Capítulo 44: Soy el más feliz.
Thiago.
El día sábado quince de diciembre queda enmarcada como la mejor noche de mi vida, Maddyson Garcés, la niña con la que choqué en el apagón de la feria, ahora es mi novia.
Aquella noche llovía muy fuerte, mi corazón latió muy rápido cuando dijo que me quedara a su lado, realmente confía en mí para habérmelo pedido y yo la respeto mucho en cada uno de los sentidos. En media noche, me fijé que ella estaba dormida, podía ver a la dulce niña dueña de mis ojos dormir como un ángel, sin pensarlo, ella se acercó a mí y me rodeo con sus brazos, quería despegarme de ella, esperaba que no pensará que yo lo hice a propósito, pero era inevitable, después de todo al amanecer seguíamos de aquella forma, cuando se dio cuenta se sonrojó como un tomate, no debía reírme , sería descortés, se la veía muy tierna recién despierta.
Esa mañana fue de locos, no era la forma apropiada de presentarme ante su hermana, pero creo que, si me aceptó, después de todo lo que nos relacionaba a los dos era la felicidad de Maddy.
Ya era miércoles, próximos a la gran noche de navidad, ya sabrán de la dichosa idea de parejas en esa noche, obviamente mi corazón anunciaba estar con la compañía de Maddy, pero Jacob, me ganó por esta vez, no debía demostrar tristeza, no quería que se sintiera mal, después de todo ella accedió a ir con Jacob, que ante los ojos de todos él es su verdadero novio.
Nuestras compañeras y hasta las de otros cursos, me invitaban a mi a la noche del baile, yo amablemente las rechazaba, hasta Virgi, intentó invitarme de una forma muy directa, fue como "Tu y yo al baile, nos vemos a las siete" tuve que responder algo descortés en ese caso "No puedo, iré solo", pero creo que me adelanté con los hechos, si no fuera por Maya que me invitó al baile, seguirá con todas esas chicas atrás de mí. Aquel día, era ultimo en el que estaríamos con clases, hoy podíamos ir a encontrar un traje para la noche, vería a mis padres, ellos ya estaban en camino, antes de ello llamé a Maddy, quería asegurarme de que estuviera bien, me preocupé mucho al escucharla llorar, pero por suerte era una película, ella es una niña muy sentimental, es muy linda.
Mis padres ya habían llegado, los saludé, abracé muy fuerte a mi mamá, la extrañaba mucho. En el carro estaba también mi tía, mi prima ya se había ido, solo éramos nosotros cuatro en búsqueda de un traje para el día viernes... un momento ¿debo decirle a mi familia que ya tengo novia?, creo que no sería apropiado, salgo con la hija del jefe de mi papá, no hay problema en eso, el problema es que yo sería como ¿el cacho?, sí, es mejor guardarlo en secreto.
Visitamos algunas tiendas, encontré un traje color negro, y un corbatín celeste, era muy elegante, me veía bien, mi mamá hasta casi llora, yo usualmente no acostumbro a trajes, pero esta semana debía existir una excepción.
Fuimos a casa y gracias al destino, queda muy cerca de la feria, la reluciente y gran feria que cada vez que la veo tengo gratos recuerdos. Ya era algo tarde, llamé a Luis, mi mejor amigo, él llegaría a mi casa en unos minutos, quería charlar sobre algo que pasó hace casi una semana, no podía contárselo de inmediato, además quería hacerlo en persona, contarle a detalle como mi niña bonita, aceptó estar a mi lado o, mejor dicho, me permitió estar a su lado.
-Thiago, amigo mío, a los tiempos te veo- dijo saludándome con un apretón de manos.
-Así es mejor, la emoción al volverte a ver se siente más grande- bromee.
-Que cursi andas ¿no?
-Tal vez, puedo decir que pasar en el internado es lo mejor que tengo en mi vida.
-¿Qué pasó con Maddy?- pregunté algo irritado.
-¿Qué te hace pensar que es sobre ella?- le dije mirándolo fijamente.
