistar sus cosas para irnos; será la primera vez que salga de las tierras del Sur, para conocer mi reino.
Cuando ella abandono el lugar con prisa, borre mi sonrisa y voltee a ver a Hannah.
—Gracias.
—De nada, Humana.
Humana... No ha dejado de llamarme de esa manera. No me molesta, pero es cansado a veces. Suspiré profundamente y dirigí mi mirada hacia donde Kara se ha ido hace tan solo unos segundos. Los guardias de mis tierras junto con otros pertenecientes a estas, se encuentran en espera de la persona que traje al mundo para que remplazara a la Líder del Sur.
Hannah, no ha cambiado de actitud y pensamientos. Ella, me trata como la primera vez que nos conocimos, pero con un poco más de respeto al ser la segunda madre de la siguiente gobernante de estas tierras.
—¿Como van las cosas?
—Bien —contesto secamente.
No sé ni para que me molesto en intentar entablar una conversación.
—... Ten cuidado con ella.
Exhale suavemente.
—Lo sé.
Algo sucede y Kara no saldrá más de las tierras del Sur. Es obvio que tiene miedo de que algo le suceda, aparte de que siente una gran desconfianza conmigo porque soy una raza "débil". Sin embargo, puedo cuidar de mi propia hija por mi cuenta. Me pregunto... ¿Como estará Akko? Diana informo lo que sucedió en su momento acerca del tope de fecha con Dylan y Amelia. He leído acerca de eso en los libros y... Espero estar cuando... específicamente ocurra... eso.
En este momento debo mantener mis pensamientos fijos en el futuro de mi reino. Afortunadamente no ha sucedido nada. Las cosas siguen estando en paz; por ahora. Una guerra se aproxima y es probable que se haga historia y pase entre generaciones. Reinas contra reinas. No quiero ni imaginar cuantas vidas se perderán en ese día. Y antes de fallecer necesito... que alguien tome mi puesto.
Por esa y otras razones que incluyen a la persona que traje a la vida, he estado visitando las tierras del Sur continuamente. No es normal que cada mes me la pase más de una semana alejado de mi reino. Sin embargo... es necesario, aunque no esté segura de sí lo aceptara.
Hannah es hermosa, leal y fría. No posee ninguna pisca de afecto; no obstante, me sorprende que Kara no haya preguntado respecto a ese comportamiento. Supongo que Hannah ha estado haciéndolo bastante bien para que ella sienta ese poco cariño que requiere de su parte.
Al pasar el tiempo he estudiado y aprendido muchas cosas que he puesto a prueba en mi reino. Los Kaiser, Aslandar, Ranter y Baristar, son... sorprendentes; al estudiar las características de cada uno, se han ganado mi respecto. Pero... sí tomo en cuenta las diferencias de las actuales líderes Kaiser... Diana, es la más fuerte. Sin embargo, no se ha podido comprobar en una pelea física quien de las tres quedaría en pie.
Lo que quiere decir que Barbara y Hannah, tienen las posibilidades de estar al alcance de Cavendish, pero eso tendría que asegurarse, aunque dudo que suceda un encuentro entre ellas. Hannah no quiere saber absolutamente nada de Diana. Y Barbara... lleva actualmente una buena relación de amistad con ella.
Suspire y cruce mis brazos. Solo espero que... Akko y Cavendish... tomen la decisión correcta. Su situación es complicada y ninguna de las dos desea que sus hijos salgan heridos; es demasiada complicada ahora que lo pienso mejor. Pero... ¿Dylan escuchara si hablan con él?
Cambie mi mirada, observando de reojo a la líder. ¿Ella aceptara si se lo pido? Volví a suspirar y la llame.
—Hannah.
Ella, giro a verme con desinterés.
—Concédeme... un hijo más.
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Fin del Cap. 79
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¿Que sabemos?
-En este capítulo, Amelia está cerca de cumplir sus cuatro años. Lo que quiere decir que Dylan lleva un año desaparecido.
-Diana, sigue en busca de Dylan, aunque le hayan dicho que esperara.
-Akko ha estado desanimada por la desaparición de su hijo.
-Harry, ha estado visitando las tierras de Benum para estudiar los cambios de Amelia.
-Amelia, no es de dirigirle la palabra mucho a Harry.
-Harry, esta poniendo a prueba su aprendizaje.
-Algunos humanos han hecho lazos con Kaiser; la población aumenta y las diferencias se va normalizando.
-Los Kailer, son Kaiser salvajes que viven más allá de las tierras gobernadas por líderes.
-Amanda, llevara a su hija por primera vez a su hogar.
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