Capítulo 3
"En el hotel"
Me junté con mi mejor amiga en el metro; ella me regaló un poster de Joey junto a John Norum, y yo más que agradecida de aquel regalo, bajamos más que rápido hasta el vagón, ya que estábamos un poco retrasadas. El día justo había amanecido nublado y garuando, todo lo contrario, al día de ayer.
Quería que mi mejor amiga me acompañara a ir al hotel. Quería compartir mi alegría con ella y que ella también pudiera, si era posible, conocerlos y tomarse alguna foto con alguno de ellos.
En el vagón nos pusimos a conversar de algo, que para mí ya no tenía sentido. Mi amiga me miró.
_ ¿Cómo han estado las cosas con Bastian?
_ Hace una semana que no nos vemos
_ ¿Y no te ha llamado?
_ No ¿Y sabes? Ya no me interesa la verdad. Las cosas entre nosotros hace tiempo que no están bien
_ Lo siento amiga
_ Creí que con Bastian las cosas funcionarían, pero me equivoqué
_ No te desanimes amiga, ese tonto no te merece, verás que cuando menos lo esperes, llegará alguien que si se interese en verdad por ti – le sonreí
_ Es verdad. Ahora, este día, solo quiero enfocarme y disfrutar de que volveré a ver a Joey – mi amiga me sonrió.
_ Disculpa que insista en el tema, pero ¿Le contaste a Bastian de esto, de lo del hotel?
_ No, él no me entendería, y mucho menos, apoyaría el que ayer haya ido al aeropuerto para conocer a Joey. No sé porque razón, a Bastian le desagrada Joey y su música. Es un tonto.
_ En eso tienes razón, tu novio es un tonto, pero, aun así, sigo pensando que es una locura lo que quieres hacer
_ ¡Ay vamos amiga! Me dijiste que me apoyarías en esto
_ Claro que lo haré, pero no sé ¿Te imaginas que él en verdad recibiera tu invitación? – me puse nerviosa.
_ Sería lo más maravilloso de la tierra..., pero si no, bueno, lo intenté...
_ ¿Qué pasará cuando Bastian se entere de la ceremonia y que tú no lo invitaste por invitar a... ya sabes quién? – me tensé.
_ La verdad, no lo sé
_ Y si esta otra persona no acude a la ceremonia ¿Qué va a pasar? – más me tensé.
_... No quiero pensar en eso, justo ahora...
Preferí mostrarle la tan bonita foto que me tomé con Joey y mi amiga asombrada, me sonrió y luego yo le conté todo lo de ayer.
Nos bajamos en la estación "El Golf" y corrimos a las escaleras. No sabíamos por cual dirección teníamos que salir de la estación, para encontrar el hotel, el que estaba justo a la salida de esta.
Ansiosa, me acerqué a una señora y le pregunté y ella cordial, me indicó que salida debíamos tomar y yo agradecida, volvimos a correr con mi amiga.
Vimos a unos pocos fans a las afuera del hotel y nosotras nos acercamos. Ellos nos sonrieron y yo les presenté a mi amiga para luego en instantes, conversar que la banda, probablemente, aún estaba en el hotel.
La gente pasaba frente a nuestro pequeño grupo y nos miraba con extrañeza, pues al parecer, nosotros éramos muy evidentes frente a la espera de Europe.
<< ¿Cuándo saldrán? >>
Eso pensé con nervios y seguí conversando con los demás fans. Era obvio, les conté de mi experiencia vivida con Joey.
Llegaba y salía gente de aquel hotel y los guardias tenían la mirada clavada en todos nosotros.
De pronto, llegaron dos van y nosotros las miramos con atención.
<< ¿A caso, esas van son para ellos? >>
Reunidos, decidimos que uno de nosotros tenía que acercarse hacia la entrada y averiguar si ellos estaban ahí. Todos nos pusimos nerviosos; nadie se atrevía a ir por los pesados guardias, hasta que mi amiga se armó de valor.
_ Yo voy...
Solo dijo y caminó hacia la entrada, y todos nosotros la miramos sorprendidos.
_ Esa es mi amiga...
_ Que personalidad tiene...
Mi amiga valiente y con personalidad se acercó a la entrada, pero no vio a nadie adentro.
Sin más, nos colocamos frente al hotel y con los nervios ya a punto de comernos, las puertas se abrieron. Mi corazón se aceleró y para calmarme, quise tomarle una foto a nuestro pequeño grupo de fans. Ellos posaron para mí; yo conté a las tres y todos me sonrieron y yo se las tomé.
Vi de pronto a John Leven y con ansias, no me controlé; lo apunté con el dedo y lo nombré. Él me vio y se devolvió.
_ Se devolvió... - dijo desanimado uno de mis compañeros a punto de asesinarme.
_...
_ Guardemos la calma por favor – dijo casi histérico y nosotros tratamos de controlarnos.
Mick, el tecladista, salió, y nosotros tranquilos, nos acercamos a él.
Llamé a mi amiga, para que también se acercara, pero ella me retuvo.
_ Amiga, ¿Estás segura de lo que vas a hacer?
_ Si Antonia. Ahora es el momento y si no lo hago, me voy a arrepentir siempre...
Las dos nos acercamos a Mick. Él serio, mi amiga se sorprendió al ver por primera vez a una estrella de rock. Las dos paralizadas frente a él, no reaccionamos a tomarnos una foto con él y yo solo me dediqué a tomarles fotos a los demás con Mick.