-Cómo no saberlo, si cada vez que se trata de ella tus ojos de dilatan, y empiezas hablar así de cursi.- tenía razón.
-Estos ojos le pertenecen a ella, claro que deben hacerse así.- le respondí riendo un poco.
-O los ojos de Maddy le pertenecen a su novio.
-¿El verdadero o falso?- le pregunté muy seriamente.
-¡¿Qué?!- ahora si se exaltó un poco.
-Maddyson Garcés es mi novia, el día quince de este mes declaré todos mis sentimientos hacia ella.
-Me perdí de mucho amigo, anda, cuéntamelo todo.- así fue, luego de varias emociones que vi a cada momento en la cara de Luis, al contarle todo sobre ese día, bueno, casi todo, omití la parte de la lluvia y el hecho que me quedé durmiendo junto a mi Maddy, creo que ese momento solo es de los dos, llegó la noche en serio era tarde, Luis debía ir a su casa.
-De verdad que quieres a esa chica.
-Claro que la quiero, es por eso que te quiero pedir un gran favor.
-Acepto ser el padrino de la boda- insinuó muy sonriente.
-Primero déjame al menos arreglar todo el asunto de su novio falso, ahí hablaremos de boda.
-¿Entonces, qué sucede?- preguntó.
-Quiero que me ayudes para la noche del veintiuno.
-Pero ese día tienes tu presentación ¿no?- lo miré fijamente y me reía de forma disimulada.
-sí, sí lo es.- argumenté, yo seguí con mi mirada acosadora.
-No lo haré Thiago, eres mi mejor amigo, pero no haré eso.- se negó, ahora mi plan no funcionará.
-Si fuéramos mejores amigos, me ayudarías con eso.- De inmediato puse mi cara triste.
-No lo hagas, no pongas esa cara ...- después de un poco de drama- bien, lo haré, haré lo que pides.
-Eres un gran amigo, Luis.- le golpee levemente la espalda.
-Me tienes que presentar a alguien.
-¿qué?- ahora me confundí.
-Amigo, tienes novia, no quiero ser su mal tercio, preséntame alguna de tus compañeras, merezco ser feliz.- ¿Mal tercio?, me recuerda a alguien que conozco.
-Me disté una idea, tal vez funcioné, tal vez no, pero nada se pierde con intentarlo- solo reía en ese instante, lo miraba a Luis, él estaba con cara de miedo.
Ya era jueves, un día antes de la gran noche, también podíamos estar en casa, era un día relajante para mí, anoche charle con mi novia, aun no puedo creer que le diga así, mi novia, el punto es que al menos no discutió con su familia, era lo que debía suponer, espero no lo haya pasado mal, en fin, hoy ayudaré a mi mamá con la casa y además iremos a un chequeo de su corazón, ya en la tarde ayudaré a papá con unos documentos de su trabajo y a eso de las cinco me iré a cortar el cabello, todo está plenamente calculado.
Horas después.
No contaré a detalles lo sucedido en la tarde de hoy, en serio se pasó el tiempo, y estoy muy cansado, creí que todo estaba "plenamente calculado", pero realmente fue agotador, de un lado a otro, viaje por aquí y por allá, ¿cómo me puedo hacer dos Thiago?
Al menos alcancé a cortarme un poco el cabello, llegué con las justas, hasta estaban a punto de cerrar el local, al menos llegué a casa temprano, eran las seis y media, cenamos, lavé los trastes me fui a dormir un poco, y a lo que desperté ya eran las nueve, el momento de ensayar llegó.
-Hola niña bonita.
-Hola ojitos multicolor- llamé a Maddy, estábamos en videollamada.
-¿Qué tal su día?- pregunté.
-De aquí para allá, mi mamá enloqueció, porque se había roto un poco el vestido que elegí, por suerte y lo cambiaron, ya que luego de ese pequeño accidente se descoció por completo.
-Que pena, pero usted se ve preciosa en cualquier atuendo que se ponga.
-Que hermoso eres- me sonrió- y dime ¿Qué tal tú día?
-Llevé a mi mamá al médico, le hicieron su chequeo y todo está perfecto, luego ayudé a mi padre con algo del trabajo, fui a la feria un momento y...- me detuvo un segundo.
-¿La feria?, no sabes cómo extraño sus luces relucientes.
-Es magnifica, algún día nos escaparemos y nos vemos allá.
-Me encanta la idea, ese sería mi lugar de escapatoria de seguro- ella sonreía, es muy bella.
-La mía también, además siempre estaré a su lado.
-Eres muy tierno...- se detuvo unos instantes, me quedó viendo directamente- Thiago, es la primera vez que te veo con gorra.- su sonrisa es mi debilidad.
-¿Luzco mal?
-Claro que no, te ves muy apuesto, sólo me sorprende vértela puesta.
-Me corté el cabello, digamos que quiero guardar el nuevo look para mañana.
-Interesante, me emociona aun mas que sea mañana, para verte todo elegante.
-Y cantar en frente de todo el internado- añadí.
-Ni me lo digas, estoy con los nervios de punta.
-Estaré a su lado, todo saldrá bien.
-Buen punto, eres mi príncipe azul que hallé en una feria- ella reía.
-¿Debemos ensayar?.
-¿Ensayar?, claro que no, si me equivoco que sea mañana, ahora solo quiero momento de relajación.
-Entonces la dejaré hacerlo mi niña bonita.
-No dije que colgaras la llamada- añadió con su dulce voz.- Cántame una canción, si no es mucho pedir.
-Para mi no hay problema, todo por mi querida novia.
Charle con Maddy hasta las diez de la noche, me dijo que tenía que prepararse el rostro para mañana, yo la veo igual de hermosa.
Horas después el gran día llegó, veintiuno de diciembre la gran noche de navidad en el gran internado, ahora puedo decir que mis nervios empezaron a surgir.
-Thiago, hijo mío, ¿a qué hora debemos estar en el internado?- mi mamá también estaba ansiosa con la presentación que tendría, quería estar en primera fila.
-Desde las seis de la tarde podremos ir mami.
-Está bien, tengo tiempo para ir al salón de belleza con tu tía.
-Mamá, apenas son las doce del día.
-Exacto hijo, apenas y alcanzo- otro punto que no entenderé de las mujeres, si todas se ven hermosas sin necesidad de arreglarse tanto.
-Nadie entiende a las mujeres hijo- intervino mi papá ingresando a casa.
-Es lo que trato de hacer- estaba tan concentrado que parece que me di a notar un poco.
-Thiago, después de la ruptura de tu primera novia, no nos has vuelto a presentar a ninguna chica, hijo si tus gustos han cambiado, sabes que puedes confiar en nosotros.
-Papá, no porque no haya presentado a ninguna chica significa que no me agradan, no estoy en contra de lo que insinuaste, pero no es mi caso.
-¿Hay alguna chica en especial?- No creo que sea el momento.
-Algún día papá- dije mientras me dirigía a la puerta.
-¿A dónde vas Thiago?- preguntó.
-Voy a recorrer la feria.
-No sé para que pregunto, si ese es tu lugar favorito.
Mi lugar seguro diría yo, estuve ahí un buen tiempo, en realidad hasta las tres de la tarde, a esa hora debíamos partir de casa para llegar a tiempo, en aquellas horas me dediqué a ver todo a mi alrededor, cada vez que veo los lugares en que la conocí, mi corazón late muy fuerte, es que no entiendo que sucede conmigo, quiero muchísimo a Maddy, solo que... tengo miedo, ambos somos de mundos diferentes, con familias que piensan otras cosas, solo espero que nuestro aprecio sea más fuerte que cualquier adversidad de nuestro camino.
Maddy, es la chica más linda, interesante, respetuosa, una chica a la que no le importa nada, solo vive el momento y lo disfruta al máximo, es la persona indicada en el momento equivocado, pero haré todo lo posible para que este momento sea el perfecto y nosotros dos, lograr ser los más felices.
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