Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 11

Al llegar a casa ya había oscurecido notoriamente y Pía tuvo la idea de que las tres durmiéramos en unos colchones inflables en la sala, una especie de pijamada improvisada.

—Traje las bebidas.—Atalia había escondido un par de cervezas en su maleta para el viaje.

—Yo la comida. — dice Pía poniendo palomitas y dulces en el suelo.

—Y yo las amo mucho.—digo sonriéndoles.

Luego de comer y beber un rato Pía empieza con su interrogatorio.

—Entonces...Tom ¿eh?—dice señalando a Atalia mientras levanta un ceja

Yo solo me río viendo como Atalia se pone roja roja.

—Me contaron por ahí que andan intercambiando ropa.—dicho esto Atalia me mira como el exorcista, sonrío inocentemente.

—En mi defensa fue su idea.—dice mi muy sonrojada amiga mientras ríe nerviosa.

—¿Entonces? ¿Ya son novios o que?—pregunto.

—Aún no. — dice desanimada. — Pero creo que pronto.

—Aww.—digo abrazando a mi almohada

—Bueno ahora...Melanie.—las dos me miran con una sonrisa de que me mataran en cualquier comento.

—¿Qué?—pregunto.—Si no recuerdo mal fueron ustedes las que me obligaron a ir a una cita con un completo desconocido. —frunzo el ceño pensando las diversas maneras que podría funcionar para cancelarlo.

—Ni lo pienses.—dice Atalia.—Iras.—yo solo bufo molesta por su telepatía.

Diablos ¿tan obvia soy?

—Como sea no me refiero a él, me refiero a Luca. — continua Pía, luego de tocarse la cabeza disimuladamente, supongo que temiendo que Atalia lea sus pensamientos también.

—¿Qué pasa con él?—pregunto confundida.

—Has pasado bastante tiempo con él desde...—me mira preguntándome con la mirada si puede decirlo yo asiento. — desde lo que pasó con Marcus, sin mencionar que Luke los vio dormidos en el sofá.—sonríe picara.

Luke, Luke...la que te espera traidor.

—Fue sin querer, estaba lloviendo, vimos una película y nos quedamos dormidos.—digo

—Te gusta.—afirma Atalia mirándome seria.

—¿Qué? ¿Cómo creen chicas?—digo.—Nos conocemos hace como menos de una semana por Dios.

—¡Eso no tiene nada que ver!—dicen al unísono.

—No mentiré, es guapo y un gran chico pero dudo mucho que me guste.—digo muy en serio.

—Como digas, sé que Lucanie tiene futuro. — dice Atalia esperanzada.

—¿Lucanie? ¿En serio?—preguntamos Pía y yo al mismo tiempo luego reímos.

—¡No se burlen! Sé que terminaran juntos, apuesto 5 dólares.

Yo me limito a rodar los ojos.

—Pía, es tu turno, ¿ya tienes algún chico especial?

Ella baja la mirada haciendo que su pelo colocho oculte su cara.

— Si. — dice tan bajo que pienso que lo he imaginado.

—¡¿Qué?!— gritamos Atalia y yo.

—¿Cómo? ¿Cuando? ¿Dónde? ¿Quien? ¿Por qué?—pregunto eufórica.

—¿Por qué no nos habías dicho? ¿Ya son novios? Planearé la perfecta boda.

Nuestros saltos y gritos de emoción son interrumpidos por unas fuertes carcajadas cortesía de Pía.

—Oh chicas hubieran visto sus caras.—ríe.—Solo no puedo.—está tan roja de tanto reír que fácil se confunde con un tomate.

Atalia y yo intercambiamos miradas y en un segundo ya estamos atacando con almohadas.

—Okay, okay, rindo. — dice sin parar de reír.

Después de darle un par de golpes más recibo una llamada.

Me alejo un poco de estas pejelagartas para evitar que digan algo indebido, como siempre hacen.

Perdona abuela, te juro que me porto bien.

—¿Hola?—pregunto.

—Hola Melanie, soy Luca.—una ronca voz se escucha del otro lado y yo sonrío.

—Ah, hola, ¿Cómo estás?

—Bien gracias, solo llamaba para preguntarte si todavía está en pie lo del viernes. — me doy una cachetada mental.

Lo había olvidado por completo.

—¡Oh! ¡Claro que sí!

—Bien.—dice y tengo la rara sensación que suena aliviado. — A las siete está bien ¿no?

—Si, está perfecto.

—Bien, que descanses Melanie.—dice y cuelga.

—¡Saldrás con Luca!—el grito de Atalia me hace saltar, el celular incluido.

—¡Tonta! Me asustas.

—Dos citas con diferentes chicos.—sonríe.—Lo único que faltaba es que sea el mismo día y sería una bomba. —ríe imaginándoselo.

—Sería una catástrofe.—la corrijo. — Y no, Sebas es mañana, Lucas es el viernes. Todo altamente calculado.

—Espero que hayas comprado lindos conjuntos. — dijo guiñándome el ojo coqueta. Yo me río y niego con la cabeza.

Pasamos toda la noche hablando y riendo.

Como amo a estas chicas.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro