Era un Lunes, Yosuani trabajaba y enfrentaba la maldad de algunos ricachones que iban con mucha frecuencia al restaurante y lo peor era que estos eran amigos de su jefe.

Josh: Yosuani, quiero que traigas el mejor vino del restaurante para mis amigos y yo festejarmos la promoción de ellos.

Yosuani: Jefe, eso no está bien, pues el restaurante tiene algunas deudas y estos vinos son muy caros.

Josh: ¿Y eso qué? Yo soy el dueño y si te mando traer el mejor vino, tú me lo traes y punto. (Le pegó). Si sigues molestando te despido.

Yosuani: No, por favor. Yo necesito de ese empleo.

Josh: Entonces póngase en su lugar.

Después de un largo día de trabajo, Yosuani ya casi se iba a la casa cuando apareció Diana, la hermana de su jefe.

Diana: ¿Qué te pasó, Yos? (Preguntó al ver su rostro rojo).

Yosuani: Nada, no te preocupes.

Diana: ¿Fue Josh, no? Es que de verdad no entiendo porque hace esas cosas, creo que mi hermano se está volviendo loco.

Yosuani: No le diga nada a mi jefe, por favor.

Diana: Él no puede hacer esas cosas y esa regla que mujeres embarazadas no pueden trabajar es tan machista, pero no voy a decir nada ahora. (La abrazó). Te llevo a tu casa.

Yosuani: Gracias por ser tan buena amiga. (Sonrió).

Diana llevó Yosuani, cuando ella ya se había ido, Yosuani entró y vió ropas por el piso, entonces corrió hacia su cuarto y cuando abrió la puerta cachó a su esposo con su amante en la cama.

Yosuani: ¡IVÁN! (Gritó y de pronto los dos brincaron de la cama).

Iván: No te voy a dar explicaciones, pues estás viendo todo lo que necesitas ver.

Yosuani: ¿Por que, me traicionaste? ¿A caso no fui una buena esposa para ti?

Iván: Estabas siempre trabajando cuando yo necesitaba tu atención y me busqué una mujer que estuviera libre para mí.

Yosuani: Eres un maldito traidor.

Iván: Mejor, si soy un maldito traidor como dices, puedes irte a buscar otro lugar en donde vivir, pues muy pronto te llegarán al restaurante los papeles del divorcio.

Yosuani: Si existe justicia en este mundo, vas a pagar por lo que me estás haciendo.

Iván: Vete de mi casa.

Yosuani sin rumbo y sin saber que hacer ahora que no tenía donde vivir, salió andando por las calles y justo cuando estaba embarazada.