Capítulo 70: Por siempre.
Ha pasado un mes desde que me fui de casa, en unos días será mi cumpleaños, seré mayor de edad, se preguntarán qué voy hacer ahora, pues, ingresar a la universidad, vi que soy muy buena para actuación, me gusta dibujar, cantar, qué mejor que seguir bellas artes, estudiaré en Europa, además crearé mi propia empresa de diseño y música, gracias a los ahorros de mi vida, siento que soy útil para algo.
Contarle a mamá sobre todo esto, ya se imaginarán, casi se desmaya, iba hasta demandar a Thiago, porque él me lleva dos años y yo sigo con diecisiete, pero ya sabrán, mi superhéroe me ayudó, ahora más que nada estoy feliz con el chico que amo.
A Thiago le está yendo de maravilla, sus músicas inéditas sobre un romance prohibido, la chica que ama, las matan a las chicas solo con oír su voz, yo las entiendo. Nuestro romance sigue siendo un secreto, Thiago publica fotos o videos de los dos, pero no se ve mi rostro, primero quiero cumplir los dieciocho por temas legales, no se hasta donde pueda llegar mamá, pero lo mas importante es que todas esas fanáticas saben que el corazón de Thiago tiene dueña.
Le conté a Maya sobre todo lo que pasó, cada detalle, ella quería matarme por lo que le oculté, pero luego supuso que era algo que también haría y me perdono, mi amiga sigue siendo feliz con Luis, la veo más enamorada que nunca.
-Amor, debemos ir a comprar sus libros- sí, ahora Thiago me dice "amor", y también me compra mis libros favoritos.
-Gracias por recordarlo- me acerqué y le di un beso.
-Llamaré a Luis y le diré que llegaré algo tarde.
-Sino puedes ahora, lo dejaremos para mañana.
-No, siempre tengo tiempo para usted.- Luis seguía siendo el manager de mi novio, así que estaba con nosotros, Maya se ponía algo triste por no acompañarnos, pero dijo que algún día vendrá de sorpresa y se quedará en esta nueva aventura.
Al principio era algo vergonzoso estar en una habitación a solas con él, pero luego nos fuimos acostumbrando a sentir el calor de ambos, no te imagines cosas que no son, tanto él como yo, esperamos el matrimonio, no es necesario que pasé algo para no dormir juntos, respetamos los designios del señor, aunque un día me puse, como decirlo ¿en llamas?, bueno ustedes sabrán, no soy buena para hablar de este tema, pero luego Thiago solo me abrazó y me dijo "dos cosas cariño, una debemos cumplir aquella promesa ante Dios y dos, no quiero que su papá me mate", tenía buenos puntos.
Varios días después.
-Feliz cumpleaños mi niña hermosa.- Thiago me llevó el desayuno a la cama.
-Al fin legal- le sonreí abriendo apenas los ojos.
-Su mamá ya no querrá enviarme a la cárcel.
-Tenlo por seguro que no.
-¿Está lista para hoy?- dijo mientras ubicaba el desayuno sobre mis piernas.
-¿No tenías reuniones?
-Todas canceladas, prefiero estar con mi chica a que escuchar charlas aburridas.
-Thiago...
-Mi manager se encargará de eso.
-¿Enviaste a Luis a escuchar charlas aburridas para tú poder estar con tu novia?
-Sí, eso mismo.
-Se lo merece.
-¿Ahora está de mi lado?- ambos sonreíamos.
-La vez pasada que quería hablar con Maya por videollamada y él interrumpió y no pude hablarle.
-Entonces bien merecido.- en medio de ese momento, alguien tocó a la puerta.
-¿Quién es?- pregunté.
-La primera sorpresa del día.
-¿Ah?- Thiago se levantó y se dirigió a la puerta, yo solo me arreglaba rápidamente, podían ser mariachis o algo así y yo estaba aún en pijama.
-¡Sorpresa!- exclamó Thiago.
-Pero hace un momento tú...
-Yo soy la sorpresa.- una pequeña figura apareció detrás de Thiago.
-¡Maya!
-¡Maddy!
-¡Mis oídos!- tras el quejido de Thiago, salté de la cama y abracé a Maya con todas las fuerzas, en serio la extrañaba.
-¿Cómo? Tu...estás.
-¡Sí!
-¡Ahh!- ambas gritamos.
-Chicas deben controlar esos gritos.
-No te quejes niño, acuérdate que nunca me contestaste las llamadas el año pasado.
-Fue por algo bueno- añadió con su tierna voz.
-Y volver a ver a mi mejor amiga lo es por dos, ahora déjanos gritar tranquilas cuñado.
-Bien, pero....
-¡ESTÁS AQUÍ!
Hoy era mi cumpleaños número dieciocho, mi mejor amiga estaría conmigo, iba estudiar en la misma universidad que yo, obvio otra carrera, a ella le fascinan los números, nada que ver con el arte, el punto es que, los cuatro mosqueteros estaríamos juntos en este nuevo trayecto, ¿qué más puedo pedir?
-¿Lista para la siguiente sorpresa?- ya iban a ser las cuatro de la tarde, Thiago en todo el día me a dado regalos tras regalos, mi familia también me llamó a felicitarme, me había olvidado de decírselos, papá llorando, Daniela orgullosa de mí, mis padrinos aceptando el hecho que crecí y ahora soy feliz, mi mamá aun asimilando que le dije ogro por un tiempo, según mi papá habla con ella todos los días para que termine de una vez con todas con la obsesión de dominar mis decisiones y por último, Jacob, mi primer novio, mi primer beso, mi mejor amigo, mi hermano, mi perrito fiel, el mas grillo de todo el internado, él seguía su vida de universitario en Estados Unidos, al final de cuentas siguió ingeniería en sistemas, siempre ha sido bueno para la tecnología, lo apoyo porque es muy inteligente y le irá bien, seguimos en contacto, somos más unidos que nunca, como siempre nos tratamos como los hermanos que somos, la mayoría de veces cuando me fui de casa me llamaba y me contaba todo lo que pasaba, luego cuando se fue a estudiar me llamaba para decirme como le iba, en serio extrañaba esa parte de él.
-Thiago son muchas sorpresas por hoy, no creo poder con tanto.
-Está es la última, se lo prometo.
-Muy bien, ¿dónde me llevarás esta vez?- en la mañana al parque, luego a un restaurante lujoso, a la plaza inmensa, día de spa, muchos lugares por hoy.
-Solo será una hora de viaje.
-¿Viaje?
-No será sorpresa si se lo digo.
-Esto es injusto.
-Solo confié en mí.- como no decirle sí a esos ojos.
Me cubrió los ojos hasta subir al avión, ¿es que siempre le hacen esto a Maddy con las sorpresas?.
-¿Ya puedo abrir los ojos?- según lo que escuché ya habíamos llegado.
-Sorpresa.
-Aeropuerto.- mencioné-Un buen lugar.
-Sí, tiene razón, le cubriré de nuevo los ojos.
-¡Thiago!- minutos mas tarde, seguía vendados los ojos, un oficial nos vio y pensó que estaba secuestrada.
-¿Ahora sí?- ya iba a ser de noche y seguía guardando el misterio.
-¡Sorpresa!
-Estamos en...¡Paris!- en frente mío esta la gran torre Eiffel, toda reluciente.
-Feliz cumpleaños mi amor.- Las lágrimas empezaron a salir.
-Es el mejor cumpleaños de todos.
-No llore mi niña.
-Eres lo mejor que me ha pasado en mi vida.- me acerqué y lo abracé, se me hacía raro que él no llorara, siempre ha sido sentimental.
-Usted es lo mejor que me pudo pasar.- hablé muy pronto, al volverlo a ver, vi esas lagrimas surgir.
-Te amo.- ese fue un gran momento mágico entre ambos.
Thiago había reservado una cena en la gran torre Eiffel, siempre se reserva con meses de anticipación, tuvo suerte en encontrar una reservación. Estábamos cenando, teníamos una gran vista al frente, literalmente sigo viviendo en un cuento de hadas; unos minutos después a mi celular llegó una notificación, lo revisé por encima de todo y me di cuenta que Thiago me había etiquetado en algo.
-Amor...esto es muy lindo- lágrimas volviendo a iniciar, Thiago había subido fotos juntos, y otras donde solo aparecía yo, algunas de cuando salíamos a las citas escondidas del internado, escribió un parlamento en aquella publicación.
-Quiero que esos dos puntos tres millones de personas que me siguen en redes se enteren de una vez por todas quien es la dueña de mi corazón.
-Ahora podemos anunciar a los cuatro vientos sin importar nada, que nos amamos.
-Y estaremos juntos hasta el final.
Palabras del post de Thiago.
Hoy es un día muy especial, antes les mencioné que una personita era dueña de mi corazón, no podía enseñarles hasta este momento quién era, porque créanme que además de ser este un amor prohibido, han pasado muchas cosas más allá, pero cada esfuerzo tiene su recompensa, quiero decir, cada lagrima, cada distancia, cada obstáculo que se atravesaba en nuestro camino los hemos podido superar, por el inmenso amor que nos tenemos. Hoy es el cumpleaños de mi niña hermosa, Maddyson Garcés, la niña que cautivó mi corazón desde la primera vez que la vi, han pasado exactamente dos años desde aquel instante y estoy agradecido a Dios por haberme puesto en su camino y al destino por poderla hallar después, sé que muchos no lo entenderán, pero después de vernos por primera vez, no volvimos a hacerlo hasta después de un año, pero lo conseguí, nunca me rendí, nunca lo hicimos, siempre estuvimos unidos el uno con el otro, porque ambos nos complementamos, como lo dije antes, nuestro amor fue prohibido, pero nada nos detuvo en creer que lo haríamos, seguiríamos estando en nuestras vidas y ahora nada lo impedirá, puedo gritar a los cuatro vientos ¡Amo a Maddyson Garcés! Sin que pasé nada, porque seremos más fuertes que nunca, nuestro amor lo está, solo me queda pedirle a Dios que siempre proteja a esta niña hermosa, que siempre estaré apoyándola en lo que sea y que nunca la dejaré sola, este es nuestro nuevocomienzo, nuestra nueva vida y aventura, Feliz cumpleaños amor, la personita que hizo que todo cambiará dentro de mí.
FIN.
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