~Dedicado a maum26 y TamiLareia mis fieles lectoras~

"Si dos personas están destinadas a estar juntas no importa cuánto tropiecen, siempre se encontraran al final del camino"
********************************

La casa de mi madrina es muy grande y lujosa con ventanas de cristales por doquier y sofás de cuero negro. Carlos no está en casa ya que se fue de vacaciones donde sus abuelos en España, mi madrina me llevó a la habitación de huéspedes que se encuentra en el tercer piso. Le pedí que me dejara sola para instalarme y cambiarme de ropa

—Cuando termines hazme el favor de ir al supermercado ¿si? Te espero abajo linda—dijo y cerró la puerta dejándome sola

Una cama con sábana de seda bastante cómoda donde me recuesto para procesar que volví a verlo y no hice absolutamente nada ¿fue real? ¿En realidad es el? O solo es mi imaginación. Me di una ducha en el baño de la habitación y me puse un vestido por encima de las rodillas y me hice una coleta decorada con pasa pelos. Baje las escaleras casi sin aliento porque son muchas y me parecen un laberinto, mi madrina está sentada leyendo un libro con sus lentes de contacto y frunciendo el ceño

—Que voy a comprar—le pregunte un poco ansiosa por salir y explorar la comunidad

—3 libras de arroz y 2 latas de maíz—me pasó unos cuantos billetes—Ah y unas sodas

—Bien—le dije y me dirigí a la puerta para salir de la casa

Por aquí soy hay casas lujosas que parecen de personas ricas, ella no lo es pero esta muy bien económicamente. Al frente hay una casa de un aspecto vintage con un balcón grande y arriba en el techo se ve de lejos una habitación. En el balcón hay un chico con un periódico lo cual le tapa cara, pero se veía un poco su cabello y es idéntico al de Jou, no te hagas ilusiones Maddi

Compre las cosas en el supermercado lo más rápido que pude y regrese a casa de mi madrina, antes de cerrar la puerta mire hacia aquel balcón pero ese chico ya no estaba. Deje las cosa en la cocina pero mi madrina no estaba por ningún lado, seguro se fue a su habitación. Cada vez que vengo a su casa puedo ir donde quiera sin su permiso porque a diferencia de mi madre ella si confía en mí. El timbre de la casa sonó desesperadamente y corrí a abrir la puerta lo más rápido que pude, mi corazón bombeo mil veces por minuto al verlo hay en la puerta con los brazos abiertos en señal de que valla abrazarlo. Mi cuerpo deseaba tanto volver a sentir su calor que no dude ni un segundo el abrazarlo pero esta vez no fueron lágrimas sino una sonrisa que iluminaban nuestros rostros

—Te extrañe tanto Jou—fui muy cuidadosa con mis palabras ya que si es un sueño no quiero despertar—Dime que eres real dime que no es un sueño

—Soy tan real como el amor que sentimos—sonreí de oreja a oreja. Esas palabras la había escuchado antes

—No entiendo, qué haces aquí

—Vivo al frente, Maddi estas hermosa no te imaginas cuanto te extrañe—en ese momento todas las ideas que pasaron de mi cabeza como olvidarlo y empezar mi vida sin él desaparecieron

—Que crees, que vienes y apareces de la nada y todo será como antes—entiendo que él se fue a la universidad pero yo estoy muy dolida

—Maddi yo...—no lo deje hablar

—Vete Jou, desaparece otra vez como lo hiciste hace meses—mire su cuello y ahí está la cadena intacta, él bajo la vista a mi mano y sonrío al ver que tengo el brazalete. Me volteé para entrar a la casa peor antes de que la abriera me abrazo por atrás y me acorraló con sus fuertes brazos, en mi defensa ya no podía hacer nada ya que él es mi debilidad

—Vamos a mi casa tenemos que hablar por favor—me volteo y me lo dijo a unos centímetros de mi. Me mordí el labio y asentí en realidad quiero hablar con él no sé qué gano haciéndome la difícil

Cruzamos la calle y entramos a su casa. Su casa es aún mucho más grande que la de mi madrina pero esta está decorada con un estilo rústico, por el silencio que hay supongo que no hay nadie en su casa solo nosotros. Lo seguí y subimos las escaleras al parecer la habitación del techo que vi por fuera es la de Jou

Es una habitación hermosa y organizada me llamo la atención un estante de trofeos que tiene y una hermosa foto de cuando era bebe, hermoso como siempre, me senté un poco tímida en un sillón grande que hay con muchos cojines y él se sentó en su cama y encendió la plasma y colocó un programa.

—Ven siéntate aquí conmigo Maddi—dijo con su bella voz

—No, me da un poco de pena

—Eso no tiene nada de malo—tiene razón así que me escabullí en su cama. El me abrazo y me recosté sobre su hombro viendo el programa en la televisión

El me contó cómo le ha ido a la universidad y las buenas calificaciones que tiene, volverá a Londres en una semana ya que eso fue lo que le dieron de vacaciones, yo le conté que hice nuevos amigos y de Alan. Media hora después aproximadamente de tanto hablar ya no teníamos tema de qué hablar así que nos quedamos en silencio viendo la televisión

Todo volvió a ser como antes y Jou y yo volvimos a ser igual de felices como hace un par de meses, supongo que tendré que acostumbrarme a que venga por una semana cada vez que pueda hasta que cumpla la edad que necesito para así poder estar juntos sin ningún problema

Jou empieza a acariciar mi pierna que está al descubierto por el vestido eso provocó que me engranaje, lo mire y lo bese. El se colocó enzima de mí con mucha delicadeza empecé a acariciar su espalda a medida del beso lleno de amor

—Maddi prométeme que nos volveremos a ver—me dijo Jou

—Nunca dejaremos de vernos

—Te amo bonita

—Te amo mi ángel

Me quede dormida sobre el pecho de Jou y el también quedó dormido

Ya ven como estamos juntos a pesar de los obstáculos ¿qué la edad importa? Por supuesto que no la edad es solo es número ¿qué si seguimos juntos? Por su puesto. Él amor imposible no existe solo que hay personas incapaces de luchar por el. Jou llegó de la nada a mi vida y se convirtió en mi todo este no es el final de nuestra historia de amor. Es solo el comienzo nuestra promesa será cumplida y si vienen más obstáculos lo enfrentaremos juntos le amor todo lo soporta así que esto no es el final de nuestro loco y verdadero amor. El verdadero amor no tiene final feliz simplemente porque el verdadero amor no tiene final.