Temerosa, saqué el sobre de mi bolsillo y lo miré en mis manos. Ian, el baterista salió y yo sin dudarlo, me le acerqué de inmediato. Quería una foto con él. Lo saludé y él tierno, me saludó.
_ Hy girl
Contenta, me puse a su lado, él me abrazó, acarició mi cabello y los dos sonreímos para la foto. Mi amiga nos la tomó; ella también quería una foto con él y yo feliz, se la tomé. Mi amiga quedó más que fascinada con Ian.
Los demás integrantes salieron y yo aproveché de tomarles fotos. Me acerqué a John Norum, el guitarrista, él me saludó y me abrazó. Sintió mis nervios y me acarició la espalda como en señal que me tranquilizara. Yo me aferré a él mi amiga nos tomó la foto.
Él se fue a la van y Antonia también quería una foto con él; yo lo llamé con urgencia.
Norum se volteó.
_ ¿Qué pasa? – preguntó en inglés y con tono molesto y las dos nerviosas, sonreímos.
_... Por favor ¿Te podrías tomar una última foto con mi amiga?
Norum sonrió y accedió y Antonia feliz, se colocó a su lado y yo les tomé la foto.
_ Muchas gracias Norum
_ Adiós, adiós
Sin más se subió a la van...
Impacientes, no salía Joey y yo nerviosa, mi amiga me miró y yo temí lo peor. El sobre me tembló en las manos.
<< Joey >>
<< ¿Dónde estás Joey? >>
Pensé en lo peor, que Joey había salido por otra salida y más nerviosa me puse. Solo anhelaba verlo y no perdí las esperanzas de que así sería.
De repente, Joey salió tranquilo y relajado del hotel. Tenía sus manos metidas en su chaqueta de cuero; yo lo vi salir y el corazón me sobresaltó en el pecho, y por inercia, le tomé una foto.
Él nos miró y yo corrí a su lado. Lo saludé y Joey me miró risueño, con cara de que ya me había visto antes, y yo le sonreí embelesada. Le pasé mi cuaderno azul y le pedí que me regalará su autógrafo.
Tierno, él accedió otra vez y me dio su autógrafo. Mi sonrisa fue más y más perdura y junto a él, mi amiga nos fotografió.
Miré su mano mientras él me escribía su firma y sentí que el corazón más rápido me latió. Me sentía la mujer más feliz y realizada a su lado.
Antonia, nos quiso tomar otra foto, Joey le sonrió y yo más que plena, también le sonreí y ella nos fotografió.
No lo pude evitar y me aferré a su brazo. No quería alejarme de él y mi amiga nos tomó otro par de fotos.
A Joey no le molestaba que yo estuviera a su lado y compartía también su tiempo con los demás fans y algunos periodistas, que habían dado con ellos.
Me olvidé de todo a su lado. Me sentí protegida por él, por mi Joey; era una emoción y dicha infinita al compartir con él esos mágicos e inolvidables momentos. Sentí el calor de su cuerpo junto al mío y más me estremecí. Volvió a mirarme y yo me reflejé en sus lentes oscuros, lo que más nerviosa me puso y con mi brazo temblando, le entregué mi sobre.
Joey lo recibió y volvió a mirarme y me sonrió.
_ ¿Es para mí?
_...Si... espero que sea de tu agrado - me sonrió con ternura.
Vi que al parecer si le había agradado mi presente. Joey no lo soltó de sus manos.
Joey tenía que irse y yo volví a llamarlo y él me miró.
_ Joey... por favor, una última foto más... - me sonrió.
_ Está bien...
Me dijo y yo corrí a sus brazos. Él con una sonrisa de oreja a oreja, mi amiga nos tomó esa última foto.
Lo miré perdidamente y le agradecí.
_ Muchas gracias, Joey – él me miró atento y luego me sonrió con coquetería y yo no me pude callar.
_ Te amo...
Más sonrió y mi corazón se me subió al pecho. Mis mejillas ardieron.
De pronto, una fan, que no estaba en nuestro grupo se acercó de manera descontrolada a Joey y me separó de él.
Él me miró tenso y nervioso y aquella mujer lo abrasó atrevidamente y lo saludó. Luego le pasó unos discos para que él se los firmara; él más que incomodo los firmó y ella comenzó a gritar y a saltar, lo que a él le espantó. Quería irse, pero ella volvió a abrazarlo para una foto y él tieso, sonrió para la foto.
Quise acercarme de nuevo y Joey desesperado, la mujer no lo soltaba y en un acto de histeria, le quitó los lentes de sus ojos y nosotros nos alarmamos y los guardaespaldas actuaron.
Tomé su brazo, lo llamé y uno de sus guardaespaldas me botó al suelo.
<< ¡NO! >>
Me vio tirada en el suelo y queriendo ayudarme, los guardaespaldas se lo llevaron a la van.
Yo lo vi subirse, escoltado por aquellos desagradables tipos, y volví a llamarlo con un grito; a punto de llorar, mi amiga me ayudó a levantarme y la van se fue.
Todos algo decepcionados por ese inesperado evento, nos marchamos y volvimos a nuestros hogares.
Olvidé el pequeño incidente, llegué a casa y le mostré mis anheladas fotos a mi familia.
Transcurrió un par de días y mi único pensamiento era él, y su tierno recuerdo, que me dejó ese jueves, cuando estuve a su lado en aquel hotel.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro