Hagamos un reencuentro de todas las personas que hacían la situación embarazosa. Por un lado estaba mi familia que no sabía nada y me miraba con curiosidad a ver mi cara atónita.

Jou, Yen y Mal (Principalmente Jou y Mal) Las personas que me habían hecho pasar los tragos más amargos de mi vida, que una vez me habían pintado un mundo de colores y creía que todo era perfecto. Me estaban mirando fijamente y me revolvia el estómago, aún así nada me impresionó mas que ver lo hermoso y sexy que estaba Vid con su traje gris.

—Qué hacen aquí—pregunté indiferente a Hil

—Sabes que estudiaron aquí—me susurró rápidamente antes de que Vid estuviera a mi lado—Es normal que los chicos de generaciones pasadas vengan a las graduaciones

—Bien, llevate a mi familia, aún debo hablar con Vid

—De acuerdo—dijo alejándose a dirección de mi familia

Por fin pude olvidarme de los problemas por un momento, mi familia se había ido a sentar y Jou y Mal siguieron en sus asuntos. Era momento de concentrarme en mi momento con Vid, la persona que realmente me importaba.

El se acercó con un hermoso arreglo de globos dorados y negros, que decían "Feliz graduación Maddi", eran hermosos y grandes que casi me podían cubrir, el con el cabello peinado hacia atrás, aunque se le escapaban uno que otros rizos lo que lo hacia ver mas sexy aún.

No sabia que decirle, la última vez que hablamos fui muy grosera con el. Me sentí una mala persona, no sabia si debía disculparme antes de que el me dijera algo o cuales eran las palabras exactas para no arruinar este momento. 

—Estás hermosa—fue lo primero que dijo al estar a mi lado y mi corazón empezó a latir rápidamente

—Gracias—le dije con entusiasimo— También estás hermoso

—Lo sé—dijo riendo

Dijo extendiéndome el hermoso y grande arreglo que me había preparado por mi graduación, habían varios jóvenes observando y susurrando, incluso eché una mirada en dirección a Mal ytambién vi que estaba mirando. Me gustaba ver el mundo arder, siempre y cuando yo provocara el fuego.

—Gracias... ¡Está bellísimo!—grité emocianada, la música que indicaba que la ceremonia estaba a punto de comenzar había empezado a sonar a todo volumen—Oh, debo irme ya

—Si, vamos dejame ayudarte—sonriendo tomó el arreglo y lo llevó junto a mi familia en donde el se sentó con ellos

Sonreí y sentí que todo estaba volviendo a su lugar, el le caía bien a mi familia y al parecer no fue necesaria una disculpa porque actuó  como si nada hubiese pasado. Aunque quería hacerlo de todos modos, pero no ahora, no quiero arruinar la noche mas importante de mi vida.

Los graduandos nos sentabamos en otro lado, divididos del público. La directora se colocó frente al micrófono dando inicio a la ceremonia y me puse a reflexionar.

Terminas un ciclo, cierras un capítulo, te despides de personas y lugares que tal vez ya no frecuentarás, pero que han formado parte de tu vida por algún tiempo. Crecer duele.  Pero al mismo tiempo no puedes evitar entusiasmarte por la nueva etapa que próximamente empiezas. Nuevos sueños, nuevas metas y retos, nuevas personas y nuevos lugares. La aventura continúa. En la escalera todavía hay peldaños por subir.

Tiempo de graduación es tiempo de despedida, empiezas a darte cuenta de que disfrutabas las clases de “mate”, los muffins de la cafetería, te atemoriza pensar qué harás ahora sin el “Nerd” de la clase que te explicaba las ecuaciones, y hasta te preguntas si la vida no será muy aburrida sin los molestos ''bullying''. Habrá compañeros que en efecto, no volverás a ver, pero muchos de ellos podrán seguir siendo parte de tu vida, y algunos de ellos, te acompañaran por siempre.  No importa dónde estén, no importa cuánto tiempo pase, se buscarán, se encontrarán, y formarán parte uno de otro de su misma esencia. Harán un sitio en Facebook para continuar la historia, donde aún con canas, seguirán siendo los mismos jóvenes de siempre.

El ciclo de la vida continúa, y muchas veces cada final es un nuevo comienzo, una libreta en blanco, una nueva oportunidad, ser como siempre has querido ser, hacer lo que siempre has querido hacer, cambiar lo que siempre has querido cambiar.

Como era de costumbre en las graduaciones todos lloramos con el discurso, incluso los que durante todo el ciclo escolar se la pasaron molestando y fingiendo que no les importaba la escuela y los demás. Era evidente que ahora esas personas serán de las que más íbamos a extrañar, nos entregaron el diploma a todos por aula y por número de lista. Al llegar mi turno estaba muy nerviosa, temía caerme en el estrado, me paré y no miré hacia atrás pues sabía que me iba a poner nerviosa si veía a todos los chicos mirando cada paso que daba, sólo miré mi familia que sonreían.

Y allí estaba el lado de las personas más importantes en mi vida siendo una de ellas. Quién iba a imaginarse que él iba a ser esa persona que estaría al lado de mi familia compartiendo este momento tan memorable e inolvidable, le guiñé un ojo mientras tomaba mi diploma y volvía a mi lugar al lado de mi mejor amiga. Al terminar la ceremonia todos nos paramos y tiramos nuestras birretes al aire mientras nos abrazamos, brincabamos de alegría celebrando que no sabíamos graduaron. Ahora la familia y el público que estaba a un lado se dispersaron y nos mezclamos todos mientras nos felicitaban se hizo un tapón de personas y me perdí a la multitud buscando a mi familia.

Buscaba con la mirada mientras caminaba por todos lados pero no los veía hasta que vi a esta persona dirigiéndose justo a mi lado. Jou se acercó lentamente con una sonrisa y lo miré confusa... En serio después de todo lo que pasó te atreves a venir con una sonrisa hacia mí?.

—Hey, felicidades ¡Lo lograste—dijo con una emoción que no sabía si era verdadera o no

—Gracias—le contesté, quiero demostrarle que no me importa hablar con el o no

—Veo que ya tienes novio—soltó de golpe

—Si, estamos mejor que nunca—le restregué en la cara. Estaba sorprendida por su hipocresía

—Que bien por ti—dijo tranquilo, y mi cólera aumentaba

Para ser sincera pensé que mi reencuentro con él sería diferente, creí que desde que lo volviera a ver le iba a dar una cachetada y a reclamarle mientras lloraba porqué me había engañado. Ahora sentía como si no me importara, sólo me molestaba un poco sus agallas de hablarme como si nada hubiese pasado, ni siquiera pedirme una disculpa.

—Si—me limité a decir, lo deje con las ganas de que le preguntara si el también tenía pareja

El se iba acercar a mí como para darme un abrazo yo ya estaba preparada para empujarlo o golpearlo hasta que sentí unas manos gruesas y suaves por mi cintura que me hizo retroceder, reconocía ese perfume sin tener que mirar a la persona que lo traía, era Vid.

—Aquí estas—me susurró en los oídos mientras estaba de espaldas mientras el me abrazaba

—Hola—me di la vuelta y le di un rápido beso

—Tu familia te espera, vamos—me dijo Vid ignorando la presencia de Jou

—El es tu novio, Maddi?—preguntó Jou con altaneria

—Si, lo soy—contestó Vid, era obvio que no le había gustado el tono de Jou —Y tu quién eres?

—Vámonos amor, yo te explico—le dije tomando su mano y llevándolo a otra parte

Caminamos entre la multitud a un lugar más apartado, quería contarle antes de que empezara a escuchar falsos rumores u otra persona viniera contarle. Así que cuando estábamos ya solos y me aseguré de que nadie pudiera escuchar le conté que él era mi ex novio.Le hice un rápido resume y lo que él me había hecho y como me había engañado, y porqué estaba hablando con él. En ese momento se quedó pensativo pero lo comprendió y esa era una de las cosas que me gusta de él, que él es maduro para entender las cosas a diferencia de mi que siempre he sido una niña hasta cuando se trata de amor.

Lo abracé y le agradecí por su comprensión y le prometí que luego le iba a contar todo los detalles pero él entendía que no era momento para hacerlo, así que nos dirigimos a buscar a mi familia. Cuando los encontramos todos me abrazaron y estaban felicitandome por mi logro, luego de charlar un poco con ellos se fueron porque la fiesta estaba a punto de empezar y mis padres no querían quedarse, acordamos en que luego iban a pasar por mí o en dado caso el padre de ir Hil me llevaría a la casa porque conociendo mi familia se iban a dormir y a caer rendidos para venir a buscarme.

Antes de que mi familia se fuera fui al baño con mi hermana y me puse un vestido corto del mismo color, era uno que le hacía juego al que traía pero uno era largo y otro era corto, me puse unas botines para poder bailar. Ya no aguantaba más esos tacones.

Así que finalmente ellos se fueron, me solté el cabello y me dirigí hacia el salón con los demás chicos que estaban esperándome para empezar a divertirme.... O eso pensaba porque nunca puede faltar un obstáculo. Mal  se acercaba hacia nosotros acompañada de Jou y Yen. Vid al saber que era mi ex ahora lo miraba con más indiferencia pero tranquilo, él sabía que él no era un rival para él, era muy seguro de sí mismo y eso me hacía quererlo más con su aire de superioridad que lo hace ver muy sexy.

—Hey chicos cómo están?—dijo Mal saludando a algunos de los chicos que estaban con nosotros que ella conocía ya que estudiaba en esta escuela antes

Los chicos la saludaron mucha alegría y yo la miraba de arriba abajo y le sonreí, ya no me importaba la presencia de estos tres, sin embargo noté que ella estaba un poco tomada.  Pero cómo logró entrar bebidas alcohólicas a la escuela si está prohibido en esta fiesta.

Ella sacó de su bolso aparentemente un pote de refresco. Miré a Vid que me miró seriamente, sabía los problemas que podría causar este tipo de acto, todos sabíamos que no era refresco lo que contenía y nos quedamos en silencio.

—Vamos chicos es su graduación y deben divertirse—Comenzó a decor Yen—Todas las generaciones hacen lo mismo y nunca hubo un problema

—Es cierto ¡A divertirse!—dijo uno de mis amigos tomando el pote de refresco que tenia ron para darse un trago y luego pasárselo a los demás

—Vamos a otro lado Maddi—me susurró Vid—no quiero que tengas problemas

—Si—le dije y empezamos alejarnos pero Jou nos gritó

—Por qué te la llevas?... No quieres que comparta con sus amigos—dijo con ironía—Jaja la tienes en una burbuja

—Cúal es tu maldito problema?—dijo Vid furioso acercándose a Jou con indiferencia

—Yo te diré cual es mi problema—contestó Jou levantando la mano

Cerré ojos y suspiré, no quería que la mejor noche de mi vida terminara siendo la peor por culpa Jou.